Solicitar al Poder Ejecutivo de la Nación, a través de los Organismos que correspondan, promueva campañas masivas de información y prevención respecto a la enfermedad del Hantavirus, especialmente en la Provincia de Tucumán, debido a que recientemente se han confirmado 3 muertes por esa enfermedad, no habiendo antecedentes de casos endémicos desde que se registró esta enfermedad en 1990.

Señor presidente:

En los últimos años en nuestro país se han detectado y denunciado varios casos de Hantavirus, una enfermedad viral aguda grave, producida por un virus perteneciente a la familia Bunyaviridae, que incluye agentes causales de dos graves enfermedades humanas: la Fiebre Hemorrágica con Síndrome Renal (FHSR) en Asia y Europa con una letalidad del 4 al 15%, y el Síndrome Pulmonar por Hantavirus (SPH) en América (Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Ecuador, USA, Panamá, Paraguay, Uruguay y Venezuela) con una letalidad promedio que alcanza al 50%.

Este virus, se transmite a las personas, a través distintas especies de roedores de todo el mundo especialmente los ratones de campo (colilargos) que actúan como reservorios de los Hantavirus; sin embargo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indica la presencia del virus en otras especies como musarañas y murciélagos.

El contagio se puede producir por contacto con la saliva, las heces y la orina, de roedores, o por inhalación del ambiente contaminando. Esto suele ocurrir al introducirse en el hábitat de los roedores en zonas suburbanas y ambientes rurales, principalmente en los peri-domicilios y durante el desarrollo de actividades laborales, recreativas, o en lugares cerrados como galpones o depósitos infestados por roedores. A su vez, la infección dentro del domicilio puede producirse por invasión de roedores silvestres en los mismos.

Según la Organización Mundial de la Salud (OSM), los síntomas en las personas, se parecen a un estado gripal, comienza con fiebre, escalofríos, cefaleas, dolores musculares y/o síntomas gastrointestinales. Después de algunos días puede haber dificultad respiratoria que puede agravarse produciendo lo que se conoce como "síndrome cardiopulmonar por hantavirus" (SPH), que si bien es poco frecuente puede llevar a la muerte si no es tratado a tiempo. Estos síntomas, aparecen normalmente al cabo de dos y cuatro semanas tras la exposición inicial al virus, pero a veces se manifiestan cuando ha transcurrido solo una semana o, por el contrario, hasta seis semanas después. Los pacientes con SPH, deben ser asistidos en establecimientos hospitalarios, de preferencia con unidades de terapia intensiva que cuenten con asistencia respiratoria mecánica

Los cambios sociales, económicos, demográficos y ambientales se han ido incrementando en los últimos años, provocando que los casos se sigan sumando. A esto se le debería sumar el potencial cambio y capacidad de adaptación de los microorganismos que han determinado la emergencia de ciertas enfermedades.

En Argentina circulan al menos 10 genotipos diferentes, y 8 de ellos han sido asociados al SPH y según varios estudios científicos se consideran Zonas de Riesgo, aquellas donde habitan gran número de roedores afectados por el virus y en nuestro país se han establecido al menos cuatro grandes zonas geográficas y ecológicamente diferentes, de mediano y alto riesgo

1) Norte del país que coincide con la selva tucumano-oranense (Salta y Jujuy)

2) NE, que abarca la selva misionera (Misiones y Formosa)

3) Sur en la franja cordillerana (Chubut, Río Negro y S. de Neuquén)

4) Zona central (Buenos Aires en áreas de mayor densidad demográfica).

En Tucumán, el director de epidemiología del SIPROSA, Rogelio Cali, afirmó los medios de comunicación, que se confirmó que las personas murieron, a causa del Hantavirus, y que se trata de casos autóctonos (lo contrajeron en la provincia). Nunca se habían registrado casos de hantavirus en Tucumán desde que se informó en humanos, en la década del 90. Debido a que la provincia no es una zona endémica, "Es algo totalmente nuevo, que no había registrado casos locales", agregó Cali.

El Ministerio de Salud de la Provincia dictó la alerta Epidemiológica, para todos los servicios de salud, tanto públicos como privados, con el objetivo de intensificar la vigilancia y difundir medidas de prevención.

De acuerdo con el Ministerio de Salud de la Nación la enfermedad puede prevenirse con las siguientes medidas:

- Evitar la convivencia con roedores y el contacto con sus secreciones.

- Tapar orificios en puertas, paredes y cañerías, mantener la higiene con agua y lavandina, colocar huertas y leña a más de 30 metros de las viviendas.

- Mantener corto pastos y malezas.

- Ventilar por lo menos 30 minutos antes de entrar a lugares que hayan estado cerrados (viviendas y galpones). Cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo húmedo antes de ingresar.

- Realizar la limpieza (pisos, mesas, cajones y alacenas) con una parte de lavandina cada diez de agua (dejar 30 minutos y luego enjuagar). Humedecer el piso antes de barrer para no levantar polvo.

- Al acampar hacerlo lejos de maleza y basurales, no dormir directamente sobre el suelo y consumir agua potable.

- Si se encuentra un roedor vivo: usar veneno para roedores o tramperas para capturarlo (no intentar tocarlo o golpearlo).

- Si se encuentra un roedor muerto: rociarlo con lavandina junto con todo lo que haya podido estar en contacto y esperar un mínimo de 30 minutos. Luego recogerlo usando guantes y enterrarlo a más de 30 centímetros de profundidad o quemarlo.

Las enfermedades zoonóticas asociadas a los roedores son difíciles de controlar sin la intervención adecuada por lo que es factible que se sigan produciendo nuevos casos en los mismos medios sin sanear, principalmente donde reside o trabaja la población sin información ni recursos. Es fundamental contar con un sistema de vigilancia y prevención que articule los tres componentes del sistema de salud: el diagnóstico, tratamiento y control de esta infección

Es por ello, que solicitamos que desde la Nación se arbitren los medios necesarios para que en Tucumán se realice una campaña intensiva y masiva de información para la prevención de esta enfermedad que hasta ahora no se consideraba endémica en esta Provincia. La implementación de políticas sanitarias, deberán estar acompañadas por recursos económicos específicos, considerando que el Hantavirus es una enfermedad de alta letalidad y riesgo de brotes, de gran repercusión social y sobre todo, posible de evitar.

Por lo expuesto, solicito el acompañamiento a mis pares en este proyecto