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PROYECTO DE TP


Expediente 5376-D-2012
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON LAS ACCIONES DESARROLLADAS EN CUMPLIMIENTO DE LAS LEYES 20466 Y 23899, PARA LA PREVENCION Y CONTROL DEL USO DE PLAGUICIDAS Y OTRAS SUSTANCIAS AGROQUIMICAS.
Fecha: 08/08/2012
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 98
Proyecto
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:


Dirigirse al Poder Ejecutivo nacional para que, por intermedio del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, se sirva informar a esta Honorable Cámara sobre las acciones desarrolladas en cumplimiento de las Leyes 20466 y 23899 para la prevención y control del uso de plaguicidas y otras sustancias agroquímicas, a cargo del Servicio Nacional de Sanidad Animal y Calidad Agroalimentaria (SENASA), requiriendo que asimismo se informe en particular, según las observaciones formuladas por la Auditoria General de la Nación (Act. AGN- N° 400/10),
sobre las cuestiones siguientes:
1) Si se han previsto medidas específicas para superar las limitaciones
cuantitativas y cualitativas en la fiscalización y el control del uso de agroquímicos por parte del Sistema Federal de Fiscalización de Agroquímicos y Biológicos (SIFFAB) en todas las etapas, desde su producción hasta su disposición final, incluyendo su almacenamiento, comercialización y aplicación
2) Si se han arbitrado medios tendientes a incrementar los monitoreos permanentes sobre frutas y hortalizas a cargo del Sistema de Control de Productos Fruti Hortícolas Frescos (SICOFHOR) para alcanzar su trazabilidad y detectar la presencia de residuos y contaminantes microbiológicos, que permitan garantizar la inocuidad de los alimentos y la salud de la población.
3) Si se han previsto acciones necesarias para mejorar la articulación con organismos provinciales y municipales e implementar un sistema de información con base de datos única y de actualización permanente, atento la carencia de un registro del universo de comercios expendedores y depósitos de almacenamiento de agroquímicos, que deja fuera de control a todos los establecimientos que no figuran en los listados disponibles.
4) Se informen las medidas que se hubieren adoptado para restablecer las acciones de fiscalización sobre la disposición final de residuos remanentes y envases de productos agroquímicos, a cargo del Sistema Federal de Fiscalización de Agroquímicos y Biológicos (SIFFAB), cuyas funciones de control a partir del año 2007, pasaron a ser de fomento y difusión de buenas prácticas, limitándose al dictado de talleres de promoción y concientización.
5) Se informen las acciones que se hubieren adoptado para actualizar el software utilizado para el control de correspondencia entre los productos que se comercializan y el registro del SENASA, a fin de superar las dificultades en el acceso a la base de datos de los centros regionales, y para poner término a los retrasos que se registran en las respuestas de laboratorio, sobre las muestras de productos que se toman en las inspecciones.
6) Se informen las medidas previstas para incrementar la protección de los consumidores contra los riesgos derivados de la eventual ingesta de frutas y hortalizas que pudieran contener residuos de plaguicidas y/o contaminantes microbiológicos, teniendo en cuenta que, según comprobaciones de la Auditoria General de la Nación, sobre 409 muestras de productos destinados al consumo interno y de exportación, desde agosto de 2009 a igual mes de 2010, en el 55 % de las frutas y en el 34,8 % de las hortalizas, se determinó la presencia de residuos de plaguicidas.
7) Se informen las acciones previstas para mejorar el control de gestión del SENASA, teniendo en cuenta que el Sistema de Control de Productos Fruti Hortícolas Frescos (SICOFHOR) funciona en 14 centros regionales del SENASA, que no tienen un sistema integrado e interconectado de información, y que desde el año 2008 en que se comenzó a monitorear sus dependencias, solo se habría visitado la mitad de los centros y recibido información incompleta, no obstante, el SENASA "no solicitó rectificaciones ni elaboró un informe consolidado con toda la información recibida", según observaciones de la AGN.
8) Se informen las razones por las cuales, en general, no se abren expedientes cuando se efectúan acciones de vigilancia por detección de residuos de plaguicidas, teniendo en cuenta lo informado por la AGN, que entre enero y agosto de 2010 los centros regionales efectuaron 67 visitas de inspección en el marco del SICOFHOR y sobre 26 situaciones de detección de residuos de plaguicidas, solamente se abrieron cuatro (4) expedientes y solo en un (1) caso se tramitaron infracciones por incumplimiento.

