Expresar su más profunda solidaridad con Nora Centeno, Madre de Plaza de Mayo quien fue ferozmente agredida el pasado 10 de marzo en su casa de Villa Castells, Gonnet, Partido de La Plata.

Señor presidente:

El sábado 9 de marzo en horas de la tarde Nora Centeno fue agredida en su casa de calle 13 entre 488 y 489 por dos sujetos que, aparentemente, ingresaron a la vivienda con fines de robo. Y digo aparentemente porque la odisea a la que fue sometida esta mujer de 78 años durante una hora (basta mirar la foto de su rostro después de la feroz golpiza) deja abiertas muchas sospechas que tendrá que dilucidar la justicia en la investigación.

Nora en sus declaraciones no descartó que este hecho esté vinculado a su labor en la organización de derechos humanos. A pesar de haber tres personas más en la vivienda ella fue la única golpeada y según su propias palabras los culatazos y la saña aumentaron cuando ella les manifestó a los atacantes que era una Madre de Plaza de Mayo.

Las Madres de Plaza de Mayo son una parte entrañable de nuestra memoria y de nuestra historia. Son un símbolo vivo del coraje con el que se resistió a la última dictadura militar y al avasallamiento de nuestros más elementales derechos, en medio del dolor producido por la pérdida de un hijo y muchas veces de familias enteras.

Desde la Presidencia de Néstor Kirchner y luego el advenimiento de nuestra actual Presidenta Cristina Fernández de Kirchner es increíble lo que se ha avanzado en materia de derechos humanos. Con la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final se habilitó el avance de las causas judiciales por los delitos de lesa humanidad cometidos durante el llamado "Proceso de Reorganización Nacional".

Gracias a estas medidas hoy la justicia está activa sacando a luz las atrocidades cometidas en esos tristes años. Y por supuesto este accionar despierta reacciones en aquellos que son condenados y que deben pagar por los crimenes cometidos Acciones como la llevada a cabo contra Nora bien pueden inscribirse dentro de la violencia de un delincuente común,

pero también puede leerse dentro del campo de las represalias. La justicia tendrá que llegar a la verdad.

Por lo que estas mujeres hicieron y significan para el conjunto de los argentinos, porque en cada una de ellas encontramos un ejemplo a seguir, porque es responsabilidad de todos protegerlas y cuidar que ningún resabio del pasado las hiera ni las lastime más, solicito a mis pares que me acompañen en la iniciativa.