Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, para que, a través del/los organismo/s que corresponda/n, implemente campañas de difusión y actualización sobre el diagnóstico precoz del cáncer pediátrico, destinadas a profesionales de la salud que se dedican a la atención de esta población.

Señor presidente:

En nuestro país se diagnostican aproximadamente 1300 casos de cáncer infantil por año. La mayoría de estos diagnósticos demoran entre 3 y 5 meses en confirmarse.

Frente a la primera consulta de los padres, el profesional de atención primaria, suele atribuir síntomas tales como fiebre, ganglios linfáticos inflamados, infecciones frecuentes, anemia o moretones a otras enfermedades o infecciones ya que son propios de ellas también, e inician el tratamiento de la enfermedad que sospechan en primera instancia.

Antes de sospechar el diagnóstico, es posible que el pediatra o el profesional a cargo, pase por diferentes diagnósticos sobre los mismos síntomas, y realice diferentes tratamientos, antes de pensar en la posibilidad de algún tipo de cáncer infantil. En más de una oportunidad, son los padres quienes deciden consultar a centros de salud de mayor complejidad, debido a que no ven mejorías en el hijo después de varios meses de tratamiento, y no tienen un diagnóstico certero de lo que le sucede.

La posibilidad de curación del cáncer pediátrico en los distintos centros oncológicos de los países desarrollados alcanza el 80%. Esto se ha logrado merced a la utilización de tratamientos óptimos, medidas de soporte refinadas, enfermería pediátrica especializada y mejor conocimiento de los pediatras de los signos y síntomas que permiten efectuar un diagnóstico precoz.

El propósito de este pedido al Poder Ejecutivo, es que se realicen actualizaciones para profesionales a cargo de la población infantil, con el fin que puedan pensar en un posible diagnóstico de cáncer tempranamente, y de esta manera sea derivado el paciente a especialistas en el tema para que sean ellos quienes comiencen con su tratamiento a la brevedad.

Sabemos que mientras antes sea diagnosticado y tratado, mejores resultados se van a obtener. Del diagnóstico precoz depende en muchos casos, la vida del paciente, las secuelas que le puedan quedar como consecuencia de la misma, la calidad de vida, no sólo de él sino, de todo su grupo familiar.

El registro Oncopedriátrico Hospitalario Argentino (ROHA) trabaja específicamente sobre la información cuantitativa del cáncer infantil.

Según los datos proporcionados por el ROHA, la distribución de casos según la Clasificación Internacional de Cáncer Pediátrico (ICCC), por año 2000-2001-2002, en nuestro país es la siguiente:

Según la última actualización del ROHA, el total de pacientes registrados menores de 15 años entre los años 2000 y 2005 es 6717 casos.

Teniendo los medios necesarios en nuestro país para la atención y eficaz tratamiento de este mal, considero de suma importancia destinar nuestros esfuerzos en la detección temprana de este tipo de enfermedades, capacitando a los profesionales de la salud para que cuenten con mayores instrumentos clínicos a ser aplicados en la atención primaria de la población pediátrica, a fin de ganar tiempo valioso en el tratamiento de estas enfermedades. Queda demostrado a nivel mundial que de este diagnóstico precoz depende la evolución de la enfermedad y la cura de la misma.

Por todo lo expuesto solicito a mis pares me acompañen en el presente proyecto.