DEFENSA DEL CONSUMIDOR, DEL USUARIO Y DE LA COMPETENCIA
Comisión PermanenteOf. Administrativa: Piso P03 Oficina 301
Jefe SR. GUANCA JAIME FERNANDO FABIO
Miércoles 10.00hs
Of. Administrativa: (054-11) 6075-2359 Internos 2359/2355/2352
cdconsumidor@hcdn.gov.ar
- DEFENSA DEL CONSUMIDOR, DEL USUARIO Y DE LA COMPETENCIA
Reunión del día 19/03/2019
- CRÉDITOS UVA
En Buenos Aires, a los diecinueve días del mes de marzo de 2019, a la hora 14 y 51:
SRA. PRESIDENTA PASSO Dado que ya se ha hecho presente una gran cantidad de invitados, vamos a dar inicio a la reunión de la Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia.
Agradezco la presencia de los diputados, así como de los autoconvocados por los créditos UVA, quienes van a contarnos su situación. Como es costumbre, también se han hecho presentes distintas asociaciones de consumidores para participar de esta reunión.
Esta iniciativa surge de varias reuniones que esta Presidencia ha mantenido en forma individual con distintos tomadores de créditos UVA, a raíz de una problemática que es de público conocimiento y que tiene que ver con uno de los tantos efectos devastadores que la inflación provoca en nuestro país.
Hace poco más de dos años y medio, muchos advertimos qué es lo que podía llegar a ocurrir en un contexto inflacionario de esta naturaleza y, lamentablemente, eso es lo que ocurrió. Hay muchos argentinos que pasaron de tener el sueño de su casa propia a la pesadilla del miedo a perderlo todo. Esto es algo de lo que el Congreso de la Nación debe tomar nota.
También tiene que tomar nota de que cada uno de los autoconvocados ha venido tejiendo una red muy federal. Hoy aquí se han dado cita autoconvocados de distintos puntos de la provincia de Buenos Aires, de Capital y de otras provincias del país. Ellos tienen la expectativa de que el Congreso es un lugar de debate de ideas y de solución de los problemas que hoy los aquejan.
De manera que le damos la bienvenida a cada uno de ellos. Queremos cumplir con esa expectativa y tenemos la voluntad de encontrar entre todos una solución a este conflicto. Hay que dar un marco de mayor previsibilidad de cara al futuro, para que puedan estar más tranquilos.
Les cuento cómo pensamos el desarrollo de la reunión para que sea ordenada y útil para todos. En principio, vamos a dar la palabra a los distintos representantes de los grupos autoconvocados. Con el fin de que el debate sea ágil, dinámico y útil, hemos estipulado que tenga alrededor de cinco minutos cada uno para hablar, y si algunas asociaciones de consumidores quieren exponer una idea, inquietud o situación, también lo podrán hacer. Luego de estas exposiciones, si están de acuerdo, vamos a abrir el debate con los diputados.
Le cedo la palabra a la secretaria Graciela Peralta para que presente a cada uno de los oradores.
Agradezco la presencia de los diputados, así como de los autoconvocados por los créditos UVA, quienes van a contarnos su situación. Como es costumbre, también se han hecho presentes distintas asociaciones de consumidores para participar de esta reunión.
Esta iniciativa surge de varias reuniones que esta Presidencia ha mantenido en forma individual con distintos tomadores de créditos UVA, a raíz de una problemática que es de público conocimiento y que tiene que ver con uno de los tantos efectos devastadores que la inflación provoca en nuestro país.
Hace poco más de dos años y medio, muchos advertimos qué es lo que podía llegar a ocurrir en un contexto inflacionario de esta naturaleza y, lamentablemente, eso es lo que ocurrió. Hay muchos argentinos que pasaron de tener el sueño de su casa propia a la pesadilla del miedo a perderlo todo. Esto es algo de lo que el Congreso de la Nación debe tomar nota.
También tiene que tomar nota de que cada uno de los autoconvocados ha venido tejiendo una red muy federal. Hoy aquí se han dado cita autoconvocados de distintos puntos de la provincia de Buenos Aires, de Capital y de otras provincias del país. Ellos tienen la expectativa de que el Congreso es un lugar de debate de ideas y de solución de los problemas que hoy los aquejan.
De manera que le damos la bienvenida a cada uno de ellos. Queremos cumplir con esa expectativa y tenemos la voluntad de encontrar entre todos una solución a este conflicto. Hay que dar un marco de mayor previsibilidad de cara al futuro, para que puedan estar más tranquilos.
Les cuento cómo pensamos el desarrollo de la reunión para que sea ordenada y útil para todos. En principio, vamos a dar la palabra a los distintos representantes de los grupos autoconvocados. Con el fin de que el debate sea ágil, dinámico y útil, hemos estipulado que tenga alrededor de cinco minutos cada uno para hablar, y si algunas asociaciones de consumidores quieren exponer una idea, inquietud o situación, también lo podrán hacer. Luego de estas exposiciones, si están de acuerdo, vamos a abrir el debate con los diputados.
Le cedo la palabra a la secretaria Graciela Peralta para que presente a cada uno de los oradores.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Damos la bienvenida a la doctora Perla Figueroa, que es abogada y va a explicar en qué consisten los problemas que vinieron a plantear los tomadores de créditos UVA.
Tiene la palabra la señora Perla Figueroa.
Tiene la palabra la señora Perla Figueroa.
SRA. FIGUEROA Buenas tardes a todos.
Muchísimas gracias por darnos este espacio a quienes estamos siendo afectados por las hipotecas UVA de manera directa.
Esta introducción la voy a hacer junto con Paola Gutiérrez, que también está presente en esta sala. Somos el grupo fundador de Hipotecados UVA Autoconvocados. Allí es donde se origina este ímpetu de organización de vecinos y familiares que cada día y cada mes estamos siendo afectados en nuestra calidad de vida.
Nosotros somos un colectivo recientemente formado tanto en la ciudad de La Plata como en el resto de la provincia. Cada uno de sus integrantes aquí presentes hizo un gran esfuerzo por llegar. No solamente ha dejado a su familia o su trabajo, con las implicancias que tiene esto en términos económicos, sino que también ha depositado la esperanza de que aquí vamos a poder encontrar una solución a lo que nos afecta día a día.
No quiero ser reiterativa, pero sí expresar esta necesidad de que podamos mirarnos las caras y comprometernos a que esto se pueda modificar. Lo necesitamos. No somos solo un número. No somos una tabla de Excel. Somos familias que necesitan una respuesta.
Paola, te pido por favor que continúes.
Muchísimas gracias por darnos este espacio a quienes estamos siendo afectados por las hipotecas UVA de manera directa.
Esta introducción la voy a hacer junto con Paola Gutiérrez, que también está presente en esta sala. Somos el grupo fundador de Hipotecados UVA Autoconvocados. Allí es donde se origina este ímpetu de organización de vecinos y familiares que cada día y cada mes estamos siendo afectados en nuestra calidad de vida.
Nosotros somos un colectivo recientemente formado tanto en la ciudad de La Plata como en el resto de la provincia. Cada uno de sus integrantes aquí presentes hizo un gran esfuerzo por llegar. No solamente ha dejado a su familia o su trabajo, con las implicancias que tiene esto en términos económicos, sino que también ha depositado la esperanza de que aquí vamos a poder encontrar una solución a lo que nos afecta día a día.
No quiero ser reiterativa, pero sí expresar esta necesidad de que podamos mirarnos las caras y comprometernos a que esto se pueda modificar. Lo necesitamos. No somos solo un número. No somos una tabla de Excel. Somos familias que necesitan una respuesta.
Paola, te pido por favor que continúes.
SRA. GUTIÉRREZ Buenas tardes.
Mi nombre es Paola Gutiérrez. Junto con otro grupo de hipotecados empezamos a organizarnos en julio del año pasado. Al principio éramos diez personas, y nueve meses más tarde ya somos más de 5.000 familias en todo el país. Nos fuimos duplicando por provincia, ya que cada provincia tiene su propia característica y necesidad.
No es lo mismo CABA que el interior, que está muy complicado. La gente que vive en el interior la está pasando muy mal. La inflación está pegando en todo sentido.
Nosotros empezamos con esto porque notamos que la inflación se estaba descontrolando. El año pasado tuvimos reuniones con muchos diputados de distintos bloques -por ejemplo, con Mónica Macha y Lavagna-, porque lo que estamos necesitando es una solución.
Nosotros no somos agentes inmobiliarios. No hicimos negocio con nuestras casas. Nuestras casas son únicas; estamos hablando de vivienda familiar y permanente. La más grande debe tener unos 70 metros cuadrados. Tampoco es que compramos palacios. Somos la clase trabajadora que no accedió al Procrear anterior y tampoco tuvo la posibilidad de acceder al crédito tradicional.
Nosotros creímos en esto. Fuimos por el sueño de la casa propia. Hoy es impagable. Personalmente, quince meses después de venir pagando mi crédito todos los meses, debo un millón de pesos más.
Como todos los acá presentes, soy clase trabajadora. Somos los que sostenemos este país. De manera que esperamos que de la Cámara de Diputados -porque creemos que la solución es política- salga una ley que nos proteja. Solamente eso. Estamos esperando que nos protejan, que el gobierno nos escuche y que se haga cargo de que esta política no funciona.
El año pasado la inflación fue del 48 por ciento, y se espera que este año sea de un 35 a un 40 por ciento. En 2020 vamos a estar debiendo un 80 por ciento más de lo que sacamos. No lo van a poder pagar ni nuestros hijos. Es así. Lo que no vamos a permitir es el remate de ninguna propiedad, porque estamos todos juntos, somos un colectivo federal y nos apoyamos los unos a los otros.
Les pedimos a los diputados y diputadas que por favor nos apoyen, que sean nuestra voz en el Congreso. Ya que no podemos contar con el recibimiento del bloque oficialista, solo nos queda la esperanza de los legisladores de la oposición.
Nosotros queremos poder pagar nuestras casas. Ese es el reclamo que venimos haciendo desde hace diez meses: pagar nuestras casas y no morir en el intento. Hay gente que se está enfermando por esta situación, porque no solo es una cuestión financiera o socioeconómica sino que está en riesgo la salud de las familias.
Les pedimos por favor que se hagan eco de nuestro pedido.
Mi nombre es Paola Gutiérrez. Junto con otro grupo de hipotecados empezamos a organizarnos en julio del año pasado. Al principio éramos diez personas, y nueve meses más tarde ya somos más de 5.000 familias en todo el país. Nos fuimos duplicando por provincia, ya que cada provincia tiene su propia característica y necesidad.
No es lo mismo CABA que el interior, que está muy complicado. La gente que vive en el interior la está pasando muy mal. La inflación está pegando en todo sentido.
Nosotros empezamos con esto porque notamos que la inflación se estaba descontrolando. El año pasado tuvimos reuniones con muchos diputados de distintos bloques -por ejemplo, con Mónica Macha y Lavagna-, porque lo que estamos necesitando es una solución.
Nosotros no somos agentes inmobiliarios. No hicimos negocio con nuestras casas. Nuestras casas son únicas; estamos hablando de vivienda familiar y permanente. La más grande debe tener unos 70 metros cuadrados. Tampoco es que compramos palacios. Somos la clase trabajadora que no accedió al Procrear anterior y tampoco tuvo la posibilidad de acceder al crédito tradicional.
Nosotros creímos en esto. Fuimos por el sueño de la casa propia. Hoy es impagable. Personalmente, quince meses después de venir pagando mi crédito todos los meses, debo un millón de pesos más.
Como todos los acá presentes, soy clase trabajadora. Somos los que sostenemos este país. De manera que esperamos que de la Cámara de Diputados -porque creemos que la solución es política- salga una ley que nos proteja. Solamente eso. Estamos esperando que nos protejan, que el gobierno nos escuche y que se haga cargo de que esta política no funciona.
El año pasado la inflación fue del 48 por ciento, y se espera que este año sea de un 35 a un 40 por ciento. En 2020 vamos a estar debiendo un 80 por ciento más de lo que sacamos. No lo van a poder pagar ni nuestros hijos. Es así. Lo que no vamos a permitir es el remate de ninguna propiedad, porque estamos todos juntos, somos un colectivo federal y nos apoyamos los unos a los otros.
Les pedimos a los diputados y diputadas que por favor nos apoyen, que sean nuestra voz en el Congreso. Ya que no podemos contar con el recibimiento del bloque oficialista, solo nos queda la esperanza de los legisladores de la oposición.
Nosotros queremos poder pagar nuestras casas. Ese es el reclamo que venimos haciendo desde hace diez meses: pagar nuestras casas y no morir en el intento. Hay gente que se está enfermando por esta situación, porque no solo es una cuestión financiera o socioeconómica sino que está en riesgo la salud de las familias.
Les pedimos por favor que se hagan eco de nuestro pedido.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora Romina Montoya.
SRA. MONTOYA Señora presidenta: gracias por la invitación y buenas tardes a todos. Soy una de las autoconvocadas del programa ProCreAr Ahorro Joven, que también es un plan UVA. En este plan teníamos que ahorrar, porque se daba la posibilidad de hacer un ahorro previo ya que no contábamos con los ingresos, y se tomaba en cuenta dinero formal o informal. Durante doce meses teníamos que depositar en una cuenta cierta cantidad de UVAs, que en realidad era un mínimo de 200 y un máximo de 16.000. Empezamos pagando algo de 3.000 y pico de pesos y terminamos pagando casi 9.000. Hicimos el ahorro, cumplimos con todos los requisitos que se nos pidieron, pero hoy nos encontramos con que no podemos acceder a nuestra casa. Es un plan nacional, por lo que estamos todos en la misma situación.
Hemos tenido cuatro reuniones con el secretario de Vivienda, para que se escuche nuestra voz y ver qué soluciones podíamos tener, pero todavía no obtuvimos ninguna. A principios de 2018 se nos permitía acceder a una casa de hasta 60.000 dólares, que hoy son alrededor de 20.000 dólares, con lo cual actualmente no podemos ni siquiera comprar una cochera.
Como decía la compañera, depositamos cada peso con la ilusión de poder acceder a nuestra vivienda. Vinculamos familia, tenemos hijos; justamente hoy me acompaña mi pequeña hija. Detrás hay un montón de compañeros. Salimos sorteados 250.000, solamente 40.000 pudimos acceder al ahorro de los doce meses, y actualmente somos 6.000, porque lo único que se nos indica es que nos tenemos que dar de baja para poder recuperar nuestros ahorros. Pero, lógicamente, lo único que nosotros queremos es lo que se prometió, que es acceder a nuestra casa.
Detrás de nosotros hay 6.000 o 10.000 familias más, en todo el interior, que tampoco pueden acceder a su vivienda. Lo único que se nos ofreció es poder acceder a un lote con servicios, que en realidad tiene que ser de ProCreAr, pero no todas las familias disponemos del dinero para poder construir. Además, tampoco tenemos en nuestra provincia algún lote con servicios de ProCreAr que esté habilitado para acceder. En mi caso particular, soy de La Matanza.
De manera que seguimos esperando. Apelamos a ustedes para que nos ayuden a visibilizar la situación, porque el plan ProCreAr Ahorro Joven no está visibilizado y no podemos acceder.
Les agradecemos que nos hayan invitado para poder contar nuestra problemática.
Hemos tenido cuatro reuniones con el secretario de Vivienda, para que se escuche nuestra voz y ver qué soluciones podíamos tener, pero todavía no obtuvimos ninguna. A principios de 2018 se nos permitía acceder a una casa de hasta 60.000 dólares, que hoy son alrededor de 20.000 dólares, con lo cual actualmente no podemos ni siquiera comprar una cochera.
Como decía la compañera, depositamos cada peso con la ilusión de poder acceder a nuestra vivienda. Vinculamos familia, tenemos hijos; justamente hoy me acompaña mi pequeña hija. Detrás hay un montón de compañeros. Salimos sorteados 250.000, solamente 40.000 pudimos acceder al ahorro de los doce meses, y actualmente somos 6.000, porque lo único que se nos indica es que nos tenemos que dar de baja para poder recuperar nuestros ahorros. Pero, lógicamente, lo único que nosotros queremos es lo que se prometió, que es acceder a nuestra casa.
Detrás de nosotros hay 6.000 o 10.000 familias más, en todo el interior, que tampoco pueden acceder a su vivienda. Lo único que se nos ofreció es poder acceder a un lote con servicios, que en realidad tiene que ser de ProCreAr, pero no todas las familias disponemos del dinero para poder construir. Además, tampoco tenemos en nuestra provincia algún lote con servicios de ProCreAr que esté habilitado para acceder. En mi caso particular, soy de La Matanza.
De manera que seguimos esperando. Apelamos a ustedes para que nos ayuden a visibilizar la situación, porque el plan ProCreAr Ahorro Joven no está visibilizado y no podemos acceder.
Les agradecemos que nos hayan invitado para poder contar nuestra problemática.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor Diego González, de la provincia de Santa Fe.
SR. GONZÁLEZ Señora presidenta: buenas tardes y gracias por recibirnos. Ojalá que en cinco minutos pueda decir todo lo que tengo para decir.
Cuando nos invitaron a esta comisión pensé en qué era lo más importante que podíamos dejar acá, y creo que lo más importante que podemos dejar es que se entienda realmente cuál es nuestra problemática.
Somos 140 mil familias. Hablan de 140 mil hipotecados pero no somos hipotecados. Somos familias que nos esforzamos, nos sacrificamos y ahorramos. En muchos casos, resignamos calidad de vida para poder llegar al sueño de la casa propia.
El fin de semana hablaba por teléfono con Perla Figueroa -porque este tema lamentablemente nos ocupa los siete días de la semana- y le decía que a mí me gustaba hablar de hogar y no de casa, porque ahí es donde nosotros, aparte de comprar la vivienda, pudimos poner nuestros sueños, sentir calma y seguridad, y es donde tenemos puesto nuestro corazón.
Hace un año que decidimos juntarnos y empezar a organizarnos. Muchos no teníamos experiencia en esto. Empezamos a llamar a diputados, senadores, concejales, diputados provinciales y distintas ONG. Tuvimos que dar notas periodísticas, algo a lo que no estábamos acostumbrados. Pusimos el cuerpo en radios, diarios y televisión. En definitiva, tuvimos que formar un colectivo, con lo difícil que es.
Hoy conocí personalmente a compañeros que me han apoyado -y con los que también he discutido- sin haberlos conocidos antes. Así de difícil es lo que estamos construyendo.
Pienso que lo que hemos construido es muy potente, porque cuando solo recibimos agresión y violencia del otro lado, significa que nos asiste la razón. Por lo menos, esta es mi interpretación.
Tenemos compañeros que se están enfermando. Tenemos madres solas con hijos a cargo que están en tratamiento psicológico o psiquiátrico. No vinimos a plantear un drama sino que estamos describiendo la realidad y me parece que es importante que se comprenda.
Hice algunas anotaciones para no olvidarme ninguna cuestión.
Hace un tiempo, cuando empezamos a reunirnos con algunos compañeros en Rosario -ya el año pasado me había reunido con el diputado Contigiani y después formamos el grupo-, un compañero planteó que existía la posibilidad de hacer una reunión con un concejal. Al principio dudé de que el concejal nos pudiera ayudar, pero luego, viendo que no había ninguna respuesta del oficialismo, entendí que los concejales tienen territorio, que se van a poner delante nuestro para impedir que rematen nuestras casas y que nos van a ayudar en esta etapa que, lamentablemente, está llegando.
Recién les dije que quería describir nuestra situación tal como es. Hace un tiempo, sin conocernos personalmente todavía, se generó una discusión en los grupos de Whatsapp acerca de si dábamos a conocer o no los casos más dramáticos. Yo planteé que como se trataba de familias destrozadas que estaban en una situación extremadamente vulnerable, exponerlos ante una cámara de televisión implicaría directamente sacrificarlos.
El fin de semana una compañera publicó en el grupo que a un compañero de su misma provincia ya lo habían intimado para ejecutar su casa. La llamé y, contradiciéndome, le dije que salgan a visibilizar esa situación; sin querer, quizás los expuse. Les dije que si la familia no podía hacerlo, lo haga algún compañero del colectivo. Es muy difícil nuestra situación.
Antes les comenté que recibimos agresiones. Creo que hay que redefinir lo que es violencia, ya que muchas veces se manifiesta de formas mucho más dolorosas que las tradicionales. Por ejemplo, violencia es cuando en algunos medios de comunicación nos contestan que hicimos un gran negocio, que nuestras casas valen el doble en pesos gracias a la devaluación, que la relación cuota-ingreso no ha variado de forma dramática o que vendamos nuestras casas y nos quedemos con la diferencia.
Agresión es cuando nos dicen que nuestro colectivo tiene intencionalidad política. Como se pueden imaginar, nuestro colectivo está integrado por personas con distintos tipos de ideologías; hay 140 mil familias que participan. De hecho, en una nota publicada el fin de semana, Iván Kerr reconoce que son 150 mil familias; y hoy Paola Gutiérrez dijo que en una comunicación telefónica con el senador Cobos, este último reconoció que son 170 mil.
Entonces, cuando nos dicen que la tasa de morosidad es baja, es violencia. Estamos haciendo malabares, renunciando a prepagas y cambiando de colegio a nuestros hijos; es decir, estamos resignando calidad de vida para poder seguir pagando las cuotas pero después nos achacan que hay poca morosidad. Es injusto.
Me parece que es violencia cuando mandan a Martín Tetaz o a Iván Carrino a contestarnos en los medios de comunicación lo mismo que nos dicen algunos pocos legisladores oficialistas.
Me parece que eso tiene una intencionalidad y es violencia.
Para mí también es violencia la respuesta de la diputada nacional Astrid Hummel, a la que estuve llamando durante más de un mes hasta poder comunicarme. Lo digo porque se lo dije a ella también. Le dije que hoy venía a esta reunión y que, si antes quería reunirse conmigo y conocerme, le iba a contar lo que yo iba a comunicar acá. Por eso creo que estoy habilitado para decirlo.
