La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Que vería con agrado que el Poder Ejecutivo Nacional, a través de los organismos que correspondan, reglamente la Ley Nº26.799, que prohíbe la utilización de equipos de emisión de rayos ultravioletas destinadas para bronceado a personas menores de edad.

Señor presidente:

Es de fundamental importancia considerar que la Ley Nº26.799 fue sancionada en Noviembre del año 2012, promulgada en el mes de diciembre de ese mismo año, estableciendo la prohibición de la utilización de equipos de emisión de rayos ultravioletas destinadas para bronceado a personas menores de edad pero que aún hoy no se encuentra reglamentada, lo que me lleva a realizar el presente proyecto buscando su efectiva reglamentación.

Para entender la preocupación sobre esta temática y la necesidad de que esta ley sea reglamentada recordaremos al respecto, ya que considero que la mayoría de nuestra población tiene conocimientos de los efectos dañinos que produce en nuestra salud la radiación ultravioleta, debido a las distintas campañas de difusión en cuanto a la temática.

La radiación ultravioleta es la principal causa de cáncer de piel. Las camas solares modernas emiten radiación ultravioleta con una potencia que puede llegar a ser hasta veinte veces más intensa que la del sol.

Para entender los motivos que llevan a numerosas personas a tomar frecuentemente sesiones de cama solar, los investigadores llevaron a cabo diferentes estudios. Estos revelaron que la exposición a la radiación ultravioleta que emite la cama solar estimula la liberación de endorfinas, hormonas que producen una sensación de bienestar. Las endorfinas causarían cierta dependencia a la cama similar a lo que ocurre con la nicotina del cigarrillo.

Desarrollar dependencia a la exposición ultravioleta puede incrementar de modo significativo los riesgos de padecer con el tiempo cáncer de piel.

Un reciente estudio realizado por la Organización Mundial de la Salus (OMS) señalo y rectifico lo precedentemente antes dicho y aporto un dato preocupante y desalentador que se ha obtenido del estudio mediante encuestas realizadas en los países de Europa como en Estados Unidos, y los resultados arrojan que está cada vez está más extendido el uso de las camas solares, sobre todo entre la gente joven e incluso entre niños de 10 y 11 años.

En mi carácter de autora del presente proyecto que finalmente en el año 2012 se convirtió en ley para todos los argentinos, considero que se debería desalentarse a la población a usar camas y lámparas de bronceado artificial debido a sus efectos dañinos en la salud. Y solicito una vez más la Reglamentación de la ley 26 799 con el objeto de restringir al acceso de los menores a camas solares, para velar de esta forma una protección a la salud integral de los niños niñas y adolescentes.

Por todo lo expuesto, le solicito a mis pares que me acompañen en la aprobación del presente proyecto.