La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

1º- Su más enérgico rechazo, ante las instituciones y los Estados miembros de la Unión Europea, por la inclusión en la lista de países y territorios a los que se aplica el régimen de Asociación de Países y Territorios de Ultramar (Anexo II) del Tratado de Lisboa, partes del territorio nacional argentino, a saber: nuestras Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y sus espacios marítimos e insulares circundantes, incluido el sector antártico argentino.

2º- La imprescriptible soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y sus espacios marítimos e insulares circundantes, sobre las cuales el Reino Unido ejerce ilegítimamente la ocupación.

3º- Su profunda convicción de la necesidad de una solución pacifica, justa y duradera a la disputa por la soberanía de la Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y sus espacios marítimos e insulares circundantes.

Señor presidente:

El Tratado de Roma de 1957 constitutivo de la Comunidad Económica Europea (CEE), estableció en su Parte IV, disposiciones especiales respecto a la asociación de ciertos países y territorios de ultramar (PTU), no europeos, enunciados en el entonces Anexo 4 (Anexo II en los Tratados posteriores).

Ese régimen de asociación sólo es aplicable a países y territorios no europeos que mantienen relaciones con Dinamarca, Francia, los Países Bajos y el Reino Unido. Los PTU (inclusive los territorios argentinos ilegítimamente ocupados por el Reino Unido) no son parte de la Unión Europea ni de su territorio y, por lo tanto, no están sujetos al derecho comunitario. Sólo están asociados a la UE en virtud de las relaciones especiales que mantienen con los países citados precedentemente. El fin de la asociación, que ha permanecido inalterado hasta la fecha, es la promoción del desarrollo económico y social de los países y territorios de ultramar y el establecimiento de relaciones económicas estrechas entre ellos y la Comunidad en su conjunto.

El Tratado de adhesión del Reino Unido a las Comunidades Europeas, que entró en vigor el 1º de enero de 1973, incorporó en el Anexo 4 a los países y territorios de ultramar británicos, incluyendo los territorios argentinos "Islas Malvinas y dependencias" (Georgias del Sur y Sándwich del Sur) y el llamado "Territorio Antártico Británico".

La protesta inicial de nuestro gobierno no se hizo esperar. El 6 de julio de 1972, el Gobierno argentino protestó ante cada uno de los Estados signatarios del tratado de adhesión del Reino Unido a las Comunidades Europeas, haciendo una reserva por la inclusión en el Anexo 4 del Tratado de Roma de partes del territorio argentino.

El 25 de julio de 1972 por nota CEE Nº 43, el Gobierno argentino comunicó dicha circunstancia al Secretario General del Consejo de la CE y rechazó tal inclusión, haciendo expresa reserva de sus derechos de soberanía sobre la Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur así como sobre el Sector Antártico Argentino y ratificando que dichos territorios y los espacios marítimos circundantes son parte integrante del territorio de la República Argentina. Se expresó que las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur están ilegítimamente ocupadas por el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y que, en consecuencia, están sujetas a una disputa de soberanía entre la Argentina y ese país. En cuanto al denominado "Territorio Antártico Británico", se recordó la vigencia del artículo IV del Tratado Antártico en el que tanto la Argentina como el Reino Unido son Partes.

Además, se han hecho reservas respecto de dichos territorios al firmarse acuerdos argentinos con la CE/UE y se han protestado y rechazado las distintas actividades de cooperación y asistencia económica de la CE/UE a las Islas Malvinas.

El Gobierno argentino rechazó, asimismo, la inclusión de las islas argentinas del Atlántico Sur y del llamado "Territorio Antártico Británico" en el Anexo II del Título IV de la Parte III del Tratado por el que se establece una Constitución para Europa, firmado el 29 de octubre de 2004, haciendo las reservas correspondientes ante las instituciones de la Unión Europea y cada uno de sus miembros.

El fracaso del proceso de ratificación del Tratado por el que se establece una Constitución para Europa, durante el año 2005, llevó a la Unión Europea a emprender un período de reflexión sobre una futura reforma.

El gobierno argentino ha sostenido su posición de rechazo con cada avance del Tratado de Reforma por notas CEE 91 al 94 del 11 de octubre de 2007 y CEE 99 al 102 del 5 de noviembre, en este último caso dirigidas respectivamente a las presidencias del Consejo, de la Comisión Europea y del Parlamento Europeo y a la Secretaría General del Consejo de la UE y ante todos los Estados miembros de la UE. Pero es con la aprobación del Tratado de Lisboa, el jueves 13 de diciembre, en el que se verifica que el nuevo texto no contiene modificaciones en la lista de PTU como solicitaba la Argentina, y por ende, nos vemos en la obligación de respaldar con todas nuestras fuerzas, desde la Honorable Cámara de Diputados de la Nación, las gestiones que está realizando el Poder Ejecutivo tendientes a rechazar esta pretensión ilegítima y dejar meridianamente clara en todos los foros su posición indeclinable.

Por todo lo expuesto solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto.