El Senado y Cámara de Diputados...

Artículo 1º - Se reconoce al género musical folklórico denominado zamba, como parte integrante del patrimonio cultural argentino en los términos establecidos por la ley 26.118, de ratificación de la Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial.

Art. 2º - Se declara de interés cultual nacional la preservación, estímulo y difusión, en todas sus modalidades del género musical folclórico zamba.

Art. 3º - Se establece el día 29 de septiembre de cada año Día Nacional de la Zamba, en conmemoración del día del natalicio del músico salteño Gustavo "Cuchi" Leguizamón (1917-2000).

Art. 4º - La autoridad de aplicación de la presente ley es la Secretaría de Cultura de la Nación, dependiente del Poder Ejecutivo, quien instrumentará todo lo atinente para el cumplimiento de los fines establecidos en el artículo 2º de la presente ley.

Art. 5º - Los gastos que demande el cumplimiento de la presente ley serán imputados al presupuesto de la administración nacional.

Art. 6º - El Poder Ejecutivo reglamentará la presente ley dentro de los noventa (90) días de su publicación.

Art. 7º - Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

El presente proyecto de ley pretende reconocer al género musical folklorico zamba, en todas sus variedades, como parte integrante del patrimonio cultural argentino y declarar de interés cultural nacional su preservación en el marco constitucional que disponen los artículos 41, párrafos 2 y 3, y 75, inciso 19.

Esta iniciativa no es novedosa, y cuenta con media sanción el 28/11/12 cuya orden del día fue el nº 1696/2012, en cuyo texto y fundamentos nos basamos, y como antecedentes de larga data se encuentran en la HCDN el expediente 4108-D-2005 de la diputada Comelli, que fuera reproducido por los expedientes 0069-D-07, 2419-D-2007, 0172-D- 2009 y 0036-D-2011; y el expediente 3934-D-2005 del diputado NEMIROVSCI; en el HSN también tuvo acogida la temática con los proyectos de ley del Senador Falco, expedientes 1579/03 y 2002/05.

La iniciativa, también propone instaurar como Día Nacional de la Zamba el día 29 de septiembre de cada año con motivo del natalicio del músico salteño Gustavo "Cuchi" Leguizamón (1917- 2000), incluyéndoselo en el calendario oficial.

También se propone establecer la obligación funcional del Poder Ejecutivo nacional de promover acciones positivas de protección de dicho bien cultural en lo que respecta al estímulo, promoción y difusión de las distintas modalidad de ejecución o corrientes interpretativas locales del género; al apoyo a la acción de sus intérpretes, autores, compositores, docentes y empresarios, a asegurar el desarrollo histórico del género mediante su difusión nacional e internacional, tanto en su música como en sus letras, interpretación y danza como una manera de asegurar su desarrollo histórico y a brindar o facilitar ámbitos físicos adecuados para su interpretación y apreciación pública.

Esta nueva presentación, como en las anteriores, en orden a los fundamentos que orientan esta iniciativa, ha de sostenerse en primer término que, al igual que en otra iniciativa de similares alcances, partimos de la base de que, tal como hoy se hace con el tango, es menester que los poderes públicos tomen activa participación en la gestión y salvaguarda de los distintos bienes culturales de la Nación, los que lo son ante todo porque han sido internalizados ancestralmente por nuestro pueblo y forman parte de sus valores, creencias y tradiciones.

La zamba es una danza de antigua raigambre hispánica cuyos orígenes probablemente están Lima y en la época de la Colonia. Es un género musical profundamente arraigado en la argentinidad, especialmente en el área del Norte, que desde siempre ha contado con ilustres intérpretes (Atahualpa Yupanqui, Mercedes Sosa, Los Chalchaleros, el Dúo Salteño, Ariel Ramírez, Daniel Toro, Zamba Quipildor, Jaime Dávalos, entre muchos otros). Su música y sobre todo su danza evoca señorío de antaño, galanura, gracia y alegría, aunque también es canal más que adecuado para la expresión más honda del sentimiento, como, precisamente sucede con la obra del músico salteño Gustavo "Cuchi" Leguizamón, junto con Atahualpa Yupanqui, uno de los más destacados cultores del género que nos ha legado obras imperecederas bendecidas, como decía este último "...con el anonimato...".

En torno al "Cuchi" Leguizamón es mucho lo que puede decirse. Nació un 29 de septiembre de 1917 en Salta y falleció en la misma ciudad el 27 de septiembre del año 2000. Fue un brillante pianista pero sobretodo, un compositor riguroso y autodidacto, de sólida formación, que innovó las formas musicales del folclore regional. Desmitificador, lúdicamente irrespetuoso de toda formalidad y de sí mismo, es sin embargo un perfecto caballero criollo, que prefería hablar mucho de la poesía y la música ajena y muy poco de la propia que, sabe, lo convierte quizás en el compositor más talentoso y profundo del Noroeste argentino.

La nómina de las obras de proyección folclórica de Gustavo Leguizamón es muy extensa. Tiene registradas en SADAIC (hasta 1987) 82 obras. Buena parte de estas composiciones son ya clásicos del folclore argentino como Zamba del Carnaval, Balderrama, La pomeña, Zamba de Juan panadero, Maturana, La Arenosa, Zamba del laurel y muchas otras. Si bien la mayoría de sus obras están editadas, su obra completa aguarda todavía una exhaustiva investigación para precisar con exactitud todas sus composiciones.

Su trayectoria, además, nos dice que en 1965 obtuvo el primer premio del Festival Latinoamericano de Salta con La zamba soltera. En 1973 ganó el Gran Premio SADAIC en el género música nativa. En 1980 ganó el primer premio en la Cantata Cafayateña, Salta. En 1986 obtuvo el primer premio en el Festival de Cosquín, Córdoba, con la zamba Bajo el azote del sol, con letra de Antonio Nella Castro. El 7 de noviembre de 1988 la Universidad Nacional de Tucumán le otorgó el reconocimiento al mérito artístico creativo (producción folclórica). El 16 de junio de 1989 el gobierno de la provincia de Salta le otorga el reconocimiento al mérito artístico previsto en la ley 6.475.

Además su actuación músical, Gustavo "Cuchi" Leguizamón fue abogado de profesión (lo que le llevó a componer una de sus piezas: Chacarera del expediente), fiscal de Estado de la provincia de Salta y diputado nacional.

Como nos decía el pianista Manolo Juárez cuando este genial músico vivía: "...Del Cuchi Leguizamón se pueden decir muchas cosas: que es un fino pianista, un gran poeta, bastante pasable persona... Sin embargo, puedo decir que a mí como autor el Cuchi no me interesa, y no me interesa porque en realidad los temas no son suyos, ya que él los hace e ingresan directamente en el cancionero popular de América latina. Mucha gente canta los temas del Cuchi Leguizamón sin saber que son de él, y el máximo elogio para un artista es que sus obras sean consideradas anónimas...".

Lo antedicho explica por qué proponemos que el Día Nacional de la Zamba coincida con el del natalicio del nombrado e ilustre músico salteño.

Por los motivos expuestos, y teniendo en miras el fin último, que también lo tuvo la media sanción que le dio esta cámara en el año 2012, de declarar a la zamba como parte integrante del patrimonio cultural argentino, como asimismo rendir un merecido homenaje a mi coterráneo Gustavo "Cuchi" Leguizamón, es que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.