La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Declarar de Interés de esta H Cámara de Diputados de la Nación la "Reserva Geológica, Paleontológica y Arqueológica Provincial "Pehuen-Có - Monte Hermoso" creada por ley 13.394 de la Provincia de Buenos Aires.

Señor presidente:

El presente Proyecto de Resolución tiene como primer objetivo destacar la importancia científica y cultural de la "Reserva Geológica, Paleontológica y Arqueológica Provincial "Pehuen-có - Monte Hermoso" declarada por Ley Provincial N° 13394, por entender que dicho ambiente natural y cultural se encuentra amenazado por la acción antropogénica y climatológica y necesita una presencia activa del estado nacional para resguardar sus singularidades naturales y los elementos fósiles y arqueológicos que se encuentran en su territorio.

La Reserva es un yacimiento paleo-icnológico ubicado a 2.500 metros al Este de la localidad de Pehuen-Co que se extiende hasta la costa de la localidad de Monte Hermoso. Las huellas fósiles de 12.000 años de antigüedad, están impresas en la plataforma de abrasión de la playa, en las capas arcillo-limosas que se hallan cubiertas parcialmente por las altas mareas. Fue descubierto en octubre de 1986, luego de un fuerte temporal.

Los yacimientos son particularmente valiosos para obtener datos acerca de las condiciones paleoambientales del pasado geológico, ya que constituyen un testimonio in situ de la locomoción y actividades que desplegaron animales del Pleistoceno Tardío, entre ellos megaterio, gliptodonte, toxodon, macrauquenia. El sector con rastrilladas, es decir, sucesión de tres o más huellas asignadas a un mismo organismo, posee una extensión aproximada de 2.500 metros paralela a la línea de costa reconociéndose las siguientes unidades de estudio:

Playa del Barco es una unidad de unas.100. ha de superficie, presenta un conjunto de fósiles representativos de la gran fauna extinta del Pleistoceno representada por restos pertenecientes a integrantes de la fauna autóctona sudamericana como los grandes perezosos de los géneros Megatherium, Scelidotherium, Lestodon, Glossotherium y Mylodon, los gliptodontes de los géneros Glyptodon, Doedicurus y Panochthus, y los ungulados Macrauchenia y Toxodon. Además restos de mastodontes, caballo, tigre dientes de sable y ciervos. Está ubicada a unos 1.000 metros al oeste del centro de la localidad de Pehuen Co, en el Area I de la Reserva Natural Provincial, cuyos límites son: la isobata de cinco metros al sur, el espaldón de playa Norte, el meridiano 61º 34' 30" W, al Este y el meridiano 61º 39' W, al Oeste. Es la más occidental de las unidades consideradas en la presente propuesta y se sitúa en el Partido de Coronel de Marina L. Rosales.

Yacimiento Paleoicnológico de Pehuen Co comprende una superficie de unas 73 ha y en él se conservan las huellas de caminatas de aquellas especies que vivieron hace unos 12.000 años, durante el Pleistoceno Tardío, en los alrededores de lagunas temporarias. Está ubicado a unos 1000 metros al este del centro de la localidad de Pehuén Co en el partido de Coronel de Marina L. Rosales, dentro del Area II de la Reserva Natural Provincial, cuyos límites son, la isobata de cinco metros al Sur, el espaldón de playa al norte, el meridiano 61º 27' 30" W, al Este y el meridiano 61º 32' 30" W, al Oeste. Se registran hasta el momento cerca de 100 rastrilladas, numerosas "icnitas" aisladas y pisaderos pertenecientes a diferentes mamíferos y aves. Las pisadas de Megatherium , evidencian en la mayoría de los casos una marcha bípeda. Otro detalle interesante es la presencia, en las paredes internas de algunas huellas, de trazas lineales y paralelas que han sido interpretadas como impresiones de pelaje (Manera de Bianco y otros, 2005).