En la primera comunicación que tuve con ella me dijo, prácticamente llorando, que estaba sensibilizada con nuestro tema y quería reunirse con nosotros pero que antes quería ir al Poder Ejecutivo y al Banco Central para juntar información y luego reunirse con nuestro colectivo teniendo elementos.
Después de un mes y pico de llamarla varias veces por semana hasta poder comunicarme -entiendo que debe tener una agenda bastante ocupada- me dice que podemos extender el plazo del crédito, algo que todos sabíamos cuando firmamos la hipoteca, y que ella había hablado con el diputado Laspina, que es economista y actual presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Me pasa el teléfono de la secretaria y el del diputado y me dice que el diputado ya estaba avisado de que yo lo iba a llamar. Hace un mes que lo estoy llamando y mandando mensajes de Whatsapp y no me contesta.
Pero nunca pensé que la mayor agresión la recibiría de un diputado de la Nación, y lo digo por lo siguiente. Durante un mes llamé una o dos veces por semana al diputado Eduardo Amadeo a su despacho. Recién el lunes de la semana pasada me contestó el llamado -yo estaba trabajando- y me dijo que nuestras casas valían el doble en pesos gracias a la devaluación. Aclaro que en este caso también me siento habilitado para decir todo lo que voy a decir acá porque también se lo contesté a él. Tuve la lucidez -no sé cómo- para poder decírselo, porque no es fácil cuando un diputado te llama, te agrede y te violenta. Así lo sentí yo, pero creo que no me agredió a mí en lo personal sino a todo el colectivo. Así se lo manifesté a los compañeros con los que pude hablar: no fue una agresión personal sino a todo el colectivo; simplemente la ejerció a través mío.
Me dijo que nuestras casas valían el doble. Yo le pregunté si sus propiedades estaban tasadas en pesos o en dólares porque, desde que tengo uso de razón, en este país las propiedades se tasan en dólares. Creo que hoy, por la crisis económica existente, nuestras propiedades valen menos dólares que los que valían cuando las compramos.
A su vez, le dije que lo único que nos trajo la devaluación fue pérdida del poder adquisitivo y todos los problemas que tienen los argentinos. Me dijo que nosotros éramos más ricos ahora que cuando compramos nuestras casas. Le comenté que nosotros estamos hipotecados.
En mi caso particular, hice un cambio de vivienda y puedo perder todo. En el caso de las personas que pidieron un 80 por ciento del valor de su vivienda, ya adeudan más de lo que valen sus propiedades o lo mismo. Hace un año y medio empezamos con estos créditos, y no hacen nada. Estamos hablando de créditos a veinte, veinticinco o treinta años.
En cinco o seis oportunidades me dijo que leyéramos y escucháramos a Martín Tetaz. Humildemente le dije que si es funcionario o tiene algún cargo en el gobierno le paguen un sueldo y nos digan cuál es su función; y que si simplemente es un economista, es el único que conozco que todavía sigue defendiendo esta política errática y fracasada de estos créditos "hipotecados" UVA. Esto es lo que pienso yo. Creo que todos los demás economistas, de cualquier ideología -inclusive Melconian-, ya no defienden estos créditos.
También me dijo que nosotros pretendíamos que el gobierno reasigne partidas presupuestarias destinadas a los pobres para que los pobres nos paguen nuestras casas. No sé si están escuchando lo que digo. Gracias a Dios, le pude decir que nosotros tenemos muchos problemas -los que tienen todos los argentinos más "la hipoteca UVA"- y no vamos a permitir que carguen nuestras mochilas con la pobreza de este país. La pobreza de este país se debe a otras circunstancias; no la generamos nosotros.
También le dije que no íbamos a entrar en una guerra de pobres contra pobres. Le dije que no lo intente porque no vamos a entrar en eso. Somos un colectivo bastante plural, en el que me he encontrado con compañeros con mucha conciencia social. Me encontré con gente muy valiosa que le está poniendo el cuerpo a tratar de solucionar este problema de 150 mil o 160 mil familias -o no sabemos cuántas, porque no hay información oficial-, en el que podemos perder todos.
Me dijo que no iban a ir en contra de la ganancia de los bancos. El Banco Nación estaba haciendo esfuerzos denodados para darles créditos a las pymes. Yo le dije que los bancos van a estar muchísimo más perjudicados si llegamos a ejecutar las viviendas y que no creía que los bancos quieran convertirse en una gran inmobiliaria.
También le dije que, si quería, yo le acercaba recortes periodísticos con informes del Banco Central que muestran que el Banco Nación está financiando al Tesoro. Yo, que no soy economista, creo que eso ni siquiera está en la Carta Orgánica. Hablan de 20 mil millones de pesos en 2017, de 20 mil millones de pesos en 2018 y de 15 mil millones de pesos en 2019. Me parece que nosotros no podemos desfinanciar al Banco Nación. Tengo acá los recortes periodísticos.
González Fraga fue citado para que explique la situación del Banco Nación. Sería una buena oportunidad para preguntarle qué piensan hacer con nosotros, y no me refiero solamente a los que tenemos un crédito del Banco Nación. A lo mejor podemos tener la perspectiva de una solución para todos, que es lo que estamos buscando.
Volviendo a mi charla con el diputado Amadeo, le pedí que habilitara el tratamiento de este tema en la comisión y en el recinto. Increíblemente, me contestó que no lo iban a hacer porque lo que nosotros queríamos era extorsionarlos, obligándolos a hacer algo que ellos no estaban dispuestos a hacer. Le dije que la Cámara de Diputados no es un lugar de extorsionadores y que nosotros al menos no lo somos, ya que somos gente de bien. Considero que en un poder de la República como el Poder Legislativo se discuten las soluciones para la vida de la gente. Eso es lo que creo yo. A lo mejor estoy equivocado.
Otra cosa que me dijo el diputado Amadeo -creo que no se dio cuenta- es que el Banco Nación dio 48 mil créditos y que solo hay siete casas en ejecución. Nosotros nos reunimos con la gente del Banco Nación el lunes de la semana pasada. Lo primero que hizo el subgerente -porque el gerente aparentemente estaba en Expoagro, aunque después me enteré de que no, porque había otros compañeros reunidos con él en ese mismo momento- fue sacar de arriba del escritorio todos los sellos del banco. Luego me dijo que iba a hablar en forma particular y no en nombre del banco. Me dijo que esto era inviable si no extendíamos el plazo.
Yo no quería tomar un café con un amigo. Después me enteré, a través de otro compañero que tiene acceso al gerente, que hay una directiva del Banco Nación para que la comunicación sea de ese modo: informal y a título personal. Me pareció raro.
El diputado Amadeo también me dijo que nos sigue en Facebook, que solamente somos seiscientos y que no representamos a nadie. No sé por qué nos agrede si no representamos a nadie. Si realmente no somos un colectivo potente, ¿por qué gastan tiempo en agredirnos? No lo entiendo.
Hoy la situación ya es crítica. Una persona que tomó un crédito por el 70 u 80 por ciento del valor de su vivienda ya debe el doble. Los que tomamos un crédito para mejorar nuestra vivienda podemos perder el ahorro de todas nuestras vidas. Yo voy a cumplir 52 años. Creo que no me podré levantar nunca más de esto si llego a perder todo, porque puse ahí todos los ahorros de mi vida.
El diputado Amadeo también me dijo que yo debería estar en blanco porque saqué un crédito, a lo que respondí que era monotributista. Me preguntó si mi paritaria había igualado la inflación. Le dije nuevamente que era monotributista. Me preguntó lo mismo. Le pedí que me dijera dónde están las paritarias para los monotributistas porque yo no las conozco.
El 73 por ciento de los créditos están dados en bancos públicos, y el 27 por ciento, en bancos privados. Hay que encontrar una solución para todos. Doy las cifras para que entendamos que no es tan difícil encontrar una solución. Sabemos que la solución debe ser política. Creo que estamos a tiempo de encontrarla. Es mucho más complejo si esto sigue pasando.
El diputado me dijo dos veces el furcio de que el país está fundido. Entonces, le pregunté por qué resarcieron a las energéticas y a las concesionarias de peajes, que también sufrieron la devaluación y el hecho de que pasen menos vehículos por las autopistas. La provincia de Buenos Aires ahora también compensó a las energéticas.
Yo creo que nosotros somos mucho más vulnerables y tenemos muchas menos herramientas que estos grupos poderosos. Además, no estamos pidiendo una compensación. Tanto la diputada Astrid Hummel como el diputado Amadeo me dijeron que esta política crediticia fue lanzada con buenas intenciones, pero tienen que demostrar que fue así. Si nos dan una solución, yo voy a creer que las intenciones fueron buenas; pero si no nos dan una solución, no voy a creer eso.
Hoy estamos a tiempo de encontrar una solución para todos. Eso es lo que yo creo. A lo mejor estoy equivocado. Estamos a tiempo de replantear los créditos.
Lamentablemente ha pasado el tiempo, y los dos proyectos que han sido presentados en la Cámara de Diputados el año pasado -a lo mejor hay más, pero solo conozco dos- ya no nos dan una solución. Se agravó mucho la situación para que esos proyectos puedan contemplar una solución. Habría que buscar otro.
Por último, quiero decir que nos reunimos con muchos espacios políticos, o con todos. Acá está presente el diputado Grandinetti, con quien me reuní en su oficina. Nos hemos reunido con varias ONG, con defensorías del pueblo, etcétera. Agradecemos el tiempo que nos han dado.
Humildemente, quiero decir -y no quiero que esto se tome a mal- que ese camino de las reuniones individuales con todos los bloques nos trajo hasta acá. Todos nos han dicho que tenemos razón y que hay voluntad de encontrar una solución. De manera que les pido que demos un paso más. Creo que esto lo comparte el colectivo en general. Demos una declaración conjunta de que todos los bloques están dispuestos a tratar este tema, salvo el oficialismo. A lo mejor se puede armar una mesa de trabajo con asesores de los diferentes bloques y algunos representantes de nuestro colectivo para reunirnos una vez por semana, cada quince días o cuando ustedes dispongan. A lo mejor ustedes nos pueden acercar ideas de cómo seguir con esta construcción o cómo armar una mesa de trabajo diferente. Pero hoy necesitamos la unión de toda la oposición. Con arrestos individuales no vamos a conseguir nada, así como ustedes no van a conseguir nada solo con la buena intención de apoyarnos.
Ojalá que haya podido explicar cuál es nuestra situación. Yo no quiero vivir en un país -ni lo quiero para mi hijo- donde todas las fuerzas políticas están de acuerdo en algo pero ni siquiera se puede discutir el tema porque hay una que se opone. No creo que funcione, así viva en una República. Eso es lo que yo creo. A lo mejor estoy equivocado y algún diputado después me lo pueda aclarar, porque supongo que van a hablar.
Ojalá que podamos encontrar una solución a esto. Simplemente quiero dejar bien en claro que nosotros como colectivo no vamos a hacer fácil que se rematen nuestras casas. Llegamos hasta acá y vamos a hacer lo que sea necesario. Vamos a ponernos delante de nuestras casas, vamos a ir con los concejales y con las ONG, y vamos a hacer lo imposible para que eso no suceda. No va a ser fácil. Si la bomba no se desactiva ahora, alguien la va a tener que desactivar; pero ya va a haber esquirlas. Todos los bloques reunidos tienen presentado un candidato a presidente. Todos los bloques quieren gobernar este país. ¿Por qué la política tiene que resolver las situaciones cuando ya explotaron? Es más fácil hacerlo antes. Es menos doloroso y pone menos vidas en juego.
En definitiva, creo que todavía estamos a tiempo. Ojalá que ustedes puedan darnos una respuesta.
Cuando nos invitaron a esta comisión pensé en qué era lo más importante que podíamos dejar acá, y creo que lo más importante que podemos dejar es que se entienda realmente cuál es nuestra problemática.
Somos 140 mil familias. Hablan de 140 mil hipotecados pero no somos hipotecados. Somos familias que nos esforzamos, nos sacrificamos y ahorramos. En muchos casos, resignamos calidad de vida para poder llegar al sueño de la casa propia.
El fin de semana hablaba por teléfono con Perla Figueroa -porque este tema lamentablemente nos ocupa los siete días de la semana- y le decía que a mí me gustaba hablar de hogar y no de casa, porque ahí es donde nosotros, aparte de comprar la vivienda, pudimos poner nuestros sueños, sentir calma y seguridad, y es donde tenemos puesto nuestro corazón.
Hace un año que decidimos juntarnos y empezar a organizarnos. Muchos no teníamos experiencia en esto. Empezamos a llamar a diputados, senadores, concejales, diputados provinciales y distintas ONG. Tuvimos que dar notas periodísticas, algo a lo que no estábamos acostumbrados. Pusimos el cuerpo en radios, diarios y televisión. En definitiva, tuvimos que formar un colectivo, con lo difícil que es.
Hoy conocí personalmente a compañeros que me han apoyado -y con los que también he discutido- sin haberlos conocidos antes. Así de difícil es lo que estamos construyendo.
Pienso que lo que hemos construido es muy potente, porque cuando solo recibimos agresión y violencia del otro lado, significa que nos asiste la razón. Por lo menos, esta es mi interpretación.
Tenemos compañeros que se están enfermando. Tenemos madres solas con hijos a cargo que están en tratamiento psicológico o psiquiátrico. No vinimos a plantear un drama sino que estamos describiendo la realidad y me parece que es importante que se comprenda.
Hice algunas anotaciones para no olvidarme ninguna cuestión.
Hace un tiempo, cuando empezamos a reunirnos con algunos compañeros en Rosario -ya el año pasado me había reunido con el diputado Contigiani y después formamos el grupo-, un compañero planteó que existía la posibilidad de hacer una reunión con un concejal. Al principio dudé de que el concejal nos pudiera ayudar, pero luego, viendo que no había ninguna respuesta del oficialismo, entendí que los concejales tienen territorio, que se van a poner delante nuestro para impedir que rematen nuestras casas y que nos van a ayudar en esta etapa que, lamentablemente, está llegando.
Recién les dije que quería describir nuestra situación tal como es. Hace un tiempo, sin conocernos personalmente todavía, se generó una discusión en los grupos de Whatsapp acerca de si dábamos a conocer o no los casos más dramáticos. Yo planteé que como se trataba de familias destrozadas que estaban en una situación extremadamente vulnerable, exponerlos ante una cámara de televisión implicaría directamente sacrificarlos.
El fin de semana una compañera publicó en el grupo que a un compañero de su misma provincia ya lo habían intimado para ejecutar su casa. La llamé y, contradiciéndome, le dije que salgan a visibilizar esa situación; sin querer, quizás los expuse. Les dije que si la familia no podía hacerlo, lo haga algún compañero del colectivo. Es muy difícil nuestra situación.
Antes les comenté que recibimos agresiones. Creo que hay que redefinir lo que es violencia, ya que muchas veces se manifiesta de formas mucho más dolorosas que las tradicionales. Por ejemplo, violencia es cuando en algunos medios de comunicación nos contestan que hicimos un gran negocio, que nuestras casas valen el doble en pesos gracias a la devaluación, que la relación cuota-ingreso no ha variado de forma dramática o que vendamos nuestras casas y nos quedemos con la diferencia.
Agresión es cuando nos dicen que nuestro colectivo tiene intencionalidad política. Como se pueden imaginar, nuestro colectivo está integrado por personas con distintos tipos de ideologías; hay 140 mil familias que participan. De hecho, en una nota publicada el fin de semana, Iván Kerr reconoce que son 150 mil familias; y hoy Paola Gutiérrez dijo que en una comunicación telefónica con el senador Cobos, este último reconoció que son 170 mil.
Entonces, cuando nos dicen que la tasa de morosidad es baja, es violencia. Estamos haciendo malabares, renunciando a prepagas y cambiando de colegio a nuestros hijos; es decir, estamos resignando calidad de vida para poder seguir pagando las cuotas pero después nos achacan que hay poca morosidad. Es injusto.
Me parece que es violencia cuando mandan a Martín Tetaz o a Iván Carrino a contestarnos en los medios de comunicación lo mismo que nos dicen algunos pocos legisladores oficialistas.
Me parece que eso tiene una intencionalidad y es violencia.
Para mí también es violencia la respuesta de la diputada nacional Astrid Hummel, a la que estuve llamando durante más de un mes hasta poder comunicarme. Lo digo porque se lo dije a ella también. Le dije que hoy venía a esta reunión y que, si antes quería reunirse conmigo y conocerme, le iba a contar lo que yo iba a comunicar acá. Por eso creo que estoy habilitado para decirlo.
En la primera comunicación que tuve con ella me dijo, prácticamente llorando, que estaba sensibilizada con nuestro tema y quería reunirse con nosotros pero que antes quería ir al Poder Ejecutivo y al Banco Central para juntar información y luego reunirse con nuestro colectivo teniendo elementos.
Después de un mes y pico de llamarla varias veces por semana hasta poder comunicarme -entiendo que debe tener una agenda bastante ocupada- me dice que podemos extender el plazo del crédito, algo que todos sabíamos cuando firmamos la hipoteca, y que ella había hablado con el diputado Laspina, que es economista y actual presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Me pasa el teléfono de la secretaria y el del diputado y me dice que el diputado ya estaba avisado de que yo lo iba a llamar. Hace un mes que lo estoy llamando y mandando mensajes de Whatsapp y no me contesta.
Pero nunca pensé que la mayor agresión la recibiría de un diputado de la Nación, y lo digo por lo siguiente. Durante un mes llamé una o dos veces por semana al diputado Eduardo Amadeo a su despacho. Recién el lunes de la semana pasada me contestó el llamado -yo estaba trabajando- y me dijo que nuestras casas valían el doble en pesos gracias a la devaluación. Aclaro que en este caso también me siento habilitado para decir todo lo que voy a decir acá porque también se lo contesté a él. Tuve la lucidez -no sé cómo- para poder decírselo, porque no es fácil cuando un diputado te llama, te agrede y te violenta. Así lo sentí yo, pero creo que no me agredió a mí en lo personal sino a todo el colectivo. Así se lo manifesté a los compañeros con los que pude hablar: no fue una agresión personal sino a todo el colectivo; simplemente la ejerció a través mío.
Me dijo que nuestras casas valían el doble. Yo le pregunté si sus propiedades estaban tasadas en pesos o en dólares porque, desde que tengo uso de razón, en este país las propiedades se tasan en dólares. Creo que hoy, por la crisis económica existente, nuestras propiedades valen menos dólares que los que valían cuando las compramos.
A su vez, le dije que lo único que nos trajo la devaluación fue pérdida del poder adquisitivo y todos los problemas que tienen los argentinos. Me dijo que nosotros éramos más ricos ahora que cuando compramos nuestras casas. Le comenté que nosotros estamos hipotecados.
En mi caso particular, hice un cambio de vivienda y puedo perder todo. En el caso de las personas que pidieron un 80 por ciento del valor de su vivienda, ya adeudan más de lo que valen sus propiedades o lo mismo. Hace un año y medio empezamos con estos créditos, y no hacen nada. Estamos hablando de créditos a veinte, veinticinco o treinta años.
En cinco o seis oportunidades me dijo que leyéramos y escucháramos a Martín Tetaz. Humildemente le dije que si es funcionario o tiene algún cargo en el gobierno le paguen un sueldo y nos digan cuál es su función; y que si simplemente es un economista, es el único que conozco que todavía sigue defendiendo esta política errática y fracasada de estos créditos "hipotecados" UVA. Esto es lo que pienso yo. Creo que todos los demás economistas, de cualquier ideología -inclusive Melconian-, ya no defienden estos créditos.
También me dijo que nosotros pretendíamos que el gobierno reasigne partidas presupuestarias destinadas a los pobres para que los pobres nos paguen nuestras casas. No sé si están escuchando lo que digo. Gracias a Dios, le pude decir que nosotros tenemos muchos problemas -los que tienen todos los argentinos más "la hipoteca UVA"- y no vamos a permitir que carguen nuestras mochilas con la pobreza de este país. La pobreza de este país se debe a otras circunstancias; no la generamos nosotros.
También le dije que no íbamos a entrar en una guerra de pobres contra pobres. Le dije que no lo intente porque no vamos a entrar en eso. Somos un colectivo bastante plural, en el que me he encontrado con compañeros con mucha conciencia social. Me encontré con gente muy valiosa que le está poniendo el cuerpo a tratar de solucionar este problema de 150 mil o 160 mil familias -o no sabemos cuántas, porque no hay información oficial-, en el que podemos perder todos.
Me dijo que no iban a ir en contra de la ganancia de los bancos. El Banco Nación estaba haciendo esfuerzos denodados para darles créditos a las pymes. Yo le dije que los bancos van a estar muchísimo más perjudicados si llegamos a ejecutar las viviendas y que no creía que los bancos quieran convertirse en una gran inmobiliaria.
También le dije que, si quería, yo le acercaba recortes periodísticos con informes del Banco Central que muestran que el Banco Nación está financiando al Tesoro. Yo, que no soy economista, creo que eso ni siquiera está en la Carta Orgánica. Hablan de 20 mil millones de pesos en 2017, de 20 mil millones de pesos en 2018 y de 15 mil millones de pesos en 2019. Me parece que nosotros no podemos desfinanciar al Banco Nación. Tengo acá los recortes periodísticos.
González Fraga fue citado para que explique la situación del Banco Nación. Sería una buena oportunidad para preguntarle qué piensan hacer con nosotros, y no me refiero solamente a los que tenemos un crédito del Banco Nación. A lo mejor podemos tener la perspectiva de una solución para todos, que es lo que estamos buscando.
