Su beneplácito por la apertura del Instituto de Investigación para la Pequeña Agricultura Familiar del Noreste Argentino, que opera en la localidad de Laguna Naineck, Provincia de Formosa.

Señor presidente:

A través de un accionar conjunto, el Gobierno Nacional y el Gobierno de la Provincia de Formosa se encuentran comprometidos en la implementación de una estrategia de desarrollo humano y económico que tiene como ejes a la persona, la familia y el territorio, con el objetivo de avanzar en el camino de la equidad y de la cohesión social. En este contexto, debemos remarcar la iniciativa del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) que presentó, en la ciudad de Formosa, el nuevo Instituto de Investigación para la Pequeña Agricultura Familiar del Noreste Argentino, un organismo técnico consagrado al desarrollo de teorías y metodologías destinadas a aumentar el rendimiento de la actividad agrícola en reducidas extensiones. Una estación experimental, cuyo edificio fue construido por el Gobierno de la Provincia de Formosa, ya se encuentra funcionando en la localidad de Laguna Naineck, a unos dos kilómetros de la ruta nacional 86, y su campo de acción se extiende a las provincias de Formosa, Chaco, Corrientes y Misiones.

El objetivo fundamental del Instituto de Investigación para la Pequeña Agricultura Familiar del Noreste Argentino consiste en desarrollar tecnologías apropiadas para los pequeños productores, en relación con sus modos de existencia, enfocando la investigación en materia de sistemas de uso múltiple, alimentación animal con recursos locales y dimensión social de la agricultura familiar. Respecto de este último objetivo, como se trata de un tipo de agricultura que debe contener a todos los integrantes de la familia rural, su busca encontrar la manera para que todos los que quieran asentarse en el campo, lo puedan lograr exitosamente.

Por otro lado, en los programas a ser desarrollados se excluirá la utilización de agroquímicos, como así también las tecnologías transgénicas, evitándose toda tecnología que signifique la dependencia de insumos externos, en tanto ello sea posible. Se privilegiará la fertilización orgánica, para que el productor pueda manejarse con los recursos que tiene a su alcance. De esta manera, se garantizará el control biológico como forma de mantener el equilibrio natural del medio ambiente. Además, todo ello repercutirá directamente en el plano comercial de la producción agrícola, ya que las producciones bajo estas condiciones poseen un mayor valor en los mercados internacionales. Para aprovechar estas ventajas se manejará permanentemente información del funcionamiento de los mercados, siguiendo de cerca todos los estadios de las cadenas de valor y de distribución.

Capacitar a los pequeños productores, lograr que puedan mejorar la tecnología de sus modos de producción, que optimicen los resultados de su trabajo y que tengan una alternativa viable para colocar sus productos en el mercado, constituye, sin lugar a dudas, un paso trascendental en la lucha para eliminar las profundas desigualdades que sufren los habitantes de las distintas regiones del país.

Por todo lo expuesto, solicito que me acompañen en la aprobación del presente proyecto.