PROYECTO DE TP
Expediente 7022-D-2014
Sumario: SOLICITAR AL PODER EJECUTIVO NACIONAL DISPONGA REMITIR A ESTA HONORABLE CAMARA LOS ANEXOS RESERVADOS DEL ACUERDO CELEBRADO ENTRE LA REPUBLICA ARGENTINA Y LA REPUBLICA POPULAR CHINA, PARA LA INSTALACION DE UNA ESTACION ESPACIAL DE EXPLORACION LUNAR EN EL PARAJE BAJADA DEL AGRIO, PROVINCIA DEL NEUQUEN.
Fecha: 08/09/2014
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 118
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Dirigirse al Poder Ejecutivo
Nacional en los términos del art. 100 inciso 11 de la C.N. para que por
intermedio del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto; Ministerio de
Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios; Comisión Nacional de
Actividades Espaciales (CONAE) y organismos que sean competentes en la
materia, se remitan a esta Cámara de Diputados de la Nación la totalidad
de los anexos reservados concernientes al acuerdo celebrado entre la
República Argentina y la República Popular China para la instalación de
una estación espacial de exploración lunar en el paraje Bajada del Agrio,
Provincia del Neuquén.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El Senado trata en estos días el
acuerdo celebrado entre la República Argentina y la República Popular
China para la instalación de una estación espacial de exploración lunar en
el paraje Bajada del Agrio, Provincia del Neuquén. Pero mientras el
Congreso de la Nación debate el tema, excavadoras y cientos de obreros
trabajan rápidamente en la construcción de esa planta que forma parte de
uno de los más acariciados sueños de Pekín en territorio argentino.
La decisión de la presidente
Cristina F. de Kirchner y su par chino, Xi Jinping, de avanzar con la
estación espacial por encima de cualquier aval parlamentario no es el
único dato llamativo del proyecto. Los "anexos reservados" que contienen
la letra chica para el desarrollo final de la estación espacial que se
firmaron con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) están
bajo siete llaves y empiezan a despertar sospechas. En medio de ese
hermetismo, sólo se dio a conocer una parte del texto del acuerdo marco
para su aprobación en el Congreso.
Causa preocupación esta
cuestión sensible. Existe la posibilidad de que la estación espacial china,
instalada en un predio de 200 hectáreas, en el futuro inmediato sea usada
por Pekín con fines militares.
Hay más dudas que encierra el
acuerdo que aprobó la mayoría oficialista en la Comisión de Relaciones
Exteriores del Senado y que se tratará en el recinto el próximo 10 de
setiembre. Según los ocho artículos del acuerdo marco, se prevé una
exención impositiva total para los chinos por los 50 años que durará la
concesión de tierras; la Argentina "no interrumpirá las actividades
normales" que se realicen en la estación espacial; los empleados de China
que trabajen en Neuquén se regirán bajo la legislación de Pekín y el
gobierno chino "mantendrá indemne a la Argentina de toda obligación que
surgiere de reclamos de cualquier naturaleza".
Los obreros que trabajan en
Neuquén bajo el auspicio del gobernador Jorge Sapag esperan terminar la
estación e instalar la antena espacial en febrero de 2015. Así lo dijo el
secretario de Gestión Pública de Neuquén, Rodolfo Laffitte.
En el Gobierno respondieron al
diario La Nación que las obras en marcha forman parte de la autarquía
que tiene Neuquén para firmar acuerdos con otros países y que el trabajo
actual sólo forma parte de la "construcción civil" de la planta. El
equipamiento espacial llegará luego, con los empleados chinos.
La Comisión Nacional de
Actividad Espacial (Conae) y la Agencia Nacional China de Lanzamiento,
Seguimiento y Control General de Satélites (CLTC) trabajarán en conjunto
en Neuquén una vez que se instale la estación espacial. Pero, según
establece el acuerdo, la Argentina sólo podrá utilizar 10% de tiempo del
trabajo de la estación, es decir, "2 horas 40 minutos por día para
actividades científicas y tecnológicas". Laffitte aclaró que el momento de
empleo de este tiempo dependerá del uso de la estación y los vuelos que
tenga China al espacio profundo.
Tanto la letra chica del acuerdo
de la Conae con CLTC como el pacto del gobierno de Neuquén con China
figuran en anexos reservados que no se hicieron públicos en el
Senado.
Fuentes calificadas de las
Fuerzas Armadas dijeron que hay mucha preocupación por el eventual uso
militar de la estación china en territorio argentino y no descartan que
desde las antenas que se instalarán en Neuquén puedan realizarse tareas
de seguimiento de misiles. En el Ministerio de Defensa explicaron que
nunca fueron consultados por este proyecto con China.
