La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, informe a esta Cámara de Diputados, a través del Ministerio de Seguridad, acerca de la actuación de la Policia Federal Argentina durante los incidentes producidos en la noche del 13.7.14 que tuvieron como epicentro la Plaza de la República en el centro de la ciudad de Buenos Aires. Informe si se ha tenido en cuenta la existencia de incidentes anteriores durante festejos deportivos para la planificación del operativo de prevención dicho día. Informe qué medidas preventivas se tomaron. Informe si se ha coordinado con la ciudad de Buenos Aires y su Policía Metropolitana las acciones preventivas y las desarrolladas luego de los incidentes. Informe si le han faltado recursos humanos y físicos para el operativo en cuestión. Informe el motivo de la inacción de la policía en los primeros momentos de los incidentes, como así también el por qué se ha permitido que los vándalos que huían de la Plaza de la República pudieran replegarse por la Avenida Corrientes sin que fuerza de seguridad alguna les cortara la retirada. Informe las causas para que no se hayan utilizado fuerzas de la Gendarmería Nacional o de la Prefectura Naval para esta ocasión. Informe asimismo el total de heridos y detenidos y la carátula de los expedientes iniciados a los delincuentes.

Señor presidente:

La zona del Obelisco en pleno centro de la Ciudad de Buenos Aires ha sido nuevamente escenario de hechos de vandalismo, saqueo y robo durante la celebración de un evento deportivo. Miles de personas concurrieron la noche del 13.7.14 para celebrar el subcampeonato del mundo de nuestra selección de fútbol. Lo que debió ser una noche de grato festejo terminó siendo un triste espectáculo de violencia, vandalismo y robo. Miles que festejaban alegre y pacíficamente debieron huir de la zona luego de que un grupo numeroso, pero claramente minoritario comenzara primero a enfrentarse con la policía y luego directamente a destruir y robar todo lo que encontraban a su paso. Estos delincuentes actuaron encapuchados. No solo robaron a quienes estaban en el lugar, hinchas, transeúntes ocasionales o medios de prensa, si no que destruyeron cuanto elemento encontraron a su paso, contenedores de basura, baldosas, señales y locales comerciales. Que los violentos se apoderen así del microcentro porteño no es novedad. Ya ha ocurrido en otras ocasiones. Lo que no deja de sorprender es la aparente incapacidad de las fuerzas policiales para poder en principio prevenir y luego sofocar estos hechos. Desde que comienza la violencia hasta que la Policía Federal Argentina intervino, transcurrió muchísimo tiempo, lo que incluso permitió que ante la inacción policial más vándalos se incorporaran a estos actos criminales.

Claro está que los miles de hinchas debieron interrumpir su festejo y huir como pudieron del lugar. También fueron saqueados locales ante las cámaras de los medios de prensa que registraban cómo los delincuentes entraban y se llevaban mercaderías de los mismos. Cuando la PFA finalmente avanzó en varios tramos y logró recuperar el control de la zona del Obelisco, se inició una débil persecución de los delincuentes por la Avenida Corrientes, que a su paso robaban todo lo que podían según surge de los relatos de la prensa como así también de las imágenes en vivo. Cabe preguntarse, entre muchas otras cosas de este operativo, si no debió cortárseles la retirada y evitar que siguieran sembrando caos a su paso. Porque el vandalismo se trasladaba por la avenida llegando incluso a la calle Uruguay. También es importante solicitar se informe si se ha coordinado este operativo con la Policía Metropolitana a la cual casi no se vio presente salvo cuando el operativo ya estaba casi terminado. Es importante saber por qué teniendo experiencias en otros eventos similares no se reforzó a la PFA con la Gendarmería Nacional o la Prefectura fuerzas. Y, por sobre todo, por qué no existió prevención.

Este hecho basta como muestra para entender el problema de desintegración del tejido social que vive nuestro país. Si en pleno centro de nuestra capital ocurren estos hechos y la policía no es capaz de prevenirlo y, producido, reprimirlo con la celeridad que la situación requiere la anomia que padecemos es sumamente inquietante.

Por esto solicito la aprobación del presente.