La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo que, a través de la autoridad correspondiente, disponga implementar medidas de prevención de incendios forestales a través del uso energético de la biomasa remanente como energía renovable autóctona proveniente de la limpieza de bosques, de acuerdo a lo establecido en el artículo 5º de la Ley 25.080 de Inversiones para Bosques Cultivados.

Señor presidente:

El pasado 4 de diciembre de 2012, en San Salvador de Jujuy se llevó a cabo la presentación del Proyecto sobre Fortalecimiento de la Gobernabilidad para la Protección de la Biodiversidad a través de la Formulación e Implementación de la Estrategia Nacional sobre Especies Exóticas Invasoras (ENEEI).

En dicho evento se desarrolló el Taller Regional NOA- (Catamarca, Jujuy, Salta, La Rioja, Santiago del Estero y Tucumán)- al que asistieron treinta y un funcionarios representando a organismos y reparticiones públicas de jurisdicción nacional y provincial, a universidades nacionales y grupos de investigación del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), a ONGs conservacionistas y a pueblos originarios.

Los participantes mostraron una particular preocupación por los bosques implantados con la especie Pinus ssp. (pinos), destacando su impacto en la intensidad y frecuencia de los incendios y la dificultad de su control que requiere la coordinación entre jurisdicciones diversas.

Efectivamente, las plantaciones de pino sin necesarios estudios de impacto ambiental y un adecuado manejo predial implican un alto riesgo de incendios, correspondiéndole a la autoridad provincial controlar la implementación de planes de manejo forestales apropiados.

Precisamente el artículo 5º de la Ley 25.080 de Inversiones para Bosques Cultivados establece que: "Los bosques deberán desarrollarse mediante el uso de prácticas enmarcadas en criterios de sustentabilidad de los recursos naturales renovables.

Todo emprendimiento forestal o foresto-industrial, para ser contemplado dentro del presente régimen, deberá incluir un estudio de impacto ambiental, y adoptar las medidas adecuadas que aseguren la máxima protección forestal, las que serán determinadas por la Autoridad de Aplicación, quien a su vez anualmente evaluará estos aspectos con la Secretaría de Recursos Naturales y Desarrollo Sustentable, con el objetivo de asegurar el uso racional de los recursos.

La Autoridad de Aplicación y las provincias que adhieran a la presente ley, acordarán las medidas adecuadas, a los efectos del estudio de impacto ambiental, cuando se trate de inversiones de poco monto o de extensiones forestales de pequeña magnitud.

A los efectos del párrafo anterior se considerará inversión de poco monto o extensiones forestales de pequeña magnitud, a aquellos proyectos que no superen las cien hectáreas."

Durante el mencionado Taller se consideró también que más allá del impacto ambiental de las especies invasoras sobre componentes específicos de la biodiversidad nativa, algunas de ellas tienen la capacidad de modificar procesos ecológicos completos, alterando la frecuencia e intensidad de los incendios, agotando los depósitos de agua subterránea, intensificando procesos de erosión o aumentando la concentración de sales en el suelo. Estas especies se comportan como "ingenieros de ecosistemas" y su expansión puede condicionar la conservación de ecosistemas completos, así como la prestación de los servicios ecológicos que de ellos dependen y el mantenimiento de distintas actividades económicas.

Los efectos de las especies exóticas no se limitan solamente a su impacto sobre la biodiversidad, sino que también son significativos a nivel de las economías regionales y su recuperación luego de una emergencia ambiental derivada de los incendios. Por ello, el establecimiento de sistemas de vigilancia que eviten la introducción accidental de especies, así como el desarrollo de protocolos de análisis de riesgo para evaluar cuidadosamente cualquier iniciativa de introducción deliberada, han sido identificados como las acciones de mayor efectividad para enfrentar el desafío de diversas especies exóticas.

A medida que el proceso de irrupción de las mismas avanza y se incrementa la abundancia y el área de distribución, el costo de las acciones de control también crece y las oportunidades de actuar con efectividad se reducen. Es por eso que se requieren mecanismos que permitan detectar la dimensión de plantaciones exóticas en sus estadios iniciales e implementar medidas de manejo que prevengan incendios. Complementariamente, para el caso de especies que ya se encuentran ampliamente distribuidas, se requieren herramientas que permitan priorizar los casos que merecen atención más urgente, sobre la base de su impacto y de la factibilidad de implementar medidas efectivas de contención, control o erradicación, y mecanismos de implementación efectiva de medidas de control.

El pasado 5 de agosto del corriente, el diario El País de España publicó la opinión del expresidente del gobierno español Felipe González, donde afirmaba que: "es posible hacer que nuestros bosques sean mucho más resistentes al fuego, gestionándolos con criterios racionales y aprovechando sus posibilidades productivas de manera sostenible, con la biomasa como primer recurso a emplear para la producción de energía."

Tras explicar que el abandono del medio rural provoca que el matorral y otras especies arbustivas colonicen antiguos espacios cultivados en medio del bosque, facilitando el avance del fuego, Felipe González aseveró que: "ordenar el monte, gestionarlo, aprovecharlo de manera sostenible y aplicar los medios tecnológicos disponibles son los mejores recursos que tenemos para disminuir la amenaza de los incendios" agregando; "Hay millones de toneladas de biomasa en nuestros montes, justo las que incrementan, por su falta de aprovechamiento, el riesgo de incendios devastadores. Si en lugar de quemarse en el monte poniendo en peligro patrimonios y vidas se utilizan para la producción de energía eléctrica, tendremos una solución donde antes había un grave problema".

Así, el expresidente socialista defendió la ordenación y aprovechamiento de la masa forestal y la utilización de la biomasa como energía porque permitiría, además, crear y mantener numerosos puestos de trabajo.

Este interesante aspecto resalta la necesidad de un correcto manejo de las explotaciones forestales cultivadas, sin el que las jurisdicciones competentes se exponen a destinar anualmente ingentes cantidades de dinero para una adecuada gestión forestal, la que debería financiarse con su propia rentabilidad ya que existe un mercado para la biomasa e inversores dispuestos a ponerla en valor.

Un elemento más que el expresidente González considera imprescindible es utilizar los equipos de alta tecnología aplicada a la detección de incendios y la simulación de su evolución sobre el terreno para hacer frente a los incendios de manera eficaz.

Por las razones expuestas, señor Presidente, y por considerar necesario incentivar la limpieza sustentable del monte que minimice los riesgos de incendios y se derive la biomasa remanente como recurso energético renovable, solicito el acompañamiento de mis pares para la aprobación del presente proyecto.