La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar su beneplácito por la realización los días 3 y 4 de Diciembre de 2010 en la ciudad de Mar del Plata, provincia de Buenos Aires, de la edición número XX de la Cumbre Iberoamericana, en cuyo marco se aprobó una declaración especial entre las repúblicas de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, que ratifica el compromiso de preservar de forma colectiva el Qhapaq Ñan, o Sistema Vial Andino y, así también presentar una candidatura única de inscripción en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.

Señor presidente:

Entre los días 4 y 5 de Diciembre de 2010 se desarrolló en la ciudad de Mar del Plata, provincia de Buenos Aires, la edición número XX de la Cumbre Iberoamericana, que reunió a 16 jefes de Estado y gobierno y a seis jefes de delegación iberoamericanos, los cuales se comprometieron y, así también, aprobaron por unanimidad la Declaración de Mar del Plata, la que refleja los pronunciamientos, propuestas y planes de acción que la comunidad adopta tras las reuniones de cancilleres y mandatarios.

En ese marco, seis países integrantes de la Cumbre, a saber: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú que comparten un patrimonio cultural de valor excepcional: el Qhapaq Ñan o Sistema Vial Andino, resolvieron aprobar una declaración conjunta que ratifica el compromiso de

preservar de forma colectiva ese patrimonio común y presentar una candidatura única de inscripción en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.

El Qhapaq Ñan, eje de comunicación principal del Imperio Incaico, era la espina dorsal de una vasta red de caminos que se extendía a lo largo de miles de kilómetros. Creado en uno de los entornos naturales más hostiles del planeta, ese sistema vial es una de las realizaciones más colosales del ingenio humano.

Los Incas supieron articular todo el conocimiento andino y enlazar con acierto redes de caminos regionales que habían empezado a formarse dos mil años antes, y lograron ponerlas al servicio de un imperio, jalonándolas de centros de producción, establecimientos de comercio y lugares de culto. Esta prodigiosa unificación se consiguió en menos de un siglo, sin ayuda de la rueda y con la única fuerza motríz del hombre y los camélidos andinos.

La región cuenta ya con numerosos sitios inscriptos en la Lista del Patrimonio Mundial, sin embargo, ahora se va a establecer por primera vez un plan de gestión integral de todos ellos para salvaguardar, al mismo tiempo, un patrimonio natural, cuya biodiversidad es una de las más ricas del planeta, y un patrimonio cultural que incluirá las tradiciones indígenas y locales.

Señor Presidente, convencida que hechos y acciones de esta naturaleza se corresponden con el momento histórico que vive nuestro país y América Latina, la 'patria grande', y que es congruente con la esencia del modelo, no obstante, considero que merecen reconocimiento y por ello y en virtud de los argumentos esgrimidos es que solicito a mis pares el acompañamiento para aprobar esta declaración