La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar enérgico repudio a las acciones de espionaje que realizan los Estados Unidos de América en Argentina y en otros países hermanos de América Latina.

Señor presidente:

La historia de espionaje, que tiene como protagonistas a América Latina y a Estados Unidos, enciende una luz de alarma, en una trama que tiene como guionista a Edward Snowden, ex asistente técnico de la CIA, quien últimamente trabajaba en Booz Allen Hamilton, empresa privada subcontratada por la Agencia de Seguridad Nacional Estadounidense (NSA).

Este agente reveló a los diarios The Guardian y The Washintong Post la existencia de programas secretos que permitían la vigilancia de las comunicaciones de millones de ciudadanos por parte del gobierno de los Estados Unidos. A través de la compañía Verinzon se espían las llamadas telefónicas dentro del país y las realizadas al extranjero.

Otro programa llamado PRISM posibilita monitorear los datos emitidos por Internet (correos electrónicos, fotos, videos, chats, redes sociales, tarjetas de crédito) y permite a la NSA y al FBI - Oficina Federal de Investigación- acceder a los servidores de las principales empresas de Internet: Microsoft, Yahoo, Google, Facebook, Paltalk, AOL, Skipe, Youtube y Apple.

La NSA es la agencia de inteligencia más importante y produce más de cincuenta toneladas de material clasificados al día. Una de sus especialidades es vigilar a los espías, es decir a los servicios de inteligencia de todas los países, amigos o enemigos. Por otra parte, colabora con el sistema Echelon, creado después la Segunda Guerra Mundial por cinco potencias anglosajonas: Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Este es un sistema de vigilancia global que se extiende por todo el mundo y está orientado hacia los satélites que se utilizan para transmitir la mayor parte de las llamadas telefónicas, comunicaciones por Internet, correos electrónicos y puede captar más de dos millones de conversaciones por minuto.

Durante la guerra de Malvinas la NSA descifró el código secreto de los servicios de inteligencia argentinos, posibilitando a los británicos información valiosísima sobre las operaciones realizadas por Argentina.

Las revelaciones de Edward Snowden dan cuenta de que el espionaje británico interfiere clandestinamente cables de fibra digital, que le permitieron, entre otras cosas, espiar comunicaciones de los delegados que asistieron a la Cumbre del G20 realizada en Londres en abril de 2009.

Para dimensionar la capacidad de interceptar que tienen, los servicios de inteligencia especifican que hay más de 2.000 millones de usuarios de Internet en el mundo y más de 1000 millones utilizan facebook en forma habitual.

Lo expresado hasta aquí nos permite visualizar como operan estas agencias a fin de obtener información trascendental para desarrollar sus estrategias de dominación en Latinoamérica. Si bien el espionaje no es nuevo, la sofisticación de las herramientas actuales, permite filtraciones masivas.

Brasil, Colombia, Venezuela, México y Argentina que aparecen dentro de las revelaciones que salieron a la luz, precisan que los documentos que interesan, no son sólo asuntos militares, sino también los secretos comerciales y todos los datos que puedan aportar a su objetivo.

Edwuard Snowden es la punta del iceberg de una intriga que se complementa con el secuestro en el aeropuerto de Viena del avión que trasladaba al presidente de Bolivia, Evo Morales, cuando regresaba de un viaje a Rusia. Como respuesta, los 12 países que conforman Unasur, cuya presidencia pro témpore ejerce Perú, expresaron su "profundo rechazo" a lo sucedido y su "solidaridad "a Evo Morales y reclamaron el esclarecimiento de lo ocurrido.

La justificación ensayada por Barak Obama admite lo ocurrido y sostiene que: "No se puede tener un 100% de seguridad y un 100% de privacidad". Frente a tal declaración, los distintos países expresaron su preocupación por esta interferencia y anunciaron distintas acciones diplomáticas a fin de esclarecer lo acontecido.

La creciente integración política, reflejada por la rápida y decidida actuación, es el camino elegido por Latinoamérica frente a la soberbia de los "países centrales", que aún sostienen estrategias y prácticas colonialistas al tiempo que violan la legalidad internacional que dicen defender. Repudiar el intervencionismo es tanto un acto de reafirmación de la dignidad nacional y latinoamericana como un eslabón más de la cadena de la lucha por la liberación nacional y la integración de la Patria Grande.

Por lo expuesto, solicito a mis compañeros que me acompañen en esta expresión de preocupación y repudio.