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


El presente proyecto de resolución tiene por objeto lograr que el Poder Ejecutivo nacional informe a esta Honorable Cámara sobre distintas cuestiones relativas a las acciones para la prevención y control del uso de plaguicidas y otras sustancias agroquímicas, a cargo del Servicio Nacional de Sanidad Animal y Calidad Agroalimentaria (SENASA).
La importancia de las cuestiones aludidas en este proyecto resulta evidente si se tiene en cuenta que el uso excesivo de plaguicidas y otras sustancias agroquímicas puede causar un deterioro del medio ambiente y poner en peligro la salud pública, según han advertido organismos internacionales como la FAO.
Consecuentemente, se ha reconocido en muchos países la necesidad de extremar sobre dichas sustancias las medidas de control adecuadas en todas sus etapas, desde la producción hasta su disposición final, incluyendo el almacenamiento, la comercialización y muy especialmente la aplicación, a raíz del uso generalizado que ha permitido desarrollar márgenes extraordinarios de productividad en la agricultura.
El uso de glifosato, un agroquímico concebido para combatir las malezas que compiten con los cultivos por la humedad, la luz y los nutrientes de la tierra, ha dado un impulso notable al sector agrícola orientado a la exportación, fortaleciendo la competitividad internacional de nuestro país como productor de granos y derivados.
Sin embargo, la aplicación de agroquímicos en la actividad agropecuaria, no obstante su innegable trascendencia para nuestra economía, no ha dado lugar a una legislación nacional de fondo, una ley nacional, que regule su uso y el Ministerio de Salud no participa en la aprobación del uso de los mismos, en resguardo de la salud de la población.
Como normativa principal en la materia se destaca el Anexo de la Resolución SAGyP 350/99, que establece el procedimiento para categorizar los agroquímicos, tarea de la que se encarga SENASA que es el órgano responsable a nivel nacional.
Queda luego bajo competencia de las provincias la regulación y control del uso y aplicación de agroquímicos. Resulta factible que se pueden comprar agroquímicos "sin receta" y, por lo tanto, la manipulación y aplicación segura de dichas sustancias de acuerdo a normativas específicas, queda en muchos casos librada al conocimiento y responsabilidad del usuario.
Por ello no pueden desconocerse irresponsablemente los riesgos que entrañan el uso y la aplicación de productos de alta toxicidad, si de parte del Estado nacional no se realizan el control y seguimiento, los registros epidemiológicos y las acciones preventivas y de educación ciudadana, para evitar el uso incorrecto o irresponsable de agroquímicos.
El SENASA, Servicio Nacional de Sanidad Animal y Calidad Agroalimentaria, es un organismo sanitario descentralizado en la jurisdicción del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, cuya responsabilidad primaria es la de instrumentar y promover la acción sanitaria y fitosanitaria, así como la de elaborar normas que aseguren el cumplimiento del Código Alimentario Argentino y las regulaciones internacionales.
Por la Ley 23899 fue reconocido como ente autárquico a cargo de las políticas nacionales en materia de sanidad y calidad, animal y vegetal, debiendo verificar el cumplimiento de la normativa vigente.
A su vez la Ley 20466 sobre fertilizantes faculta al SENASA a extraer muestras sin cargo en cualquier lugar del territorio nacional con el objeto de verificar si corresponden a lo declarado y requerir e inspeccionar cualquier documentación relativa los mismos, pudiendo solicitar la cooperación funcional de otros organismos oficiales y el auxilio de la fuerza pública, cuando lo considere conveniente.
En la estructura del organismo se destaca la Dirección Nacional de Inocuidad y Calidad Alimentaria, bajo cuya órbita operan dos sistemas:
El Sistema Federal de Fiscalización de Agroquímicos y Biológicos (SIFFAB) con el objeto de:
- Asegurar que los productos que se comercializan se correspondan con los registrados en el SENASA mediante las normas vigentes;
- Corroborar la legitimidad de los productos que se comercializan y que hayan sido elaborado por el establecimiento declarado, según sus etiquetas y rótulos;
- Retirar del circuito comercial los productos que no cuenten con el registro correspondiente en el SENASA y aplicar sanciones a los infractores de las normas vigentes;
- Fiscalizar el cumplimiento por parte de todos los actores involucrados en la cadena alimentaria, de todas las responsabilidades enmarcadas en las normas vigentes.