Volviendo a mi charla con el diputado Amadeo, le pedí que habilitara el tratamiento de este tema en la comisión y en el recinto. Increíblemente, me contestó que no lo iban a hacer porque lo que nosotros queríamos era extorsionarlos, obligándolos a hacer algo que ellos no estaban dispuestos a hacer. Le dije que la Cámara de Diputados no es un lugar de extorsionadores y que nosotros al menos no lo somos, ya que somos gente de bien. Considero que en un poder de la República como el Poder Legislativo se discuten las soluciones para la vida de la gente. Eso es lo que creo yo. A lo mejor estoy equivocado.
Otra cosa que me dijo el diputado Amadeo -creo que no se dio cuenta- es que el Banco Nación dio 48 mil créditos y que solo hay siete casas en ejecución. Nosotros nos reunimos con la gente del Banco Nación el lunes de la semana pasada. Lo primero que hizo el subgerente -porque el gerente aparentemente estaba en Expoagro, aunque después me enteré de que no, porque había otros compañeros reunidos con él en ese mismo momento- fue sacar de arriba del escritorio todos los sellos del banco. Luego me dijo que iba a hablar en forma particular y no en nombre del banco. Me dijo que esto era inviable si no extendíamos el plazo.
Yo no quería tomar un café con un amigo. Después me enteré, a través de otro compañero que tiene acceso al gerente, que hay una directiva del Banco Nación para que la comunicación sea de ese modo: informal y a título personal. Me pareció raro.
El diputado Amadeo también me dijo que nos sigue en Facebook, que solamente somos seiscientos y que no representamos a nadie. No sé por qué nos agrede si no representamos a nadie. Si realmente no somos un colectivo potente, ¿por qué gastan tiempo en agredirnos? No lo entiendo.
Hoy la situación ya es crítica. Una persona que tomó un crédito por el 70 u 80 por ciento del valor de su vivienda ya debe el doble. Los que tomamos un crédito para mejorar nuestra vivienda podemos perder el ahorro de todas nuestras vidas. Yo voy a cumplir 52 años. Creo que no me podré levantar nunca más de esto si llego a perder todo, porque puse ahí todos los ahorros de mi vida.
El diputado Amadeo también me dijo que yo debería estar en blanco porque saqué un crédito, a lo que respondí que era monotributista. Me preguntó si mi paritaria había igualado la inflación. Le dije nuevamente que era monotributista. Me preguntó lo mismo. Le pedí que me dijera dónde están las paritarias para los monotributistas porque yo no las conozco.
El 73 por ciento de los créditos están dados en bancos públicos, y el 27 por ciento, en bancos privados. Hay que encontrar una solución para todos. Doy las cifras para que entendamos que no es tan difícil encontrar una solución. Sabemos que la solución debe ser política. Creo que estamos a tiempo de encontrarla. Es mucho más complejo si esto sigue pasando.
El diputado me dijo dos veces el furcio de que el país está fundido. Entonces, le pregunté por qué resarcieron a las energéticas y a las concesionarias de peajes, que también sufrieron la devaluación y el hecho de que pasen menos vehículos por las autopistas. La provincia de Buenos Aires ahora también compensó a las energéticas.
Yo creo que nosotros somos mucho más vulnerables y tenemos muchas menos herramientas que estos grupos poderosos. Además, no estamos pidiendo una compensación. Tanto la diputada Astrid Hummel como el diputado Amadeo me dijeron que esta política crediticia fue lanzada con buenas intenciones, pero tienen que demostrar que fue así. Si nos dan una solución, yo voy a creer que las intenciones fueron buenas; pero si no nos dan una solución, no voy a creer eso.
Hoy estamos a tiempo de encontrar una solución para todos. Eso es lo que yo creo. A lo mejor estoy equivocado. Estamos a tiempo de replantear los créditos.
Lamentablemente ha pasado el tiempo, y los dos proyectos que han sido presentados en la Cámara de Diputados el año pasado -a lo mejor hay más, pero solo conozco dos- ya no nos dan una solución. Se agravó mucho la situación para que esos proyectos puedan contemplar una solución. Habría que buscar otro.
Por último, quiero decir que nos reunimos con muchos espacios políticos, o con todos. Acá está presente el diputado Grandinetti, con quien me reuní en su oficina. Nos hemos reunido con varias ONG, con defensorías del pueblo, etcétera. Agradecemos el tiempo que nos han dado.
Humildemente, quiero decir -y no quiero que esto se tome a mal- que ese camino de las reuniones individuales con todos los bloques nos trajo hasta acá. Todos nos han dicho que tenemos razón y que hay voluntad de encontrar una solución. De manera que les pido que demos un paso más. Creo que esto lo comparte el colectivo en general. Demos una declaración conjunta de que todos los bloques están dispuestos a tratar este tema, salvo el oficialismo. A lo mejor se puede armar una mesa de trabajo con asesores de los diferentes bloques y algunos representantes de nuestro colectivo para reunirnos una vez por semana, cada quince días o cuando ustedes dispongan. A lo mejor ustedes nos pueden acercar ideas de cómo seguir con esta construcción o cómo armar una mesa de trabajo diferente. Pero hoy necesitamos la unión de toda la oposición. Con arrestos individuales no vamos a conseguir nada, así como ustedes no van a conseguir nada solo con la buena intención de apoyarnos.
Ojalá que haya podido explicar cuál es nuestra situación. Yo no quiero vivir en un país -ni lo quiero para mi hijo- donde todas las fuerzas políticas están de acuerdo en algo pero ni siquiera se puede discutir el tema porque hay una que se opone. No creo que funcione, así viva en una República. Eso es lo que yo creo. A lo mejor estoy equivocado y algún diputado después me lo pueda aclarar, porque supongo que van a hablar.
Ojalá que podamos encontrar una solución a esto. Simplemente quiero dejar bien en claro que nosotros como colectivo no vamos a hacer fácil que se rematen nuestras casas. Llegamos hasta acá y vamos a hacer lo que sea necesario. Vamos a ponernos delante de nuestras casas, vamos a ir con los concejales y con las ONG, y vamos a hacer lo imposible para que eso no suceda. No va a ser fácil. Si la bomba no se desactiva ahora, alguien la va a tener que desactivar; pero ya va a haber esquirlas. Todos los bloques reunidos tienen presentado un candidato a presidente. Todos los bloques quieren gobernar este país. ¿Por qué la política tiene que resolver las situaciones cuando ya explotaron? Es más fácil hacerlo antes. Es menos doloroso y pone menos vidas en juego.
En definitiva, creo que todavía estamos a tiempo. Ojalá que ustedes puedan darnos una respuesta.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Les recuerdo que tienen solo cinco minutos para exponer, porque nuestro tiempo en la sala es limitado.
Le damos la bienvenida a la señora María Romina Medina, de la provincia de Tucumán, quien va a hacer uso de la palabra a continuación.
Le damos la bienvenida a la señora María Romina Medina, de la provincia de Tucumán, quien va a hacer uso de la palabra a continuación.
SRA. MEDINA Muchas gracias.
Como recién dijo la secretaria, soy representante de la provincia de Tucumán. Como provincia del interior, Tucumán está viviendo realidades terribles. Ya se están ejecutando las hipotecas, es decir que hay gente que ya está perdiendo sus casas. Si bien nos estamos organizando y acoplando a este colectivo, no tenemos la misma fuerza para poder evitar esta catástrofe.
Tenemos las mismas características de crédito. A mí me gusta resaltar que algunos formamos parte del programa ProCreAr, que es un programa pensado con espíritu social e inclusión social. Hoy ese ProCreAr no existe, porque está del lado de los bancos y nos está quitando la posibilidad de cumplir el sueño de la casa propia.
Particularmente, pertenezco al desarrollo urbanístico que se inauguró hace un año en Yerba Buena, Tucumán. Se trata de 540 unidades funcionales, y diecisiete familias están en riesgo porque ya fueron intimadas, es decir, ya fueron notificadas del desalojo a corto plazo. Digo esto porque es así.
Lo que pedimos desde Tucumán es que se discuta el tema, pero sobre todo pedimos soluciones inmediatas y que paren con esto, porque si seguimos esperando hasta que se elabore un proyecto de ley y se discuta en ambas Cámaras, las 170 mil familias argentinas vamos a perder el derecho a la casa propia. No estamos hablando de algo nimio sino que estamos hablando, nada más y nada menos, que de nuestra casa.
Desde Tucumán, aunamos las fuerzas y les pedimos que paren con las ejecuciones. Pedimos que nos garanticen el derecho a la vivienda única y familiar, que nos garanticen el derecho al sueño de la casa propia y que no sean cómplices de las ganancias del banco y de los intereses financieros. Hoy en día están siendo cómplice de todo esto.
Les pedimos a los diputados que nos acompañen en esta lucha. Como decía Diego, los necesitamos más que nunca porque no queremos vivir en la calle. En mi caso particular, ya fui notificada y estoy a punto de perder mi casa, la que me dieron hace un año. Esto ya es insostenible. A pesar de eso, estamos con toda la fuerza y energía para seguir luchando.
En Tucumán somos muchos los damnificados. No hay relación entre los sueldos y el aumento de las cuotas. Básicamente, los tucumanos pedimos soluciones inmediatas. Pedimos que por lo menos se postergue el arrebato de nuestro sueño y se ponga un tope a las cuotas hasta que se pueda rever este sistema financiero.
Por último, quiero agradecer públicamente a todo el colectivo, porque más allá de la fuerza, tiene mucha empatía ante estas situaciones. Así que se los agradezco, y les digo que Tucumán también tiene el compromiso de luchar.
Como recién dijo la secretaria, soy representante de la provincia de Tucumán. Como provincia del interior, Tucumán está viviendo realidades terribles. Ya se están ejecutando las hipotecas, es decir que hay gente que ya está perdiendo sus casas. Si bien nos estamos organizando y acoplando a este colectivo, no tenemos la misma fuerza para poder evitar esta catástrofe.
Tenemos las mismas características de crédito. A mí me gusta resaltar que algunos formamos parte del programa ProCreAr, que es un programa pensado con espíritu social e inclusión social. Hoy ese ProCreAr no existe, porque está del lado de los bancos y nos está quitando la posibilidad de cumplir el sueño de la casa propia.
Particularmente, pertenezco al desarrollo urbanístico que se inauguró hace un año en Yerba Buena, Tucumán. Se trata de 540 unidades funcionales, y diecisiete familias están en riesgo porque ya fueron intimadas, es decir, ya fueron notificadas del desalojo a corto plazo. Digo esto porque es así.
Lo que pedimos desde Tucumán es que se discuta el tema, pero sobre todo pedimos soluciones inmediatas y que paren con esto, porque si seguimos esperando hasta que se elabore un proyecto de ley y se discuta en ambas Cámaras, las 170 mil familias argentinas vamos a perder el derecho a la casa propia. No estamos hablando de algo nimio sino que estamos hablando, nada más y nada menos, que de nuestra casa.
Desde Tucumán, aunamos las fuerzas y les pedimos que paren con las ejecuciones. Pedimos que nos garanticen el derecho a la vivienda única y familiar, que nos garanticen el derecho al sueño de la casa propia y que no sean cómplices de las ganancias del banco y de los intereses financieros. Hoy en día están siendo cómplice de todo esto.
Les pedimos a los diputados que nos acompañen en esta lucha. Como decía Diego, los necesitamos más que nunca porque no queremos vivir en la calle. En mi caso particular, ya fui notificada y estoy a punto de perder mi casa, la que me dieron hace un año. Esto ya es insostenible. A pesar de eso, estamos con toda la fuerza y energía para seguir luchando.
En Tucumán somos muchos los damnificados. No hay relación entre los sueldos y el aumento de las cuotas. Básicamente, los tucumanos pedimos soluciones inmediatas. Pedimos que por lo menos se postergue el arrebato de nuestro sueño y se ponga un tope a las cuotas hasta que se pueda rever este sistema financiero.
Por último, quiero agradecer públicamente a todo el colectivo, porque más allá de la fuerza, tiene mucha empatía ante estas situaciones. Así que se los agradezco, y les digo que Tucumán también tiene el compromiso de luchar.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora Silvia Sosa, de La Plata.
SRA. SOSA Señora presidenta: buenas tardes a todos. Soy Silvia Sosa y formo parte del colectivo de autoconvocados de La Plata y del equipo asesor que ha formado el colectivo.
Voy a tratar de no ser autorreferencial. Me da bastante vergüenza estar en esta situación. Tomé un crédito hipotecario, pero no quiero referirme a mi situación sino explicar a nivel macro cómo llegamos a este punto y tratar de esbozar una solución.
Lo primero que voy a decir es que de este Congreso salió una ley que permitía la indexación y generaba la herramienta de los UVA. Esa ley no ponía límite a la cantidad de veces que se puede indexar el capital adeudado. Tampoco se estableció un límite de afectación del salario familiar con relación a la cuota del crédito ni una herramienta para el caso de que hubiese desfases como el que ocurrió a partir de 2018.
Culpan de esta situación a los deudores -ya lo habrán escuchado, o pueden leer los argumentos en Twitter-, pero de ninguna manera es responsabilidad de los que hemos tomado esos créditos. Al momento de tomar las hipotecas, todos pasamos por el análisis crediticio de los bancos, y todos sabemos lo que eso implica. Tuvimos que acreditar nuestros ingresos familiares y, además, cubrir un porcentaje de la vivienda -variable, según el tipo de crédito y el banco-, más los gastos. Esta suma alcanzaba como mínimo el 25 por ciento del valor de la vivienda y, como máximo, el 40 por ciento. Todos hemos pagado ese porcentaje; todos hemos calificado y todos éramos aptos para pagar estas hipotecas, según los bancos.
¿Cuál es la situación actual? Me referiré a un análisis realizado en base a dos casos que nos han acercado al colectivo, pero hay infinidad de situaciones similares y en todos se reitera la misma variante. La diferencia reside en el momento en que tomaron la hipoteca: quien tomó la hipoteca hace más tiempo tiene un monto mayor acumulado.
En el primer caso, la escritura se celebró el 15 de diciembre de 2017. La persona pidió prestados 1.082.500 pesos para comprar su vivienda. En ese momento, el salario mínimo, vital y móvil era de 9.500 pesos, por lo que la deuda contraída ascendía a 114 salarios mínimo, vital y móvil. Doce meses después, su deuda pasó a ser de 1.575.431 pesos, que con un salario mínimo, vital y móvil de 11.600 pesos equivalía a 136 salarios mínimo, vital y móvil. Esta persona debe mayor cantidad de dinero y de salarios mínimo, vital y móvil sin haber hecho absolutamente nada; es decir que, sin haber hecho nada, se sobreendeudó. En un año su capital adeudado aumentó 492.931 pesos, lo que equivale a un auto bastante bonito que esta persona no se compró sino que se lo debe al banco.
El siguiente caso es exactamente igual; la única diferencia es que en un plazo de once meses la persona debe 660.179 pesos más.
Con esta política que adoptó el gobierno, en vez de destinarse nuestro dinero -nuestros ahorros e ingresos- al mercado del consumo, se lo destina al mercado financiero y no nos están dando una respuesta.
Quiero agradecer a la diputada Passo por esta oportunidad que nos brinda y pedir a todos los legisladores aquí presentes que se comprometan a que todas las fuerzas políticas opositoras se juntarán en una mesa de diálogo para tratar este tema.
Como ya hay ejecuciones en trámite, no hay tiempo para pensar una solución de fondo. Necesitamos una ley de emergencia. En ese sentido, mi propuesta es que se declare la emergencia de los créditos UVA a partir del 1º de enero de 2018 y durante trescientos sesenta y cinco días, o hasta que el Congreso dicte una ley que recomponga el equilibrio entre las partes deudoras y acreedoras.
Propongo que se deje de aplicar la indexación por UVA y que para el cálculo del capital y de la cuota se aplique un índice en base a la variación del salario mínimo, vital y móvil que hubo entre 2017 y 2018 y entre 2018 y 2019. Esto permitiría que las familias puedan pagar su crédito y que el capital adeudado no siga creciendo en forma exponencial.
Además, para garantía de quienes ya están en situación de ejecución, solicito que en la misma ley se disponga suspender las ejecuciones de las viviendas únicas y familiares de los tomadores de créditos UVA hasta tanto se dicte otra norma que resuelva esta cuestión.
Señora diputada Marcela Passo: le pido personalmente el compromiso de que, en lo posible, reúna a su bloque para que se una al resto de las fuerzas opositoras y vean qué dictamen conjunto pueden lograr para que esto sea posible. Sé que esto que planteo no es la solución al problema, pero es algo que evitaría la debacle que está empezando a suceder entre las familias. Muchas gracias.
Voy a tratar de no ser autorreferencial. Me da bastante vergüenza estar en esta situación. Tomé un crédito hipotecario, pero no quiero referirme a mi situación sino explicar a nivel macro cómo llegamos a este punto y tratar de esbozar una solución.
Lo primero que voy a decir es que de este Congreso salió una ley que permitía la indexación y generaba la herramienta de los UVA. Esa ley no ponía límite a la cantidad de veces que se puede indexar el capital adeudado. Tampoco se estableció un límite de afectación del salario familiar con relación a la cuota del crédito ni una herramienta para el caso de que hubiese desfases como el que ocurrió a partir de 2018.
Culpan de esta situación a los deudores -ya lo habrán escuchado, o pueden leer los argumentos en Twitter-, pero de ninguna manera es responsabilidad de los que hemos tomado esos créditos. Al momento de tomar las hipotecas, todos pasamos por el análisis crediticio de los bancos, y todos sabemos lo que eso implica. Tuvimos que acreditar nuestros ingresos familiares y, además, cubrir un porcentaje de la vivienda -variable, según el tipo de crédito y el banco-, más los gastos. Esta suma alcanzaba como mínimo el 25 por ciento del valor de la vivienda y, como máximo, el 40 por ciento. Todos hemos pagado ese porcentaje; todos hemos calificado y todos éramos aptos para pagar estas hipotecas, según los bancos.
¿Cuál es la situación actual? Me referiré a un análisis realizado en base a dos casos que nos han acercado al colectivo, pero hay infinidad de situaciones similares y en todos se reitera la misma variante. La diferencia reside en el momento en que tomaron la hipoteca: quien tomó la hipoteca hace más tiempo tiene un monto mayor acumulado.
En el primer caso, la escritura se celebró el 15 de diciembre de 2017. La persona pidió prestados 1.082.500 pesos para comprar su vivienda. En ese momento, el salario mínimo, vital y móvil era de 9.500 pesos, por lo que la deuda contraída ascendía a 114 salarios mínimo, vital y móvil. Doce meses después, su deuda pasó a ser de 1.575.431 pesos, que con un salario mínimo, vital y móvil de 11.600 pesos equivalía a 136 salarios mínimo, vital y móvil. Esta persona debe mayor cantidad de dinero y de salarios mínimo, vital y móvil sin haber hecho absolutamente nada; es decir que, sin haber hecho nada, se sobreendeudó. En un año su capital adeudado aumentó 492.931 pesos, lo que equivale a un auto bastante bonito que esta persona no se compró sino que se lo debe al banco.
El siguiente caso es exactamente igual; la única diferencia es que en un plazo de once meses la persona debe 660.179 pesos más.
Con esta política que adoptó el gobierno, en vez de destinarse nuestro dinero -nuestros ahorros e ingresos- al mercado del consumo, se lo destina al mercado financiero y no nos están dando una respuesta.
Quiero agradecer a la diputada Passo por esta oportunidad que nos brinda y pedir a todos los legisladores aquí presentes que se comprometan a que todas las fuerzas políticas opositoras se juntarán en una mesa de diálogo para tratar este tema.
Como ya hay ejecuciones en trámite, no hay tiempo para pensar una solución de fondo. Necesitamos una ley de emergencia. En ese sentido, mi propuesta es que se declare la emergencia de los créditos UVA a partir del 1º de enero de 2018 y durante trescientos sesenta y cinco días, o hasta que el Congreso dicte una ley que recomponga el equilibrio entre las partes deudoras y acreedoras.
Propongo que se deje de aplicar la indexación por UVA y que para el cálculo del capital y de la cuota se aplique un índice en base a la variación del salario mínimo, vital y móvil que hubo entre 2017 y 2018 y entre 2018 y 2019. Esto permitiría que las familias puedan pagar su crédito y que el capital adeudado no siga creciendo en forma exponencial.
Además, para garantía de quienes ya están en situación de ejecución, solicito que en la misma ley se disponga suspender las ejecuciones de las viviendas únicas y familiares de los tomadores de créditos UVA hasta tanto se dicte otra norma que resuelva esta cuestión.
Señora diputada Marcela Passo: le pido personalmente el compromiso de que, en lo posible, reúna a su bloque para que se una al resto de las fuerzas opositoras y vean qué dictamen conjunto pueden lograr para que esto sea posible. Sé que esto que planteo no es la solución al problema, pero es algo que evitaría la debacle que está empezando a suceder entre las familias. Muchas gracias.
SRA. PRESIDENTA PASSO Gracias, Silvia.
Antes de ceder la palabra a los representantes de las asociaciones de consumidores, quiero hacer algunos comentarios respecto de los compromisos que asumimos, que tienen que ver con lo que se mencionó acá respecto de tratar de salir de esas reuniones individuales y poder llevarlas a un terreno más institucional, más colectivo, a fin de ayudarlos a visibilizar este problema que los aqueja y que, por lo que vemos día a día, se vuelve cada vez más angustiante y más grave.
En ese orden de ideas, lo que hicimos fue comprometernos a escucharlos en esta comisión, cosa que hoy estamos haciendo.
Por otro lado, omití comentarles que también se asumió la responsabilidad de convocar a esta comisión al secretario de Vivienda, Iván Kerr, para que brinde las explicaciones correspondientes y poder llevar esas reuniones individuales que mantuvo con algunos de ustedes a un espacio más institucional y más público. Es por eso que hemos cursado una invitación al señor secretario de Vivienda para que el martes de la semana próxima venga a esta comisión, que es a la cual las víctimas de esta situación han acudido para hacer escuchar su voz.
