Declarar de interés de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación la investigación de la molécula "factor de crecimiento transformante beta 1" del sistema inmune, llevada a cabo científicos del Instituto Leloir y el Conicet.

El estudio es clave para el potencial hallazgo de una cura de la enfermedad de Parkinson.

Señor presidente:

TEMA: Declaración de interés de la H. Cámara de Diputados de la Nación de la investigación de la molécula "factor de crecimiento transformante beta 1" del sistema inmune, llevada a cabo científicos del Instituto Leloir y el Conicet.

INICIATIVA: Dip. Carlos Rubín.

Se estima que en nuestro país hay 40.000 personas que sufren del mal de Parkinson, la enfermedad que conduce con el tiempo a una incapacidad progresiva, producido a consecuencia de la destrucción, por causas que todavía se desconocen, de un tipo de neuronas. Frecuentemente clasificada como un trastorno del movimiento, la enfermedad de Parkinson también desencadena alteraciones en la función cognitiva, en la expresión de las emociones y en la función autónoma (1) .

Actualmente se suministran fármacos a los pacientes, para controlar los síntomas. Sin embargo la cura de la enfermedad está vinculada a la generación de nuevas neuronas. El descubrimiento realizado por el grupo del investigador en terapias regenerativas del sistema nervioso Fernando Pitossi, publicado en la revista Molecular and Cellular Neuroscience, va en esa dirección: existe un proceso que ocurre entre el sistema inmune del organismo y el sistema nervioso que desencadena la producción de nuevas neuronas a partir del uso de células madre.

El Dr. Pitossi declaró ante medios periodísticos: "Somos los primeros en descubrir que una molécula del sistema inmune cumple un papel crucial para que se desarrollen neuronas nuevas. Una identificación que nos acerca más hacia nuestro objetivo final que es obtener -a partir de células madre- el tipo de neuronas que se mueren progresivamente en los pacientes con enfermedad de Parkinson" (2) . La molécula llamada factor de crecimiento transformante beta 1 del sistema inmune, foco de la investigación, está involucrada con la producción de una proteína, la fibulina-2, muy importante para que las células madre se diferencien en neuronas.

Los investigadores confían en que las terapias de regeneración podrían permitir, no sólo controlar los síntomas, sino revertir la enfermedad en los próximos 10 años.

Si bien el hallazgo se realizó en experimentos con animales, ahora se trabaja con células madre humanas.

El descubrimiento constituye un paso fundamental hacia una mejor calidad de vida para los pacientes que sufren de la enfermedad y sus familias, y que la investigación se haya gestado en laboratorios argentinos nos debe llenar de orgullo.

Por los motivos expuestos solicito a mis pares acompañen la iniciativa.