La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Solicitar al Poder Ejecutivo que, a través del Organismo que corresponda, se exprese el Rechazo y el Repudio, ante los Organismos Internacionales pertinentes, por la actitud provocativa y arrogante del Reino Unido de pretender designar a parte del territorio Antártico con el nombre de "Tierra de la Reina".

Señor presidente:

Pareciera que las autoridades del Reino Unido de Inglaterra, se han quedado en tiempo y espacio y más precisamente, en el Medioevo.

Recientemente, el Reino Unido puso el nombre de su monarca a un trozo del continente que equivale al doble de la superficie del Reino Unido, pretendiendo bautizado con el nombre de "Tierra de la Reina Isabel" en homenaje a los 60 años en el trono de Isabel II.

El área de la Antártida, que no tenía nombre, se encuentra en el oeste del continente y tiene una extensión de unos 437.000 kilómetros cuadrados; una rebanada geográfica de 169.000 millas cuadradas de territorio antártico que toca el Polo Sur y llega a cubrir un área que es dos veces el tamaño del Reino Unido.

El territorio bautizado con el nombre de la reina pertenece en realidad a la Argentina y se encuentra protegido por el Tratado Antártico. Sin embargo, los británicos se lo adjudican por la posesión ilegal que ejercen sobre las Islas Malvinas.

Al respecto, el Diario Británico "The Telegraph", entre otros, reconoce que el Ministerio de Relaciones Exteriores de su país "...corre el riesgo de un conflicto diplomático con Argentina por nombrar parte de la Antártida como Tierra de la Reina Isabel". En la misma nota periodística se reconoce que eThe Foreign Office has risked a fresh diplomatic row with Argentina by naming part of Antarctica after the Queen as a Diamond Jubilee gift.l Ministerio de Asuntos Exteriores Británico ha arriesgado un nuevo frente de conflicto diplomático con Argentina por este hecho.

Según se informa "Se marcará en todos los mapas británicos en el futuro, pero es poco probable que lo hagan en los mapas argentinos de la zona, ya que el país ha rechazado la afirmación de Gran Bretaña en el continente polar y tiene su propia delimitación que se superpone al de la tierra recién cambiada de nombre". Evidentemente, hasta los medios británicos conocen la realidad de esa ilegitima pretensión de su gobierno.

William Hague, the Foreign Secretary, announced the gift as he gave the Queen a guided tour of the Foreign Office.William Hague, el ministro de Asuntos Exteriores, anunció esta vergonzosa disposición como un regalo a la reina en una visita guiada por el Ministerio de Relaciones Exteriores Británico. Como puede apreciarse, se trata de una nueva provocación en este caso de fuerte sesgo diplomático y simbólico que, en el fondo, esconde una vieja pretensión de explotación económica por parte del Reino Unido frente al ejercicio de soberanía que nuestro país viene realizando en esa zona del territorio Antártico, para lo cual se encuentra protegida por tratados internacionales.

La gravedad de los hechos planteados demanda una clara y urgente expresión de repudio de todo el cuerpo político argentino, sin distinción partidaria o ideológica, toda vez que el gobierno de Gran Bretaña se ha arrogado unilateralmente el derecho "bautizar" provocativamente un territorio del cual nuestro país ejerce soberanía efectiva amparada en el Tratado.

Por las razones expuestas, solicitamos a esta Honorable Cámara de Diputados de la Nación la aprobación de este proyecto de Declaración.