Lamentablemente, advertimos que ninguno de los proyectos vinculados con esta temática -que son muchos y pertenecen a diputados de distintas fuerzas políticas- ha sido girado a la Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia. Tengo que decir que hemos estado revisando un material muy interesante -que después haré circular- que nos acercó el grupo Hipotecados UVA Provincia de Buenos Aires, donde hacen un análisis de los proyectos a los cuales han accedido.
En general, todos esos proyectos tienen giro a la Comisión de Finanzas, y de una manera muy despareja, a otras comisiones. Lamentamos que no hayan sido girados a la Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia. Evidentemente, el criterio para el giro de los proyectos no es el mismo que la sociedad en su conjunto está teniendo a la hora de tratar de encontrar soluciones a este problema. Dicho esto, obviamente les quiero aclarar que seguimos a disposición para todo lo que pueda estar a nuestro alcance.
A continuación escucharemos a los representantes de las asociaciones de consumidores que nos visitan.
Antes de ceder la palabra a los representantes de las asociaciones de consumidores, quiero hacer algunos comentarios respecto de los compromisos que asumimos, que tienen que ver con lo que se mencionó acá respecto de tratar de salir de esas reuniones individuales y poder llevarlas a un terreno más institucional, más colectivo, a fin de ayudarlos a visibilizar este problema que los aqueja y que, por lo que vemos día a día, se vuelve cada vez más angustiante y más grave.
En ese orden de ideas, lo que hicimos fue comprometernos a escucharlos en esta comisión, cosa que hoy estamos haciendo.
Por otro lado, omití comentarles que también se asumió la responsabilidad de convocar a esta comisión al secretario de Vivienda, Iván Kerr, para que brinde las explicaciones correspondientes y poder llevar esas reuniones individuales que mantuvo con algunos de ustedes a un espacio más institucional y más público. Es por eso que hemos cursado una invitación al señor secretario de Vivienda para que el martes de la semana próxima venga a esta comisión, que es a la cual las víctimas de esta situación han acudido para hacer escuchar su voz.
Lamentablemente, advertimos que ninguno de los proyectos vinculados con esta temática -que son muchos y pertenecen a diputados de distintas fuerzas políticas- ha sido girado a la Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia. Tengo que decir que hemos estado revisando un material muy interesante -que después haré circular- que nos acercó el grupo Hipotecados UVA Provincia de Buenos Aires, donde hacen un análisis de los proyectos a los cuales han accedido.
En general, todos esos proyectos tienen giro a la Comisión de Finanzas, y de una manera muy despareja, a otras comisiones. Lamentamos que no hayan sido girados a la Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia. Evidentemente, el criterio para el giro de los proyectos no es el mismo que la sociedad en su conjunto está teniendo a la hora de tratar de encontrar soluciones a este problema. Dicho esto, obviamente les quiero aclarar que seguimos a disposición para todo lo que pueda estar a nuestro alcance.
A continuación escucharemos a los representantes de las asociaciones de consumidores que nos visitan.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor Pedro Bussetti, en representación de la asociación DE.U.CO.
SR. BUSSETTI Señora presidenta: la ley a la que hacía referencia la señora Silvia Sosa se aprobó en septiembre de 2016 por 123 votos afirmativos y 38 negativos. Evidentemente, hubo treinta y ocho diputados que veían el final anticipado de esta situación. En aquel momento los señores diputados Pitrola, Recalde y otros -no alcancé a leer toda la versión taquigráfica- advertían sobre lo que está pasando en la actualidad. Y esto va a seguir pasando si no hay una intervención, en primer lugar, del Poder Ejecutivo para resguardar el derecho a la vivienda de miles de familias que hoy están en la situación que se acaba de describir.
Aquí se dijo que ya varias familias recibieron la intimación de desalojo. Esto es así porque los que votaron la ley le dieron título ejecutivo, es decir, ni siquiera previeron un juicio sino directamente la intimación y a la calle.
Nos gustaría que los ciento veintitrés diputados que votaron a favor se hagan cargo y den la cara ante los afectados; entre ellos, el señor diputado Amadeo, a quien hacía alusión el compañero González. Da vergüenza que un diputado de la Nación se refiera a un afectado por esta situación en la forma en que lo hizo el diputado Amadeo.
Creemos que la solución es política. Tiene que intervenir el Poder Ejecutivo nacional, como intervino ante la situación de las distribuidoras de gas, que por la devaluación tuvieron un desfase en el pago que habían hecho a las productoras de gas. Habían contratado un dólar a determinado valor pero luego se devaluó y tuvieron que pagar a otro valor. ¿Qué hizo el Estado nacional? Salió en su protección, teniendo en cuenta que la devaluación las había afectado, y cubrió con fondos propios del Estado nacional lo que no pudo concretar con la resolución 180 del año pasado, que nos obligaba a los usuarios a pagar esa deuda.
Ahora ya lo han resuelto: meten en la tarifa las diferencias diarias acumuladas. Pero el año pasado fue el Estado nacional el que salió a cubrir el desfase de las distribuidoras. Aquí hay personas, hay habitantes, hay trabajadores, hay clase media. Le decimos al Poder Ejecutivo nacional que alguna vez tenga sensibilidad social y se acuerde de que el presidente Macri dijo que iba a construir un millón de viviendas a treinta años. Sin embargo, hoy tenemos la situación de miles de argentinos que van a perder sus viviendas por los créditos UVA.
En particular, suscribimos lo que acaba de decir Paula Sosa, de La Plata, sobre el proyecto de ley de emergencia para resolver en forma inmediata esta situación. Obviamente, desde nuestra organización, DE.U.CO., ofrecemos apoyo a todos los sectores que están representando a provincias y municipalidades aquí. Como es natural, somos apenas una entidad de consumidores que no tiene la estructura suficiente como para acompañarlos y darles respuestas, pero en la medida de nuestras posibilidades vamos a estar acompañándolos a todos, como estuvimos en 2002 con una situación particular, que también fue otra vergüenza: los deudores hipotecarios perjudicados por la devaluación del 300 por ciento del Poder Ejecutivo nacional.
Aquí se dijo que ya varias familias recibieron la intimación de desalojo. Esto es así porque los que votaron la ley le dieron título ejecutivo, es decir, ni siquiera previeron un juicio sino directamente la intimación y a la calle.
Nos gustaría que los ciento veintitrés diputados que votaron a favor se hagan cargo y den la cara ante los afectados; entre ellos, el señor diputado Amadeo, a quien hacía alusión el compañero González. Da vergüenza que un diputado de la Nación se refiera a un afectado por esta situación en la forma en que lo hizo el diputado Amadeo.
Creemos que la solución es política. Tiene que intervenir el Poder Ejecutivo nacional, como intervino ante la situación de las distribuidoras de gas, que por la devaluación tuvieron un desfase en el pago que habían hecho a las productoras de gas. Habían contratado un dólar a determinado valor pero luego se devaluó y tuvieron que pagar a otro valor. ¿Qué hizo el Estado nacional? Salió en su protección, teniendo en cuenta que la devaluación las había afectado, y cubrió con fondos propios del Estado nacional lo que no pudo concretar con la resolución 180 del año pasado, que nos obligaba a los usuarios a pagar esa deuda.
Ahora ya lo han resuelto: meten en la tarifa las diferencias diarias acumuladas. Pero el año pasado fue el Estado nacional el que salió a cubrir el desfase de las distribuidoras. Aquí hay personas, hay habitantes, hay trabajadores, hay clase media. Le decimos al Poder Ejecutivo nacional que alguna vez tenga sensibilidad social y se acuerde de que el presidente Macri dijo que iba a construir un millón de viviendas a treinta años. Sin embargo, hoy tenemos la situación de miles de argentinos que van a perder sus viviendas por los créditos UVA.
En particular, suscribimos lo que acaba de decir Paula Sosa, de La Plata, sobre el proyecto de ley de emergencia para resolver en forma inmediata esta situación. Obviamente, desde nuestra organización, DE.U.CO., ofrecemos apoyo a todos los sectores que están representando a provincias y municipalidades aquí. Como es natural, somos apenas una entidad de consumidores que no tiene la estructura suficiente como para acompañarlos y darles respuestas, pero en la medida de nuestras posibilidades vamos a estar acompañándolos a todos, como estuvimos en 2002 con una situación particular, que también fue otra vergüenza: los deudores hipotecarios perjudicados por la devaluación del 300 por ciento del Poder Ejecutivo nacional.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor Miguel Ángel Martín.
SR. MARTÍN Buenas tardes. Represento a la asociación Consumidores Alerta y a IANCA, que es el Instituto Argentino de Negociación, Conciliación y Arbitraje.
Voy a hablar desde un punto de vista absolutamente técnico, aunque estemos en un ámbito político, ya que las consecuencias brutales de estos créditos las están pagando los pobres deudores.
Esto pasó tres veces en el país. Primero con Martínez de Hoz, con la famosa "1.050". Ahora está volviendo a pasar exactamente lo mismo. Pasó también cuando Cavallo hizo la hiperinflación. Cavallo previó una tasa de interés que dejó a la gente muy contenta, porque estábamos en el 1.000 por ciento anual y pasamos a pagar el 30 por ciento, pero con una inflación cero las cuotas resultaron impagables.
Con esto quiero decir que una vez más, estén o no identificados como autoconvocados, los tomadores de crédito van a terminar pagando el pato de la boda con sus viviendas.
Yo no diría que es una estafa. Supongo que esto no se hizo con ninguna intención. Lo cierto es que sucedió tres veces en el país y no aprendemos. O quizá hay alguna intencionalidad. En todo caso, es lo que no puedo llegar a comprender. El problema es que a la gente que tomó un crédito UVA le están cobrando dos veces la inflación, porque le ajustan el crédito y también las tasas de interés. Además, le están cobrando el IVA, que no es un valor agregado a la inflación. Con lo cual le están cobrando dos veces la inflación y dos veces el IVA, que no corresponde porque no es ningún valor agregado sino que es un ajuste de la deuda. Eso es una barrabasada.
No lo conozco en particular, porque no he tenido ninguna consulta concreta sobre el tema de los créditos UVA, pero por la forma en que está calculado supongo que las cuotas están indexadas y pagan tasas activas que tienen la inflación adentro. Esto no lo digo yo porque se me ocurre sino porque está reconocido en muchísimas sentencias judiciales. Estas sentencias dicen que se justifican las tasas activas porque en las deudas hay que prever el índice de la inflación, cuando en realidad me la están cobrando por otro lado.
Esto indica que el problema es técnico. Nosotros hemos hecho una investigación a partir de 2001. Hemos ganado algunos juicios. Los bancos no sabían qué contestar cuando les planteábamos estas cosas. En este sentido, me siento un poco como Quijote en el desierto. Ni siquiera los abogados de los bancos, que tienen la misión de apelar las sentencias de primera instancia para no dejar registrada ninguna sentencia de segunda instancia, hicieron eso. Me refiero a que no apelaron las sentencias que hicimos nosotros. Esto prueba que eran bastante precarios.
No quiero ser muy técnico, pero la tasa de interés en realidad contiene tres conceptos que están metidos dentro de la tasa. Dos de ellos no deberían estar metidos. Uno de ellos es la inflación. ¿Por qué está la inflación? Porque tenemos una ley, la de convertibilidad, que dice que no se pueden ajustar las deudas. Entonces, la aplican. ¿Y cómo encontraron la forma de hacerlo? Metiéndola en la tasa de interés.
La otra cosa es que el riesgo crediticio -que en los UVA no debería estar porque no hay ningún riesgo, porque están respaldados por el Banco Hipotecario- lo van a cobrar porque las viviendas son el respaldo del crédito. Eso constituye una cifra menor: entre el 1 y el 3 por ciento. Evidentemente, la magnitud referida a lo que estamos hablando hoy no tiene nada que ver con esos montos, por lo cual ni nos hubiéramos enterado ni estaríamos convocados nunca por el riesgo.
Pero esos tres conceptos están. ¿Por qué no está el riesgo crediticio? Porque la ley de las compañías de seguros prohíbe asegurar el riesgo financiero. Hay otros rubros que sí son cobrados por el banco, como el riesgo de muerte o de accidente, pero el riesgo financiero no se puede.
Esto se agrava más cuando el individuo deja de pagar, ya que le aplican penalizaciones. Pero en estos casos la penalización también está mal aplicada. Aplican la penalización multiplicando la tasa que tiene la inflación, por lo cual vuelven a cobrar otra vez parte de la inflación -que es una barbaridad que esté contemplada-, ya que multiplican la inflación varias veces en la tasa.
Entonces, hay que darse cuenta de que hay un error técnico -que quiero suponer que es por ignorancia y no por malicia- en la forma de calcular la tasa de interés.
Nosotros hemos hecho una investigación que abarca tres tomos y refiere a la teoría del interés y de la usura. Consideramos que las tasas de interés son usurarias. Además, hay otro concepto que hace a la usura, que es el ratioferusismo, o sea, el cálculo mal aplicado.
Ustedes seguramente habrán escuchado que estos créditos están hechos a través del sistema francés o del sistema alemán. Cualquiera de los tres sistemas que voy a nombrar son absolutamente idénticos para el banco, ya que los bancos van a cobrar la misma cantidad de dinero en el tiempo. Pero para el usuario bancario, esto no es así. El sistema francés representa el ciento por ciento -aunque yo creo que con la inflación actual debería ser más- de lo que le están cobrando. Si le cobraran por el sistema alemán, con la inflación actual pagarían un 20 por ciento menos a lo largo del crédito.
Tengo muchas cosas más para aclarar pero me piden que redondee.
En el tema de los préstamos hay otro error. Pareciera que, al tomar un crédito para comprar una vivienda, uno fuera socio del banco. Y no es así. Uno simplemente tomó un crédito, es decir, no se asoció con el banco que se lo otorgó. El argumento de que mi vivienda aumentó no tiene nada que ver, porque de la misma manera que aumentó se pudo haber desvalorizado, y en ese caso no me van a bajar el crédito.
Los créditos fueron otorgados de acuerdo a la capacidad de pago de los usuarios, con lo cual, si después se ajustan en base a otro elemento, evidentemente nos va a dar cualquier cosa. Hay problemas absolutamente técnicos en los cuales deberían estar basadas las leyes; obviamente, todo esto es un acuerdo. Para mí es una barrabasada la forma en que está establecido, por todo esto que estamos viendo.
Hay otra cosa terrible en cuanto a las tasas de interés que cobran los bancos. En esas tasas está incluida la inflación. Los bancos prestan plata que no es de ellos. ¿A quién le pagan la inflación? A nadie. Las operaciones pasivas de los bancos no pagan inflación, o lo que pagan es casi nulo. Sin embargo, se la cobran a sus clientes con todo, inclusive a los tomadores de los créditos UVA. Esto representa que están teniendo un enriquecimiento incausado.
Voy a finalizar acá pese a que podría aportar muchísimas cosas más en todo este tema. Muchas gracias.
Voy a hablar desde un punto de vista absolutamente técnico, aunque estemos en un ámbito político, ya que las consecuencias brutales de estos créditos las están pagando los pobres deudores.
Esto pasó tres veces en el país. Primero con Martínez de Hoz, con la famosa "1.050". Ahora está volviendo a pasar exactamente lo mismo. Pasó también cuando Cavallo hizo la hiperinflación. Cavallo previó una tasa de interés que dejó a la gente muy contenta, porque estábamos en el 1.000 por ciento anual y pasamos a pagar el 30 por ciento, pero con una inflación cero las cuotas resultaron impagables.
Con esto quiero decir que una vez más, estén o no identificados como autoconvocados, los tomadores de crédito van a terminar pagando el pato de la boda con sus viviendas.
Yo no diría que es una estafa. Supongo que esto no se hizo con ninguna intención. Lo cierto es que sucedió tres veces en el país y no aprendemos. O quizá hay alguna intencionalidad. En todo caso, es lo que no puedo llegar a comprender. El problema es que a la gente que tomó un crédito UVA le están cobrando dos veces la inflación, porque le ajustan el crédito y también las tasas de interés. Además, le están cobrando el IVA, que no es un valor agregado a la inflación. Con lo cual le están cobrando dos veces la inflación y dos veces el IVA, que no corresponde porque no es ningún valor agregado sino que es un ajuste de la deuda. Eso es una barrabasada.
No lo conozco en particular, porque no he tenido ninguna consulta concreta sobre el tema de los créditos UVA, pero por la forma en que está calculado supongo que las cuotas están indexadas y pagan tasas activas que tienen la inflación adentro. Esto no lo digo yo porque se me ocurre sino porque está reconocido en muchísimas sentencias judiciales. Estas sentencias dicen que se justifican las tasas activas porque en las deudas hay que prever el índice de la inflación, cuando en realidad me la están cobrando por otro lado.
Esto indica que el problema es técnico. Nosotros hemos hecho una investigación a partir de 2001. Hemos ganado algunos juicios. Los bancos no sabían qué contestar cuando les planteábamos estas cosas. En este sentido, me siento un poco como Quijote en el desierto. Ni siquiera los abogados de los bancos, que tienen la misión de apelar las sentencias de primera instancia para no dejar registrada ninguna sentencia de segunda instancia, hicieron eso. Me refiero a que no apelaron las sentencias que hicimos nosotros. Esto prueba que eran bastante precarios.
No quiero ser muy técnico, pero la tasa de interés en realidad contiene tres conceptos que están metidos dentro de la tasa. Dos de ellos no deberían estar metidos. Uno de ellos es la inflación. ¿Por qué está la inflación? Porque tenemos una ley, la de convertibilidad, que dice que no se pueden ajustar las deudas. Entonces, la aplican. ¿Y cómo encontraron la forma de hacerlo? Metiéndola en la tasa de interés.
La otra cosa es que el riesgo crediticio -que en los UVA no debería estar porque no hay ningún riesgo, porque están respaldados por el Banco Hipotecario- lo van a cobrar porque las viviendas son el respaldo del crédito. Eso constituye una cifra menor: entre el 1 y el 3 por ciento. Evidentemente, la magnitud referida a lo que estamos hablando hoy no tiene nada que ver con esos montos, por lo cual ni nos hubiéramos enterado ni estaríamos convocados nunca por el riesgo.
Pero esos tres conceptos están. ¿Por qué no está el riesgo crediticio? Porque la ley de las compañías de seguros prohíbe asegurar el riesgo financiero. Hay otros rubros que sí son cobrados por el banco, como el riesgo de muerte o de accidente, pero el riesgo financiero no se puede.
Esto se agrava más cuando el individuo deja de pagar, ya que le aplican penalizaciones. Pero en estos casos la penalización también está mal aplicada. Aplican la penalización multiplicando la tasa que tiene la inflación, por lo cual vuelven a cobrar otra vez parte de la inflación -que es una barbaridad que esté contemplada-, ya que multiplican la inflación varias veces en la tasa.
Entonces, hay que darse cuenta de que hay un error técnico -que quiero suponer que es por ignorancia y no por malicia- en la forma de calcular la tasa de interés.
Nosotros hemos hecho una investigación que abarca tres tomos y refiere a la teoría del interés y de la usura. Consideramos que las tasas de interés son usurarias. Además, hay otro concepto que hace a la usura, que es el ratioferusismo, o sea, el cálculo mal aplicado.
Ustedes seguramente habrán escuchado que estos créditos están hechos a través del sistema francés o del sistema alemán. Cualquiera de los tres sistemas que voy a nombrar son absolutamente idénticos para el banco, ya que los bancos van a cobrar la misma cantidad de dinero en el tiempo. Pero para el usuario bancario, esto no es así. El sistema francés representa el ciento por ciento -aunque yo creo que con la inflación actual debería ser más- de lo que le están cobrando. Si le cobraran por el sistema alemán, con la inflación actual pagarían un 20 por ciento menos a lo largo del crédito.
Tengo muchas cosas más para aclarar pero me piden que redondee.
En el tema de los préstamos hay otro error. Pareciera que, al tomar un crédito para comprar una vivienda, uno fuera socio del banco. Y no es así. Uno simplemente tomó un crédito, es decir, no se asoció con el banco que se lo otorgó. El argumento de que mi vivienda aumentó no tiene nada que ver, porque de la misma manera que aumentó se pudo haber desvalorizado, y en ese caso no me van a bajar el crédito.
Los créditos fueron otorgados de acuerdo a la capacidad de pago de los usuarios, con lo cual, si después se ajustan en base a otro elemento, evidentemente nos va a dar cualquier cosa. Hay problemas absolutamente técnicos en los cuales deberían estar basadas las leyes; obviamente, todo esto es un acuerdo. Para mí es una barrabasada la forma en que está establecido, por todo esto que estamos viendo.
Hay otra cosa terrible en cuanto a las tasas de interés que cobran los bancos. En esas tasas está incluida la inflación. Los bancos prestan plata que no es de ellos. ¿A quién le pagan la inflación? A nadie. Las operaciones pasivas de los bancos no pagan inflación, o lo que pagan es casi nulo. Sin embargo, se la cobran a sus clientes con todo, inclusive a los tomadores de los créditos UVA. Esto representa que están teniendo un enriquecimiento incausado.
Voy a finalizar acá pese a que podría aportar muchísimas cosas más en todo este tema. Muchas gracias.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) En todo caso, nos puede acercar su informe por escrito y nosotros se lo haremos llegar a todos.
Tiene la palabra el señor Mariano Castillo, de la Asociación Cruzada Cívica.
Tiene la palabra el señor Mariano Castillo, de la Asociación Cruzada Cívica.
SR. CASTILLO Señora presidenta: trataré de ser breve por una cuestión de tiempo.
Si bien estamos convocados por la situación de los tomadores de créditos hipotecarios UVA, dada la trascendencia social que tiene -como mencionaron los anteriores oradores-, en realidad esta situación afecta a un universo más amplio de consumidores. Digo esto porque también hemos recibido varias consultas por la situación que están viviendo otros consumidores que han tomado préstamos personales UVA para poder afrontar deudas, principalmente de tarjetas de crédito u otro tipo de deudas que no podían cubrir. Estos consumidores hoy también se encuentran en la situación de no poder cubrir sus pasivos.
