PROYECTO DE TP
Expediente 9550-D-2014
Sumario: FABRICACION DE BATERIAS Y PILAS RECARGABLES DE LITIO. REGIMEN PARA SU FABRICACION.
Fecha: 04/12/2014
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 179
El Senado y Cámara de Diputados...
Artículo 1°.- La presente ley
tiene como objeto promover la fabricación nacional de baterías y pilas recargables
de litio.
Artículo 2º.- A los efectos de
la presente ley, entiéndase por batería o pila recargable de litio a todo dispositivo
diseñado para almacenamiento de energía eléctrica que contenga litio como
material activo de su cátodo capaz de ser reutilizado luego de completada su
recarga.
Artículo 3º.- A los fines de
dar cumplimiento al objeto de la presente ley, se establecen los siguientes
incentivos a la fabricación de baterías y pilas de litio recargables:
a) La importación de insumos,
tecnología y bienes de capital destinados a la producción de baterías y pilas de litio
recargables, siempre que ellos que no se fabriquen en Argentina, estará eximida
del pago de todo gravamen aduanero durante un plazo de 10 años a partir de la
reglamentación de la presente ley.
b) Las empresas que fabriquen
baterías o pilas de litio recargables verán reducido en un 35% el pago del
impuesto a las ganancias durante un plazo de 10 años a partir de la
reglamentación de la presente ley.
c) La exportación de baterías y
pilas de litio recargables fabricadas en la República Argentina se verá libre del pago
de todo derecho de exportación durante un plazo de 15 años a partir de la
reglamentación de la presente ley.
Artículo 4º.- La presente ley
deberá ser reglamentada dentro de los noventa (90) días de su publicación.
Artículo 5º.- El Poder
Ejecutivo Nacional designará a la autoridad de aplicación de la presente ley.
Artículo 6º.- Comuníquese al
Poder Ejecutivo.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Como todos sabemos, el petróleo es
un recurso natural no renovable. Esto significa un duro desafío para una
civilización que desde inicios del Siglo XX ha dependido de los hidrocarburos para
el desarrollo de su economía. Una vez que el petróleo se acabe, o su extracción
resulte sumamente costosa tanto desde el punto de vista económico como desde
el ambiental, la humanidad deberá reemplazarlo por otras fuentes de energía. Esta
situación, que aparenta indicar que nos encaminamos hacia el colapso energético
global, con todas las implicancias negativas que ello traería aparejado, en realidad
nos abre la posibilidad para adoptar nuevas tecnologías que en la actualidad, por
un motivo u otro, se encuentran en etapa experimental o de poca aplicación
práctica. Afortunadamente, tras largos años de investigación, contamos con un
abanico de fuentes renovables de energía que, permitirán ir abandonando de a
poco al gas y al petróleo, y por su "limpieza" colaboran, tal como está probado,
con la protección del medio ambiente y la mitigación de los efectos del
calentamiento global.
Entre las fuentes de energía
alternativas a los hidrocarburos, podemos mencionar principalmente a la
proveniente del sol, la eólica, la mareomotriz, la geotérmica, la hidráulica y la
proveniente de biomasa (metano, biodiesel y etanol). El problema de estas fuentes
de energía, con excepción de las provenientes de biomasa, es el instrumento para
su almacenamiento. Ello cobra especial importancia si el uso que se les dará será
para impulsar vehículos eléctricos cuyo funcionamiento se alimenta de la energía
contenida dentro de baterías recargables (que deben reunir tres condiciones
esenciales: ser de pequeña dimensión, livianas y capaces de almacenar la cantidad
de energía suficiente como para dotar a esos vehículos de una autonomía
aceptable). La solución a dicho problema la tenemos en el litio.
El litio es el más liviano de todos los
metales, aunque se lo utiliza fundamentalmente en forma de productos químicos:
carbonato, cloruro, etc. Se lo obtiene principalmente a partir de salmueras
naturales, las que se han convertido en la principal fuente de este metal (más del
60%). Los depósitos más importantes se encuentran en lagos salinos continentales
y en salares. Las salmueras de los salares son ricas en litio y otras sales solubles.
La calidad del depósito dependerá de los niveles de concentración de los diversos
elementos (potasio, sodio, calcio, magnesio, boro, bromo, etc.).
Las salmueras más importantes del
mundo, en términos de calidad y volumen, se encuentran en Chile (Salar de
Atacama), Bolivia (Salar de Uyuni), Argentina (Salar del Hombre Muerto), en
diversos lagos salinos de los EEUU, en China (provincia de Qinghai), en el Tibet y
Rusia.