La Conae descartó
tajantemente la posibilidad de un uso militar de la estación espacial. El
secretario general de la Conae, Félix Menicocci, se presentó el miércoles
pasado en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado para explicar
los alcances del acuerdo firmado entre los dos países. Allí negó que vaya a
estar implicado personal militar chino en el proyecto. Algo similar dijeron a
La Nación fuentes de la embajada de China en Buenos Aires.
Para el especialista en temas
internacionales Felipe de la Balze, "la estación satelital en Neuquén, en
particular la mencionada red de telemetría, seguimiento y control, es una
tecnología de uso dual civil y militar. Tiene además de sus usos civiles,
usos militares de enorme relevancia y que podrían implicar a nuestro país
en un futuro conflicto militar entre los Estados Unidos y China".
El senador Fernando Solanas
(UNEN), señaló que: "El acuerdo no especifica si el personal que empleará
China será militar o no. Pero en caso de ser militares, el ingreso al país
debe estar sujeto al régimen especial de la ley 25.880 de ingreso de
tropas", dijo Solanas.
El legislador de
UNEN evaluó que la tecnología utilizada es "sensible y de uso dual,
civil/militar, ya que China tiene integrados estos programas y se utiliza
también para el tracking [seguimiento] de la actividad aeroespacial y
misilística". Además, dijo que están comprobados los lazos de CLTC con
los organismos militares chinos, con el Centro Nacional de Control y
Seguimiento Misilístico del Espacio y, lo más destacado, el CLTC depende
específicamente del Departamento General de Armamento y de la
Comisión Central Militar del Ejército Popular de Liberación de China.
También se supo que el
director de la CLTC sería a la vez jefe militar del Departamento de
Armamento General del Ejército chino.
A su vez, el senador Juan
Carlos Marino (UCR) dijo que el proyecto que se construye en Neuquén
será "una verdadera cesión de soberanía de territorio argentino a China".
El lugar sería custodiado en el futuro por la Gendarmería y no podrá
ingresar cualquiera.
En el caso de que haya
personal militar chino en la estación de Bajada del Agrio y haya un
proyecto militar detrás, las objeciones por las exenciones impositivas por
50 años, la legislación laboral con la que se trabajará allí y la participación
de la Conae en el proyecto apenas pasará a ser una pequeña
anécdota.
Uno de los primeros en
expresar su preocupación por la obra fue el diplomático y ex vicecanciller
argentino Roberto García Moritan, quien escribió una columna para
Infobae en la que señaló que la construcción de una estación de monitoreo
en la Argentina tiene "cierta complejidad geoestratégica".
"Por las características técnicas
de la antena de recepción y los instrumentos operativos, (el observatorio
espacial) tendría otros eventuales alcances que le permitiría un uso dual,
civil y militar", advirtió García Moritan.
"La estación, con antenas que
permitirían una cobertura y visibilidad casi completa de la Tierra, sería a
la vez un centro potencial de escaneo de comunicaciones, rastreo y
detección de satélites, control de lanzamientos a escala global incluso, en
caso de necesidad, de misiles, drones y otras actividades militares
semejantes", fundamentó el diplomático. "Estas circunstancias, entre
otras, pondrían a la Argentina en teoría en un complejo mapa de riesgos
hipotéticos".
El ex vicencanciller consideró
que "no se trata de temas menores ya que la presencia de una estación
estratégica de estas características, por sus efectos, hace a la defensa
nacional e incluso a orientaciones de política exterior".
En resumen, La empresa china
CLTC confirmó este martes que la estación para observación del espacio
lejano que construye en la provincia de Neuquén, con una inversión
cercana a los 300 millones de dólares, estará en funcionamiento en 2016.
Y anunció que a fin de año comenzará la construcción de las antenas.
Esta obra generó la reacción de
diversos sectores que advierten de la "pérdida de soberanía" que sufrirá la
Argentina, porque -aseguran- entregará una parte de su territorio para que
el gobierno chino haga y deshaga a su antojo, sin un control riguroso de
las autoridades locales.
La estación para la observación
del espacio lejano, ubicada en la localidad neuquina de Bajada del Agrio,
tiene por objetivo "realizar tareas de monitoreo, control y bajada de datos
en el marco del programa chino de misiones para la exploración de la Luna
y el espacio", destacó el Ministerio de Planificación Federal.
Por todo lo expuesto y ante la
gravedad de la cuestión que pareciera implicar cesión de soberanía o un
oscuro proyecto militar foráneo, que podrían involucrar a nuestro país en
un futuro conflicto armado entre los Estados Unidos y China solicito el
acompañamiento de mis pares con su voto a fin de aprobar esta
iniciativa.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
ASSEFF, ALBERTO | BUENOS AIRES | UNIR |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
RELACIONES EXTERIORES Y CULTO (Primera Competencia) |