Por eso, si bien destacamos la situación social particular que están sufriendo los tomadores de créditos hipotecarios UVA, que a través de su esfuerzo han logrado visibilizar el tema, consideramos que es necesario tratar la cuestión en forma más amplia porque afecta a un universo más amplio de consumidores que no se han organizado de la misma manera pero que merecen la misma protección; es decir, deben ser tratados conjuntamente. Muchas gracias.
Si bien estamos convocados por la situación de los tomadores de créditos hipotecarios UVA, dada la trascendencia social que tiene -como mencionaron los anteriores oradores-, en realidad esta situación afecta a un universo más amplio de consumidores. Digo esto porque también hemos recibido varias consultas por la situación que están viviendo otros consumidores que han tomado préstamos personales UVA para poder afrontar deudas, principalmente de tarjetas de crédito u otro tipo de deudas que no podían cubrir. Estos consumidores hoy también se encuentran en la situación de no poder cubrir sus pasivos.
Por eso, si bien destacamos la situación social particular que están sufriendo los tomadores de créditos hipotecarios UVA, que a través de su esfuerzo han logrado visibilizar el tema, consideramos que es necesario tratar la cuestión en forma más amplia porque afecta a un universo más amplio de consumidores que no se han organizado de la misma manera pero que merecen la misma protección; es decir, deben ser tratados conjuntamente. Muchas gracias.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor diputado Ramón.
SR. RAMÓN Buenas tardes a todos. En primer lugar, agradezco la presencia de tantos usuarios y consumidores afectados por esta modalidad de una oferta de propaganda que se ha hecho desde el Estado, en asociación con una franja muy chiquitita de bancos del Estado y privados que se apoderan de la economía de cada una de las familias que tenían la expectativa, de acuerdo a esa original oferta de propaganda.
Quise empezar así mi intervención por lo siguiente. En la última reforma de la Constitución -en 1994- se incluyó la protección de los derechos de los usuarios y los consumidores. Sin embargo, los gobiernos que vinieron después -no solo el actual sino también los anteriores, independientemente de la idea política de sus funcionarios- no se pudieron sentar a discutir las políticas de Estado que van a proteger a los usuarios y consumidores en cuanto a los servicios y productos que se les ofrecen.
Este es el primer punto para dejar en claro, sobre todo a cada de uno los diputados oficialistas que dicen representar al pueblo y que obtuvieron la mayoría de los votos. Pareciera ser que los usuarios y los consumidores son esa cuarta pata a la que no se le quiere dar bolilla.
¿Cuáles son las patas de todos los negocios, los comercios y las prestaciones de servicios que se dan en las ciudades, provincias y Nación? Cuando nos sentamos en una mesa a discutir sobre algo que se vende o un servicio que se presta, en primer lugar está el Estado, que somos todos nosotros. Somos los dueños de los servicios -aun de los financieros- en un sistema de libre comercio. Algunos se preguntarán por qué estoy diciendo esto; esto es así porque se incluyó en el ámbito constitucional la protección de los derechos de los usuarios y los consumidores.
Entonces, una pata de la mesa es el Estado; otra es el proveedor que tiene que prestar el servicio -en este caso estamos hablando de servicios financieros-, y la tercera es el ente que tiene que controlar que ese proveedor cumpla con las normas constitucionales. En el caso de estos créditos, es el Banco Central de la República Argentina quien debe ejercer el control. Por último, la cuarta pata de la mesa son los usuarios y los consumidores.
Pareciera ser que cuando se instrumenta una política que tiene que ver con el interés de los usuarios y los consumidores, estos entes de control se escapan.
Para que ustedes sepan, todos los temas que se tratan en esta comisión en particular están relacionados con los usuarios y los consumidores y con los servicios; pero los proveedores de los servicios únicamente se sientan con aquellos políticos que están en el ámbito del Estado y que protegen su interés económico, no el del usuario o el del consumidor.
Es tremendo escuchar el testimonio de los afectados y es realmente un problema lo que está ocurriendo.
Conozco un solo economista del cual se ha desprendido el mensaje político del oficialismo acerca de que el valor en dólares de las propiedades adquiridas con estos créditos UVA se ha incrementado. Uno de los invitados del día de hoy lo ha manifestado muy claramente. El economista se llama Martín Tetaz y de él se han prendido todos los demás economistas que apoyan este sistema de los bancos y, en el ámbito de la política, aquellos funcionarios del gobierno que siguen cuidando el interés económico de las entidades bancarias.
Creo que ustedes se quieren llevar algo de esta reunión, pero la verdad es que se van a ir con nada. Si bien nosotros no queremos eso, se debe principalmente a que el oficialismo no está aquí presente.
Este encuentro se está grabando por quienes tienen interés en visibilizar esta problemática; por lo tanto, deben darla a conocer. Esta reunión tiene que llegar a los medios de comunicación porque el oficialismo no está presente y hay un arco de la oposición que tampoco está. Para que nosotros podamos tomar una decisión desde esta comisión, necesitamos tener quórum. Esto es algo político.
Van a escuchar muchas veces decir que no se pueden confundir las asociaciones de consumidores con la política. Lo digo porque me toca venir de una asociación de consumidores. Dicen que confundir la acción política con los consumidores es un craso error, pero los consumidores y los usuarios tenemos el derecho político de empezar a hacer valer nuestros derechos acá.
Entonces, políticamente celebro que ustedes estén hoy acá. No celebro la situación en la que se encuentran sino su presencia en esta comisión, así como también esta posibilidad de visibilizar el problema.
En cuanto al compromiso solicitado, tanto mi bloque -Protectora- como creo que todos los bloques de los demás diputados aquí presentes son parte de un sistema político que quiere modificar esta realidad. Estoy seguro de que cada uno de los legisladores aquí presentes y aquellos que se han tenido que retirar para asistir a otras reuniones de comisiones entienden a la perfección que la política tiene que sentar a los usuarios y los consumidores a la mesa en la que se discuten la planificación y el control de los sistemas. De hecho, en materia de control, veremos que tanto el Banco Central, en este tema que nos ocupa, como cada uno de los entes reguladores del gas, de la electricidad o de cualquiera de los servicios públicos, están cooptados por ese pequeño grupito de proveedores de servicios que se han apoderado del sistema y de la economía de los usuarios.
Entonces, la propuesta de nuestro bloque -que haremos llegar a los colegas que forman parte de la comisión y al resto de los integrantes de la Cámara- es declarar la emergencia de los créditos UVA en favor de cada uno de los usuarios que tienen ingresos por salario, por monotributo o por cualquier condición que no sea la de los grandes ingresos, obviamente.
Esa declaración de emergencia de los créditos UVA tiene que incluir necesariamente la imposición al proveedor del servicio crediticio de no aparecer con una bandera de remate en la casa de una familia. Esto como primer punto. Ahí van a notar si un diputado o un senador está políticamente comprometido con la idea de proteger a los usuarios y los consumidores.
En segundo lugar, quiero que sepan que cuando tengamos quórum vamos a solicitar que el presidente del Banco Central, que es el ente regulador, venga a dar explicaciones porque necesitamos información. En este sentido, hoy ninguno de nosotros está en condiciones de saber cuántos son realmente los afectados por estos créditos que se están ajustando de la manera en que la economía argentina lo está haciendo.
El presidente del Banco Central, el presidente del Banco de la Provincia de Buenos Aires -que es el mayor captador de créditos UVA- y el presidente del Banco de la Nación Argentina deben venir al Congreso a dar explicaciones. Desde que empezó esta oferta de propaganda que se hizo desde el Estado están haciendo negocios jugosos.
Por último, hay un dato técnico que debemos saber. En 2016 se sancionó la ley 27.271, que -como decía el señor Bussetti- habilita a los bancos a ejecutar sin juicio de desalojo. Es decir, se presentan en el juzgado y se habilita el lanzamiento de la propiedad, lo cual es una locura.
Pero esa garantía que querían los bancos tenía una ventaja. En primer lugar, los UVI fueron creados por ley -la 27.271-, o sea que tienen la seriedad de algo discutido en el seno del Congreso. Además, los UVI tienen un sistema de ajuste muy parecido al que utilizaba nuestro vecino país de Chile, es decir, por un Índice del Costo de la Construcción, que hoy, en un sistema en depresión, es menos 10 por ciento de lo que tiene la tasa de ajuste de los UVA.
En cambio, los UVA no fueron creados por ley. Los bancos lograron que aquel que los protege como ente regulador -en este caso, el Banco Central- dicte una resolución y cree los UVA para hacer todo este desastre que está ocurriendo ahora, pero no porque los UVA sean una mala palabra sino porque está hecho como una oferta de propaganda para un país con un dígito de inflación. Pero en un país con una inflación como la que estamos teniendo, con salarios e ingresos de las familias totalmente deprimidos, se produce el desastre que cada uno de ustedes estaba explicando.
Por lo tanto, debe modificarse esa ley. Esta es otra solución de emergencia que se puede adoptar: que se modifique la ley 27.271 y se incorpore esta resolución del Banco Central que crea las UVA, con un índice de ajuste como el Índice del Costo de la Construcción.
Obviamente, ningún banco va a querer eso; vamos a tener que convencerlos. Por eso les dije en un momento que es muy difícil que se vayan con algo positivo, porque tenemos que lograr que el oficialismo entienda esta idea de protección del interés económico del usuario financiero y no de los bancos.
Podría hacer una exposición más extensa porque las propuestas pueden ser muchas. Hay cinco proyectos que están en danza en la Cámara, ¿pero qué hacen los pícaros de la Presidencia de la Cámara? Los giran a otras comisiones para que no se traten acá, como decía la señora diputada Passo.
Cuando ingrese este proyecto de declaración de emergencia de nuestro bloque vamos a pedir, por nota a la Presidencia, que se gire a esta comisión, donde sí nos reunimos y tenemos interés en que pase algo, porque en las comisiones de Presupuesto y Hacienda o de Finanzas no va a ocurrir nada.
Quise empezar así mi intervención por lo siguiente. En la última reforma de la Constitución -en 1994- se incluyó la protección de los derechos de los usuarios y los consumidores. Sin embargo, los gobiernos que vinieron después -no solo el actual sino también los anteriores, independientemente de la idea política de sus funcionarios- no se pudieron sentar a discutir las políticas de Estado que van a proteger a los usuarios y consumidores en cuanto a los servicios y productos que se les ofrecen.
Este es el primer punto para dejar en claro, sobre todo a cada de uno los diputados oficialistas que dicen representar al pueblo y que obtuvieron la mayoría de los votos. Pareciera ser que los usuarios y los consumidores son esa cuarta pata a la que no se le quiere dar bolilla.
¿Cuáles son las patas de todos los negocios, los comercios y las prestaciones de servicios que se dan en las ciudades, provincias y Nación? Cuando nos sentamos en una mesa a discutir sobre algo que se vende o un servicio que se presta, en primer lugar está el Estado, que somos todos nosotros. Somos los dueños de los servicios -aun de los financieros- en un sistema de libre comercio. Algunos se preguntarán por qué estoy diciendo esto; esto es así porque se incluyó en el ámbito constitucional la protección de los derechos de los usuarios y los consumidores.
Entonces, una pata de la mesa es el Estado; otra es el proveedor que tiene que prestar el servicio -en este caso estamos hablando de servicios financieros-, y la tercera es el ente que tiene que controlar que ese proveedor cumpla con las normas constitucionales. En el caso de estos créditos, es el Banco Central de la República Argentina quien debe ejercer el control. Por último, la cuarta pata de la mesa son los usuarios y los consumidores.
Pareciera ser que cuando se instrumenta una política que tiene que ver con el interés de los usuarios y los consumidores, estos entes de control se escapan.
Para que ustedes sepan, todos los temas que se tratan en esta comisión en particular están relacionados con los usuarios y los consumidores y con los servicios; pero los proveedores de los servicios únicamente se sientan con aquellos políticos que están en el ámbito del Estado y que protegen su interés económico, no el del usuario o el del consumidor.
Es tremendo escuchar el testimonio de los afectados y es realmente un problema lo que está ocurriendo.
Conozco un solo economista del cual se ha desprendido el mensaje político del oficialismo acerca de que el valor en dólares de las propiedades adquiridas con estos créditos UVA se ha incrementado. Uno de los invitados del día de hoy lo ha manifestado muy claramente. El economista se llama Martín Tetaz y de él se han prendido todos los demás economistas que apoyan este sistema de los bancos y, en el ámbito de la política, aquellos funcionarios del gobierno que siguen cuidando el interés económico de las entidades bancarias.
Creo que ustedes se quieren llevar algo de esta reunión, pero la verdad es que se van a ir con nada. Si bien nosotros no queremos eso, se debe principalmente a que el oficialismo no está aquí presente.
Este encuentro se está grabando por quienes tienen interés en visibilizar esta problemática; por lo tanto, deben darla a conocer. Esta reunión tiene que llegar a los medios de comunicación porque el oficialismo no está presente y hay un arco de la oposición que tampoco está. Para que nosotros podamos tomar una decisión desde esta comisión, necesitamos tener quórum. Esto es algo político.
Van a escuchar muchas veces decir que no se pueden confundir las asociaciones de consumidores con la política. Lo digo porque me toca venir de una asociación de consumidores. Dicen que confundir la acción política con los consumidores es un craso error, pero los consumidores y los usuarios tenemos el derecho político de empezar a hacer valer nuestros derechos acá.
Entonces, políticamente celebro que ustedes estén hoy acá. No celebro la situación en la que se encuentran sino su presencia en esta comisión, así como también esta posibilidad de visibilizar el problema.
En cuanto al compromiso solicitado, tanto mi bloque -Protectora- como creo que todos los bloques de los demás diputados aquí presentes son parte de un sistema político que quiere modificar esta realidad. Estoy seguro de que cada uno de los legisladores aquí presentes y aquellos que se han tenido que retirar para asistir a otras reuniones de comisiones entienden a la perfección que la política tiene que sentar a los usuarios y los consumidores a la mesa en la que se discuten la planificación y el control de los sistemas. De hecho, en materia de control, veremos que tanto el Banco Central, en este tema que nos ocupa, como cada uno de los entes reguladores del gas, de la electricidad o de cualquiera de los servicios públicos, están cooptados por ese pequeño grupito de proveedores de servicios que se han apoderado del sistema y de la economía de los usuarios.
Entonces, la propuesta de nuestro bloque -que haremos llegar a los colegas que forman parte de la comisión y al resto de los integrantes de la Cámara- es declarar la emergencia de los créditos UVA en favor de cada uno de los usuarios que tienen ingresos por salario, por monotributo o por cualquier condición que no sea la de los grandes ingresos, obviamente.
Esa declaración de emergencia de los créditos UVA tiene que incluir necesariamente la imposición al proveedor del servicio crediticio de no aparecer con una bandera de remate en la casa de una familia. Esto como primer punto. Ahí van a notar si un diputado o un senador está políticamente comprometido con la idea de proteger a los usuarios y los consumidores.
En segundo lugar, quiero que sepan que cuando tengamos quórum vamos a solicitar que el presidente del Banco Central, que es el ente regulador, venga a dar explicaciones porque necesitamos información. En este sentido, hoy ninguno de nosotros está en condiciones de saber cuántos son realmente los afectados por estos créditos que se están ajustando de la manera en que la economía argentina lo está haciendo.
El presidente del Banco Central, el presidente del Banco de la Provincia de Buenos Aires -que es el mayor captador de créditos UVA- y el presidente del Banco de la Nación Argentina deben venir al Congreso a dar explicaciones. Desde que empezó esta oferta de propaganda que se hizo desde el Estado están haciendo negocios jugosos.
Por último, hay un dato técnico que debemos saber. En 2016 se sancionó la ley 27.271, que -como decía el señor Bussetti- habilita a los bancos a ejecutar sin juicio de desalojo. Es decir, se presentan en el juzgado y se habilita el lanzamiento de la propiedad, lo cual es una locura.
Pero esa garantía que querían los bancos tenía una ventaja. En primer lugar, los UVI fueron creados por ley -la 27.271-, o sea que tienen la seriedad de algo discutido en el seno del Congreso. Además, los UVI tienen un sistema de ajuste muy parecido al que utilizaba nuestro vecino país de Chile, es decir, por un Índice del Costo de la Construcción, que hoy, en un sistema en depresión, es menos 10 por ciento de lo que tiene la tasa de ajuste de los UVA.
En cambio, los UVA no fueron creados por ley. Los bancos lograron que aquel que los protege como ente regulador -en este caso, el Banco Central- dicte una resolución y cree los UVA para hacer todo este desastre que está ocurriendo ahora, pero no porque los UVA sean una mala palabra sino porque está hecho como una oferta de propaganda para un país con un dígito de inflación. Pero en un país con una inflación como la que estamos teniendo, con salarios e ingresos de las familias totalmente deprimidos, se produce el desastre que cada uno de ustedes estaba explicando.
Por lo tanto, debe modificarse esa ley. Esta es otra solución de emergencia que se puede adoptar: que se modifique la ley 27.271 y se incorpore esta resolución del Banco Central que crea las UVA, con un índice de ajuste como el Índice del Costo de la Construcción.
Obviamente, ningún banco va a querer eso; vamos a tener que convencerlos. Por eso les dije en un momento que es muy difícil que se vayan con algo positivo, porque tenemos que lograr que el oficialismo entienda esta idea de protección del interés económico del usuario financiero y no de los bancos.
Podría hacer una exposición más extensa porque las propuestas pueden ser muchas. Hay cinco proyectos que están en danza en la Cámara, ¿pero qué hacen los pícaros de la Presidencia de la Cámara? Los giran a otras comisiones para que no se traten acá, como decía la señora diputada Passo.
Cuando ingrese este proyecto de declaración de emergencia de nuestro bloque vamos a pedir, por nota a la Presidencia, que se gire a esta comisión, donde sí nos reunimos y tenemos interés en que pase algo, porque en las comisiones de Presupuesto y Hacienda o de Finanzas no va a ocurrir nada.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora diputada Mónica Macha.
SRA. MACHA Señora presidenta: en primer lugar quiero aclarar que con muchas y muchos de los presentes ya nos hemos visto varias veces, puesto que desde julio del año pasado empezamos a armar las primeras reuniones con una actividad importante en términos de representatividad de los bloques e inclusive de la posibilidad de que también tengan representación federal, ya que pudieron participar personas de distintas provincias.
Desde ahí venimos dando vueltas con la posibilidad de discutir estos proyectos, que como bien decía el señor diputado Ramón, son cinco expedientes que están todavía vigentes y que no se discuten por una decisión del oficialismo.
No obstante ello, me parece importante que se desarrolle esta reunión. No integro esta comisión, pero vine porque se trata el tema de los créditos UVA. Entiendo que hay una contradicción si hablamos de la vivienda desde los conceptos de "consumo" y "consumidores" en lugar de hacerlo desde la idea del derecho al hábitat y a la vivienda.
Es importante que se celebre esta reunión, pero hay concepciones muy diferentes, porque estamos hablando de un montón de personas a lo largo y a lo ancho del país que han pedido estos créditos y han puesto en juego los ahorros de toda su vida; incluso algunos han vendido casas más pequeñas para comprar una casa más cómoda para su familia.
Hoy están en riesgo porque hablamos del derecho a la vivienda y al hábitat, así como de la posibilidad de construir un proyecto de vida en determinado barrio, con sus instituciones, escuelas y centros de salud, ámbitos que hacen a la vida de cada familia en el marco de una comunidad.
A diferencia de lo que dice el señor diputado Ramón, sí tenemos que irnos con algo esta tarde. Sé que los invitados de hoy vienen caminando y tocando puertas, pero como legisladora me da vergüenza que se vayan sin nada. La compañera de La Plata habló de los lineamientos de un posible proyecto de emergencia de créditos UVA que contemple distintas situaciones: desde quien no puede pagar y viene arrastrando esa deuda hasta quienes tienen una intimación o una amenaza de desalojo. Ese dictamen debe ser firmado por todos los jefes y jefas de bloque; es un compromiso que pueden asumir, si están dispuestos.
Los invitados decían que han visitado todos los bloques, y me parece que es hora de que obtengan algo concreto. Todos los proyectos que fuimos presentando han sido mirados críticamente por muchas y muchos de ustedes y han apoyado algunos puntos y criticado otros. Los créditos UVA desde su raíz están mal planteados y no responden a la posibilidad de satisfacer el derecho a la vivienda sino que son parte de un sistema especulativo de los bancos, que son los que siempre terminan ganando, en una pelea absolutamente desigual con las personas que sacaron estos créditos.
La conformación de cada bloque es muy heterogénea, y en el caso del señor diputado Ramón está él solo, pero en Unidad Ciudadana somos 64 diputados y diputadas. Nosotros nos hemos reunido con el presidente de nuestro bloque, el señor diputado Agustín Rossi, quien también acompañó la iniciativa, y sé que lo mismo ha sucedido con todos bloques de la oposición. Existe esa posibilidad de obtener un dictamen con el que los diferentes bloques estemos de acuerdo. Será más importante si la letra y el diseño de ese proyecto viene de parte de los tomadores de estos créditos, que son los que tienen claridad sobre cuál es la situación que están viviendo. Mi bloque, Unidad Ciudadana, se compromete a firmar ese proyecto, revisar la técnica legislativa y discutirlo. Debemos buscar las herramientas necesarias para no esperar a que el señor diputado Amadeo convoque a la comisión, porque no lo va a hacer, dado que es una decisión política.
Quiero quedarme con una frase que se planteó, en el sentido de que se pide una compensación al Estado. Yo tengo una mirada estatista: el Estado tiene mucho que regular. Si no regula el Estado, lo hacen los mercados; y si regulan los mercados, pasan estas cosas. Cuando la situación llega a estas condiciones de vida, no sé si la palabra apropiada es "compensación", pero el Estado a través de sus instituciones -y esta es una de ellas- debe tomar definiciones y medidas. Lo tiene que hacer, porque si no lo hacemos desde las instituciones que representan al pueblo, ¿quién lo va hacer? Si ustedes no encuentran acá la protección y defensa de sus derechos, ¿quién los protegerá? Es momento de pensar al Estado desde un lugar diferente, desde esa función de estar a la altura de las situaciones que están viviendo.
