La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su satisfacción por la inauguración el pasado 3 de octubre de 2009, del Monumento a los Caídos en Malvinas e Islas del Atlántico Sur, erigido en honor a los soldados argentinos muertos en combate durante el conflicto por la soberanía sobre nuestras Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur. Monumento este que se encuentra emplazado en el Cementerio Argentino de Darwin en la Isla Soledad del archipiélago de las Islas Malvinas.

Señor presidente:

"Quiero que vayan con mucha fuerza, con mucha entereza y que les digan que hay cuarenta millones de argentinos que les rinden homenaje junto a ustedes y que un día de este siglo un presidente argentino va a ir a rendirles homenaje en nombre de los derechos irrenunciables, inclaudicables y legítimos que tenemos sobres esas islas (...) "¡Gloria y honor a los caídos en Malvinas!", dijo la presidenta Cristina Fernández de Kirchner al despedir en Río Gallegos al primer contingente de familiares de soldados muertos en las Islas Malvinas y en el Atlántico Sur durante el conflicto bélico con el reino Unido de Gran Bretaña, quiénes viajaron a las Islas para rendir homenaje a los argentinos allí enterrados e inaugurar el Monumento erigido en su honor en el cementerio argentino de Darwin, en el que constarán placas con los nombres de los 649 efectivos argentinos que cayeron en combate.

Ese viaje cerro la larga lucha que llevó adelante la Comisión de Familiares de Caídos en Malvinas e Islas del Atlántico Sur, que comenzó apenas finalizada la guerra. En aquel momento, los británicos, con la supervisión del Comité Internacional de la Cruz Roja, decidieron trasladar los cuerpos de los efectivos argentinos muertos a un sitio ubicado en las afueras de Darwin, alejado de centros poblados y con muchas dificultades de acceso.

Frente a esa decisión el primer reclamo ante las autoridades británicas ocupantes de este territorio nacional que impulsaron los Familiares, fue el de exigir ejercer su derecho a visitar las tumbas de sus seres queridos.

Fue en marzo de 1991 cuando las gestiones realizadas por la Comisión dieron su fruto, permitiendo que el deseo de los deudos se hiciera realidad. Fueron 381 los familiares que por primera vez viajaron a las Islas. El Delegado General Adjunto del Comité Internacional de la Cruz Roja para América Latina, entidad que supervisó el desarrollo de la actividad, Edmond Corthésy, recuerda aquel emotivo episodio de esta manera; "... a pesar de que las tratativas para realizar esa visita se habían iniciado mucho tiempo antes y que fue posible recién casi diez años después, ese viaje ayudó a los familiares en su proceso de duelo; era una cuestión humanitaria. Cuando llegó el momento, fue muy emocionante e importante y, por los comentarios y por el agradecimiento de los familiares cuando volvíamos de las Islas, fue, en cierto sentido, reconfortante." (1) Los viajes de familiares se sucedieron "... no sin dificultades, interrupciones y demoras" como ellos mismos refieren y no sólo a las Islas, sino también a la zona del Atlántico Sur donde fuera hundido el Crucero A.R.A General Belgrano.

Pero aquella primera visita al cementerio argentino de Darwin fue determinante. Y lo fue no sólo por lo que significa estar frente a los restos de un ser querido, fallecido en combate en un territorio lejano de la patria. Sino también porque produjo una desagradable revelación. Muchas de las tumbas de los héroes no tenían nombre. En rigor, del total de 247 lápidas sólo 109 lo tienen, en el resto puede leerse en cambio, "soldado argentino sólo conocido por Dios".

Ese hecho despertó en los integrantes de la Comisión de Familiares de Caídos en Malvinas e Islas del Atlántico Sur, la necesidad de avanzar un paso más, para decirlo en sus palabras; "Teníamos claro el objetivo: nuestra propuesta era construir en el Cementerio de Darwin un lugar de homenaje y recordación para todos nuestros muertos, un sitio de identidad para la Memoria Argentina, un lugar de encuentro en la Verdad, la Paz y la Justicia".

Fueron 6 años de intensas gestiones. Finalmente, a principios de 2004, el monumento, que consta de una Cruz de tres metros de altura , 24 placas que identifican a las provincias argentinas y a la Ciudad Autónoma y que incluye la lista de los nombres de todos nuestros soldados caídos en combate, fue embarcado en dirección a Malvinas para su emplazamiento. Allí empezó otra ardua negociación; la de obtener el acuerdo británico para realizar un acto de inauguración y que en este estuviera presente un familiar por cada soldado muerto. El Reino Unido propuso que a cambio de la autorización, se permitiera el incremento de los vuelos comerciales a las islas que sobrevuelan el territorio continental argentino.

En la "Cumbre de Líderes Progresistas" realizada en Viña del Mar a fines de marzo del corriente año, la presidenta Cristina Kirchner se reunió con el premier británico Gordon Brown. "¿Ustedes son socialistas, defensores de los derechos humanos y no permiten que las familias de los soldados vayan a colocar una flor ", les dijo entonces la Presidenta a Brown y los suyos (2) .

Finalmente se arribó a un acuerdo entre ambos gobiernos. En agosto mediante el Decreto 1138/2009 se crea una "Comisión Organizadora", con el fin de llevar a cabo las acciones necesarias para la preparación y organización de los viajes a las Islas Malvinas de los familiares con motivo de las ceremonias de inauguración del monumento a la memoria de los miembros de las Fuerzas Armadas Argentinas muertos en acción en 1982.

Como afirmaron los Familiares de Caídos en Malvinas e Islas del Atlántico Sur: "Vamos a Malvinas llevando en el corazón la fuerza, el cariño, la comprensión y el respeto que todo el pueblo argentino nos ha hechos llegar ahí donde estuviéramos. Nos sentimos acompañados por ese pueblo. Y en nombre de él nuestras familias viajan a Homenajear a nuestros Héroes".

Felizmente así fue. Los sufridos corazones de los familiares se reconfortaron tomando fuerza para nuevos desafíos, y todos nuestros soldados muertos en combate defendiendo la soberanía de aquella porción de nuestra Nación, fueron recordados como se lo merecen los héroes, con honor y gloria.