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COMERCIO

Comisión Permanente

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PROYECTO DE RESOLUCION

Expediente: 0026-D-2012

Sumario: DECLARAR DE INTERES DE LA HONORABLE CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION LA PROMOCION DEL COMERCIO JUSTO EN LA REPUBLICA ARGENTINA Y EL PROGRAMA BID/FOMIN - BANCO INTERAMERICANO DE DESARROLLO A TRAVES DEL FONDO MULTILATERAL DE INVERSIONES: "PROMOCION DE SISTEMAS PRODUCTIVOS SUSTENTABLES A TRAVES DE MERCADOS DE COMERCIO JUSTO".

Fecha: 01/03/2012

Publicado en: Trámite Parlamentario N° 1

Proyecto
Declarar de interés parlamentario la promoción del Comercio Justo en la República Argentina y el Programa BID/FOMIN "Promoción de Sistemas Productivos Sustentables a través de Mercados de Comercio Justo".

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


El comercio justo es una forma alternativa del intercambio convencional basada en el diálogo, la transparencia y el respeto. Promueve una relación comercial justa entre los productores y los consumidores, atendiendo a valores éticos que abarcan aspectos sociales y ambientales, además de los económicos.
Sus objetivos estratégicos son:
Trabajar prioritariamente con los productores y trabajadores más desfavorecidos para facilitarles la superación de una situación de vulnerabilidad y alcanzar la autosuficiencia económica.
Fortalecer a los productores y trabajadores como sujetos activos y responsables de sus propias organizaciones.
Desempeñar un rol más relevante en el escenario mundial para lograr mayor igualdad en el comercio internacional.
Convertir al consumidor en ciudadano, haciéndolo partícipe activo de una Economía Solidaria.
El comercio justo defiende la igualdad entre el hombre y la mujer, el respeto a la niñez, a las culturas y a su diversidad y el respeto por el medio ambiente, además de un precio justo por el trabajo realizado.
Busca apoyar a los productores más desfavorecidos, tratando que alcancen la autosuficiencia económica y fortalecerlos como sujetos activos y responsables de sus propias organizaciones.
En síntesis, el comercio justo procura:
Asegurar condiciones de trabajo justas y dignas.
Fomentar empleos con igualdad de oportunidades.
Asegurar un igual ingreso por igual trabajo para las mujeres.
Combatir la explotación infantil.
Estimular el cuidado del medio ambiente y las actividades productivas sustentables.
Privilegiar el apoyo a productores marginados o con poco acceso a la comercialización.
Informar a los consumidores acerca del origen de los productos.
Mantener reducida al mínimo la cadena de intermediarios entre productor y consumidor de modo de asegurarle una mayor rentabilidad al primero.
Pagar un precio justo a los productores.
Brindar a los trabajadores ingresos que les permitan cubrir sus necesidades básicas y combatir el trabajo informal.
Promover el respeto a la identidad cultural de los productores.
Fomentar organizaciones con formas jurídicas democráticas y transparentes.
Esta alternativa surge en el año 1968, en el marco de la Segunda Conferencia de la UNCTAD (Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo) - que impulsó una nueva visión estratégica de cooperación al desarrollo bajo el concepto de: "Comercio, no ayuda" (trade not aid)-.
No obstante, es recién en las últimas décadas que el movimiento del comercio justo muestra un desarrollo sostenido en determinados países desarrollados. La aparición de los sellos identificatorios, a partir de fines de los ochenta, da un gran impulso al mismo, siendo varias las iniciativas actuales de "etiquetado justo".
En los últimos 4 años se han duplicado las ventas mundiales de productos comercio justo y cientos de nuevas organizaciones de productores se han convertido en organizaciones comercio justo.
El mercado del comercio justo a nivel mundial está compuesto en un 60% por productos agrícolas. Las artesanías y otros productos cubren el resto de este mercado. Los principales productos involucrados son café y té, cacao y chocolate, miel, frutas frescas y secas, azúcar, jugos de fruta, arroz, flores, vinos, especias y esencias (quinoa y amaranto).
Si bien en América Latina su desarrollo es aún incipiente, países como Méjico, Ecuador, Chile y Brasil promocionan el comercio justo a nivel local con una marcada participación de la sociedad civil y con la ejecución de políticas públicas sustentables.
Aunque la Argentina cuenta un significativo número de productores agropecuarios pequeños y medianos, un sistema nacional de comercio justo -tal y como se conoce en Europa y otros países desarrollados- no se encuentra todavía implantado en la producción ni en la comercialización interna o externa, ni tampoco existe un mercado interno desarrollado para productos de comercio justo.
En su mayoría se trata de productores que tienen dificultades para el ingreso y permanencia en el mercado, con fuerte dependencia estructural de intermediarios que adquieren su producción, pagando precios que muchas veces no les permiten garantizar un adecuado estándar de vida para ellos y sus familias. En general, su oferta es pequeña y atomizada y tienen escasa capacidad de gestión comercial. Su localización geográfica introduce una restricción adicional que limita la accesibilidad a los mercados.
Se observan algunas experiencias puntuales de comercio justo en artesanías y en el sector agrícola. Por ejemplo, la Cooperativa La Riojana, que exporta cerca del 20% de su producción de vinos espumantes, varietales, convencionales y orgánicos bajo condiciones de producción normalizadas conformes a las normas internacionales.
Pueden mencionarse también la Cooperativa Apícola Coop Sol y la Cooperativa Norte Grande, en miel.
En este contexto, nace el Programa "Promoción de Sistemas Productivos Sustentables a través de Mercados de Comercio Justo", que actualmente implementa la Fundación Fortalecer, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a través del Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN), como forma de contribuir a paliar la situación de vulnerabilidad en que se encuentran los pequeños productores agropecuarios.
El mencionado Programa apoya a los pequeños productores rurales (y sus asociaciones) para que puedan vender sus productos bajo la modalidad de comercio justo, en condiciones más favorables y a precios razonables, contribuyendo de esta manera a mejorar el ingreso y a promover el bienestar de estos productores y sus familias, aportando a su desarrollo humano a largo plazo.
El mismo se alinea con los principios de comercio justo internacionalmente aceptados, básicamente: ataque a la pobreza; desarrollo de capacidades; equidad de género; condiciones de trabajo en un entorno seguro y saludable; condena al trabajo infantil; respeto al medio ambiente; precio acordado a través del diálogo y la participación; oportunidades para todos; relaciones comerciales basadas en la solidaridad, la confianza y el respeto mutuo.
El comercio justo, como forma alternativa de intercambio, no solo introduce una novedosa estrategia de comercialización o certificación de productos sino que también genera la posibilidad de fomentar una economía solidaria a través de redes de cooperación y nuevas relaciones sociales entre los productores y consumidores a nivel doméstico e internacional.
Permite también contribuir al desarrollo local, con mejoras no económicas, tales como, el fortalecimiento de los productores a través de la capacitación y la asistencia técnica, la seguridad de la fuente de ingresos, el mayor nivel educativo, la conservación de las culturas indígenas, la inclusión de los aspectos de género y otros beneficios sociales.
Por lo expuesto, Sr. Presidente, solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto de Resolución.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
ORSOLINI, PABLO EDUARDO CHACO UCR
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
COMERCIO (Primera Competencia)
Trámite en comisión(Cámara de Diputados)
Fecha Movimiento Resultado
13/11/2012 INICIACIÓN DE ESTUDIO Aprobado sin modificaciones con dictamen de mayoría y dictamen de minoría