Por su parte, el Sistema de Control de Productos Fruti Hortícolas Frescos (SICOFHOR) tiene a su cargo:
- La identificación de los productos fruti hortícolas frescos conforme la especie, zona de producción o país de origen, firma empacadora, productora o importadora, categoría y grado de selección de los productos, para generar un grado de trazabilidad confiable;
- La determinación de la calidad de los productos fruti hortícolas frescos;
- La determinación de la presencia de residuos y de contaminantes microbiológicos en los productos fruti hortícolas frescos, que puedan afectar la inocuidad de los alimentos.
A su vez la Resolución SAGyP 350/99 y su Anexo, aprueban el Manual de Procedimientos, Criterios y Alcances para el Registro de Productos Fitosanitarios en la República Argentina, donde se contemplan los procedimientos, la clasificación toxicológica y los procedimientos de fiscalización de establecimientos elaboradores de productos fitosanitarios.
La carencia de una política sanitaria nacional para el control sobre los agroquímicos por parte del Ministerio de Salud de la Nación, resulta agravada por la falta de una fiscalización adecuada del SENASA y sus dependencias competentes en la materia. Lo expuesto surge palmariamente de recientes comprobaciones de la Auditoria General de la Nación en su último informe de "Acciones de control de agroquímicos desarrolladas en el SENASA" (Act. AGN- N° 400/10), que sirven de fundamento al presente pedido de informes al Poder Ejecutivo nacional.
En el mencionado informe la AGN sostiene que "es imprescindible que el Estado extreme las medidas de control sobre los agroquímicos en todas las etapas" y que "se realicen monitoreos permanentes de los alimentos para detectar la presencia de residuos, con el fin de garantizar la salud de los ciudadanos".
Entre otras observaciones, desde el año 2007 el SENASA no fiscaliza el uso de envases de pesticidas y sobre 409 muestras de productos destinados al consumo interno y de exportación, desde agosto de 2009 a igual mes de 2010, en el 55 % de las frutas y en el 34,8 % de las hortalizas, se determinó la presencia de residuos de plaguicidas.
Si bien el 96,7 % de dichos residuos "presentaban concentraciones dentro de los límites permitidos", el SENASA detectó que en el 87 % de los casos se trataba de "productos que no están autorizados para el cultivo en el que fueron encontrados", aunque no significa que sean plaguicidas prohibidos por la normativa vigente.
Lo expuesto exige incrementar la protección de los consumidores contra los riesgos derivados de la eventual ingesta de frutas y hortalizas que pudieran contener residuos de plaguicidas y/o contaminantes microbiológicos, siendo preciso conocer si se han adoptado nuevas medidas al respecto.
Además se advierte en el informe de la AGN que "las muestras de productos que se toman en las inspecciones y que se envían a analizar a los laboratorios de SENASA registran retrasos en las respuestas", y que existen "dificultades en el acceso a la base de datos de los centros regionales del SIFFAB". Esto último, "hace que los inspectores salgan a fiscalizar con un software desactualizado, pudiendo generarse errores al momento de realizar las inspecciones"
En el examen del Sistema Federal de Fiscalización de Agroquímicos y Biológicos (SIFFAB) del Servicio Nacional de Sanidad Animal y Calidad Agroalimentaria (SENASA) la AGN detectó que no tiene un registro del total de comercios donde se vende este tipo de productos, por lo que el ente se limita a controlar "los establecimientos conocidos y deja de lado a todos los no identificados".
Según el informe, aprobado por la AGN este año sobre datos colectados entre los años 2007 a 2011, el sistema que controla el cumplimiento de normas de los productos comercializados, "carece del registro del universo de comercios expendedores y depósitos de almacenamiento de agroquímicos".
La AGN señaló que "se advierte una escasa articulación con organismos provinciales y municipales que tienen autoridad en la materia" y, agrega, que éstos entes "no le proporcionan toda esa información a SENASA".
Además el SIFFAB vio reducidas sus acciones de fiscalización en cuanto a la disposición final de los envases de productos agroquímicos. En una primera instancia tenía funciones de "control", pero desde 2007 sus tareas pasaron a ser de "fomento y difusión" de buenas prácticas sobre disposición final de residuos remanentes y envases, limitándose al dictado de talleres de promoción y concientización.
Sobre el Centro Regional de Santa Fe, la AGN señaló que "la dilación de los tiempos de entrega de los resultados del laboratorio, podría implicar la comercialización de productos que arrojen una detección de residuos de plaguicidas fuera de norma". Además, se observó "falta de capacitación a los inspectores y recursos materiales limitados para realizar las tareas de monitoreo, por ejemplo, insuficiente cantidad de cajas conservadoras para las muestras".
