La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar enérgico repudio y gran preocupación por la conducta, constitutiva de práctica desleal, llevada a cabo por las empresas periodísticas Clarín, La Nación y Perfil contra el Sindicato de Vendedores de Diarios y Afines (SIVENDIA) y la Sociedad de Distribuidores de diarios, Revistas y Afines (SDDRA) que en pleno ejercicio de las garantías constitucionales que en su carácter de asociaciones profesionales con personería gremial decretaron paro en sus respectivas actividades para los días sábado 18 y domingo 19 de agosto de 2012.

Señor presidente:

La gravedad insita en el conflicto que llevó a SIVENDIA, cuyo Secretario General es nuestro compañero Diputado Nacional, Omar Plaini, y SDDRA, a decretar el cese de actividades por dos días es notoria y compleja. En él se encuentran entrelazados no sólo un reclamo que se evidencia legítimo y que gira en torno a una adecuación de las remuneraciones de los asalariados del sector sino que se trata, básicamente de un reclamo de derecho por la restitución de una remuneración unilateralmente reducida por la patronal. Se trata en sí de quitar eficacia a un hecho jurídico nulo de nulidad absoluta como lo son las reducciones salariales dispuestas de este arbitrario modo. A su vez, el mero hecho de que las empresas dominantes se hayan negado durante tantos años si quiera a sentarse a negociar configura pos sí mismo un comportamiento desleal reprochable en los términos de la Ley 23.551.

Pero además, en este reclamo se encuentran directamente en juego las garantías constitucionales de ejercicio del derecho a huelga de esos mismos trabajadores, ilegítimamente afectadas por las grandes empresas periodísticas que se han jactado de su poder para acallar la protesta; se encuentra en juego también el derecho a la libertad de expresión de numerosas empresas periodísticas que son sometidas al imperio del más fuerte que no sólo domina la materia prima -papel prensa- sino que también busca dominar los canales de acceso al publico y por ende, se encuentra también en juego el derecho a la información de toda la población Argentina. Por estas razones es que estimamos que los representantes del pueblo argentino no debemos permanecer impávidos.

Los compañeros diputados recordarán lo difícil que fue establecer, y tuvo que hacerse por Ley, el día de los trabajadores vendedores de diarios y revistas de la industria periodística para lograr que estos trabajadores descansen al menos uno de los 362 días que laboraban al año.

Es que, efectivamente, la reducción salarial que se encuentra a la base del conflicto no es más que una de las manifestaciones del ejercicio abusivo de la posición dominante por parte del oligopolio periodístico que busca evidentemente por medio de estas ilegítimas maniobras y otras, decidir por sí qué opiniones alcanzarán público y cuáles no lo harán.

Por todo ello, reafirmando las principios y garantías expresados en nuestra Constitución Nacional y que hacen a la esencia misma de nuestra república, repudiamos las prácticas abiertamente desleales y antidemocráticas de las empresas hegemónicas y solicitamos, Sr. Presidente, la aprobación del presente proyecto de resolución.