La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo, para que a través del Ministerio de relaciones Exteriores y Culto informe sobre supuestas acciones realizadas por el gobierno de Reino Unido, plasmada en versiones periodísticas:

1) Si el mencionado gobierno británico pretende crear una reserva ecológica, que abarcaría tanto las Islas Malvinas como las Georgias y Sándwich del Sur -territorio de la República Argentina-.

2) Si la reserva que se planearía crear tendría un perímetro aproximado de 1 millones de kilómetros cuadrados.

3) Si según los acuerdos internacionales, de confirmarse la versión expuesta, se realizarán las presentaciones ante los organismos pertinentes que corresponde en este caso.

5) De ser esto cierto, se tendrán en cuenta los mensajes de alerta del Observatorio Parlamentario Malvinas acerca de "este nuevo avance en el abusivo e ilegítimo proyecto del gobierno británico".

6) De ser verídica la versión ¿qué otras medidas o acciones tomaría el Poder Ejecutivo Nacional en defensa de la soberanía Nacional?

Señor presidente:

El gobierno británico tendría la intención de crear una reserva ecológica marina de un perímetro de 1,07 millones de kilómetros cuadrados, la más grande del mundo, que incluirían tanto a las Islas Malvinas como a las Georgias y Sándwich del Sur, que forman parte del Territorio Argentino. La decisión se tomó unilateralmente a pesar de que ambos gobiernos son signantes de la Convención para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos. Además tanto la Argentina como el Reino Unido son firmantes de la Convención para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (CCAMLR).

Se trataría de la mayor zona de protección marina del mundo, lo que demostraría el afán de ampliar su zona de acción de control militar y pesquero, cuestión que el Gobierno Nacional no debería permitir.

La República Argentina recibió el apoyo a los pedidos y el repudio al accionar unilateral británico del resto de los representantes de Estados de la región, en la XXI Cumbre Iberoamericana de octubre de este año. Esto nos induciría a reclamar en todos los organismos internacionales para evitar que se concrete esta pretensión del Reino Unido y logre controlar libremente, mediante la excusa de una reserva ecológica, más de un millón de kilómetros cuadrados de territorio argentino, y permitiendo, en un futuro, ser usado como precedente para la soberanía británica sobre las Islas Malvinas.

El Poder Ejecutivo Nacional debe, de verificarse la versión, instrumentar las medidas necesarias en todos los ámbitos para evitar que el gobierno británico tome una decisión unilateral y sin consulta previa, en un claro avance neocolonialista, a pesar de tener el respaldo de la reciente creada Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), integrada por 33 jefes de estado de la región, y de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), en el reclamo argentino de soberanía sobre las islas.

Esta decisión británica habría sido tomada de forma unilateral e injustificada, y buscaría mantener la usurpación de la islas del Atlántico Sur, fuera de su jurisdicción y a más de 14 mil kilómetros de sus costas. Utilizarían una fachada ambientalista como nueva estrategia para mantener su posición ilegítima, yendo en contra de los diferentes organismos internacionales que apoyan el reclamo argentino.

Seiscientos cuarenta y nueve argentinos ofrendaron sus vidas defendiendo nuestros territorios durante el Conflicto de Malvinas, y el Gobierno Nacional, que se dice protector de la soberanía nacional y que cuenta con el apoyo de los países de la región, ha mostrado una falta de coherencia discursiva y torpeza incomprensible en el manejo de la cuestión; errores que podrían costarle la pérdida de credibilidad en reclamos futuros.

Por lo expuesto es necesario la aprobación del presente proyecto para tener información precisa y actuar en consecuencia