Les quiero manifestar una cuestión personal: ayer me llamó llorando una compañera porque su hija supuestamente había tenido un brote psicótico. Fue al Hospital Italiano -donde la atienden por su obra social- y pasó la noche con psiquiatras. Esta compañera colapsó porque tiene un crédito UVA y no lo puede pagar. La obra social no cubre el tratamiento del Hospital Italiano en el área de psiquiatría, por lo que estamos buscando un profesional que pueda atenderla. Estas son las consecuencias en la salud mental que se pueden desarrollar o desencadenar, incluso con síntomas psíquicos o físicos. La raíz de esto es el tremendo estrés al que ustedes están expuestos.
Estas personas deben irse con un compromiso concreto en el sentido de que todos los jefes y jefas de bloque de este recinto -todo el espacio opositor- firmen un dictamen, sin importar los anteriores, que siguen guardados en la Comisión de Finanzas.
A todos los invitados les expreso mi respeto y solidaridad. Cuenten con nosotros y con nosotras. Es hora de que tengamos una respuesta más contundente.
Desde ahí venimos dando vueltas con la posibilidad de discutir estos proyectos, que como bien decía el señor diputado Ramón, son cinco expedientes que están todavía vigentes y que no se discuten por una decisión del oficialismo.
No obstante ello, me parece importante que se desarrolle esta reunión. No integro esta comisión, pero vine porque se trata el tema de los créditos UVA. Entiendo que hay una contradicción si hablamos de la vivienda desde los conceptos de "consumo" y "consumidores" en lugar de hacerlo desde la idea del derecho al hábitat y a la vivienda.
Es importante que se celebre esta reunión, pero hay concepciones muy diferentes, porque estamos hablando de un montón de personas a lo largo y a lo ancho del país que han pedido estos créditos y han puesto en juego los ahorros de toda su vida; incluso algunos han vendido casas más pequeñas para comprar una casa más cómoda para su familia.
Hoy están en riesgo porque hablamos del derecho a la vivienda y al hábitat, así como de la posibilidad de construir un proyecto de vida en determinado barrio, con sus instituciones, escuelas y centros de salud, ámbitos que hacen a la vida de cada familia en el marco de una comunidad.
A diferencia de lo que dice el señor diputado Ramón, sí tenemos que irnos con algo esta tarde. Sé que los invitados de hoy vienen caminando y tocando puertas, pero como legisladora me da vergüenza que se vayan sin nada. La compañera de La Plata habló de los lineamientos de un posible proyecto de emergencia de créditos UVA que contemple distintas situaciones: desde quien no puede pagar y viene arrastrando esa deuda hasta quienes tienen una intimación o una amenaza de desalojo. Ese dictamen debe ser firmado por todos los jefes y jefas de bloque; es un compromiso que pueden asumir, si están dispuestos.
Los invitados decían que han visitado todos los bloques, y me parece que es hora de que obtengan algo concreto. Todos los proyectos que fuimos presentando han sido mirados críticamente por muchas y muchos de ustedes y han apoyado algunos puntos y criticado otros. Los créditos UVA desde su raíz están mal planteados y no responden a la posibilidad de satisfacer el derecho a la vivienda sino que son parte de un sistema especulativo de los bancos, que son los que siempre terminan ganando, en una pelea absolutamente desigual con las personas que sacaron estos créditos.
La conformación de cada bloque es muy heterogénea, y en el caso del señor diputado Ramón está él solo, pero en Unidad Ciudadana somos 64 diputados y diputadas. Nosotros nos hemos reunido con el presidente de nuestro bloque, el señor diputado Agustín Rossi, quien también acompañó la iniciativa, y sé que lo mismo ha sucedido con todos bloques de la oposición. Existe esa posibilidad de obtener un dictamen con el que los diferentes bloques estemos de acuerdo. Será más importante si la letra y el diseño de ese proyecto viene de parte de los tomadores de estos créditos, que son los que tienen claridad sobre cuál es la situación que están viviendo. Mi bloque, Unidad Ciudadana, se compromete a firmar ese proyecto, revisar la técnica legislativa y discutirlo. Debemos buscar las herramientas necesarias para no esperar a que el señor diputado Amadeo convoque a la comisión, porque no lo va a hacer, dado que es una decisión política.
Quiero quedarme con una frase que se planteó, en el sentido de que se pide una compensación al Estado. Yo tengo una mirada estatista: el Estado tiene mucho que regular. Si no regula el Estado, lo hacen los mercados; y si regulan los mercados, pasan estas cosas. Cuando la situación llega a estas condiciones de vida, no sé si la palabra apropiada es "compensación", pero el Estado a través de sus instituciones -y esta es una de ellas- debe tomar definiciones y medidas. Lo tiene que hacer, porque si no lo hacemos desde las instituciones que representan al pueblo, ¿quién lo va hacer? Si ustedes no encuentran acá la protección y defensa de sus derechos, ¿quién los protegerá? Es momento de pensar al Estado desde un lugar diferente, desde esa función de estar a la altura de las situaciones que están viviendo.
Les quiero manifestar una cuestión personal: ayer me llamó llorando una compañera porque su hija supuestamente había tenido un brote psicótico. Fue al Hospital Italiano -donde la atienden por su obra social- y pasó la noche con psiquiatras. Esta compañera colapsó porque tiene un crédito UVA y no lo puede pagar. La obra social no cubre el tratamiento del Hospital Italiano en el área de psiquiatría, por lo que estamos buscando un profesional que pueda atenderla. Estas son las consecuencias en la salud mental que se pueden desarrollar o desencadenar, incluso con síntomas psíquicos o físicos. La raíz de esto es el tremendo estrés al que ustedes están expuestos.
Estas personas deben irse con un compromiso concreto en el sentido de que todos los jefes y jefas de bloque de este recinto -todo el espacio opositor- firmen un dictamen, sin importar los anteriores, que siguen guardados en la Comisión de Finanzas.
A todos los invitados les expreso mi respeto y solidaridad. Cuenten con nosotros y con nosotras. Es hora de que tengamos una respuesta más contundente.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora diputada Del Plá.
SRA. DEL PLÁ Buenas tardes. Como bien señaló el representante de DE.U.CO., cuando se trató el proyecto de créditos UVA, desde el bloque del Frente de Izquierda y el Partido Obrero claramente anticipamos que el objetivo final no era crear un mecanismo para que la población que no tenía vivienda accediera a ella, sino crear un instrumento financiero para los bancos. Si uno ve esto en el plano internacional, se parece mucho a los créditos subprime que llevaron a la crisis de las hipotecas en los Estados Unidos, España y varios otros países de Europa.
Justamente, frente a un cuadro de crisis económica internacional, se creó un nuevo negocio para los bancos. Crearon este instrumento flexibilizando -teóricamente- las condiciones para el acceso a los créditos, sabiendo que esto más o menos rápidamente iba a entrar en crisis. Pero el objetivo no es la familia que accede a la vivienda ni la población que directa o indirectamente podría haberse visto involucrada en esta situación, sino que el fin es crear un instrumento financiero que el banco pueda vender y armar como una gran burbuja financiera. Funciona un tiempo como negocio, pero para los bancos siempre es negocio. Este es el punto fundamental: en cualquier estadio que estemos de esta situación en relación con los créditos hipotecarios UVA, siempre es un negocio para los bancos. Ellos nunca van a perder.
Entonces, acá estamos frente a un problema muy claro entre las necesidades sociales y los negocios de los bancos. Allí se ve dónde se ubica cada uno. En este punto nosotros tenemos muy claro de qué lado nos ubicamos. Es por eso que desde hace varios meses venimos tratando el problema y también nos hemos reunido con varios de ustedes.
De todos modos, rápidamente hemos instalado este tema en algunas de las sesiones a las que vino el señor Marcos Peña, reclamando que nos dé una respuesta, sabiendo que esto efectivamente ya se estaba convirtiendo en un problema. También lo hemos instalado frente al secretario de Finanzas cuando vino a fundamentar el presupuesto de ajuste para el 2019, que luego se aprobó. También lo hemos instalado ahora en las preguntas que había que elaborar para el próximo informe del señor Jefe de Gabinete en la Cámara de Diputados.
Allí ya están colocadas una serie preguntas muy importantes que vienen a cuento. En primer lugar, por qué la mayoría de los que tienen un crédito hipotecario UVA no accede a todo el historial de su crédito ni a todo su desarrollo. Este es un primer problema fundamental. Obviamente, también la denuncia y todos los problemas alrededor de esto que ya describieron sobradamente, como la indexación completamente exponencial de capital y el valor de la cuota.
En definitiva -como bien se dijo aquí-, lo único que se hace al alargar los plazos es convertir a cada uno de los afectados en inquilinos permanentes de los bancos. Aquel que alquilaba y creyó que era una buena oportunidad acceder a este crédito para comprar una vivienda, de pronto se encuentra con la terrible realidad de que, lejos de haber resuelto el problema, pasó de ser el inquilino de un propietario equis a ser el inquilino permanente de los bancos, con riesgo permanente de la pérdida de la propiedad.
Pero no son los únicos afectados, porque también se ven afectados en forma similar -aunque no se trate del mismo bien- aquellos que han tomado créditos o planes de autoahorro, ya que también están indexados por estos mecanismos. Aquí hay algunos de ellos.
Es decir que estamos yendo rápidamente a una crisis social en relación con esta cuestión, que también va acompañada de la crisis general que hay con la vivienda. Yo soy del partido de La Matanza, donde nos encontramos con un crecimiento exponencial de los barrios más alejados porque efectivamente hay una crisis más general de la vivienda. Esto está estallando y tiene distintas aristas: el que no puede pagar el alquiler, el que no puede pagar el crédito que sacó y el que no puede acceder absolutamente a nada porque ni siquiera tiene un empleo.
Efectivamente, creo que gran parte de esto solamente se podrá resolver con un proceso más general de movilización. En ese punto quiero decir que podemos elaborar proyectos más abarcativos y los estamos elaborando tomando otras inquietudes que se fueron planteando para sumar a los que están. Podemos tomar algunas de las propuestas o elementos mínimos que se sugirieron aquí para realizar un dictamen y poder avanzar.
Incluso, me parece que sería una idea importante trabajar entre los bloques opositores que estén dispuestos y plantear una convocatoria a sesión especial para presionar y que estos proyectos se puedan instalar, aunque se trate de manifestaciones en minoría, ya que los diarios y los medios deberán registrar que el oficialismo y algunos bloques opositores se borraron del debate de un tema que está afectando a miles y miles de familias y personas, con todas estas extensiones que mencionamos.
Además, creo que se colocó muy bien el tema porque acá estamos hablando con trabajadores y con sectores medios; en ningún caso con empresarios que se benefician con todo tipo de exenciones y subvenciones, ni con aquellos que se benefician con el saqueo del Estado en forma sistemática.
Como trabajadora quiero decir que seguramente tendremos que entroncar este movimiento y este reclamo con un proceso de movilización, porque si el Congreso da la espalda, efectivamente hay que obligar a que deje de hacerlo y que el conjunto de funcionarios dejen de hacerlo también.
Nosotros también nos comprometemos a acompañar cada de una de las iniciativas que se presenten en este sentido y, desde ya, quedamos a su disposición.
Entonces, estamos aquí acompañando este proceso de organización que se ha dado, y sepan que cuentan con nuestro compromiso para lograr que el derecho a la vivienda de cada persona sea respetado.
Justamente, frente a un cuadro de crisis económica internacional, se creó un nuevo negocio para los bancos. Crearon este instrumento flexibilizando -teóricamente- las condiciones para el acceso a los créditos, sabiendo que esto más o menos rápidamente iba a entrar en crisis. Pero el objetivo no es la familia que accede a la vivienda ni la población que directa o indirectamente podría haberse visto involucrada en esta situación, sino que el fin es crear un instrumento financiero que el banco pueda vender y armar como una gran burbuja financiera. Funciona un tiempo como negocio, pero para los bancos siempre es negocio. Este es el punto fundamental: en cualquier estadio que estemos de esta situación en relación con los créditos hipotecarios UVA, siempre es un negocio para los bancos. Ellos nunca van a perder.
Entonces, acá estamos frente a un problema muy claro entre las necesidades sociales y los negocios de los bancos. Allí se ve dónde se ubica cada uno. En este punto nosotros tenemos muy claro de qué lado nos ubicamos. Es por eso que desde hace varios meses venimos tratando el problema y también nos hemos reunido con varios de ustedes.
De todos modos, rápidamente hemos instalado este tema en algunas de las sesiones a las que vino el señor Marcos Peña, reclamando que nos dé una respuesta, sabiendo que esto efectivamente ya se estaba convirtiendo en un problema. También lo hemos instalado frente al secretario de Finanzas cuando vino a fundamentar el presupuesto de ajuste para el 2019, que luego se aprobó. También lo hemos instalado ahora en las preguntas que había que elaborar para el próximo informe del señor Jefe de Gabinete en la Cámara de Diputados.
Allí ya están colocadas una serie preguntas muy importantes que vienen a cuento. En primer lugar, por qué la mayoría de los que tienen un crédito hipotecario UVA no accede a todo el historial de su crédito ni a todo su desarrollo. Este es un primer problema fundamental. Obviamente, también la denuncia y todos los problemas alrededor de esto que ya describieron sobradamente, como la indexación completamente exponencial de capital y el valor de la cuota.
En definitiva -como bien se dijo aquí-, lo único que se hace al alargar los plazos es convertir a cada uno de los afectados en inquilinos permanentes de los bancos. Aquel que alquilaba y creyó que era una buena oportunidad acceder a este crédito para comprar una vivienda, de pronto se encuentra con la terrible realidad de que, lejos de haber resuelto el problema, pasó de ser el inquilino de un propietario equis a ser el inquilino permanente de los bancos, con riesgo permanente de la pérdida de la propiedad.
Pero no son los únicos afectados, porque también se ven afectados en forma similar -aunque no se trate del mismo bien- aquellos que han tomado créditos o planes de autoahorro, ya que también están indexados por estos mecanismos. Aquí hay algunos de ellos.
Es decir que estamos yendo rápidamente a una crisis social en relación con esta cuestión, que también va acompañada de la crisis general que hay con la vivienda. Yo soy del partido de La Matanza, donde nos encontramos con un crecimiento exponencial de los barrios más alejados porque efectivamente hay una crisis más general de la vivienda. Esto está estallando y tiene distintas aristas: el que no puede pagar el alquiler, el que no puede pagar el crédito que sacó y el que no puede acceder absolutamente a nada porque ni siquiera tiene un empleo.
Efectivamente, creo que gran parte de esto solamente se podrá resolver con un proceso más general de movilización. En ese punto quiero decir que podemos elaborar proyectos más abarcativos y los estamos elaborando tomando otras inquietudes que se fueron planteando para sumar a los que están. Podemos tomar algunas de las propuestas o elementos mínimos que se sugirieron aquí para realizar un dictamen y poder avanzar.
Incluso, me parece que sería una idea importante trabajar entre los bloques opositores que estén dispuestos y plantear una convocatoria a sesión especial para presionar y que estos proyectos se puedan instalar, aunque se trate de manifestaciones en minoría, ya que los diarios y los medios deberán registrar que el oficialismo y algunos bloques opositores se borraron del debate de un tema que está afectando a miles y miles de familias y personas, con todas estas extensiones que mencionamos.
Además, creo que se colocó muy bien el tema porque acá estamos hablando con trabajadores y con sectores medios; en ningún caso con empresarios que se benefician con todo tipo de exenciones y subvenciones, ni con aquellos que se benefician con el saqueo del Estado en forma sistemática.
Como trabajadora quiero decir que seguramente tendremos que entroncar este movimiento y este reclamo con un proceso de movilización, porque si el Congreso da la espalda, efectivamente hay que obligar a que deje de hacerlo y que el conjunto de funcionarios dejen de hacerlo también.
Nosotros también nos comprometemos a acompañar cada de una de las iniciativas que se presenten en este sentido y, desde ya, quedamos a su disposición.
Entonces, estamos aquí acompañando este proceso de organización que se ha dado, y sepan que cuentan con nuestro compromiso para lograr que el derecho a la vivienda de cada persona sea respetado.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor diputado Carlos Selva.
SR. SELVA Buenas tardes. En principio, si bien no formo parte de la comisión, quiero agradecer a la presidenta por crear el marco para tratar este tema que, como bien se dijo y ustedes saben, está dando vueltas dentro de la Cámara en virtud de los procedimientos administrativos y burocráticos propios de este órgano.
He escuchado todos los enfoques y los casos particulares presentados en esta reunión, especialmente los de los representantes de la provincia de Santa Fe -quienes realmente se quebraron en su exposición- y de Tucumán.
Por supuesto que de esta reunión tienen que quedar algunos de los análisis que fueron expresados por los representantes de La Plata y las asociaciones de consumidores, quienes han desarrollado criterios a tener en cuenta cuando se trate la cuestión de fondo.
Sin entrar en definiciones, quiero decir que desde que existen los bancos, siempre han ganado plata con el otorgamiento de préstamos; siempre lo han hecho con esa finalidad. Si bien podemos entrar en particularidades, esto no es un descubrimiento. Por otro lado, también es cierto que lo que motiva a estos créditos orientados a la clase media es, ni más ni menos, que acceder a un ordenador social: la familia, que es la célula básica de la sociedad.
Hoy también se mencionó la pérdida en la calidad de vida para poder satisfacer la actual usura de los bancos.
Podemos sacar un montón de definiciones de este diagnóstico, pero quiero hacer hincapié en la urgencia.
En relación con la cuestión de fondo, la presidenta de la comisión tiene en claro -y así lo manifestó- que hay un manejo para no introducir en profundidad el tema y que por ello fue desviado burocráticamente. Como dije recién, los expedientes que tienen como fondo este tema fueron enviados a distintas comisiones. Esto es algo que tenemos que resolver los legisladores. Obviamente que ante la urgencia de la problemática hoy expuesta es muy necesario que nosotros lo pongamos en evidencia.
Pero hay dos cuestiones que también se mencionaron hoy. Soy parte del bloque del Frente Renovador, junto con Marcela Passo, Rosa Muñoz y otros diputados, y creo que los doscientos cincuenta y siete diputados de la Nación conocemos algún caso relacionado con esta problemática, ya sea de gente allegada o conocida.
Nos encontramos en este lugar al que muchas veces definimos como nuestro metro cuadrado para poder resolver las cosas. La urgencia amerita la declaración de la emergencia. La urgencia amerita que la próxima vez que venga el jefe de Gabinete, cada legislador esté posicionado en relación con este tema. Asumo públicamente el compromiso de plantearle esta cuestión al jefe de Gabinete -si bien ya se le hizo saber- y, particularmente, de solicitarle el freno de las ejecuciones. Más allá del mecanismo para sancionar una ley, cuando en abril vaya al recinto de la Cámara el jefe de Gabinete tiene que escuchar de nuestra boca nuestra decisión política en este sentido. Las preguntas ya han sido elevadas la semana pasada.
De alguna forma, debemos tratar de que el Ejecutivo tome una decisión con urgencia, más allá de los plazos reglamentarios. La única herramienta que podemos utilizar es el pedido de sesión especial, y así lo haremos. Trataremos de que todos los bloques se concentren en este problema y plasmen un posicionamiento al respecto.
Pero, reitero, la visibilización del tema requiere de decisiones del Ejecutivo; frenar las ejecuciones depende de un mandamiento del Poder Ejecutivo, más allá del sistema financiero.
Es muy lindo el nombre "Banco Hipotecario", pero todos sabemos que hoy es un banco privado. Según la historia de nuestros padres, ese banco era la herramienta para acceder nada menos que a una vivienda única.
La disquisición entre viviendas únicas y demás es un tema técnico que tendremos que resolver, y para ello sí nos daremos el tiempo necesario a fin de tratar de acordar un mecanismo que establezca claramente y en coincidencia cuáles son las prioridades que debe contemplar el marco legislativo.
Pero, reitero, creo que no hay otra forma posible si el Ejecutivo no escucha esto. Lamentablemente, no es casual que hoy no haya ningún representante del bloque oficialista. Ustedes tienen que entender que esto también nos dificulta la realización de una sesión especial, porque no nos dan quórum -nos ha pasado con otras cuestiones, como con el tema de las tarifas-, pero vamos a tratar de agotar todas las instancias posibles, dentro de lo que es el marco político, para volcarlo en una decisión institucional de tratar de lograr algo; primero que nada, con el corte de las ejecuciones. Esto, como punto de partida.
Esta situación no puede dilatarse un mes, por todas las circunstancias que comentaron ustedes y las que debe estar pasando un montón de gente que hoy no está acá; incluso, las psicológicas.
Dejo expresado nuestro compromiso de darle fuerza a la prioridad, que es frenar las ejecuciones, para luego entrar a discutir el tema de fondo.
He escuchado todos los enfoques y los casos particulares presentados en esta reunión, especialmente los de los representantes de la provincia de Santa Fe -quienes realmente se quebraron en su exposición- y de Tucumán.
Por supuesto que de esta reunión tienen que quedar algunos de los análisis que fueron expresados por los representantes de La Plata y las asociaciones de consumidores, quienes han desarrollado criterios a tener en cuenta cuando se trate la cuestión de fondo.
Sin entrar en definiciones, quiero decir que desde que existen los bancos, siempre han ganado plata con el otorgamiento de préstamos; siempre lo han hecho con esa finalidad. Si bien podemos entrar en particularidades, esto no es un descubrimiento. Por otro lado, también es cierto que lo que motiva a estos créditos orientados a la clase media es, ni más ni menos, que acceder a un ordenador social: la familia, que es la célula básica de la sociedad.
