La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

1) Expresar su más enérgico repudio por el procedimiento vejatorio del Servicio de Inteligencia de Venezuela al que fueron sometidos distintos periodistas argentinos en el aeropuerto internacional de Caracas el pasado 8 de octubre del corriente año, por el que fueron demorados, retenidos sus pasaportes, interrogados, revisadas sus comunicaciones y documentos personales y secuestrado su material periodístico.

2) Instar al señor Canciller, Hector Timerman, a cursar el correspondiente reclamo diplomático a su par venezolano y solicitar las explicaciones del caso por dicho procedimiento autoritario, arbitrario y violatorio de la libertad de tránsito, la intimidad, la libertad de prensa y el derecho a la información.

Señor presidente:

Es competencia de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto "dictaminar sobre los tratados, convenciones, conferencias, congresos internacionales y demás asuntos que se refieran al mantenimiento de las relaciones de la Nación con los Estados extranjeros"

En ejercicio de la misma, y a partir de los graves hechos sucedidos en el aeropuerto de Caracas, el presente proyecto de resolución propicia dar un claro mensaje de respaldo a la libertad de tránsito, el respeto a la intimidad, la libertad de prensa y el derecho a la información a los efectos de que hechos como el que motiva el presente proyecto nunca más vuelvan a ocurrir.

El pasado 8 de octubre, distintos periodistas argentinos - Jorge Lanata y Nicolás Wiñazki, entre otros- y sus equipos de producción, que regresaban de Venezuela luego de haber cubierto las elecciones presidenciales en dicho país, fueron demorados arbitrariamente en el aeropuerto de Caracas por el Servicio de Inteligencia venezolano, quien retuvieron sus pasaportes, los interrogaron, accedieron a correspondencia y documentos privados y retuvieron su material periodístico.

Pese a la gravedad del hecho, que involucra a ciudadanos argentinos que han viajado a Venezuela a cumplir con su trabajo e informar sobre el desarrollo de las elecciones presidenciales, la Cancillería argentina se ha limitado a manifestar, a través de su Embajador en Caracas, Carlos Cheppi, que el procedimiento llevado a cabo por los servicios de inteligencia venezolanos "fue un procedimiento de rutina" y que "en ningún momento estuvo detenido", en referencia al periodista Jorge Lanata, pero luego agrega que "Habrá pasado una hora, hora y cuarto desde que lo retiene".

La contradicción en la que incurre el Funcionario, al referir que no hubo detención, para luego confirmar que hubo una "retención" por más de una hora, amerita una urgente explicación de lo sucedido.

Pero además, este tipo de aval de nuestro Gobierno a un procedimiento tan arbitrario como excesivo de un servicio de inteligencia extranjero respecto de ciudadanos argentinos, sin siquiera exigir ningún tipo de explicación diplomática que permita analizar lo sucedido y el marco legal aplicado, no solo avergüenza sino que concreta un estado de absoluta desprotección a nuestros compatriotas en el exterior que augura nuevos atropellos si no se avanza con un reclamo firme en el sentido que se propicia en el presente proyecto.

Téngase presente en este sentido que el periodista Jorge Lanata ya había sido objeto de un operativo similar a su entrada a Venezuela y fue seguramente el silencio del Gobierno argentino en aquella oportunidad lo que seguramente contribuyó a que el hecho se repitiera.

El Gobierno no puede ignorar o mantenerse al margen, sin ningún pedido formal de explicación, porque sería convalidatorio del accionar de un Gobierno extranjero que no solo conculca los derechos individuales de los ciudadanos involucrados sino el derecho de todos los argentinos en tanto configura un avasallamiento a la libertad de prensa y al derecho a la información.

Es por todo lo expuesto, y en la inteligencia de que el Gobierno argentino debe reaccionar seriamente ante este suceso, solicito a mis pares acompañen la presente iniciativa.