La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo nacional que, a través de los organismos competentes, incorpore al Calendario Nacional de Vacunación la vacuna antineumocóccica en la población pediátrica.

Señor presidente:

La meningitis es una enfermedad que se presenta en forma estacional y por lo general anualmente hay 500 casos de meningitis bacteriana. Desde comienzos del año actual, son 30 los muertos por meningitis en todo el país y en lo que va del 2008 fueron diagnosticados más de 500 casos. Las cifras surgen de los informes oficiales de las autoridades sanitarias provinciales y nacionales.

Se trata de una patología que produce inflamación de los tejidos que recubren el cerebro y la médula espinal, y que se presenta en dos formas: la viral y la bacteriana. Los síntomas más comunes de la meningitis son fiebre, dolor de cabeza fuerte, rigidez de cuello, dolor en los ojos, sueño, confusión, nauseas y vómitos. En los bebés, también se puede presentar inquietud e irritabilidad, excesivo sueño o falta de apetito. Para su cura, la meningitis debe ser detectada a tiempo. Por eso, la mejor manera de actuar en caso de presentarse síntomas como los antes expuestos es acudir rápidamente a la consulta médica.

La vacunación antineumocóccica permite disminuir considerablemente el riesgo de complicaciones severas, especialmente en aquellos pacientes con mayor predisposición a contraer esta enfermedad. Por ello la Organización Mundial de la Salud recomienda la aplicación de la vacuna cada 5 años en la población de riesgo. Integran los grupos de riesgo, niños con enfermedad crónica cardiopulmonar y diabetes, niños nacidos prematuramente, niños inmunocomprometidos.

Informa la Organización Mundial de la Salud que cada año mueren en el mundo 10 millones de niños menores de cinco años, uno de cada cuatro fallece de enfermedades prevenibles con vacunas. Actualmente la inmunización salva entre 2 y 3 millones de vidas al año. En países europeos como Inglaterra la vacunación antineumocóccica la otorga el estado obligatoriamente.

Implementar los medios necesarios para fomentar la vacunación

gratuita y obligatoria - incorporándola al Calendario de Vacunación - en la población pediátrica de todo el país como método de prevención, significaría un gran avance en la lucha contra esta enfermedad y resultaría una medida indispensable en cuanto a garantizar vidas saludables para nuestra población.

Es por estas razones que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.