Hoy también se mencionó la pérdida en la calidad de vida para poder satisfacer la actual usura de los bancos.
Podemos sacar un montón de definiciones de este diagnóstico, pero quiero hacer hincapié en la urgencia.
En relación con la cuestión de fondo, la presidenta de la comisión tiene en claro -y así lo manifestó- que hay un manejo para no introducir en profundidad el tema y que por ello fue desviado burocráticamente. Como dije recién, los expedientes que tienen como fondo este tema fueron enviados a distintas comisiones. Esto es algo que tenemos que resolver los legisladores. Obviamente que ante la urgencia de la problemática hoy expuesta es muy necesario que nosotros lo pongamos en evidencia.
Pero hay dos cuestiones que también se mencionaron hoy. Soy parte del bloque del Frente Renovador, junto con Marcela Passo, Rosa Muñoz y otros diputados, y creo que los doscientos cincuenta y siete diputados de la Nación conocemos algún caso relacionado con esta problemática, ya sea de gente allegada o conocida.
Nos encontramos en este lugar al que muchas veces definimos como nuestro metro cuadrado para poder resolver las cosas. La urgencia amerita la declaración de la emergencia. La urgencia amerita que la próxima vez que venga el jefe de Gabinete, cada legislador esté posicionado en relación con este tema. Asumo públicamente el compromiso de plantearle esta cuestión al jefe de Gabinete -si bien ya se le hizo saber- y, particularmente, de solicitarle el freno de las ejecuciones. Más allá del mecanismo para sancionar una ley, cuando en abril vaya al recinto de la Cámara el jefe de Gabinete tiene que escuchar de nuestra boca nuestra decisión política en este sentido. Las preguntas ya han sido elevadas la semana pasada.
De alguna forma, debemos tratar de que el Ejecutivo tome una decisión con urgencia, más allá de los plazos reglamentarios. La única herramienta que podemos utilizar es el pedido de sesión especial, y así lo haremos. Trataremos de que todos los bloques se concentren en este problema y plasmen un posicionamiento al respecto.
Pero, reitero, la visibilización del tema requiere de decisiones del Ejecutivo; frenar las ejecuciones depende de un mandamiento del Poder Ejecutivo, más allá del sistema financiero.
Es muy lindo el nombre "Banco Hipotecario", pero todos sabemos que hoy es un banco privado. Según la historia de nuestros padres, ese banco era la herramienta para acceder nada menos que a una vivienda única.
La disquisición entre viviendas únicas y demás es un tema técnico que tendremos que resolver, y para ello sí nos daremos el tiempo necesario a fin de tratar de acordar un mecanismo que establezca claramente y en coincidencia cuáles son las prioridades que debe contemplar el marco legislativo.
Pero, reitero, creo que no hay otra forma posible si el Ejecutivo no escucha esto. Lamentablemente, no es casual que hoy no haya ningún representante del bloque oficialista. Ustedes tienen que entender que esto también nos dificulta la realización de una sesión especial, porque no nos dan quórum -nos ha pasado con otras cuestiones, como con el tema de las tarifas-, pero vamos a tratar de agotar todas las instancias posibles, dentro de lo que es el marco político, para volcarlo en una decisión institucional de tratar de lograr algo; primero que nada, con el corte de las ejecuciones. Esto, como punto de partida.
Esta situación no puede dilatarse un mes, por todas las circunstancias que comentaron ustedes y las que debe estar pasando un montón de gente que hoy no está acá; incluso, las psicológicas.
Dejo expresado nuestro compromiso de darle fuerza a la prioridad, que es frenar las ejecuciones, para luego entrar a discutir el tema de fondo.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor diputado Zottos.
SR. ZOTTOS Señora presidenta: en primer lugar quiero saludar a todos y agradecer la presencia de cada uno de ustedes. Seguramente muchos de ustedes han dejado a sus familias para estar acá, esperando una respuesta.
Por otro lado, quiero saludar y felicitar a las autoridades de la comisión. Esta reunión la veníamos buscando desde hace tiempo, porque el reclamo que vienen haciendo cada uno de ustedes ya lleva más de un año.
Como diputado nacional por la provincia de Salta quiero plantear lo siguiente, señora presidenta: dado que están llegando representantes de Salta -porque les reprogramaron el vuelo y lamentablemente no pudieron llegar antes-, pido autorización, con el respeto de todos, para que cuando vengan puedan tener también sus cinco minutos de exposición, ya que es bueno escucharnos. En este sentido, es bueno tener esta Argentina federal que necesitamos; si todos los temas de la Argentina los manejáramos de esta manera, creo que las cosas serían diferentes.
Yendo a lo que han planteado cada de uno de ustedes y a lo que plantearon mis compañeros diputados y diputadas, quiero decir lo siguiente, tratando de no ser reiterativo. Como ustedes lo han expresado muy claramente, la situación es totalmente angustiante. Hay familias que están en crisis o se están separando por esta situación, cuando el crédito fue creado con un sentido social para que la clase trabajadora pueda acceder a una casa. Ese fue el sentido de este crédito.
Aunque en 2016 todavía no integrábamos esta Cámara -como es mi caso-, como políticos no podemos mirar para otro lado sino que nos debemos hacer cargo. Eso es lo que le hace falta a nuestro país.
Lamentablemente, la inflación ha comido el poder adquisitivo de los salarios -o sea, el salario no ha crecido como la inflación- y hoy nos encontramos ante esta situación, como lo han expresado cada uno de ustedes y los legisladores. Pero el Estado es el que se tiene que hacer cargo y dar la solución. No podemos dejarlo de esta manera o esperar.
Recién el diputado dijo que vamos a esperar a que venga el jefe de Gabinete. Creo que todos los bloques le hemos planteado esta situación cada vez que vino a brindar su informe a la Cámara de Diputados. Si no me equivoco, ahora vendrá a fines de abril, con lo cual falta un mes. Mientras tanto, muchas familias ya están perdiendo su vivienda, como dijeron acá. Por lo tanto, creo que no podemos esperar más.
Si no me equivoco, el 27 de marzo tendremos una sesión para tratar el proyecto de ley para combatir la violencia en el fútbol y tal vez el de financiamiento de partidos políticos, si es que viene del Senado.
Creo que sería bueno ponernos de acuerdo, ya que estamos todos los bloques, porque esto no pasa por ser oposición u oficialismo, sino que es un problema humano. Si los políticos no tenemos ese sentido de humanidad, de pensar en la persona, creo que vamos por mal camino. Lo primero es el ser humano, no la economía. Acá le erramos: cuando pensamos que un gobierno solo debe conseguir resultados económicos, y no pensamos en el ser humano o en la familia, vamos mal.
Esta es la realidad. Este tema pasa por lo humano, es decir, va más allá de las banderías políticas, como han dicho muchos de ustedes, que se han quebrado. Me iré de esta reunión después de conocer gente que hizo muchos kilómetros con la esperanza de venir acá a expresarse mientras les están quitando la casa. ¿Me voy a ir tranquilo? No.
Recién han ingresado los compañeros de Salta, a quienes -como dije- les reprogramaron su vuelo. Yo prefiero darle la palabra a ellos para que se presenten, pero antes quiero redondear algo, y no quiero extenderme para no quitarles minutos a ellos, que han hecho 1.600 kilómetros para estar acá y acompañar a los demás expositores.
En cuanto a lo que dijo la representante de La Plata, le alcanzo el proyecto presentado por Argentina Federal -yo pertenezco a ese interbloque- en septiembre del año pasado. Todo lo que pide está acá; solo falta poner "emergencia".
Por eso digo que tenemos la posibilidad de seguir adelante. No es que los esperamos a ustedes para presentar el proyecto. El proyecto ya está presentado. Lo que ustedes pidieron ya lo hemos trabajado, y esto lo saben los representantes de Salta; no estoy inventando nada. Se contemplan las cuestiones que han transmitido ustedes, porque lo mejor que podemos hacer es escuchar al pueblo; con soberbia no llegamos a ningún lado. Nosotros somos los elementos que transmitimos lo que quiere el pueblo. Yo lo entiendo así.
El proyecto indica muy claramente que la solución de alargar el 25 por ciento no es la respuesta. La cuota no debe pasar más del 30 por ciento real de los ingresos de la familia; y si pasa, que se haga cargo el Estado. No se deben rematar las casas. Asimismo, la iniciativa también indica cómo debe ser la actualización. Entonces, como dije, el proyecto está presentado desde septiembre del año pasado, y solo hay que poner el término "emergencia".
Reitero el compromiso de mi interbloque. Nuevamente les pido mil disculpas -debemos tener esa grandeza- a cada una de las más de 100 mil familias afectadas. Hay gente que todavía no recibió la casa. Como aquí se dijo, hay familias que vendieron su propiedad chiquita para acceder a esa vivienda única y en estos momentos están desesperadas; no saben qué hacer porque hoy se están comiendo la plata de la venta para afrontar el pago de un alquiler. Realmente es doloroso.
Reitero que esto va más allá de la política; es humano. Espero que el oficialismo y todos tengamos esa sensibilidad como argentinos y argentinas de bien.
Si la presidenta lo autoriza, me gustaría que haga su exposición el representante de Salta.
Por otro lado, quiero saludar y felicitar a las autoridades de la comisión. Esta reunión la veníamos buscando desde hace tiempo, porque el reclamo que vienen haciendo cada uno de ustedes ya lleva más de un año.
Como diputado nacional por la provincia de Salta quiero plantear lo siguiente, señora presidenta: dado que están llegando representantes de Salta -porque les reprogramaron el vuelo y lamentablemente no pudieron llegar antes-, pido autorización, con el respeto de todos, para que cuando vengan puedan tener también sus cinco minutos de exposición, ya que es bueno escucharnos. En este sentido, es bueno tener esta Argentina federal que necesitamos; si todos los temas de la Argentina los manejáramos de esta manera, creo que las cosas serían diferentes.
Yendo a lo que han planteado cada de uno de ustedes y a lo que plantearon mis compañeros diputados y diputadas, quiero decir lo siguiente, tratando de no ser reiterativo. Como ustedes lo han expresado muy claramente, la situación es totalmente angustiante. Hay familias que están en crisis o se están separando por esta situación, cuando el crédito fue creado con un sentido social para que la clase trabajadora pueda acceder a una casa. Ese fue el sentido de este crédito.
Aunque en 2016 todavía no integrábamos esta Cámara -como es mi caso-, como políticos no podemos mirar para otro lado sino que nos debemos hacer cargo. Eso es lo que le hace falta a nuestro país.
Lamentablemente, la inflación ha comido el poder adquisitivo de los salarios -o sea, el salario no ha crecido como la inflación- y hoy nos encontramos ante esta situación, como lo han expresado cada uno de ustedes y los legisladores. Pero el Estado es el que se tiene que hacer cargo y dar la solución. No podemos dejarlo de esta manera o esperar.
Recién el diputado dijo que vamos a esperar a que venga el jefe de Gabinete. Creo que todos los bloques le hemos planteado esta situación cada vez que vino a brindar su informe a la Cámara de Diputados. Si no me equivoco, ahora vendrá a fines de abril, con lo cual falta un mes. Mientras tanto, muchas familias ya están perdiendo su vivienda, como dijeron acá. Por lo tanto, creo que no podemos esperar más.
Si no me equivoco, el 27 de marzo tendremos una sesión para tratar el proyecto de ley para combatir la violencia en el fútbol y tal vez el de financiamiento de partidos políticos, si es que viene del Senado.
Creo que sería bueno ponernos de acuerdo, ya que estamos todos los bloques, porque esto no pasa por ser oposición u oficialismo, sino que es un problema humano. Si los políticos no tenemos ese sentido de humanidad, de pensar en la persona, creo que vamos por mal camino. Lo primero es el ser humano, no la economía. Acá le erramos: cuando pensamos que un gobierno solo debe conseguir resultados económicos, y no pensamos en el ser humano o en la familia, vamos mal.
Esta es la realidad. Este tema pasa por lo humano, es decir, va más allá de las banderías políticas, como han dicho muchos de ustedes, que se han quebrado. Me iré de esta reunión después de conocer gente que hizo muchos kilómetros con la esperanza de venir acá a expresarse mientras les están quitando la casa. ¿Me voy a ir tranquilo? No.
Recién han ingresado los compañeros de Salta, a quienes -como dije- les reprogramaron su vuelo. Yo prefiero darle la palabra a ellos para que se presenten, pero antes quiero redondear algo, y no quiero extenderme para no quitarles minutos a ellos, que han hecho 1.600 kilómetros para estar acá y acompañar a los demás expositores.
En cuanto a lo que dijo la representante de La Plata, le alcanzo el proyecto presentado por Argentina Federal -yo pertenezco a ese interbloque- en septiembre del año pasado. Todo lo que pide está acá; solo falta poner "emergencia".
Por eso digo que tenemos la posibilidad de seguir adelante. No es que los esperamos a ustedes para presentar el proyecto. El proyecto ya está presentado. Lo que ustedes pidieron ya lo hemos trabajado, y esto lo saben los representantes de Salta; no estoy inventando nada. Se contemplan las cuestiones que han transmitido ustedes, porque lo mejor que podemos hacer es escuchar al pueblo; con soberbia no llegamos a ningún lado. Nosotros somos los elementos que transmitimos lo que quiere el pueblo. Yo lo entiendo así.
El proyecto indica muy claramente que la solución de alargar el 25 por ciento no es la respuesta. La cuota no debe pasar más del 30 por ciento real de los ingresos de la familia; y si pasa, que se haga cargo el Estado. No se deben rematar las casas. Asimismo, la iniciativa también indica cómo debe ser la actualización. Entonces, como dije, el proyecto está presentado desde septiembre del año pasado, y solo hay que poner el término "emergencia".
Reitero el compromiso de mi interbloque. Nuevamente les pido mil disculpas -debemos tener esa grandeza- a cada una de las más de 100 mil familias afectadas. Hay gente que todavía no recibió la casa. Como aquí se dijo, hay familias que vendieron su propiedad chiquita para acceder a esa vivienda única y en estos momentos están desesperadas; no saben qué hacer porque hoy se están comiendo la plata de la venta para afrontar el pago de un alquiler. Realmente es doloroso.
Reitero que esto va más allá de la política; es humano. Espero que el oficialismo y todos tengamos esa sensibilidad como argentinos y argentinas de bien.
Si la presidenta lo autoriza, me gustaría que haga su exposición el representante de Salta.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor Kimon Demitropulos.
SR. DEMITROPULOS Muchas gracias. Quiero pedir disculpas por llegar tarde, pero ocurrió lo siguiente: los cuatro delegados teníamos pasajes para las 6 de la mañana pero se canceló el vuelo de Aerolíneas Argentinas, porque se rompió el avión, y lo reprogramaron para las 13 y 30. No obstante ello, con Julio decidimos arriesgarnos -dado el cambio de horario- para ver si podíamos llegar a esta reunión de comisión.
Hace dos años que venimos luchando en representación de cientos de familias de Salta que hoy viven la denominada "pesadilla de los créditos UVA". Queremos plantear ante esta Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia la injusticia que estamos viviendo de manera particular en Salta. En este plan de lucha hemos logrado que en el Concejo Deliberante de Salta se apruebe por unanimidad un proyecto de resolución mediante el cual apoyan nuestro reclamo. Asimismo, logramos que en la Cámara de Diputados se apruebe, también por unanimidad, un proyecto por el cual comprenden la situación desesperante que estamos atravesando. Incluso, convocaron al titular del Instituto de la Vivienda, Iván Kerr, quien no se hizo presente.
Por otra parte, hemos conversado con cinco de los siete diputados nacionales que tiene la provincia de Salta. Agradecemos a los señores diputados a Zottos y David, que han presentado proyectos relacionados con los créditos UVA. Además, hemos hablado con los tres senadores nacionales que tiene la provincia de Salta. Y como si fuera poco, también nos reunimos con el intendente y con el propio gobernador Juan Manuel Urtubey.
Hemos pasado por todo el arco político sin importar banderías, ya que no representamos a ningún sector. Hemos logrado durante casi 24 meses que alguien nos escuche y entienda que esta situación va a terminar explotando. Particularmente, en Salta no solo estamos padeciendo el crédito UVA sino que nos privatizaron, al igual que en la provincia de Misiones. Accedimos a viviendas a través del ProCreAr y el gobierno no tuvo mejor idea que abrir una licitación y concederla al Banco Río, lo que implicó cambio de condiciones, como por ejemplo el aumento de tasas.
Gracias al señor diputado Zottos, en diciembre logramos venir a una reunión con los representantes del Instituto de la Vivienda, quienes nos recibieron durante un par de minutos. Ellos nos confirmaron que Salta es la única provincia a la que se le ha asignado un banco privado, con diferencias en las condiciones.
En estos dos años nos han cambiado el valor de las viviendas. Nosotros logramos firmar recién en enero y febrero de 2019, a pesar de que las casas se terminaron en 2017, y no tenemos garantía sobre ellas. Muchas tienen problemas y no conseguimos que alguien nos ayude.
Sabemos que hay muchos proyectos de gente experta en economía que buscan la forma de sujetar el crédito, y en particular el UVA. Es una locura plantear que la variable sea la inflación a treinta años en un país tan ciclotímico como la Argentina.
A mí me tocó firmar el crédito el 6 de febrero, es decir, hace poco. Estaba con mi hija, y recuerdo que lo primero que se me ocurrió preguntarle a la gerenta del Banco Río después de firmar fue de cuánto sería mi primera cuota. Ese día tan importante para mí, por la obtención de mi primera vivienda, se transformó en una pesadilla, porque la gerenta me miró, se rió y me dijo: "Eso no lo puede saber nadie".
De manera que hemos firmado créditos a quince, veinte o treinta años y no sabemos cuánto vamos a terminar pagando por los vaivenes que lamentablemente tiene este país.
Sin robar mucho tiempo, queremos aprovechar la gentileza de todos los que nos están escuchando para exponer el caso de Salta. No solamente estamos atrapados en los créditos UVA, porque a medida que van pasando los meses se acrecienta la deuda -además, vivimos en una región donde los salarios son más bajos que en el resto de la Argentina-, sino que además se dieron el lujo de privatizar nuestras urbanizaciones con un banco privado, como es el Banco Río.
Tengo entendido que la mayoría trabaja con el Banco Hipotecario. En cambio, nuestras casas son de la banca privada. Si en medio de toda esta crisis alguien se atrasa en el pago de una o dos cuotas, las casas pasarán a ser de un banco privado.
Tenemos carpetas y archivos con casos que se están dando en distintas urbanizaciones de Salta. Por ejemplo, hay gente que apenas va por la cuota número quince y en menos de un año su deuda creció más de un millón de pesos. Estamos hablando de gente que todos los meses ponía diez mil pesos para pagar su vivienda y hoy debe un millón de pesos más.
Algunos a través de Facebook o de Whatsapp nos dicen la frase "Bueno, pero tu casa vale más". Quiero que quede claro que acá nadie está especulando inmobiliariamente. Lo que queremos es nuestra casa, nuestro techo, y nadie está pensando en venderla. En todo caso, la casa que costaba 20 mil, 50 mil o 100 mil dólares el año pasado, hoy cuesta lo mismo; lo que vale menos es nuestra plata. Entonces, por más que digan "Bueno, pero tu casa vale más", nadie quiere vender su casa. Uno quiere componer su familia, se quiere quedar, quiere proyectar y tener seguridad.
Nosotros, desde el Norte, les pedimos humildemente que nos escuchen y, sobre todo, que nos acompañen en el reclamo. En todas las conversaciones que tuvimos, desde los concejales hasta el gobernador nos decían que no podíamos hacer nada porque no habíamos firmado la hipoteca y por lo tanto no teníamos derecho de consumidor; éramos simplemente sorteados. Ahora la hemos firmado hace un mes, y en la primera cuota ya debemos 35.000 pesos más. Repito: en tan solo un mes -o sea, en apenas treinta días- ya debemos 35.000 pesos más. Por lo menos esto es lo que está ocurriendo en Salta.
Por supuesto, agradecemos al señor diputado Zottos y a la senadora Cristina Fiore, que nos ha brindado un pasaje para poder estar presentes hoy acá.
Queríamos exponer nuestro caso a todos los presentes, porque sabemos que hay delegados y representantes de distintos puntos de la Argentina, para que sepan que esto no es una locura de un sector en particular -que está a favor o en contra del gobierno- sino una locura de gente que simplemente quiere poder pagar su casa.
Hace dos años que venimos luchando en representación de cientos de familias de Salta que hoy viven la denominada "pesadilla de los créditos UVA". Queremos plantear ante esta Comisión de Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia la injusticia que estamos viviendo de manera particular en Salta. En este plan de lucha hemos logrado que en el Concejo Deliberante de Salta se apruebe por unanimidad un proyecto de resolución mediante el cual apoyan nuestro reclamo. Asimismo, logramos que en la Cámara de Diputados se apruebe, también por unanimidad, un proyecto por el cual comprenden la situación desesperante que estamos atravesando. Incluso, convocaron al titular del Instituto de la Vivienda, Iván Kerr, quien no se hizo presente.
Por otra parte, hemos conversado con cinco de los siete diputados nacionales que tiene la provincia de Salta. Agradecemos a los señores diputados a Zottos y David, que han presentado proyectos relacionados con los créditos UVA. Además, hemos hablado con los tres senadores nacionales que tiene la provincia de Salta. Y como si fuera poco, también nos reunimos con el intendente y con el propio gobernador Juan Manuel Urtubey.
Hemos pasado por todo el arco político sin importar banderías, ya que no representamos a ningún sector. Hemos logrado durante casi 24 meses que alguien nos escuche y entienda que esta situación va a terminar explotando. Particularmente, en Salta no solo estamos padeciendo el crédito UVA sino que nos privatizaron, al igual que en la provincia de Misiones. Accedimos a viviendas a través del ProCreAr y el gobierno no tuvo mejor idea que abrir una licitación y concederla al Banco Río, lo que implicó cambio de condiciones, como por ejemplo el aumento de tasas.
