Expresar beneplácito por las declaraciones emitidas por Las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, a través de un comunicado formulando el rechazo al proyecto para declarar "emblema nacional argentino" el pañuelo blanco de las Madres de Plaza de Mayo, que obtuvo media sanción de la Cámara de Diputados de la Nación.

Señor presidente:

Es de público conocimiento que el día 2 de Julio de 2014, la Cámara de Diputados de la Nación, con fuerte apoyo otorgó media sanción al proyecto que declara Emblema Nacional al pañuelo blanco de las Madres de Plaza de Mayo. La iniciativa, aprobada sin debate previo, recogió el respaldo de 176 diputados de distintas bancadas, mientras siete integrantes de los bloques del PRO y el Frente Renovador (FR), entre ellas las Diputadas, Nelly Lagoria, Laura Esper, Liliana Schwindt y Mirta Tundis, más la que suscribe, rechazamos la propuesta. Siendo que el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), sumaron tres abstenciones.

No obstante las disputas no concluyeron en el recinto, las reyertas se prorrogan a los días subsiguientes. Y en rigor de verdad, se vienen remachando hace ya muchas décadas, influenciados, como siempre lo estaremos, por las particularidades de las relaciones y conflictos, el drama de nuestra vida política será repetido con mayor o menor intensidad de acuerdo a la profundidad de nuestros apremios, aun irresueltos. El oficialismo versus la oposición parlamentaria, replica las sempiternas rivalidades y el razonamiento político argentino, orbita históricamente por la dialéctica amigo-enemigo. Ambos, no disimulan en exhibir cualidades reñidas con la concordia republicana y democrática, lo que impide articular propuestas alternativas, cimentar alianzas o liderazgos confiables. Los rencores, al igual que la mordedura de serpiente, envenenan al cuerpo legislativo. La ponzoña no queda reservada solo al odiado y al odiador, unos y otros van cambiando los roles, lo que termina derramando y contaminando a toda la Nación.

Por lo demás ya no se encubre ni enerva la enemistad, por el contrario se alimenta y convulsiona la militancia del odio. Muchos antipatías asumen forma activa, dividen, aíslan distancian, produciendo un monumental costo social y ese costo se paga.

Previo a toda polémica, hay una realidad que está allí y que queda reconocer. Las pasiones son irracionales. La inmadurez política con su propio conocimiento superficial se caracteriza por la necedad, la falta de coherencia en sus postulados, derivada de la ausencia de una identidad personal suficientemente configurada y de un objetivo de vida realista.

Los que odian, aman de igual forma e incomprensiblemente. Así, se caracterizan por presentar dificultades para admitir carencias, fallos y limitaciones. Esto potencia la inclinación a escapar de la realidad, hacia un mundo de entelequias en donde se cumplan las fantasías insatisfechas.

La flexibilidad y el entendimiento son los rasgos de la conducta sana. Todo ello da pie a abordar una dimensión a menudo denostada e incluso olvidada por un modernismo burdo que opera con la concepción antropológica reduccionista y poco respetuosa contra las múltiples condiciones de toda persona. Ampliar los conocimientos sobre nosotros mismos y sobre el ambiente que nos circunda, poner de relieve la extensión espiritual o trascendente del ser humano. El camino de resolución, no es otro que la búsqueda del equilibrio. Moderar las exaltaciones y reflexionar desde varias perspectivas para tomar una actitud diferente que me una a mi prójimo, a mi vecino a la comunidad y a la gente.

A pesar de las posibilidades de la mente humana, no podemos estar al tanto de todo. No poseemos la capacidad para hacerlo. Ser conscientes de nuestra condición, de las limitaciones y dignidades que llevamos dentro, como la amistad, el amor, la ternura, la compasión, la empatía, el altruismo, la capacidad de trascender. Reconciliación, auto-critica, aceptación del otro como es, dialogo constructivos sin recriminaciones pueden ser caminos de oxigenación y reparación de ese sentimiento sombrío que es el rencor. Vale la pena trasmutar nuestra actitud de indiferencia menosprecio y desprestigio público.

La ardua tarea de aprender a vivir en sociedad, está en nuestras manos. Poseemos los recursos emocionales que nos permitirán evolucionar hacia el encuentro social y político o podemos seguir permaneciendo anquilosados en posiciones disonantes, agresivas y nefastas para el país.

Por todo lo mencionado, creo necesario expresar beneplácito por las declaraciones emitidas por Las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, a través de un comunicado repudiando el proyecto para declarar "emblema nacional argentino" el pañuelo blanco, que a continuación transcribo....

- Viernes, 4 de julio de 2014- ACLARACIÓN - NOS NEGAMOS A QUE EL PAÑUELO SEA DECLARADO EMBLEMA O SÍMBOLO NACIONAL. Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora da a conocer su posición respecto al hecho de enterarse, por las noticias actuales, y sin haber sido consultadas, sobre la presentación de un proyecto para ser declarado "Emblema o Símbolo Nacional" nuestro Pañuelo. El movimiento de Madres, nacido del dolor, es un movimiento de resistencia activa.

Nuestra ronda en la Plaza de Mayo, con el pañuelo, simboliza nuestro compromiso inclaudicable con la Memoria, la Verdad y la Justicia. El pañuelo surgió cuando salimos a buscar a los Hijos e Hijas. Fue y es, en nuestra lucha, un lazo de unión con ellos y ellas y nos ha dado la fuerza para seguir adelante desde el principio. No lo sentimos emblema nacional sino signo de amor con Nuestros Hijos e Hijas, por lo tanto nos negamos a que el pañuelo sea declarado como emblema o símbolo nacional. Publicado por Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.

En efecto, mujeres valerosas, esforzadas y consecuentes con sus convicciones como Nora Cortiñas, "Taty" Almeyda, Elia Espen, Mirta Baravalle, Marta Ocampo de Vásquez, nos transmiten valores como la Verdad, la Memoria, la Justicia, la búsqueda y por sobre todo el amor a sus hijos. Expresando su rechazo por el nuevo emblema que es nada menos que el propio, pero obviando y dejando al margen los agravios e insultos. Este es otro importante ejemplo de vida, que nos regalan las "MADRES", una nueva enseñanza, otro camino para sostener con firmeza las ideas y la fe, cuando son correctas, aun cuando se corra el riesgo de controversia agresiva, conservar la calma, no alterase, discutir con argumentos y con ecuanimidad. Con perspicacia y comprensión, para respaldar las convicciones, pacíficamente sin pretender obligar a nadie. La lucha por los ideales, debe transitar por el camino del conocimiento, el dialogo y la persuasión, única senda para ser respetados y aceptados.

Para finalizar, reproduzco el pensamiento de Paulo Freire: La "deshumanización" es la consecuencia de la opresión, y afecta a los oprimidos y a quienes oprimen. Los oprimidos, en reacción contra los opresores, a quienes idealizan, desean convertirse a su vez en opresores. Es una gran contradicción, que desafía al oprimido proponiéndole una nueva fórmula, transformarse en los restauradores de la libertad de ambos. De esta forma, debería nacer un hombre nuevo que supere la contradicción: ni opresor ni oprimido: un hombre liberándose, humanizándose.

Sin duda las Madres de Plaza de Mayo, línea fundadora han sabido resolver esta contradicción y una vez más nos invitan a emularlas, por lo que solicito a los Señores Diputados presten conformidad al presente Proyecto de Resolución.