PROYECTO DE TP
Expediente 5358-D-2009
Sumario: BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA: SE ESTABLECE A DICHA ENTIDAD COMO COMPRADOR PRIVILEGIADO O EN PRIMERA INSTANCIA DE LA PRODUCCION DE METAL DE ORO REFINADO.
Fecha: 03/11/2009
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 151
El Senado y Cámara de Diputados...
ARTICULO 1º.- De acuerdo a lo
dispuesto por los artículos 3, 4, 18 y 33 de Carta Orgánica del Banco Central de
la República Argentina Ley Nº 24.144 y sus modificaciones, se establece a
dicha entidad como comprador privilegiado o en primera instancia de la
producción de metal de oro refinado que tenga lugar en todo el territorio de
la República Argentina.
ARTICULO 2º.- El Banco Central de la
República Argentina establecerá para cada año, en función de las
necesidades financieras, las cuotas de la producción del metal sobre las que
hará uso del derecho como comprador privilegiado o en primera instancia. Los
montos restantes de la producción serán de libre disponibilidad para las
respectivas empresas productoras de acuerdo a las leyes vigentes que rigen
dicha actividad.
ARTICULO 3º.- El Banco Central de la
República Argentina establecerá el precio de compra del metal de oro. Para
la determinación del precio del metal se deberá tener en cuenta los costos
internos de extracción de dicho metal y los pasivos ambientales derivados de
la actividad.
ARTICULO 4º.- La Secretaría de
Minería de la Nación será la encargada de determinar los costos internos de
extracción y la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable será la
encargada de calcular el costo del impacto ambiental. Ambos índices serán
de referencia insoslayable para la fijación del precio de compra del metal de
oro, que bajo ninguna circunstancia podrá ser superior a los precios de
mercado.
ARTICULO 5º.- Comuníquese al Poder
Ejecutivo Nacional
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
En la historia de la economía, el oro,
como depositario de valor, ha permitido establecer relaciones entre los precios
de los bienes, organizando un sistema de intercambio en el comercio
internacional, estableciendo además las bases de un sistema monetario
internacional moderno. Actuó así como reserva y medida de valor.
Esa fusión de la carga simbólica del
oro como metal precioso y de unidad de cuenta en monedas elaboradas en
oro fue un elemento esencial del proceso económico moderno. Las finanzas y
el comercio internacional comenzaron a girar alrededor del oro. El estallido de
la primera Gran Guerra y luego de la Segunda alteró ese funcionamiento,
desplazando el cetro de la hegemonía económica mundial de Inglaterra a
Estados Unidos. Entonces el papel moneda denominado dólar se convirtió en
el medio de cambio aceptado a nivel internacional. Hasta 1972, el dólar, en
teoría, estaba respaldado por el oro acumulado en la Reserva Federal en una
relación de cambio fija. Desde ese año, Estados Unidos, para enfrentar sus
crecientes desequilibrios macroeconómicos (déficit de comercio exterior),
declaró la inconvertibilidad del dólar. La potencia económica estableció de
ese modo que su moneda era la medida de equivalencia para las
transacciones internacionales. Desapareció así el patrón oro, y emergió uno
dominado por el dólar.
La cuestión más fascinante y llena de
incertidumbres, que surge de la actual crisis global, reside en el actual
cuestionamiento de ese patrón dólar. De cualquier manera los principales
actores económicos de la Argentina pueden estar tranquilos puesto que los
procesos de cambio en esta materia no son automáticos. Son con final abierto
en un escenario futuro que hoy es desconocido. Pero eso no significa ignorar lo
que está pasando. Por lo pronto, el Nobel Joseph Stiglitz afirmó que "el sistema
de reserva global basado en el dólar ya está desgastado: el dólar demostró no
ser una buena fuente de almacenamiento de valor". En ese panorama
reaparece el oro, con todo su brillo y seducción, superando los 1000 dólares la
onza, como refugio de valor ante un esquema monetario global incierto.
