El Senado y Cámara de Diputados...

UNIVERSIDAD NACIONAL DE ENTRE RÍOS (UNER) ESTABLECIMIENTO DE UNA ASIGNACION PRESUPUESTARIA ESPECIAL.-

ARTÍCULO 1º: Establécese una asignación presupuestaria especial de $ 15.000.000 (pesos quince millones) a la Universidad Nacional de Entre Ríos (U.N.E.R.), que se efectivizará en el curso del año 2.007, y se destinará a la construcción de edificios, aulas y laboratorios.

ARTÍCULO 2º): La Jefatura de Gabinete de Ministros, queda facultada a reasignar la partida presupuestaria pertinente al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación, con el fin estipulado en el artículo 1º.-

ARTÍCULO 3º): De forma.

Señor presidente:

Los argumentos que siguen nos fueron proporcionados a los legisladores nacionales por la Provincia de Entre Ríos por la U.N.E.R. (Universidad Nacional de Entre Ríos), prestigiosa entidad que tiene asiento en dicha provincia. El dinero solicitado en este proyecto de ley, tiene por objeto ser destinado a la concreción de los proyectos edilicios que posee la Universidad para dar respuesta a los requerimientos más urgentes de espacio e infraestructura, espacios que hoy la misma necesita para el desarrollo de sus- cada vez más numerosas- actividades de docencia, investigación y extensión.

Durante los últimos veinte años, las políticas de financiación de obras públicas para las universidades nacionales han sido escasas. También la distribución entre las universidades del sistema ha resultado desigual; algunas han recibido fuertes inversiones, lo que les ha posibilitado disponer de recursos destinados a instalaciones e infraestructura que contribuyen al desarrollo de sus actividades. Otras universidades, como la U.N.E.R., han recibido asignaciones presupuestarias insuficientes para el desarrollo de la infraestructura física, lo que afecta las condiciones de producción académica para la formación, investigación, extensión y apoyo al desarrollo local y regional.

Desde una mirada retrospectiva de la situación edilicia de esta Universidad, resulta oportuno señalar que sus principales inmuebles (Facultad de Ciencias Económicas y Trabajo Social, Cs. de la Educación de Paraná. Cs. Agropecuarias de Oro Verde., Cs. de la Administración y Cs. de la Alimentación de Concordia) pertenecían o a la Provincia de Entre Ríos o bien a la institución de las cuales dependen las unidades académicas que conformaron posteriormente nuestra Casa de Altos Estudios. En casos como el de la Facultad de Ingeniería, la inversión original estuvo a cargo de la Provincia de Entre Ríos.

Desde entonces y de manera muy fraccionada en el tiempo, se han ido desarrollando algunas ampliaciones a las referidas Facultades, entre las que podemos mencionar el edificio de la Facultad de Cs. de la Educación, en cuyo caso específico los recursos disponibles no posibilitaron ejecutar la otra parte del proyecto, equivalente en su dimensión física al edificio construido sobre calle Buenos Aires de la ciudad de Paraná.

Por otra parte, con recursos resultantes de la gestión de un presupuesto que cabe subrayar- sólo prevé asignaciones para gastos de funcionamiento (personal, gastos y servicios), fueron adquiridos los inmuebles para las Facultades de Ciencias de la Salud en Concepción del Uruguay y de Bromatología en Gualeguaychú. Los proyectos edilicios para ambas Facultades poseen un insuficiente nivel de concreción, situación que se agrava al no contar con los recursos necesarios para continuarlos.

En lo que respecta a la construcción de la Facultad de Cs. de la Salud, la primera y reciente convocatoria del “Programa de Apoyo al Desarrollo de la Infraestructura Universitaria”, permitió un avance parcial del proyecto, mientras se espera que en la próxima convocatoria se permitirá alcanzar las inversiones previstas. Con este mismo propósito se ha contratado la elaboración del proyecto de la Facultad de Trabajo Social, ya elaborado y concluido por un equipo especializado de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional del Litoral.

Ligado a esta instancia de análisis, no menos importante resulta exponer que desde esta universidad se ha apoyado en diversos ámbitos- como el Consejo Interuniversitario Nacional y el Ministerio de Educación y Cultura- los requerimientos elevados por el Congreso de la Nación a través de las Leyes de Presupuesto 1.997, Nº 24.764, Art. 30º; 1.998, Nº 24.938, Art. 20º; 1.999, Nº 25.064, Art. 35; 2.000, Nº 25.237, Art. 41º; 2.001 Nº 25.401, Art. 46º, y 2.002 Nº 25.565., Art. 25º. Se ha contribuido en este sentido, a institucionalizar los criterios de distribución de los incrementos presupuestarios a través de pautas que en común lograron objetivizar las universidades nacionales.

Desde hace unos años se ha recurrido en más de una oportunidad a estas Pautas de Distribución Presupuestaria, manteniéndose en un firme compromiso en el marco del CIN para que continúen siendo la principal referencia en los criterios de distribución presupuestaria.

Estas Pautas de Distribución Presupuestaria no contemplan entre otros, los modos de distribuir los recursos para obras públicas ni los valores de requerimientos para tal destino, sino básicamente los destinados al personal- docente, administrativo y de servicio- y a gastos de funcionamiento. No obstante ello, se ha continuado trabajando para incorporarlos en el futuro, así como también a otras variables que deben contemplarse al momento de asignar y distribuir el presupuesto.

Es oportuno comentar, además, que en vistas a que en la segunda convocatoria del “Programa de Apoyo al Desarrollo de la Infraestructura Universitaria”- financiado con recursos del presupuesto del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios- la selección de las obras a financiar estará a cargo del Ministro de Educación y Cultura, se invitó al Secretario de Políticas Universitarias a visitar las universidad. La simple visualización de la actual infraestructura edilicia y su compatibilidad con la producción académica y las actividades de relación con el medio que desde las mismas se genera, posibilitará percibir y constatar la situación actual de un modo más eficaz que abundando en una descripción escrita.

Este breve informe sobre la situación edilicia de la UNER es- sin duda- menos crítico que el escenario de escasa infraestructura en el que desarrolla cotidianamente la misión educativa. Sin embargo, y ante condiciones de trabajo desfavorables, la comunidad universitaria no abandonó nunca su invalorable aporte a la formación, la investigación, la extensión y el fortalecimiento institucional. Lo hace defendiendo, sosteniendo y promoviendo los valores que dieron origen a esta universidad nacional, y respondieron, al mismo tiempo, a las necesidades de crecimiento que la propia sociedad exige en el marco de un proyecto nacional.

La situación descripta es, entonces, resultado del insuficiente desarrollo de la infraestructura de la universidad, y requiere de manera urgente revertirla. Seguramente que acompañando estas acciones con otras políticas se contribuirá a mejorar la tarea educativa, para cumplir de este modo con los objetivos que la Nación y sus ciudadanos- a través de sus representantes- le han asignado a la universidad por medio de las normas que la obligan.

Por último hago mis las palabras del Contador Eduardo Asueta, Rector de la Universidad Nacional de Entre Ríos: “Entendemos que en el reclamo por una realidad mejor para nuestro país se necesita de la participación plural, más aún de quienes asumimos responsabilidades públicas. Creemos que es esfuerzo no será en vano si el trabajo es conjunto, obstinado y decidido”.

Por los fundamentos y razones aquí expuestos solcito a los señores y señoras diputados la aprobación del presente proyecto de Ley.