Que resulta absolutamente imprescindible que el Poder Ejecutivo Nacional a través de- su organismo de aplicación, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria - SENASA - defina e implemente a la brevedad posible una agresiva campaña de erradicación de la fiebre aftosa, en todo el territorio nacional y especialmente en las zonas de frontera; a la vez dotar al área de los medios necesarios para que dicho accionar esté contenido en un plan que perdure por los próximos cinco años. A tal fin el SENASA convocará a todas las instituciones intermedias relacionadas con la ganadería, como única manera de integrarlas activamente en esta campaña y a los fines de prevenir la aparición de nuevos focos de la enfermedad ocasionados por la falta de atención sanitaria o movimientos clandestinos de hacienda.

Señor presidente:

Recurrentemente nuestro país se ve afectado por distintos focos de fiebre aftosa que producen una significativa pérdida en toda la cadena productiva y de exportación de nuestras carnes. Ante cada nuevo brote son sacrificados los animales afectados y/o los del entorno cercano lo que diezma nuestros rodeos; pero lo más grave es la momentánea y paulatina pérdida de mercados - mundiales a los que nuestro país había logrado abastecer regularmente y con mucha calidad. En esta oportunidad la mayoría de los mercados suspendieron solamente las exportaciones cuya procedencia fuera de los departamentos del norte de la provincia de Corrientes, zona particularmente afectada en el presente brote y en brotes anteriores.

Desde tiempo se sabe que esta introducción de ganado afectado por la fiebre aftosa de países limítrofes, especialmente desde Paraguay, van produciendo como arriba decirnos, recurrentemente distintos brotes; ello motivado por la diferencia de precios de ganado en pié, un 30% menores a los de los rodeos argentinos. Ello resulta entonces un importante negocio para los ganaderos, especialmente los ubicados allende de los 2000 Km. de fronteras con países que indudablemente no practican suficiente sanidad para sus ganados. Además se debe prevenir el traslado de hacienda desde la provincia afectada por los brotes a otras zonas del país sin los controles sanitarios correspondientes.

A la luz de esta situación resulta entonces imprescindible establecer una campaña nacional de erradicación de la fiebre aftosa y asignar al SENASA un presupuesto estable que permita aplicar procedimientos perdurables en el tiempo, con la participación de todas las instituciones intermedias, policías provinciales, gendarmería nacional, prefecturas en su caso, etc. a fin que entre todos participemos de este desafio nacional, en el entendimiento que de esta única manera podremos erradicar definitivamente esta epidemia y poder alcanzar la categoría de país libre de aftosa sin vacunación que tanto valor tiene para los mercados internacionales que demandan nuestros productos.

Por ello solicitamos la aprobación del presente proyecto de Declaración.