Según el Servicio Geológico de los
Estados Unidos, los recursos identificados a nivel global son de 33 millones de
toneladas de litio metálico, en tanto las reservas (económicamente viables) son de
13 millones de toneladas. La República Argentina ocupa el cuarto lugar a nivel
mundial de recursos identificados de litio con un total estimado de 2,6 millones de
toneladas. Lo preceden Bolivia (9 millones de toneladas), Chile (7,5 millones de
toneladas) y China (5,4 millones de toneladas) (1) .
La mayor cantidad de reservas de
litio de Argentina se concentran en los salares de la región NOA del país. Los
principales yacimientos se encuentran en las provincias de Catamarca (salar del
Hombre Muerto), Salta (salares de Rincón, Pocitos y Arizaro), Jujuy (salares de
Olaroz y Caucharí). Las exportaciones de litio de nuestro país están en el orden de
los U$S 71 millones anuales, siendo los Estados Unidos de Norteamérica, China y
Japón, los principales destinatarios.
Ahora bien, la demanda de litio por
parte del mundo debe llevarnos a analizar el potencial económico que significa
para Argentina el hecho de contar con enormes reservas de este mineral. Para ello
basta mencionar que la tonelada de salmuera a partir de la cual se obtiene el litio,
cuesta U$S 300; que el carbonato de litio concentrado cuesta U$S 6.000 y que una
batería de litio para un automóvil eléctrico, cuyo peso es de aproximadamente 10
kilogramos, cuesta entre U$S 10.000 y 20.000. Cabe preguntarse entonces si no
resultaría más provechoso para nuestro país fabricar las baterías de litio en lugar
de exportar ese mineral para que otros las manufacturen y se beneficien con el
valor agregado generado.
La mayor parte de las plantas para
la elaboración de baterías de litio están instaladas en China, Japón y Corea del Sur.
En la actualidad, sólo en China, hay más de 100 fabricantes que producen para un
mercado mundial de componentes. El segmento de baterías Li-Ion (iones de litio)
para la industria automotriz se encuentra menos desarrollado que el de las baterías
destinadas a la electrónica, pero si se tiene en cuenta que para el año 2020
alrededor del 20% de los vehículos del planeta serán impulsados por motores
eléctricos, se puede apreciar el potencial con que Argentina cuenta para
convertirse en uno de los actores principales del mercado.
Por dicho motivo, el programa "Del
Solar a la Batería" desarrollado conjuntamente entre la Universidad Nacional de
Córdoba, la Universidad Nacional de La Plata y el
CONICET, se avocó a la investigación
de la tecnología aplicable a la fabricación de baterías de litio y ya está en camino
de iniciar su faz productiva. Inicialmente se construirán baterías para notebooks y
teléfonos celulares y en una segunda instancia, el objetivo es la fabricación de
baterías para automóviles y motocicletas eléctricos.
Ante un panorama tan ventajoso a
largo plazo como el que se nos ofrece por tener grandes disponibilidades de litio
en nuestro país, debemos plantearnos la conveniencia de incentivar y promover la
fabricación de baterías y pilas recargables de este mineral de manera local. Por
dicho motivo, en el presente proyecto de ley se propone la adopción de las
siguientes medidas:
a) La importación libre y sin
gravámenes aduaneros durante 10 años de aquellos insumos, tecnología y bienes
de capital destinados a la producción de baterías de litio recargables siempre que
ellos que no se fabriquen en Argentina.
b) Exención del pago del 35%
del impuesto a las ganancias durante 10 años para las empresas que se dediquen
a la fabricación de baterías de litio recargables.
c) La eliminación de todo canon
durante 15 años a los derechos de exportación de las baterías de litio
recargables.
La tecnología aplicada a este tipo de
dispositivos de almacenamiento de energía se encuentra aún en una etapa
embrionaria y en constante desarrollo. Por dicho motivo se establecen beneficios
fiscales que tendrán una duración temporal que permitirá terminar el desarrollo de
la investigación, y la posterior inversión en emprendimientos competitivos, que
generen importante empleo para el mercado local.
Entendemos que en la medida que
se generen los estímulos suficientes, Argentina será capaz de convertirse en una
pieza clave en el mercado de este tipo de baterías. En ese sentido vale rescatar lo
dicho en 2012 por la Presidente de la Nación en el congreso de la Asociación de
Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) cuando se refirió a
los "importantísimos yacimientos de litio" como fuente de riqueza del nuevo
milenio, y señaló que el desafío es "industrializarlo en origen" (2) .
Por todo lo expuesto, solicito la
aprobación del presente proyecto de ley.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
AGUILAR, LINO WALTER | SAN LUIS | COMPROMISO FEDERAL |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
INDUSTRIA (Primera Competencia) |
ENERGIA Y COMBUSTIBLES |
PRESUPUESTO Y HACIENDA |