La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que informe acerca de cuáles son las órdenes de servicio y protocolos que tiene la Policía Federal Argentina para prevenir disturbios en el espacio público que potencialmente provoquen conmoción y alarma en la población, además de perjuicio en los bienes físicos; asimismo, cuáles son las previsiones de esa fuerza de seguridad ante los hechos, consumados o en curso de consumarse, de graves desórdenes; y finalmente si el Poder Ejecutivo Nacional distingue entre represión ilegal y poner orden con la ley en la mano.

Señor presidente:

El día 12 de diciembre de 2012 se inscribe en la lista de las jornadas aciagas para la Ciudad de Buenos Aires. Es la contra lista de la ristra de virtudes que hicieron mundialmente famosa a la "Reina del Plata". El 12-12-12 fue uno de esos días en los que Buenos Aires - sobre todo en su casco céntrico - se asemeja a la Franja de Gaza, dicho esto con todo el sincero respeto que merece el sacrificado pueblo palestino.

Destrucción, saqueos, piedras, palos, daños en monumentos y espacio público. Literalmente, vandalismo del peor y del más incivil. Brutalidad de la más baja especie. Ni siquiera rústico. Porque la rusticidad del mundo rural tiene su encanto y su belleza, más allá de su rudeza.

Forajidos encapuchados y también a cara descubierta. Hordas. Unos, embozados como hinchas de un club de fútbol, Boca Júnior. Otros, con el pretexto de protestar por el fallo recaído en la causa de Marita Verón, en Tucumán, acerca de la trata de personas.

La destrucción del móvil de CRÓNICA TV y el asalto y robo en el CANAL 13 y TN en la Avenida San Juan, casi Lima de la Ciudad, son hechos sumamente graves que nos hacen retrogradar a tiempos de barbarie.

Es una flagrante contradicción que desde las altas esferas gubernamentales se proclame recurrentemente que estamos encaminándonos "hacia la profundización de la democracia" y la realidad, cruda y brutal, patentice que vamos rumbo hacia la incivilización y el primitivismo. Porque no es un "bárbaro aislado". Son centenas y centenas de inciviles.

Durante horas el sector céntrico fue un infierno. Inadmisible.

La Policía Federal debe disponer de protocolos para prevenir los disturbios y para, en caso de que se produzcan, reponer el orden en forma inmediata. Una Policía que se tiene que refugiar o retirar dejando libre el espacio a los destructores es una imagen deplorable que exhibe que en la Argentina el imperio de la ley todavía es una meta remota.

Los fiscales deben actuar de oficio. Con auxilio de la Policía deben identificar a los vándalos, procesarlos y llevarlos a la condena penal que dé ejemplo a todo el país de que en la Argentina se inhumó el reino de la impunidad. Y que, por fin, se cumple la ley.

Pero también una prueba de que la Policía Federal puede y sabe reprimir con la ley en la mano y reponer el orden público de modo eficiente, profesional e inmediato.

Es menester que la Cámara representativa del pueblo argentino se comprometa a fondo con el orden. Nada, ni siquiera una profunda transformación, se puede plasmar en el contexto del desorden y los trastornos que conmueven a la convivencia y a la paz social.

La jornada de ayer 12-12-12 es una bochornosa página de la historia chica de los argentinos. Digo "chica" porque hace rato que estamos escribiendo historia de bajo vuelo y de mirada corta.

Pido el respaldo de la Cámara para este pedido de informes.