Además de las huellas de Megatherium, en dicho yacimiento se han registrado las de otros mamíferos extinguidos; son bastante frecuentes y muy características las asignables a Macrauchenia, ya que coinciden con la forma de los miembros de tres dedos y almohadilla plantar de este peculiar integrante de la fauna pleistocena de la región pampeana. También se observan huellas de mastodontes (elefantes extinguidos), osos y caballos. En cuanto a mamíferos que aún viven en la actualidad, se ha registrado la presencia de huellas pertenecientes a ciervos, guanacos, pumas, carnívoros pequeños como zorros o gatos monteses y maras. Es interesante destacar que en los casos en que se observaron huellas de puma, estaban asociadas con icnitas de guanaco, evidencias excepcionales de una cacería acaecida hace 12.000 años.

Otros animales que imprimieron sus pisadas en aquel fango continúa con la mención de innumerables aves, principalmente acuáticas, como los flamencos, distintas especies de la familia Anatidae, que incluye cisnes, patos, gansos y cauquenes, además de teros, chorlos y ñandúes. Esta unidad se destaca por la cantidad y calidad de las pisadas y por el tipo de asociación faunística que ellas representan. Las huellas nos cuentan de una paleocomunidad de mamíferos y aves integrada por una gran diversidad de especies que en unos pocos miles de años fue diezmada. Muchos de esos animales se extinguieron, otros no viven más en la región, pero el testimonio de su presencia quedó en el barro que se convirtió en roca. La cantidad y tipo de estas huellas, como toda la otra información asociada que de ellas se infiere, hacen que este yacimiento sea único en el mundo.

Monte Hermoso 1 contiene centenares de pisadas de niños, adolescentes, de hombres y de mujeres realizando actividades cotidianas en los alrededores de una laguna entre médanos muy cercanos al mar. Los afloramientos se extienden de manera interrumpida por 1100 m a lo largo de la playa donde se pueden detectar dos sectores:

Sector Este

Se relevaron 438 m2 donde se registraron 472 pisadas humanas, 35 huellas de ave y 2 de artiodáctilo. Sobre la base de análisis estadísticos se ha propuesto que las huellas fueron producidas por niños, jóvenes o mujeres que deambulaban por la playa lacustre en un lugar cercano al campamento residencial del grupo.

Sector Oeste

Se relevó un área total de 353 m2, allí se registraron pisadas de adultos con dirección SE-NO, lo que indica una senda de tránsito. En el área excavada se recuperaron restos óseos de otáridos, guanaco, corvina, caracoles marinos, y cáscara de huevo de ñandú. En este sector del sitio se han hallado artefactos de madera y piedra en muy baja densidad.

Además de estas evidencias se cuenta con restos humanos de dos individuos adultos (fragmentos de cráneo y partes de esqueleto apendicular) removidos por la erosión marina en la base de los médanos. Los estudios hechos sobre isótopos estables muestran una dieta basada principalmente en recursos marinos, información novedosa para la región.

La Olla 1, 2 y 4, registra las actividades de despostamiento de presas, así como un conjunto único de artefactos de madera en excelente estado de conservación.

Los sitios arqueológicos están ubicados en el Area III de la Reserva Natural Provincial que comprende la franja de aguas y playas entre los siguientes limites: la isobata de cinco metros al sur, la base del médano frontal al Norte, el meridiano 61 20' 983" W, al Este; el meridiano 61 21' 760" W, al Oeste, en el Partido de Monte Hermoso.

Las unidades se encuentran a unos 6 km al oeste de la localidad de Monte Hermoso, donde los depósitos del fondo de una laguna afloran en la playa actual y dos veces al día los cubre la marea. Se trata de sedimentos estratificados de láminas intercaladas de arcilla y arena, que se extienden a lo largo de la playa. En el pasado formaban parte del borde de una antigua laguna litoral, hoy desaparecida.

Otros Aspectos Destacables del Sitio

La localidad arqueológica en su conjunto, los cuatro sitios, tiene carácter único porque aporta datos excepcionales para el conocimiento de la historia de los cazadores recolectores de la Región Pampeana y Ecorregión de la Pampa Húmeda. En primer lugar tiene una preservación sobresaliente de artesanías de madera que incluyen al instrumento decorado más antiguo sobre esa materia prima y un hacha enmangada, Ambos restos son absolutamente excepcionales. En segundo término muestra el comienzo de la explotación de los recursos marinos, en el momento en que se produjo el ascenso del nivel del mar como consecuencia de la instauración de las condiciones más cálidas del Holoceno medio. Esto se evidencia en el procesamiento de lobos marinos y en la información isotópica sobre huesos humanos. En tercer lugar centenares de improntas de niños y adultos, así como de aves y de mamíferos quedaron impresas en las márgenes de una antigua laguna.

