La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Que vería con agrado que el Poder Ejecutivo inicie los trámites de financiamiento correspondientes para la concreción del Proyecto identificado en la cartera de la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA) como Ferrocarril de Zapala a Las Lajas - Límite con Chile, perteneciente al Eje del Sur, Grupo G1, y cuya inversión se encuentra señalada como de carácter público con un monto de U$S 70.000.000., de conformidad a la ficha del Proyecto elaborada para el corriente año por la Coordinación Nacional Argentina de IIRSA que ejerce la Subsecretaría de Planificación Territorial del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.-

Señor presidente:

El presente Proyecto de Resolución tiene por objeto manifestar al Poder Ejecutivo Nacional que vería con agrado que impartiera instrucciones para el inicio de los trámites de financiamiento correspondientes para la concreción del Proyecto identificado en la cartera de la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA) como Ferrocarril de Zapala a Las Lajas - Límite con Chile, perteneciente al Eje del Sur, Grupo G1, y cuya inversión se encuentra señalada como de carácter público con un monto de U$S 70.000.000., de conformidad a la ficha del Proyecto elaborada para el corriente año por la Coordinación Nacional Argentina de IIRSA que ejerce la Subsecretaría de Planificación Territorial del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.

Como ya expresáramos en anteriores presentaciones, la obra en cuestión forma parte del Corredor Bioceánico Trasandino del Sur que unirá, por vía multimodal, al puerto de Bahía Blanca (el mayor puerto de aguas profundas del país, con muelles con capacidad para operar todo tipo de buques y mercaderías) con su par de Talcahuano, en el sur chileno, resultando en un ambicioso plan que contempla la exportación a Chile, y por el Pacífico a Oriente, Oceanía, la costa Oeste de Estados Unidos, y otros países con costas en el Océano Pacífico.

Está previsto que, cuando concluya el enlace ferroviario, el mismo cruzará Los Andes a 1.776 m. sobre el nivel del mar, asegurando la continuidad del tránsito durante todo el año, pues no estará expuesto a los estragos de la naturaleza como en los pasos de Las Cuevas, Mendoza, que se encuentra a 3.500 m. sobre el nivel del mar, y Socompa, Salta, a Antofagasta, Chile, que está a 4.300 m. sobre el nivel del mar.

Lamentablemente tanto los avatares políticos y económicos-financieros como la especulación sectorial y política han paralizado la conclusión de esta obra, que lleva 113 años de gestión, y que con los avances de la ciencia y la tecnología ha dejado de ser un emprendimiento riesgoso o inalcanzable.

Hoy sólo faltan 110 kilómetros del lado argentino y 80 kilómetros del lado chileno para que esa vieja aspiración se concrete. Como se reconoce en documentos oficiales, se necesitan tan sólo 70 millones de dólares para que Argentina llegue a la frontera, y por ello estamos impulsando se arriben a acuerdos concretos para finalizar esta obra.

El acceso de la República Argentina al océano Pacífico producirá un efecto multiplicador para toda la región Patagónica y posibilitará la complementación socioeconómica argentino- chilena. Asimismo, eliminará falsos fletes generados por la navegación por zona de alto riesgo (Estrecho de Magallanes) y evitará trasbordes inútiles por el empalme a la red ferroviaria chilena de trocha similar. La construcción del tramo faltante del Ferrocarril Trasandino del Sur revitalizará el actual trazado del Ferrocarril Gral. Roca, produciendo el desenvolvimiento armónico y constante del eje Bahía Blanca - Puerto Talcahuano (1.200 km.), a través del fenómeno del trabajo que la concreción de esta nueva integración física con la república de Chile habrá de generar al movilizar nuestras inmensurables riquezas yacentes en la superficie y en las entrañas de nuestra Patagonia.

La tan anhelada concreción del Ferrocarril Trasandino del Sur resultará un hito trascendente en la integración nacional y continental hispanoamericana, constituyendo lazos permanentes entre puebles con similares culturas, orígenes, folklore, anhelo de progreso y desarrollo. Debemos reivindicar como derecho inalienable del sur argentino la conclusión de esta obra fundamental para el desarrollo integrado de la región Patagónica.

Asimismo, su ejecución dará nacimiento a nuevos asentamientos humanos, proporcionando fuentes de trabajo a poblaciones hoy marginadas, revitalizando la vida rural y urbana de las regiones a servir.

Debe entenderse esta obra como un emprendimiento integrador del pueblo argentino en su conjunto, unido en pos de la realización de las grandes causas, dando real y concreta materialización a nuestra declamada vocación federalista y de integración latinoamericana.

La obra mantiene actualidad porque continúan vigentes las causas que la generaron, acrecentadas por el crecimiento vegetativo y consecuentemente por la mayor necesidad de producir toda clase de bienes para proveerlos a un creciente mercado consumidor, posibilitando un intercambio comercial con Chile, y a través del Pacífico a Oriente, Oceanía, la costa Oeste de Estados Unidos, y otros países con costas en el Océano Pacífico.

Las obras proyectadas a realizarse tanto del lado chileno como así también del lado Argentino, en la Zona Fronteriza del Paso Pino Hachado, habrán de jerarquizar las perspectivas de un Paso Internacional de primera línea, pasando a ser éste, por su infraestructura vial y tecnología a incorporar, el más actualizado y ágil de nuestro país.

Si bien el proyecto y ejecución de las mencionadas obras ha sido delegado por parte de la Nación en la Provincia de Neuquén, es innegable el interés nacional en la concreción de esta obra, ya que el fomento del intercambio comercial y la reducción del tiempo de transporte y costos por el Trasandino del Sur, oscilante entre un 25 y un 35% según el destino y punto de partida, por tonelada y por pasajero, no sólo significarán un real incentivo para la movilización general de la producción de las zonas centro sureña, recursos y radicación de capitales, sino que será, también, una de las formas más importantes de recuperación a corto plazo de las inversiones que la obra demande.

Debemos tener en cuenta, también, los ahorros y por consiguiente las ventajas que el transporte ferroviario tiene por sobre el transporte carretero en materia de accidentabilidad, consumo de energía, y en lo que se refiere al medio ambiente y los cambios que pudieran producirse sobre el mismo.

De esta manera el Corredor Bioceánico Trasandino del Sur pretende convertirse y consolidarse en una base de articulación y exportación del MERCOSUR, constituyéndose en parte de la infraestructura soporte del sistema de servicios comerciales, de transportes y comunicaciones de esta porción del cono sur.

Restan, por último, destacar las proyecciones sociales y culturales que surgirán de la ejecución integral del Proyecto Ferroviario Portuario, así como el fomento de la actividad turística con perspectivas insospechadas habida cuenta de las bellezas naturales del sur argentino.

Nos parece de suma importancia la información que nos brinda la Coordinación Argentina de la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA) en cuanto a que el financiamiento de la obra será público, a cargo del Tesoro Nacional y por un monto de inversión de U$S 70.000.000 (ver página Web IIRSA, ficha de proyecto Ferrocarril de Zapala a Las Lajas - Límite con Chile, información al 15/05/2010 (1) ), que coincide con lo que restaría para completar la obra del lado argentino.

Lamentablemente el trámite de financiamiento no estaría iniciado, y por ello nos permitimos presentar el presente Proyecto de Resolución, solicitando a las Sras. Diputadas y Sres. Diputados acompañen en su aprobación.-