PROYECTO DE TP
Expediente 7017-D-2014
Sumario: RENDIR HOMENAJE AL BRIGADIER GENERAL DE LA CONFEDERACION ARGENTINA DON NAZARIO BENAVIDEZ, GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE SAN JUAN ENTRE LOS AÑOS 1836 Y 1857.
Fecha: 08/09/2014
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 118
La Cámara de Diputados de la Nación
DECLARA:
Rendir homenaje al Brigadier
General de la Confederación Argentina don Nazario Benavídez, gobernador de
la Provincia de San Juan entre los años 1836 y1857. Gobernante que en
tiempos de lucha entre argentinos convirtió a su provincia en un ejemplo de
pacificación y digna defensa de su autonomía, haciendo de su lealtad una
virtud. El gobernador Benavídez acompañó en las horas más difíciles a Juan
Manuel de Rosas, entonces depositario de la suprema autoridad de la
Confederación Argentina.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El proyecto
de declaración elevado a esta Honorable Cámara tiene como finalidad
reconocer a un gobernante que presidió durante más de dos décadas
los destinos de la provincia de San Juan. Tras los años difíciles de la
guerra civil y la agresión anglofrancesa, Nazario Benavídez condujo a
su provincia hasta las puertas de la organización nacional.
En la
tradición del federalismo de las provincias de Cuyo su lugar ha sido
menos visible. Sin embargo, Benavídez no fue menos importante para
el pueblo sanjuanino de lo que fueron otros co-provincianos ilustres
incluso en facciones políticas opuestas.
Hay que
decir que la historia oficial fue mezquina en reconocer la gestión
ordenada y tolerante de este gobernador defensor decidido de la
autonomía provincial. Benavídez fue también una genuina expresión
de su tierra: el futuro caudillo trabajó primero como agricultor desde
muy joven y luego como arriero conoció cada paso cordillerano. En el
año 1826 acompañó a Juan Facundo Quiroga en su campaña contra el
poder unitario de Lamadrid. Mencionado por su desempeño en la
batalla del Rincón de Valladares el 6 de julio de 1827. Benavídez
permaneció al lado del jefe riojano hasta el año 1833. Con el grado de
teniente coronel participó en la célebre batalla de la Ciudadela y más
tarde en la incursión a la frontera de los ranqueles.
El 8 de
febrero de 1836 la Sala de Representantes de San Juan lo designó
gobernador interino y el 8 de mayo, gobernador propietario cargo que
ejerció hasta el año 1855. Su pueblo lo acogió con beneplácito tras el
período de anarquía vivido en la provincia.
En los
años aciagos de 1840 y 1841 cuando la integridad territorial de la
Nación se encontraba en grave riesgo, fuerza unitarias de la Coalición
del Norte cayeron sobre las provincias federales cuyanas. La invasión a
San Juan encontró a Benavídez en sólida alianza con el gobernador
Aldao de Mendoza.
El
federalismo resistió la acción de los invasores que fue particularmente
odiosa y violenta en el caso de San Juan y derrotó definitivamente a la
Coalición en la batalla decisiva de Rodeo del Medio, el 24 de septiembre
de 1841.
Siguieron años de perturbación por la
insistencia de Peñaloza en volcar la situación en La Rioja apelando para
ello a sus montoneras. Empero como gobernador leal a la
Confederación Argentina no le cupo a Benavídez sino la tarea
estabilizar la región. En el año 1842 y nuevamente en 1843 en una
sucesión de encuentros desafortunados Peñaloza fue completamente
derrotado.
El 4 de
diciembre de 1846 Benavídez ordenó un censo rural-urbano que nos
permite conocer con precisión el perfil agrícola y ganadero de San
Juan. En enero de 1847 también se normalizó el comercio cordillerano
con Chile clara señal de una nueva fase de prosperidad y pacificación
para San Juan.
Pese a los
desencuentros Benavídez protegió en 1845 a Peñaloza cuando regresó
del exilio. Ese mismo año Sarmiento reconoció en carta al general Paz
que el sanjuanino tenía un elevado prestigio "en todas las provincias de
la costa de los Andes, y domina a Mendoza y La Rioja".
En vísperas
de la batalla de Caseros Juan Manuel de Rosas lo designó Comandante
Militar del Oeste y cuando se produjo la decisión adversa en Caseros
quedó claro a gobernador de San Juan que una época cerraba sus
puertas. Colaboró con Justo José de Urquiza en los comienzos de la
organización nacional. Con otros gobernadores y caudillos fue
Benavidez uno de los signatarios del Acuerdo de San Nicolás.
La prensa
porteña, basta con leer La Tribuna y El Nacional y los liberales de
influencia, difundieron la existencia de una conspiración de Benavídez y
Peñaloza. Pocos días antes de su muerte el Vicepresidente Salvador
María del Carril denunció en la prensa liberal de Buenos Aires, la
existencia de esa conspiración. Todos temían lo peor. Y lo peor ocurrió.
El
brigadier general Nazario Benavídez sometido a prisión un mes antes
fue asesinado en la noche del 22 de octubre de 1858.
La
memoria del federalismo argentino registra lealtades y desencuentros.
Pero, sin duda, inscribe la trayectoria de sus caudillos y gobernadores
como la primera escuela de nuestra democracia popular y nacional.
Por todo lo
expuesto, solicito a nuestros pares la aprobación de la presente
iniciativa.
Firmante | Distrito | Bloque |
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VILLA, JOSE ANTONIO | SAN JUAN | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
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LABOR PARLAMENTARIA (Primera Competencia) |