CIENCIA, TECNOLOGIA E INNOVACION PRODUCTIVA
Comisión PermanenteOf. Administrativa: Piso P01 Oficina 130
Secretario Administrativo LIC. CAMPOS PABLO
Jefe DR. Alsina Fermin
Martes 18.00hs
Of. Administrativa: (054-11) 6075-2120 Internos 2120/21
ccytecnologia@hcdn.gob.ar
PROYECTO DE LEY
Expediente: 0321-D-2017
Sumario: DECLARESE "CAPITAL NACIONAL DE LA ASTRONOMIA" A LA LOCALIDAD DE CALINGASTA, PROVINCIA DE SAN JUAN.
Fecha: 05/03/2017
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 3
Artículo 1º: Declárese “Capital Nacional de la Astronomía” a la localidad de Calin-gasta, provincia de San Juan.
Artículo 2º: Comuníquese al Poder Ejecutivo.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Nuestra querida localidad de Calingasta, tiene el orgullo de contar con el Parque Nacional El Leoncito, ubicado en el corazón de la sierra del Tontal, muestra repre-sentativa de áreas como el monte, la punta y los altos Andes. El Leoncito es uno de los espacios más privilegiados del mundo para la observación de cuerpos ce-lestes y esto se debe a sus clásicas noches de profunda oscuridad, con escasa humedad, una atmósfera exenta de contaminación y sus cielos absolutamente despejados entre 270 y 300 noches al año.
Esto sucedió gracias a la creación del Complejo Astronómico El Leoncito, fundado en mayo de 1983 como un Centro Nacional de Servicios para la Comunidad As-tronómica, dependiente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET,) con la participación de la entonces Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Nación y de las Universidades Nacionales de San Juan, La Plata y Córdoba.
Como consecuencia de la fundación de esta Reserva Astronómica y Ecológica, la Honorable Cámara de Diputados de la provincia de San Juan aprobó el 1° de oc-tubre de 1987, la Ley Provincial N° 5771, cuyo objetivo es “regular la protección de la calidad del cielo en las inmediaciones del Complejo Astronómico.”
Esta Ley formula que el espacio debe ser preservado de factores y actividades tales como la contaminación atmosférica, la contaminación del espectro electromagnético, la luz artificial, el trazado vial, la circulación en los caminos existentes, la actividad minera y la circulación aérea y los aeródromos.
Dicha legislación establece que, “en un radio de hasta 15 Km. a la redonda del ob-servatorio astronómico, cualquier actividad industrial, minera, agropecuaria o de servicio, que emita humo o cualquier tipo de partículas que produzcan contamina-ción atmosférica, deberá ser expresamente autorizado.” Lo mismo ocurre con la instalación o funcionamiento de equipos transmisores radioeléctricos, medios de iluminación artificial que emitan radiación contaminante de longitudes de onda en-tre 300 y 1.000 nanómetros, etc. A su vez, es la autoridad vial de la provincia, la
que debe “proceder a la adecuada señalización de carreteras y otras vías, sobre el uso de las luces correspondientes.”
Todos estos factores son los que permiten, hoy día, que el Parque Nacional El Leoncito, sea el único del sistema de áreas protegidas de la República Argentina, en el que se puede reconocer el cielo de una forma particularmente clara.
El Complejo Astronómico se encuentra a 2.552 metros sobre el nivel del mar, 40 Km. al sur de la localidad de Barreal, frente a la antigua cuenca lacustre de “Ba-rreal Blanco.” Ofrece una asistencia trascendental a la comunidad científica, brin-dando sus instalaciones a decenas de astrónomos, para que puedan llevar a cabo sus diversos programas de observación.
El complejo, de 2000 metros cuadrados cubiertos, posee la capacidad de alojar a 50 personas, con un personal a su disposición que se compone de personal técni-co, administrativo, de mantenimiento, limpieza y cocina. Los científicos a su vez, pueden hacer uso de un comedor, una sala de reuniones, una sala de recreación, oficinas administrativas y 26 habitaciones dobles con baño privado, además del acceso a internet, conexión telefónica y televisión.
Las instalaciones también poseen talleres de mecánica de precisión, de metalur-gia, laboratorios de electrónica, óptica y computación y otras dependencias que contribuyen al pleno funcionamiento de la actividad técnica y astronómica que lle-van a cabo los especialistas.
Sin dudas, el protagonista es el telescopio “Jorge Sahade,” que lleva el nombre del científico que lucho por la instalación de este complejo. Se trata de un telescopio reflector con un espejo primario de 215 cm de diámetro y otro secundario de 65 cm. Pesa 40 TN y su movimiento corresponde a la precisión de un reloj, a los fines de compensar la rotación terrestre cuando se sigue un objeto espacial para su es-tudio.
El montaje de dicho instrumento se concretó entre octubre y diciembre del año 1984, hasta que a mediados de 1986 se trabajó en la puesta a punto en cuanto a su electromecánica. Finalmente, fue a partir de 1987, que el telescopio comenzó a emplearse por astrónomos para sus investigaciones de manera sistemática, hasta el día de hoy.
