La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar su más enérgico repudio por la agresión padecida por el periodista Miguel Reyes, de la provincia de Salta, durante el desempeño de su tarea periodística en el recinto municipal del Concejo Deliberante de la ciudad Rosario de Lerma, en el mes de agosto de 2010.

Señor presidente:

En oportunidad de cubrir una nota periodística en la en el recinto municipal del Concejo Deliberante de la ciudad Rosario de Lerma, de la provincia de Salta, el periodista Miguel Reyes habría sido agredido físicamente por el señor Marcelo Guaymás.

Frente a este reiterado hecho de violencia, diversas organizaciones se hicieron eco de la situación, solidarizándose con el periodista, en tal sentido el Sindicato de Prensa de Salta (SIPRENSAL), expresó: "....insistimos, que en lo que va del año, los y las periodistas fuimos víctimas de acusaciones, atropellos, golpes, denuncias y persecuciones; mientras cumplíamos con nuestro deber, el cual no solo padece la tortura de no ser reconocido bajo las estipulaciones legales y laborales vigentes, sino que además está vulnerado por estas prácticas que pertenecen a la época más oscura de nuestra historia reciente."

Por su parte, la filial de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa en la provincia de Salta (FATPREN), difundió comunicado de repudio, manifestando que: "....No podemos ejercer nuestra profesión en un entorno de corrupción, violencia y pobreza, como el que impera en la provincia de Salta, toda vez que los periodistas debemos luchar por ser dignificados como trabajadores y trabajadoras, dado que nos encontramos sometidos al acoso laboral, al tráfico de influencias, a los despidos sin causa y a estos constantes atropellos por quienes de un modo cobarde se amparan en la función pública o se arrogan padrinazgos políticos. Exigimos que las instituciones de gobierno se comprometan de modo fehaciente con el cumplimiento de las condenas a quienes cometen estos hechos, como así también con el cumplimiento de las leyes laborales y las condiciones que aseguren el respeto por nuestros derechos humanos."

Consideramos que ésta es una muestra más de la intolerancia que impera en nuestro país contra los hombres y mujeres de prensa. El periodismo es un servicio para la comunidad, por lo que la labor de los periodistas debe ser respetada en todos los ámbitos.

Las agresiones contra los periodistas, en todo el país, se han concretado con acciones de diversa índole, cuyo único objetivo es acallar las voces de la prensa. Esperamos que estos hechos no vuelvan a reiterarse. Por nuestra parte, continuaremos luchando por la libertad de expresión y por la libertad de prensa, porque son los pilares fundamentales en toda Democracia.

Este año Periodistas de todo el país han sido objeto de agresiones de distinta índole, tales como a la periodista Adela Gómez, le incendiaron el auto en la puerta de su domicilio en Santa Cruz, al periodista Facundo Pastor lo agredió la Policía Federal, a Mónica Gutiérrez le aflojaron las ruedas del auto, a Omar Rulli le levantaron su programa del aire sin explicaciones, la periodista Maria Rosa Leico en Mendoza, Gustavo Torres de Chaco, Jaime Barrera y Rolando Díaz en Salta. También, reconocidos periodistas fueron escrachados a través de afiches anónimos, Fernando Bravo fue insultado durante una manifestación, y ahora el periodista Miguel Reyes.

Es sabido que existen en nuestro país intereses muy claros en contra de la actuación del periodismo sin condicionamientos, y sabido es que existen sectores decididos a coartar, presionar y condicionar al periodismo comprometido con brindar la información tal cual se produce, en tanto es el estado el mayor responsable de garantizar en nuestro país la libertad de prensa y expresión y a esa tarea se debe abocar de inmediato.

El Preámbulo de la Declaración de Chapultepec, sostiene: "Solo mediante la libre expresión y circulación de ideas, la búsqueda y difusión de informaciones, la posibilidad de indagar y cuestionar, de exponer y reaccionar, de coincidir y discrepar, de dialogar y confrontar, de publicar y transmitir, es posible mantener una sociedad libre. Solo mediante la práctica de estos principios será posible garantizar a los ciudadanos y grupos su derecho a recibir información imparcial y oportuna."

Solicitamos a las autoridades correspondientes, que garanticen a los periodistas que cubren el juicio a los represores de la Dictadura puedan desarrollar su tarea sin ser agredidos, por ninguno de los asistentes.

Por lo expuesto, solicitamos a nuestros pares nos acompañen en éste proyecto.