El control de gestión sobre la aplicación de agroquímicos en distintas partes del país ha dado lugar a juicios y controversias en poblaciones que reclaman graves perjuicios por la aplicación de agroquímicos.
En un juicio que se ventila en Córdoba, una de las principales observaciones respecto de las aplicaciones de productos como endosulfán y glifosato tienen que ver con su manipulación y la falta de cumplimiento de
la normativa que impide la fumigación sobre poblaciones.
En el Chaco una nueva ley sobre el uso de agroquímicos fija distancias mínimas acordes con las máximas que existen en el país para las aéreas que será de 1500 metros y de 500 m para las fumigaciones terrestres. Adicionalmente se le otorga a la Autoridad de Aplicación que es el Ministerio de Medio Ambiente, la posibilidad de ampliar estas distancias.
De tal manera se va imponiendo en varias provincias la necesidad de adoptar precauciones en el uso de agroquímicos y fortalecer un desarrollo sustentable con resguardo ambiental, bajo un principio precautorio del ambiente y la salud de la población, que debe ser entrenada, educada y contar con información pública suficiente.
No podremos mejorar responsablemente el sistema de control y manejo de agroquímicos si estas cuestiones permanecen en la oscuridad.
Ante el dinamismo que en la última década alcanzara la oferta de fertilizantes y herbicidas compatibles con el uso de semillas transgénicas para nuestra producción agrícola, el Estado debe extremar los cuidados para garantizar el uso seguro de productos fitosanitarios y el control de la disposición final de envases.
Las innovaciones tecnológicas incorporadas a la agricultura, la introducción de transgénicos y la adopción de la siembra directa. con altos beneficios en el rendimiento de los cultivos y reducción de costos a los productores, deben guardar equilibrio en su aplicación, con la adopción de severas medidas de control sobre los agroquímicos.
Es preciso que las medidas de control de productos tóxicos en el agro cubran todas las etapas, desde su producción hasta su disposición final, incluyendo su almacenamiento, comercialización y, especialmente, su aplicación, con la finalidad prioritaria de garantizar la salud de la población.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, OMS, anualmente dos millones de personas se intoxican por exposición directa o indirecta de plaguicidas y de este total las 3/4 partes de afectados pertenecen a países en desarrollo, donde únicamente se utiliza el 25% de la producción mundial de plaguicidas.
El contacto con pesticidas y su entrada al organismo se produce por exposición laboral y en el hogar debido a usos y aplicaciones incorrectos, falta de medidas preventivas y de protección, almacenamiento inadecuado, reutilización de envases y, desde luego, las fumigaciones aéreas.
Son conocidos los efectos de la intoxicación aguda por plaguicidas sobre el organismo humano. Síntomas dermatológicos, neurológicos, oculares, cardio respiratorios, digestivos, antecedentes de aborto y otros síntomas inespecíficos. Además debemos destacar que los mayores niveles de morbi mortalidad por intoxicación aguda se observan en niños y adolescentes.
Consecuentemente en relación a la utilización de agroquímicos se debe priorizar la seguridad laboral, y generar modelos de prevención y planificación ante accidentes con sustancias tóxicas.
No podemos ignorar que el uso de agroquímicos provoca trastornos severos en la salud humana y el medio ambiente, según su grado de toxicidad que debe ser objeto de una precisa normativa y eficiente control en su aplicación.
Por ello, no puede legitimarse la mayor productividad agropecuaria sin tener en cuenta criterios vinculados a la salud pública y la protección del medio ambiente evitando su degradación.
Es preciso tener muy en cuenta además, los factores culturales en cada región, ya que la población rural más expuesta presenta factores socioeconómicos y culturales, como el analfabetismo, la ausencia de servicios sanitarios accesibles, viviendas precarias y necesidades básicas insatisfechas, que favorecen la ausencia de cuidados con respecto a la salud.
Son situaciones que se agudizan con la utilización de agroquímicos y que debemos defender con absoluta convicción.
Por todo lo expuesto, pido el apoyo de mis pares para dar aprobación al presente proyecto.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
MALDONADO, VICTOR HUGO CHACO UCR
SANTIN, EDUARDO BUENOS AIRES UCR
TUNESSI, JUAN PEDRO BUENOS AIRES UCR
ORSOLINI, PABLO EDUARDO CHACO UCR
BURYAILE, RICARDO FORMOSA UCR
NEGRI, MARIO RAUL CORDOBA UCR
ALFONSIN, RICARDO LUIS BUENOS AIRES UCR
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
AGRICULTURA Y GANADERIA (Primera Competencia)