Cabe destacarse, que el CASLEO también cumple con un amplio programa de di-vulgación de la astronomía a nivel nacional. Anualmente, el complejo recibe a más de 6.000 visitantes de todo el mundo, que realizan visitas tanto diurnas como noc
turnas, para conocer más de las características técnicas de los equipos y el traba-jo que se lleva a cabo con ellos.
Sin embargo, el CASLEO no es el único observatorio astronómico que posee el Parque Nacional El Leoncito. La Estación Astronómica Dr. Carlos Cesco fue el primer antecedente en la región de Calingasta, dando el puntapié inicial para la conformación del entonces futuro Complejo Astronómico.
Inaugurado en el año 1964, su ubicación privilegiada y la calidad de su entorno hicieron de este observatorio uno de los puestos de observación de cuerpos celes-tes más importantes del mundo, sin contar la presencia de su telescopio astrógrafo doble, único en su tipo en todo el hemisferio sur.
En la actualidad, el turismo astronómico es un auténtico fenómeno que atrae a cientos de visitantes, ansiosos por conocer los sitios astronómicos, los programas de investigación y los instrumentos de trabajo que emplea la sede. Durante las vi-sitas de día, aquellos que asistan a las instalaciones pueden acceder a una carte-lería ilustrativa con textos y fotos de los avistamientos e inclusive, ser parte de una demostración de modalidad de trabajo, con la apertura de la cúpula y la puesta en movimiento de la misma. También se exhiben programas para confeccionar efe-mérides astronómicas y se puede observar de manera virtual, aquellos objetos que se pueden divisar durante la noche o los que están pasando en ese instante por el meridiano.
Por el contrario, las visitas nocturnas consisten en el reconocimiento de constela-ciones a “ojo desnudo” e identificación de las principales estrellas, observación con telescopio de objetos celestes como planetas, cúmulos y nebulosas y fotografía a diversas constelaciones mediante cámaras CCD acopladas al telescopio o fijadas con trípode en modo nocturno.
La Estación Astronómica, con sus 52 años de historia, es el fruto del primer con-venio entre una universidad argentina y una norteamericana, pionera en materia de ciencia astronómica. A comienzos de 1960, las gestiones del científico Carlos Cesco, hicieron que las universidades de Yale y Columbia decidieran instalar un observatorio propio en nuestra provincia de San Juan. Dichas instituciones querían colocar un observatorio en el hemisferio sur para estudiar en profundidad, los mo-vimientos de las estrellas australes.
El edificio se construyó sobre 40 hectáreas cedidas por los propietarios de la Es-tancia El Leoncito, previamente a ser constituida en Parque Nacional. El 31 de
marzo de 1964 se inauguró el llamado “Observatorio Austral Yale- Columbia,” nombre que se mantuvo hasta 1973 cuando la Universidad de Columbia se retiró del proyecto y Yale firmó un convenio con la recientemente creada Universidad Nacional de San Juan.
El proyecto Yale-San Juan denominó al observatorio “Estación Astronómica de Al-tura El Leoncito.” Sin embargo, en 1990, la Cámara de Diputados de la Provincia de San Juan, propuso modificar su nombre tras las celebraciones del 25° aniver-sario y la institución comenzó a tomar su nombre actual.
Tras años de funcionamiento, la Estación Astronómica ha sido una fuente invalua-ble para el estudio de nuestra galaxia. Esto se debe a que en la actualidad, más de 103 millones de estrellas australes poseen movimientos propios determinados por datos arrojados a través de decenas de investigaciones que se realizaron en dichas instalaciones.
Tras cumplirse 50 años de su fundación, el Yale Southern Observatory decidió do-nar a la Universidad Nacional de San Juan la totalidad de sus propiedades e ins-trumentos en la República Argentina. Esto quiere decir que la institución subsiste hoy día, gracias al talento y esfuerzo de científicos argentinos que ponen toda su capacidad en pos de avances que coloquen a nuestro país, en el centro de la co-munidad internacional.
En síntesis, nuestra localidad de Calingasta encierra en pocos kilómetros, dos ins-tituciones emblema de la astronomía nacional, cuyos antecedentes hacen sentir orgullosos a todos los sanjuaninos. El cielo de nuestra provincia, protegido ley provincial, propicia un entorno óptimo y a la vez envidiable para aquellos amantes del espacio, que viajan desde cualquier rincón del mundo, para observar nuestra bóveda celeste, gracias a la tecnología de avanzada que poseemos.
Por todo lo expuesto, solicito a los Sres. legisladores, que me acompañen en la aprobación del presente Proyecto de Ley.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
PEÑALOZA MARIANETTI, MARIA FLORENCIA | SAN JUAN | COMPROMISO CON SAN JUAN |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
CIENCIA, TECNOLOGIA E INNOVACION PRODUCTIVA (Primera Competencia) |
LEGISLACION GENERAL |
Trámite en comisión(Cámara de Diputados)
Fecha | Movimiento | Resultado |
---|---|---|
08/05/2018 | ANÁLISIS DE PROYECTOS DE COMPETENCIA MIXTA | Aprobado por unanimidad en la parte de su competencia con modificaciones |
Trámite
Cámara | Movimiento | Fecha | Resultado |
---|---|---|---|
Diputados | REPRODUCIDO POR EXPEDIENTE 1019-D-19 |