Distintos aspectos de los rastros permitieron acceder al uso del paisaje de la gente en sus prácticas cotidianas. Hace siete mil años existía un cuerpo de agua con variaciones estacionales de tamaño que temporariamente era una marisma costera o una laguna entre los médanos cercanos al mar. La vegetación era típica de interdunas húmedas, con leve influencia marina. A orillas de este antiguo cuerpo de agua se encuentran los 4 sitios que conforman la localidad.

Se obtuvieron 20 fechados radiocarbónicos, sobre muestras de maderas, de hueso de lobo marino, de guanaco y de semillas de Ruppia sp (una planta que crecía a orilla de la laguna). La cronología se estableció entre 7.900 y 6.600 años antes del presente para los cuatro sitios.

Los sitios 1, 2, y 4 de La Olla son pequeños afloramientos a lo largo de 150 m que permanecen casi siempre cubiertos por arena en el límite de la baja marea, Sólo han quedado expuestos cinco veces en los últimos 20 años y nunca en forma simultánea. En estos sitios se han recuperado huesos de las dos especies de lobo marino; algunos de ellos presentan marcas de corte, rastros de combustión y confección de artefactos.

Todos estos sitios muestran los lugares donde se terminaban de procesar los lobos marinos que eran capturados en la costa marítima y acarreados hasta La Olla para ser despostados. En estos mismos campamentos también se procesaron vegetales especialmente para confeccionar artefactos. Los instrumentos presentes incluyen puntas de una sola pieza y mangos para artefactos con cabezal de piedra. El artefacto más destacado es un instrumento de madera, una especie de espátula alargada, que estaba decorada con incisiones en zig-zag y tenia pintura roja.

Todo esto forma un registro único en América que además ilustra de manera excepcional la forma de vida indígena en la región pampeana entre 7900 y 6700 años atrás.

En este sector del litoral atlántico la historia geológica se interdigita con la biológica y humana, conformando un espacio de relación de estos aspectos, cuya unicidad se complementa con la espectacularidad del registro que exhibe una secuencia conformada por diferentes momentos entre los finales del Pleistoceno hasta el Holoceno medio.

Autenticidad: La historia de los hallazgos paleontológicos en la zona se remonta a 1832 cuando Charles Darwin, a bordo del Beagle, recorrió este punto de gran importancia paleontológico. Luego en 1887, Florentino Ameghino comienza a explorar este lugar y de ahí en más muchos investigadores acudieron a este sector con el afán de realizar nuevos descubrimientos hasta el día de la fecha.

En 1887 comenzaron las exploraciones de los hermanos Ameghino en la Farola Monte Hermoso (Rovereto, 1914), que luego se extendieron a zonas adyacentes, lo que dio lugar al descubrimiento del yacimiento de Playa del Barco, ubicado en las proximidades del actual balneario Pehuen co. A partir de entonces el área fue visitada en diferentes ocasiones por estudiosos que acudían con el afán de realizar nuevos hallazgos. Actualmente dicho yacimiento sigue brindando hermosos ejemplares de fósiles de mamíferos del Pleistoceno. En los últimos años se han descubierto algunas capas con huellas con características muy similares a las del Yacimiento Paleoicnológico de Pehuen co.

El Yacimiento Paleoicnológico de Pehuen Co se conoce desde octubre de 1986, cuando luego de un temporal se descubrió una plataforma de rocas sedimentarias entre la arena de la playa actual. Estas sedimentitas, se extienden a lo largo de la costa por más de 5000 metros. Afloran en la parte media y alta de la playa constituyendo una serie de amplias capas escalonadas, desgastadas por el mar, que se cubren con arena actual o se descubren, en forma aleatoria, según la dirección y energía de los vientos reinantes. Esta particularidad permite observar con frecuencia nuevos afloramientos, que de tanto en tanto proporcionan hallazgos novedosos, mientras que otras veces están totalmente cubiertos por arena.

