La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Que vería con agrado que el Poder Ejecutivo, a través del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), regional Mendoza, promueva e incentive la plantación de árboles de robles (Quercus sp) para obtener esta madera a futuro y recuperar la industria de la tonelería regional relacionada a la vitivinicultura, mueblería fina, industria y comercio.

Señor presidente:

Señor Presidente, la especie más resistentes del roble es la Quercus robur, su madera es una de las más preciadas y sus ejemplares pueden llegar a vivir dos mil años en su hábitat original. Esta especie se encuentra casi en extinción en el mundo y su demanda supera incluso a su propia existencia.

Su denominación vulgar es "roble de Eslavonia"; es una fagácea arbórea y su área de distribución comprende casi toda Europa desde el Atlántico a los Montes Urales. Es originario de Europa Central y Asia menor en donde forma bosques naturales en las llanuras aunque se extiende hasta los mil metros sobre el nivel del mar, por lo que podrá adaptarse fácilmente a nuestras alturas provinciales. En la península ibérica se lo encuentra por los Pirineos centrales y las montañas atlánticas.

Su madera es dura, pesada y fácilmente trabajable, especialmente porque proviene de árboles desarrollados lentamente. Posee un gran valor forestal y ornamental, es plantado aisladamente en parques y paseos siendo símbolo de fuerza, vigor y longevidad.

En la Argentina es un árbol muy cultivado pero siempre por razones ornamentales y no tanto por su madera. De hecho es común ver en el mercado "falsos" muebles de robles construidos por maderas similares. A nivel mundial por el contrario su demanda es alta aunque no así su cultivo, razón por la cual se cree que de seguir esta tendencia podría estar en pocos años en vías de extinción.

La situación mundial referida a las necesidades de reducir las emisiones de dióxido de carbono y de gases de efecto invernadero en general es crítica por lo cual se hace cada vez más necesario aumentar la forestación de nuestro entorno, promoviendo los denominados sumideros de GEI´s, El impulso a la forestación con Quercus robur es una de las formas de aportar oxígeno a nuestro medio.

La mueblería también se vería beneficiada por la alta calidad de la madera, la cual podría ser obtenida en forma directa o bien reutilizando la tonelería en desuso que comenzaría a aparecer en la provincia de Mendoza, por descarte de material de vasijas de robles usadas. La creación de áreas con robles permitiría también mejorar la calidad de chacinados como los jamones, tal como ocurre con la calidad de éstos en España y por último, sin su madera, los buenos vinos jamás llegarían a ser excelentes

La especie Querus robur es una de las especies más resistentes a la polución ambiental y no necesita grandes cuidados. Gusta de una buena iluminación asentándose sobre suelos variados. Requiere suelos profundos y frescos de PH indiferente de ácido a básico, humedad ambiente preferentemente media a alta, no requiere intervención alguna en cuanto a poda, es difícil que se vea atacado por plagas y enfermedades y su mantenimiento no tiene grandes exigencias.

Para comenzar a forestar con dicha especie, es factible utilizar las bellotas de las propias plantaciones existentes en la provincia de Mendoza, para comenzar a producir plantines y ofrecerlos a agricultores que dispongan de terrenos incultos con acceso a riego, dispuestos a promover una industria segura en unos pocos años. La demanda de plantines está cubierta pues en varias provincias argentinas existen viveros que podrían proveer los mismos al inicio del proyecto.

Sería deseable contar con la colaboración del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTA) para la prestación de asistencia técnica en cuanto al lugar adecuado para las plantaciones, período del año conveniente para su plantación, periodicidad de riego y demás condiciones para su desarrollo.

Por los motivos expuestos solicito a mis pares me acompañen en la presente iniciativa.