Los profundos desequilibrios
provocados por los déficits gemelos de Estados Unidos (fiscal y comercial)
fueron financiados desde la década del '70 por el resto del mundo. La emisión
de dólares billetes y deuda fue absorbida por los países superavitarios,
especialmente Japón y China, acumulando millonarias reservas en esa
moneda. La actual crisis global agudizó esa situación de la economía
estadounidense porque, además del desequilibrio estructural de esas cuentas,
se sumó la instrumentación de inmensos paquetes de auxilio para bancos,
compañías de seguro y automotrices.
Esos billones de dólares adicionales
en circulación, que hoy se traduce en una elevada liquidez que está
alimentando una nueva burbuja internacional, plantea interrogantes acerca
de esa moneda de referencia. Los principales tenedores de dólares fuera de
Estados Unidos se enfrentan a un dilema de supervivencia: gran parte de sus
reservas está colocada en una moneda que se debilita, pero no pueden
desprenderse de ella sin provocarse un daño mayor. En ese inestable equilibrio
de la arquitectura financiera internacional comienza a desarrollarse una lenta
pero persistente diversificación de activos. Y el oro aparece como uno
estratégico, de refugio frente a un contexto mundial que está transitando un
pausado sendero de decadencia del reinado de la actual moneda
hegemónica.
Esto se traduce en
alzas de commodities y de ciertos bienes-refugio. De todos modos, esa
tendencia positiva tiene implícito lo que se denomina "ilusión monetaria". La
suba de precios de esos activos ofrece a los vendedores un estado de
satisfacción porque reciben más dólares por sus productos entregados. Pero,
en realidad, esa mayor cantidad de billetes tiene un menor valor por el
retroceso de esa moneda de referencia. En ese contexto se tienen que
entender ciertos movimientos de países petroleros que proponen abandonar
al dólar como unidad de valor para sus barriles.
En ese turbulento escenario
monetario, economías periféricas tienen la oportunidad, pero también la
responsabilidad, de diseñar estrategias que les permita adaptarse de la mejor
manera posible a esa situación. En ese sentido se inscriben iniciativas como la
diversificación de reservas, los acuerdos de intercambio de monedas (como
los swaps definidos por el Banco Central de Argentina con los de Brasil y
China), la compensación de transacciones comerciales excluyendo al dólar y
el proyecto de una moneda regional. En esa tendencia no se está incluyendo
como aspecto estratégico la acumulación de oro como activo de reservas, ni
la preservación de la riqueza en oro que se encuentra en la cuenca minera.
Resulta entonces fundamental
diversificar las reservas internacionales de la Argentina, ante el escenario
imprevisible en materia del dólar, o en todo caso es previsible que se vaya
depreciando, lo que le produciría un fuerte perjuicio al país dado que sus
reservas están casi todas en dólares. Por ejemplo, si el dólar se depreciara en
los próximos 5 años en un 30%, las reservas nuestras actuales (46.000 millones de
dólares) sufrirían una pérdida estimativa de valor de 14.000 millones de dólares,
lo que equivale, para darle una dimensión clara, a 8 años de cobertura
universal por hijo. O sea, que desde el punto de vista del interés nacional y
social, sería muy importante ponerse a cubierto de una posible pérdida en ese
sentido.
Por todo ello, y constituyendo nuestro
deber como legisladores preservar el valor de nuestra moneda y nuestro
recursos naturales, es que pongo este proyecto a disposición de mis pares
solicitando su apoyo.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
RAIMUNDI, CARLOS | BUENOS AIRES | SOLIDARIDAD E IGUALDAD (SI) |
GORBACZ, LEONARDO ARIEL | TIERRA DEL FUEGO | PROYECTO PROGRESISTA |
BISUTTI, DELIA BEATRIZ | CIUDAD de BUENOS AIRES | SOLIDARIDAD E IGUALDAD (SI) |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
MINERIA (Primera Competencia) |
FINANZAS |
PRESUPUESTO Y HACIENDA |
Trámite en comisión (Cámara de Diputados)
Fecha | Movimiento | Resultado |
---|---|---|
08/09/2010 | INICIACIÓN DE ESTUDIO | Aprobado sin modificaciones con dictamen de mayoría y dictamen de minoría |