Gracias al señor diputado Zottos, en diciembre logramos venir a una reunión con los representantes del Instituto de la Vivienda, quienes nos recibieron durante un par de minutos. Ellos nos confirmaron que Salta es la única provincia a la que se le ha asignado un banco privado, con diferencias en las condiciones.
En estos dos años nos han cambiado el valor de las viviendas. Nosotros logramos firmar recién en enero y febrero de 2019, a pesar de que las casas se terminaron en 2017, y no tenemos garantía sobre ellas. Muchas tienen problemas y no conseguimos que alguien nos ayude.
Sabemos que hay muchos proyectos de gente experta en economía que buscan la forma de sujetar el crédito, y en particular el UVA. Es una locura plantear que la variable sea la inflación a treinta años en un país tan ciclotímico como la Argentina.
A mí me tocó firmar el crédito el 6 de febrero, es decir, hace poco. Estaba con mi hija, y recuerdo que lo primero que se me ocurrió preguntarle a la gerenta del Banco Río después de firmar fue de cuánto sería mi primera cuota. Ese día tan importante para mí, por la obtención de mi primera vivienda, se transformó en una pesadilla, porque la gerenta me miró, se rió y me dijo: "Eso no lo puede saber nadie".
De manera que hemos firmado créditos a quince, veinte o treinta años y no sabemos cuánto vamos a terminar pagando por los vaivenes que lamentablemente tiene este país.
Sin robar mucho tiempo, queremos aprovechar la gentileza de todos los que nos están escuchando para exponer el caso de Salta. No solamente estamos atrapados en los créditos UVA, porque a medida que van pasando los meses se acrecienta la deuda -además, vivimos en una región donde los salarios son más bajos que en el resto de la Argentina-, sino que además se dieron el lujo de privatizar nuestras urbanizaciones con un banco privado, como es el Banco Río.
Tengo entendido que la mayoría trabaja con el Banco Hipotecario. En cambio, nuestras casas son de la banca privada. Si en medio de toda esta crisis alguien se atrasa en el pago de una o dos cuotas, las casas pasarán a ser de un banco privado.
Tenemos carpetas y archivos con casos que se están dando en distintas urbanizaciones de Salta. Por ejemplo, hay gente que apenas va por la cuota número quince y en menos de un año su deuda creció más de un millón de pesos. Estamos hablando de gente que todos los meses ponía diez mil pesos para pagar su vivienda y hoy debe un millón de pesos más.
Algunos a través de Facebook o de Whatsapp nos dicen la frase "Bueno, pero tu casa vale más". Quiero que quede claro que acá nadie está especulando inmobiliariamente. Lo que queremos es nuestra casa, nuestro techo, y nadie está pensando en venderla. En todo caso, la casa que costaba 20 mil, 50 mil o 100 mil dólares el año pasado, hoy cuesta lo mismo; lo que vale menos es nuestra plata. Entonces, por más que digan "Bueno, pero tu casa vale más", nadie quiere vender su casa. Uno quiere componer su familia, se quiere quedar, quiere proyectar y tener seguridad.
Nosotros, desde el Norte, les pedimos humildemente que nos escuchen y, sobre todo, que nos acompañen en el reclamo. En todas las conversaciones que tuvimos, desde los concejales hasta el gobernador nos decían que no podíamos hacer nada porque no habíamos firmado la hipoteca y por lo tanto no teníamos derecho de consumidor; éramos simplemente sorteados. Ahora la hemos firmado hace un mes, y en la primera cuota ya debemos 35.000 pesos más. Repito: en tan solo un mes -o sea, en apenas treinta días- ya debemos 35.000 pesos más. Por lo menos esto es lo que está ocurriendo en Salta.
Por supuesto, agradecemos al señor diputado Zottos y a la senadora Cristina Fiore, que nos ha brindado un pasaje para poder estar presentes hoy acá.
Queríamos exponer nuestro caso a todos los presentes, porque sabemos que hay delegados y representantes de distintos puntos de la Argentina, para que sepan que esto no es una locura de un sector en particular -que está a favor o en contra del gobierno- sino una locura de gente que simplemente quiere poder pagar su casa.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra el señor Miguel Ánguel Martín, de CONSAL.
SR. MARTÍN Simplemente quiero agregar un comentario. En función de lo que dijo el señor diputado Zottos sobre lo inhumano de todo esto -con lo que coincido plenamente-, lamento que no esté presente la doctora María de los Ángeles Vecchiarelli, que es la presidenta de CONSAL y se ocupa más del enfoque sociológico.
Si me permiten, quiero decir una cosa. Todos nosotros, y especialmente ustedes como diputados, tenemos una responsabilidad, que es la vida de varias personas. En este sentido, tengamos en cuenta que en todas las crisis ha habido gente que se ha suicidado o se ha enfermado como consecuencia de ellas, lo cual está comprobado estadísticamente.
Por lo tanto, no es solo el tema de la pérdida de la vivienda sino que es algo más grave, porque hay pérdida de vidas. Yo no sé si ya se habrá suicidado alguno de los afectados, pero estamos en vías de que eso suceda.
Quería decir esto para que nos demos cuenta de que las consecuencias pueden ir más allá, porque hablamos de propiedades pero no hablamos de algo que es mucho más importante: que esto es un derecho humano. Está tratado en la Constitución y en todos los pactos y convenciones internacionales. Muchas gracias.
Si me permiten, quiero decir una cosa. Todos nosotros, y especialmente ustedes como diputados, tenemos una responsabilidad, que es la vida de varias personas. En este sentido, tengamos en cuenta que en todas las crisis ha habido gente que se ha suicidado o se ha enfermado como consecuencia de ellas, lo cual está comprobado estadísticamente.
Por lo tanto, no es solo el tema de la pérdida de la vivienda sino que es algo más grave, porque hay pérdida de vidas. Yo no sé si ya se habrá suicidado alguno de los afectados, pero estamos en vías de que eso suceda.
Quería decir esto para que nos demos cuenta de que las consecuencias pueden ir más allá, porque hablamos de propiedades pero no hablamos de algo que es mucho más importante: que esto es un derecho humano. Está tratado en la Constitución y en todos los pactos y convenciones internacionales. Muchas gracias.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora diputada del Plá.
SRA. DEL PLÁ He pedido la palabra para agregar un tema que omití mencionar cuando hablé.
Creo que entre los ejes que debemos tomar en cuenta no solo están los casos de aquellos que ya tomaron créditos. En la denuncia también tenemos que incluir el hecho de que se están propagandizando los créditos UVA a futuro. Es decir, se presenta nuevamente y de manera engañosa esta estafa que ya, de alguna manera, están sufriendo todos ustedes. Se está tratando de atraer a aquellas personas desesperadas que no tienen una vivienda, presentándole la situación como que van a pagar una cuota similar al alquiler. Pero las personas que tomen estos créditos pasarán a vivir la pesadilla que están viviendo ustedes ahora.
Creo que debemos incorporar este eje porque ahora ya se conocen las consecuencias y la cantidad de familias que van ingresando en estos créditos es cada vez mayor a pesar de la crisis general. En efecto, la gente tiene que seguir viviendo y resolver sus problemas, por lo que más de una familia está pensando en tomar estos créditos que se siguen presentando en forma engañosa.
Por lo tanto, pienso que también hay que incorporar este punto.
Creo que entre los ejes que debemos tomar en cuenta no solo están los casos de aquellos que ya tomaron créditos. En la denuncia también tenemos que incluir el hecho de que se están propagandizando los créditos UVA a futuro. Es decir, se presenta nuevamente y de manera engañosa esta estafa que ya, de alguna manera, están sufriendo todos ustedes. Se está tratando de atraer a aquellas personas desesperadas que no tienen una vivienda, presentándole la situación como que van a pagar una cuota similar al alquiler. Pero las personas que tomen estos créditos pasarán a vivir la pesadilla que están viviendo ustedes ahora.
Creo que debemos incorporar este eje porque ahora ya se conocen las consecuencias y la cantidad de familias que van ingresando en estos créditos es cada vez mayor a pesar de la crisis general. En efecto, la gente tiene que seguir viviendo y resolver sus problemas, por lo que más de una familia está pensando en tomar estos créditos que se siguen presentando en forma engañosa.
Por lo tanto, pienso que también hay que incorporar este punto.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra nuevamente el señor diputado Zottos.
SR. ZOTTOS Seré breve, muchas gracias.
A mí me gusta tomar medidas de prevención antes que de reacción ante alguna situación. Por lo tanto, les anticipo que aparte del problema de ustedes, el gobierno tiene la intención de eliminar los institutos provinciales de la Vivienda. Quiere modificar totalmente el sistema de vivienda nacional y pasarlo a fideicomiso para que lo manejen las entidades financieras.
Cuando esto suceda, muchos sectores -por ejemplo, comunidades de pueblos originarios y otras clases sociales- van a quedar sin la posibilidad de acceder a la vivienda, como está pasando ahora.
Quería ponerlos al tanto porque en breve el Poder Ejecutivo nacional estará enviando al Congreso este proyecto de ley.
A mí me gusta tomar medidas de prevención antes que de reacción ante alguna situación. Por lo tanto, les anticipo que aparte del problema de ustedes, el gobierno tiene la intención de eliminar los institutos provinciales de la Vivienda. Quiere modificar totalmente el sistema de vivienda nacional y pasarlo a fideicomiso para que lo manejen las entidades financieras.
Cuando esto suceda, muchos sectores -por ejemplo, comunidades de pueblos originarios y otras clases sociales- van a quedar sin la posibilidad de acceder a la vivienda, como está pasando ahora.
Quería ponerlos al tanto porque en breve el Poder Ejecutivo nacional estará enviando al Congreso este proyecto de ley.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora Romina Montoya.
SRA. MONTOYA Acoplándome un poco a lo que comentaron recién la diputada del Plá y el diputado Zottos, quiero dejar en claro que somos tomadores del crédito pero que todavía no hemos podido acceder a nuestra vivienda.
Somos 40 mil personas las que nos hemos autoconvocado y creado el grupo ProCreAr Joven Resiste. Nos estamos autoconvocando por las redes y también apelamos a movilizarnos porque las reuniones que mantuvimos con el secretario de Vivienda no fueron exitosas y no logramos absolutamente nada. Si bien se produjeron algunas mejoras, nuestros salarios no aumentan y el dólar se fue por las nubes, por lo que no podemos acceder a comprar ningún tipo de vivienda hoy en día.
Como se comentó antes, se nos han ofrecido desarrollos urbanísticos pero tenemos el impedimento de que para calificar hacen falta otros requisitos que nosotros no cumplimos, porque la mayoría somos trabajadores informales. Entonces, tampoco podemos acceder a esos desarrollos.
Es por ello que sentimos que estamos encaminados a ser los próximos "hipotecados UVA", ya que no hemos logrado acceder a nuestras viviendas. Quiero recalcar que en mi caso en particular, y también en el de la mayoría de las 40 mil personas autoconvocadas, alquilamos el lugar donde vivimos.
Este plan estaba destinado a jóvenes que recién se iniciaban en sus trabajos o pretendían independizarse. Pagamos un alquiler y, a raíz de todo esto, dejamos de hacer un montón de cosas. En mi caso puntual, me separé por todos estos problemas de dinero y de afrontar la cuota más el alquiler. Por eso me emocioné cuando el diputado Zottos puso ese ejemplo. Pero también hay un montón de compañeros que están enfermos. Muchos viven en el interior, y al no tener los medios para viajar a Buenos Aires se enferman porque sienten que solo se los escucha aquí.
Además, sentimos bronca porque se siguen abriendo inscripciones y publicitando la Estación Buenos Aires y un montón de desarrollos urbanísticos que se construyeron y que se abrieron también en el interior, pero nosotros seguimos anclados en los bancos sin poder acceder a nada.
Eso es algo que nos enoja. Obviamente yo caí en la trampa, porque teniendo una hija y habiéndome separado pensé "entre alquilar y tirar la plata -porque el alquiler es eso-, me meto en un crédito de estos". Por supuesto, salí sorteada y califiqué, porque el ser madre soltera es una condición que beneficia, pero actualmente no puedo acceder. Quería recalcar esto porque es importante saber que muchos todavía no pudimos acceder y vamos encaminados hacia el mismo lugar.
Somos 40 mil personas las que nos hemos autoconvocado y creado el grupo ProCreAr Joven Resiste. Nos estamos autoconvocando por las redes y también apelamos a movilizarnos porque las reuniones que mantuvimos con el secretario de Vivienda no fueron exitosas y no logramos absolutamente nada. Si bien se produjeron algunas mejoras, nuestros salarios no aumentan y el dólar se fue por las nubes, por lo que no podemos acceder a comprar ningún tipo de vivienda hoy en día.
Como se comentó antes, se nos han ofrecido desarrollos urbanísticos pero tenemos el impedimento de que para calificar hacen falta otros requisitos que nosotros no cumplimos, porque la mayoría somos trabajadores informales. Entonces, tampoco podemos acceder a esos desarrollos.
Es por ello que sentimos que estamos encaminados a ser los próximos "hipotecados UVA", ya que no hemos logrado acceder a nuestras viviendas. Quiero recalcar que en mi caso en particular, y también en el de la mayoría de las 40 mil personas autoconvocadas, alquilamos el lugar donde vivimos.
Este plan estaba destinado a jóvenes que recién se iniciaban en sus trabajos o pretendían independizarse. Pagamos un alquiler y, a raíz de todo esto, dejamos de hacer un montón de cosas. En mi caso puntual, me separé por todos estos problemas de dinero y de afrontar la cuota más el alquiler. Por eso me emocioné cuando el diputado Zottos puso ese ejemplo. Pero también hay un montón de compañeros que están enfermos. Muchos viven en el interior, y al no tener los medios para viajar a Buenos Aires se enferman porque sienten que solo se los escucha aquí.
Además, sentimos bronca porque se siguen abriendo inscripciones y publicitando la Estación Buenos Aires y un montón de desarrollos urbanísticos que se construyeron y que se abrieron también en el interior, pero nosotros seguimos anclados en los bancos sin poder acceder a nada.
Eso es algo que nos enoja. Obviamente yo caí en la trampa, porque teniendo una hija y habiéndome separado pensé "entre alquilar y tirar la plata -porque el alquiler es eso-, me meto en un crédito de estos". Por supuesto, salí sorteada y califiqué, porque el ser madre soltera es una condición que beneficia, pero actualmente no puedo acceder. Quería recalcar esto porque es importante saber que muchos todavía no pudimos acceder y vamos encaminados hacia el mismo lugar.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Tiene la palabra la señora Paola Gutiérrez.
SRA. GUTIÉRREZ Justamente quería hablar de las personas que se enferman. Nosotros tenemos muchos casos. La semana pasada hubo una reunión de Habitar Argentina en esta comisión, y estuvimos muy quebrados porque hay casos que son extremos. Me llamó una maestra de Misiones, que da clases en cuatro escuelas y es madre separada -con tres hijos y un juicio por alimentos-, y me dijo: "¿Sabes qué? Me quiero morir y dejar a mis hijos una casa sin deuda".
Entonces, es muy importante que se tome conciencia de que este tema está muy complicado en el interior del país por lo siguiente. Allí ya venían pagando tarifas altas. Sin embargo, las tarifas se incrementaron en el mismo porcentaje que en la ciudad de Buenos Aires, pero con el triple efecto, porque la gente no puede pagar estas hipotecas.
Los que tomaron los créditos fueron muchos maestros, empleados estatales, policías provinciales y policías federales; todos pertenecientes a la clase media. Somos todos trabajadores. Por eso reclamamos que por favor trabajen en conjunto. Simplemente se trata de esto: de ser solidario con el otro.
Nos llegan casos de personas que están mal de salud. Tenemos compañeras que se tuvieron que internar por un pico de estrés. Esto es mucho más grave. Más allá de poder perder una casa, estamos perdiendo calidad de vida.
En lo personal, hoy es el cumpleaños de mi hijo y yo estoy acá, porque creo que la lucha también es un ejemplo para él. Lucho porque soy familia monoparental. Somos muchas las familias monoparentales que queremos dejarles un techo a nuestros hijos.
Entonces, es muy importante que se tome conciencia de que este tema está muy complicado en el interior del país por lo siguiente. Allí ya venían pagando tarifas altas. Sin embargo, las tarifas se incrementaron en el mismo porcentaje que en la ciudad de Buenos Aires, pero con el triple efecto, porque la gente no puede pagar estas hipotecas.
Los que tomaron los créditos fueron muchos maestros, empleados estatales, policías provinciales y policías federales; todos pertenecientes a la clase media. Somos todos trabajadores. Por eso reclamamos que por favor trabajen en conjunto. Simplemente se trata de esto: de ser solidario con el otro.
Nos llegan casos de personas que están mal de salud. Tenemos compañeras que se tuvieron que internar por un pico de estrés. Esto es mucho más grave. Más allá de poder perder una casa, estamos perdiendo calidad de vida.
En lo personal, hoy es el cumpleaños de mi hijo y yo estoy acá, porque creo que la lucha también es un ejemplo para él. Lucho porque soy familia monoparental. Somos muchas las familias monoparentales que queremos dejarles un techo a nuestros hijos.
SRA. SECRETARIA (PERALTA) Por último, tiene la palabra la señora Silvia Sosa.
SRA. SOSA Seré muy breve. En realidad, la pregunta era para el señor diputado Ramón, que no está, pero quizás algún otro diputado me la pueda responder.
El señor diputado Ramón mencionó que dentro del abanico de la oposición hay una parte que no se está sentando a debatir la cuestión. Para nosotros sería interesante saber quién esa parte de la oposición, para poder golpear esas puertas.
El señor diputado Ramón mencionó que dentro del abanico de la oposición hay una parte que no se está sentando a debatir la cuestión. Para nosotros sería interesante saber quién esa parte de la oposición, para poder golpear esas puertas.
SRA. PRESIDENTA PASSO Antes de pasar a la respuesta, le damos un minuto más al señor Julio Arroyo, de Salta.
SR. ARROYO Señora presidenta: quiero agregar a lo que dijo Kimon que los bancos dan muy poca información. Ayer fui al banco a pedir información sobre las cuotas, porque quería saber cuántas UVA pago todos los meses, y el banco no me la quiso dar.
Tenemos otros vecinos que están hace quince meses y pagan cuotas variables en UVA -de 450, 430, 420, 480- sin saber por qué. La información la niegan tanto el Banco Hipotecario como el Santander Río, en nuestro caso. No sé si a los demás les pasa lo mismo, pero es preocupante que no nos den esa información.
Tenemos otros vecinos que están hace quince meses y pagan cuotas variables en UVA -de 450, 430, 420, 480- sin saber por qué. La información la niegan tanto el Banco Hipotecario como el Santander Río, en nuestro caso. No sé si a los demás les pasa lo mismo, pero es preocupante que no nos den esa información.
SRA. PRESIDENTA PASSO Silvia: paso a responder tu pregunta. Para no equivocarnos, te vamos a pasar el listado por Secretaría, porque quizás son distintas fuerzas políticas que forman parte de un mismo interbloque.
Graciela hará un resumen de los espacios políticos que hoy han estado presentes y que han reafirmado su compromiso con el tema.
Quiero agradecerles por estar acá, felicitarlos por la fuerza, por el valor, por el coraje y por el trabajo que están llevando adelante. En nombre de todos los espacios políticos presentes, se llevan de esta comisión el compromiso de seguir trabajando para encontrar una solución a este problema. Tras bambalinas, en los últimos minutos los equipos de los distintos espacios políticos empezaron a articular medidas mediatas e inmediatas. Lo inmediato va en el sentido del planteo de la emergencia, mientras que en lo mediato trataremos de llevar al recinto el resto de los proyectos de las distintas comisiones, pedidos de informes y preguntas al señor jefe de Gabinete.
Agrego una cuestión que tiene ver con la situación que ustedes están viviendo. Asumimos este compromiso no solamente por quienes son visibles sino también por quienes lamentablemente están invisibilizados. Se me pone la piel de gallina al recordar reuniones con muchos de ustedes en las que trataban de no aparecer en la foto o evitaban que se escuchara su voz porque tenían miedo de recibir represalias en su trabajo. Eso está pasando en nuestro país en 2019 y en democracia. Los felicito por alzar la voz en nombre de todos aquellos que no lo pueden hacer por miedo. Muchas gracias. Les dejamos nuestro compromiso de seguir trabajando en este sentido.
Graciela hará un resumen de los espacios políticos que hoy han estado presentes y que han reafirmado su compromiso con el tema.
Quiero agradecerles por estar acá, felicitarlos por la fuerza, por el valor, por el coraje y por el trabajo que están llevando adelante. En nombre de todos los espacios políticos presentes, se llevan de esta comisión el compromiso de seguir trabajando para encontrar una solución a este problema. Tras bambalinas, en los últimos minutos los equipos de los distintos espacios políticos empezaron a articular medidas mediatas e inmediatas. Lo inmediato va en el sentido del planteo de la emergencia, mientras que en lo mediato trataremos de llevar al recinto el resto de los proyectos de las distintas comisiones, pedidos de informes y preguntas al señor jefe de Gabinete.
Agrego una cuestión que tiene ver con la situación que ustedes están viviendo. Asumimos este compromiso no solamente por quienes son visibles sino también por quienes lamentablemente están invisibilizados. Se me pone la piel de gallina al recordar reuniones con muchos de ustedes en las que trataban de no aparecer en la foto o evitaban que se escuchara su voz porque tenían miedo de recibir represalias en su trabajo. Eso está pasando en nuestro país en 2019 y en democracia. Los felicito por alzar la voz en nombre de todos aquellos que no lo pueden hacer por miedo. Muchas gracias. Les dejamos nuestro compromiso de seguir trabajando en este sentido.
Es la hora 16 y 57.