La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que adopte las medidas pertinentes para mantener el accionar preventivo de las Fuerzas de Gendarmería Nacional en el ámbito de la Provincia de Tucumán, con el objeto de garantizar la paz social, la convivencia pacífica, la tranquilidad pública, el respeto por la libertad, la vida y el patrimonio de sus habitantes, así como la plena vigencia de sus instituciones republicanas.

Señor presidente:

Durante los días 9, 10 y 11 del corriente mes, la sociedad tucumana vivió horas de tensión, angustia, pena, desazón e impotencia. El caos y el vandalismo se apoderaron de las calles de nuestra provincia, donde sucedieron una ola de saqueos y violencia generalizada en supermercados, distribuidoras mayoristas, casas de electrodomésticos, heladerías, pinturerías, entre otros comercios. Esta dolorosa situación provocó el cierre de establecimientos educativos, oficinas públicas, entidades bancarias, comercios, quienes decidieron no abrir sus puertas ante la imposibilidad de garantizar la seguridad de su personal y público concurrente. Del mismo modo, el transporte público provincial no brindó servicio y fue suspendida la provisión de combustible en las distintas estaciones de expendio. En consecuencia, durante el transcurso de estos días, la vida y la integridad física de los tucumanos corrían peligro ante la amenaza latente de nuevos focos de violencia y la consumación de posibles delitos.

El acuartelamiento policial en procura de un aumento salarial marcó el puntapié inicial de estos lamentables sucesos. El descontrol, la incertidumbre y el temor colectivo se extendieron en cada rincón de la provincia. Así, los vecinos formaban barricadas para defender su propia vida, la de su familia y sus hogares. Asimismo, la ausencia de las fuerzas de seguridad obligó a los comerciantes a formar sus propias murallas armadas a fin de salvaguardar su fuente de trabajo.

Al atardecer del miércoles 10, miles de tucumanos profundamente indignados y dolidos marcharon a la Plaza Independencia, a los efectos de exteriorizar su reclamo por la situación de angustia e indefensión que estaban sufriendo. Sin embargo, esta manifestación también resultó teñida por la violencia y la represión. La policía provincial disparó balas de goma y arrojó gases lacrimógenos contra los vecinos que protestaban.

Según datos ampliamente difundido por los medios de comunicación, estos graves sucesos se cobraron la vida de seis personas y varios heridos, aunque el gobierno provincial todavía no dio a conocer la cifra exacta del número de víctimas. En cuanto a los perjuicios económicos, la Confederación Argentina de la Empresa (CAME) estima que unos 250 comercios fueron saqueados y las pérdidas materiales rondan los $ 75 millones.

El mantenimiento de la paz social y la seguridad pública es una de las funciones primordiales del Estado Constitucional de Derecho, cuya finalidad última es garantizar la convivencia armónica y pacífica de todas las personas que habitan bajo su suelo y la órbita de su ley. Por esta razón, resulta imprescindible la actuación de la Gendarmería Nacional, en su rol de fuerza intermedia, ya que tiene capacidad para disuadir y responder amenazas, crisis, contingencias e incidentes en el ámbito de la Seguridad Interior. En consecuencia, urge la necesidad de que el Poder Ejecutivo Nacional adopte las medidas pertinentes para mantener la dotación de Gendarmería Nacional afectada en la provincia de Tucumán a fin de mantener la tranquilidad pública y la convivencia pacífica, el respeto por la vida y el patrimonio de sus habitantes, así como la plena vigencia de sus instituciones republicanas.

En virtud de las razones esgrimidas, pido a mis pares que me acompañen en la aprobación del presente Proyecto de Resolución.