A partir de la fecha del descubrimiento se iniciaron los estudios (Aramayo y Manera de Bianco, 1987, 1996; Manera de Bianco y Aramayo, 2004; Manera de Bianco y otros autores, 2005) que revelaron la riqueza e importancia paleontológica del hallazgo, destacándose fundamentalmente por la presencia de numerosas huellas de grandes perezosos cuaternarios del género Megatherium.

La lista de especies que se reunían en aquel ambiente, probablemente aún no esté completa. Después de cada gran tormenta puede surgir alguna novedad. Es así que, el 3 de febrero de 2005, se encontraron dos bloques de limolita que exhibían las mismas características que el material de este tipo que está "in situ" en el yacimiento. Los bloques estaban separados entre sí por unos 200 metros y ubicados respectivamente en la parte media y alta de la playa. Cada uno de ellos presentaba la impresión de una huella humana, en ambos casos del pie izquierdo. A pesar de que estaban sueltos, esto confirma la presencia del hombre en este paleoambiente y aunque no permite establecer su posición en la sucesión sedimentaria, ni su relación con la fauna extinguida, abre un nuevo camino para futuras investigaciones.

El estudio de este yacimiento permitió inferir las condiciones ambientales bajo las cuales se formó. Hace unos 12.000 años, el área no estaba ubicada a orillas del mar. Era un sitio que se inundaba con agua dulce durante períodos de lluvia, aportada por descargas fluviales de las redes de drenaje accesorias (Zavala y otros autores, 2005), formándose lagunas donde acudían los animales a beber y tal vez a proveerse de alimento. Lentamente, las lagunas se iban secando, total o parcialmente, hasta que se producía un nuevo aporte de agua que arrastraba sedimentos que cubrían el fango que contenía las huellas impresas. Estos episodios ocurrían cíclicamente, como lo evidencian los diferentes niveles con huellas, que forman extensos escalones entre la arena actual

Estudios Paleontológicos realizados: Los estudios paleontológicos de los yacimientos pleistocenos de la actual Reserva comenzaron en el área I , a comienzos del siglo XX con los trabajos realizados por Florentino Ameghino a partir de 1908, siguieron a través del tiempo, entre otros por Frenguelli y Kragllievich y continúan en la actualidad, extendiéndose a partir de 1987 al área II con las investigaciones efectuadas, entre otros, por Aramayo, Manera de Bianco y colaboradores- Desde el punto de vista geológico se destacan las observaciones y estudios realizados durante los trabajos para el proyecto "Preserve prehistoric animal tracks at a unique palaeontological site" (Premio Rolex 2004); y principalmente los estudios de Zavala y Quattrocchio (2001), y de Zavala y colaboradores (2005) . En el caso particular del área II es importante destacar que ha sido incluido entre los Sitios de Interés Geológico de la República Argentina por el SEGEMAR (Servicio Geológico Minero Argentino) (2008).

Proyectos de Investigación Paleontológica en curso

PGI: 24/H094 dirigido por Silvia Aramayo Estudio paleoicnológico integrado de yacimientos costeros entre la costa atlántica de la provincia de Río Negro (Mioceno tardío) y Santa Clara dell Mar (Pleistoceno tardío)

PGI: 24/ZH16 dirigido por Teresa Manera Tafonomía de los yacimientos de vertebrados (Plioceno-Pleistoceno) de Coronel Rosales.

La localidad arqueológica de Monte Hermoso 1 y La Olla 1, 2 y 4 en conjunto tiene carácter único porque aportó datos excepcionales para el conocimiento de la historia de los cazadores recolectores de la región pampeana. En primer lugar tiene una preservación sobresaliente de artesanías de madera que incluyen al instrumento decorado más antiguo sobre esa materia prima y un hacha enmangada, Ambos restos son absolutamente excepcionales. En segundo término muestra el comienzo de la explotación de los recursos marinos, en el momento en que se produjo el ascenso del nivel del mar como consecuencia de la instauración de las condiciones más cálidas del Holoceno medio. Esto se evidencia en el procesamiento de lobos marinos y en la información isotópica sobre huesos humanos. En tercer lugar centenares de improntas de niños y adultos, así como de aves y de mamíferos quedaron impresas en las márgenes de una antigua laguna. Distintos aspectos de los rastros permitieron acceder al uso del paisaje de la gente en sus prácticas cotidianas.