La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Su indignación y más enérgico repudio ante la negligencia y mala predisposición demostrada por la embajada argentina en Venezuela, luego que el periodista Jorge Lanata fuera retenido, junto con el equipo profesional de su programa "Periodismo para todos", por el Servicio de Inteligencia de la República de Venezuela.

Señor presidente:

El motivo de este proyecto de declaración es expresar nuestra indignación ante la negligencia y mala predisposición demostrada por la embajada argentina en Venezuela, luego que el periodista Jorge Lanata fuera retenido, junto con el equipo profesional de su programa "Periodismo para todos", por el Servicio de Inteligencia del régimen venezolano, a poco de abordar el avión que los traía de regreso a la Argentina.

Como es de público conocimiento, el periodista denunció que los efectivos venezolanos borraron todo el material filmado que tenía. También que intentaron procesarlo por espionaje, puesto que dio a conocer frente a las cámaras de su programa una circular donde se impartía la orden de vigilarlo mientras desempeñaba su tarea periodística en territorio venezolano. Por último, tanto Jorge Lanata como los técnicos y periodistas que lo acompañaban, habrían sido amenazados con no dejarlos retornar a la Argentina.

Frente a todo esto, era de esperar que el embajador argentino en Venezuela, Carlos Cheppi, actuara en defensa de nuestros compatriotas. Sin embargo no fue así. Por el contrario, lo declarado hasta ahora por este funcionario sólo apunta a justificar las agresiones llevadas a cabo por los agentes del Estado venezolano y hasta se permite acusar al periodista argentino y su equipo por supuestas provocaciones.

Consideramos absolutamente intolerable que, mientras un compatriota sufre una intimidación semejante y ve arruinado el resultado de su labor profesional, los encargados de protegerlo y asistirlo se ponen del lado de sus agresores. Ejercer la soberanía nacional es, entre otras cosas, que el Estado Nacional sostenga la integridad personal de cada ciudadano y defienda sus derechos a la libre circulación y al trabajo.

Por todo ello, exigimos a las autoridades diplomáticas de la Argentina una adecuada explicación de lo sucedido y reclamamos, por parte de la República Bolivariana de Venezuela, un inmediato pedido de disculpas por la angustiante situación que hicieron vivir a este grupo de trabajadores de nuestro país.