PROYECTO DE TP
Expediente 5663-D-2012
Sumario: EXPRESAR BENEPLACITO POR LA INVESTIGACION DE CIENTIFICOS - INVESTIGADORES ARGENTINOS, QUIENES LOGRARON INHIBIR LA PRODUCCION DE TOXINAS QUE INFECTAN LAS EXTREMIDADES INFERIORES DE LOS PACIENTES CON DIABETES.
Fecha: 16/08/2012
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 104
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Expresar su beneplácito por la
investigación realizada por científicos-investigadores de la Universidad Nacional de
Rosario y del CONICET; y por los resultados obtenidos, donde lograron inhibir la
producción de toxinas, que infectan las extremidades inferiores de los pacientes
con diabetes.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Investigadores de la Universidad
Nacional de Rosario y del CONICET lograron inhibir la producción de toxinas, que
infectan las extremidades inferiores de los pacientes con diabetes, mediante la
aplicación de azúcares. A partir de estos resultados, planean fabricar un
fármaco.
Las bacterias del género Clostridium
son los patógenos de humanos con mayor presencia en el ambiente y, aunque no
son las más nocivas, pueden causar tétanos, botulismo, diarrea asociada a los
antibióticos, intoxicaciones por alimentos en mal estado y gangrena, entre otras
afecciones.
Pero investigadores del CONICET y de
la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de la UNR lograron detener la
peligrosidad de una especie de esta gran familia de bacterias, la denominada
Clostridium perfringens, que ocasiona la gangrena gaseosa, un problema para los
diabéticos y otros grupos de riesgo como los fumadores.
Este patógeno tiene tres maneras de
atacar al cuerpo. Por un lado, posee la capacidad de esporular, es decir, vivir
refugiada en esporas, una especie de envoltorio que evita que entre en contacto
con el oxígeno y muera. También, puede trasladarse por deslizamiento ("gliding")
de tejido en tejido generando infecciones en cadena. Por último, genera toxinas
que son las responsables de degradar los tejidos.
En el caso de los diabéticos, las infecciones se ocasionan por la incapacidad de
cicatrización de las heridas, de allí que ante cualquier corte en la piel por menor
que sea, la espora de la bacteria germina y tiene vía libre para producir toxinas,
infectar el miembro (principalmente los pies) y, luego, desplazarse por los tejidos
destruyéndolos y diseminándose a otras áreas del cuerpo.
"Una gangrena tratada tardíamente puede llegar a avanzar 10 centímetros por
hora. Por eso, hasta el momento, la solución más habitual a una gangrena activa
es la amputación", afirma el doctor en Ciencias Bioquímicas, Roberto Grau, quien
dirige la investigación.
En investigaciones anteriores, los
científicos de la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de Rosario
lograron detener dos de los procesos: la esporulación y el desplazamiento de la
bacteria, denominado gliding. Ahora, pudieron inhibir la producción de las dos
toxinas más importantes, a través de azúcar, un compuesto utilizado desde hace
miles de años para todo tipo de infecciones.
"Lo que descubrimos previamente fue que los azúcares inhiben, a nivel génico, la
expresión del pilus tipo IV, que es lo que usa esta bacteria para moverse, una
especie de muleta que le permite ir escalando y avanzando a través de los tejidos
a los que destruye por la acción de las toxinas. Lo nuevo que desciframos fue
cómo los azúcares bloquean la capacidad de la bacteria de producir tales toxinas",
explica Grau.
Gracias a estos descubrimientos se
puede conseguir que la bacteria no esporule, con lo cual queda a merced del
oxígeno y no puede escapar, tampoco defenderse produciendo toxinas, entonces
su destino final es la muerte. Así, para dejar a la bacteria totalmente indefensa, los
científicos prevén la producción de una droga basada en azúcar y fosfatos.
"Uno de nuestros primeros
descubrimientos fue que el fosfato inorgánico regula la esporulación y que los
azúcares regulan la capacidad del Clostridium de realizar gliding (desplazarse). Por
eso, llamamos al azúcar, la señal dulce y al fosfato, la señal salada. Son como el
yin y el yang para combatir al patógeno", detalla el investigador.
El próximo paso para los científicos
del CONICET es crear un medicamento en base a glicopéptidos, para evitar la
degradación del azúcar y los inconvenientes de higiene al aplicar el producto
directamente sobre las heridas de los pacientes con gangrena o personas en
situación de riesgo en general.
"Los glicopéptidos son moléculas que poseen una porción análoga a los azúcares
que se podrían probar inicialmente in vitro, y luego in vivo en animales, para
determinar si pueden detener la producción de toxinas, al igual que el azúcar
convencional", sostiene Grau.
Con las investigaciones sobre esta
bacteria se comprobó que el azúcar puede aplicarse en otras enfermedades en las
que intervienen patógenos bacterianos.
Por lo expuesto, solicito a mis
compañeros me acompañen en el siguiente proyecto.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
GUZMAN, OLGA ELIZABETH | NEUQUEN | MOV POP NEUQUINO |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
ACCION SOCIAL Y SALUD PUBLICA (Primera Competencia) |
Trámite en comisión (Cámara de Diputados)
Fecha | Movimiento | Resultado |
---|---|---|
09/10/2012 | DICTAMEN | Aprobado por unanimidad con modificaciones en los términos del articulo 108 primer parrafo del reglamento de la H. Cámara |
Dictamen
Cámara | Dictamen | Texto | Fecha |
---|---|---|---|
Diputados | Orden del Dia 1140/2012 | CON MODIFICACIONES; ARTICULO 108 DEL REGLAMENTO DE LA H. CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION; ARTICULO 114 DEL REGLAMENTO DE LA H. CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION, BAE 31/2012 | 24/10/2012 |
Trámite
Cámara | Movimiento | Fecha | Resultado |
---|---|---|---|
Diputados | APROBACION ARTICULO 114 DEL REGLAMENTO DE LA H CAMARA DE DIPUTADOS; COMUNICADO EL 07/11/2012 | APROBADO |