PROYECTO DE TP
Expediente 4782-D-2015
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON EL ESTADO DEL PARQUE DE AERONAVES QUE INTEGRAN LA AGRUPACION AEREA PRESIDENCIAL.
Fecha: 02/09/2015
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 113
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Solicitar al Poder Ejecutivo
Nacional que, a través de los organismos que resulten competentes, informe lo
que a continuación se requiere acerca de la Agrupación Aérea
Presidencial:
Cómo se compone el parque de
aeronaves afectadas a la Agrupación Aérea Presidencial, indicando matrícula de
cada una de ellas, modelos, año de fabricación, año de compra y horas de
vuelo de cada una de ellas;
Detalle el estado general de cada
una de ellas, indicando revisiones técnicas y cantidad de horas de vuelo anuales
de cada una de ellas desde el 10 de diciembre de 2007 a la fecha;
El consumo promedio de cada una
de dichas aeronaves, detallando los costos de las revisiones técnicas y
reparaciones;
El presupuesto anual de la
Agrupación Aérea Presidencial desde el año 2008 al 2015;
Eleve copia debidamente
certificada de: los Historiales de Aeronave, de Motor y de Hélice, y los Registros
de Vuelo de cada una de las aeronaves que la integran desde el 10 de
diciembre de 2007 a la fecha; y los Libros de Vuelo de los pilotos afectados a la
flota aérea presidencial en el mismo lapso de tiempo;
Listado completo de contratos de
servicios de taxis aéreos, desde el 10 de diciembre de 2007 a la fecha,
destinados al transporte de la Presidenta de la Nación, su gabinete y/o entorno
familiar, detallando tipo de unidad contratada, horas de vuelo, destinos
cubiertos y costo por hora de vuelo y total del contrato.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
En septiembre de 2007, aún como
candidata, la Presidenta alquiló, para su viaje a Nueva York, un Jumbo Boeing
747-200 de Aerolíneas Argentinas por U$S 300.000.- Es una aeronave con
capacidad para 400 pasajeros, pero la comitiva presidencial es de unas 40
personas. El alquiler incluye combustible, gastos operativos y el
estacionamiento en el destino. Hacer el viaje en el avión presidencial Tango 01,
en cambio, hubiera costado U$S 140.000.- La diferencia entre ambos es que,
para viajar a los Estados Unidos o a Europa, el Tango 01 debe hacer escala
para cargar combustible. En cambio, el Jumbo Boeing 747-200 tiene autonomía
para volar en forma directa.
En octubre de 2009, el Tango 10,
uno de los aviones que integran la flota presidencial, recorrió 3000 km. sin
pasajeros hasta Río Gallegos, y volvió sólo con la hija de la presidenta a bordo.
Esto se repitió en dos oportunidades en abril de 2010, lo que derivó en una
causa judicial que el juez federal Daniel Rafecas archivó en diciembre de
2012.
En noviembre de 2009, se reveló
la habitual utilización del Tango 03 como "avión canillita", para llevar los diarios
del domingo a la Presidenta en su estadía en el sur. El Tango 03, que
actualmente se encontraría fuera de servicio, es un F-28 de 50 años de
antigüedad, de bajo techo operativo, con motores de alto nivel de ruido y
elevado consumo de combustible. Los viajes entre Buenos Aires y Río Gallegos
o El Calafate, insumen 3 horas (6 horas ida y vuelta) lo que hace un promedio
de alrededor de U$S 30.000.- diarios el costo para que la Presidenta tenga en
su mesa, cada uno de los matutinos que se publican en la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires. A partir de 2013, esta tarea de "avión canillita" la estaría
realizando el otro F-28, el Tango 02.
En junio de 2012, la Presidenta
viajó a Río Gallegos para buscar a su hijo, Máximo Kirchner, para hacerlo
atender en el hospital Austral de Pilar por una "artritis séptica" en la rodilla
derecha. Según especialistas, este viaje le costó al Estado unos U$S 82.000.-
La cifra surge de una estimación
de los gastos que genera poner en el aire un avión Boeing 757,
aproximadamente U$S 15.000/hora, multiplicado por las 5 horas y media que
tardo la Presidenta en realizar el viaje. Esa suma incluiría los costos en
combustible, el seguro de motores, el seguro de las partes del fuselaje y demás
gastos "consumibles", como el filtro de aceite, cubiertas y luces, por ejemplo,
pero no contabiliza la espera en tierra del avión.
Para visitar a su hijo, la Presidenta
utilizó el helicóptero oficial Sikorsky H-01, el cual, en un viaje de ida y vuelta
entre Aeroparque y Pilar cuesta unos U$S 8.000.-
El último trimestre de 2012, debido
a una revisión técnica del avión Tango 01, el Gobierno pagó $ 9.829.821,68 a
Milenium Air S.A por la contratación de servicios de transporte aéreo para el
traslado de la Presidenta.
En Enero de 2013, el Gobierno
nacional confirmó que, por temor a un embargo de los fondos buitre, no
utilizaría el Tango 01 para la gira de la Presidenta Cristina Kirchner por Cuba,
Emiratos Árabes Unidos, Indonesia y Vietnam. Sin licitación alguna, y violando
además la Ley 26.659, se alquiló un Global Express, con unas 5000 millas
náuticas de autonomía, a la empresa inglesa Chapman Freeborn. Ese viaje, con
escala en las Islas Seychelles incluida, habría costado U$S 880.000, contra unos
U$S 730.000.- que hubiera implicado hacerlo en el Tango 01.
En noviembre de 2014, el
aeropuerto de Río Gallegos tuvo una jornada atípica a raíz del tránsito que le
imprimió el Gobierno con la llegada de tres aviones oficiales en un breve lapso:
el Tango 10, llevando a la Ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; un
Focker de la Armada, llevando a su par de Defensa, Agustín Rossi; y el Tango
04, llevando al Ministro de Economía, Axel Kicillof, y el Canciller Héctor
Timerman. A Kicillof y Timerman los esperaba una cuarta nave para trasladarlos
a la cumbre del G-20 que se desarrollaba en Brisbane, Australia.
La aeronave que usaron Kicillof y
Timerman es un Jet Falcon 7X, alquilado en Suiza por un valor que, de acuerdo
a los valores de mercado, no podría ser inferior a los U$S 500.000.-, mientras
que el mismo día podrían haber tomado un vuelo programado de LAN con un
costo por pasajero de U$S 6.780.- para la clase Premium Business, la más alta.
Incluso podrían haber alquilado una nave similar a la contratada en San Pablo,
o la utilización de un Airbus de la flota de Aerolíneas Argentinas. Ambas
representaban un costo más bajo, aunque sí implicaban hacer más
escalas.
Estos son sólo algunos datos
dispersos de los gastos que demandaría el traslado y movilidad de la Presidenta
de la Nación, su familia y su gabinete. Se desconoce que algún funcionario de
este gobierno se movilice en alguna aeronave de línea, lo cual no deja de
generar nuestra sorpresa.
Según fuentes del ambiente, la
flota presidencial, que se encontraría "en estado crítico", estaría actualmente
compuesta por:
Tres helicópteros Sikorsky: dos S-
76B matrículas H-02 y H-03, y un S-70A Blanchawk H-01.
Cuatro aeronaves de ala fija: un
Boeing 757-200 Matrícula T-01 y dos Fokker F-28 matrículas T-02 y T-03, y
recientemente adquirido en 2014, un Boeing 737-500 matrícula T-04, modelo
1993, identificado como Monseñor Angelelli.
Una aeronave Lear Jet 60
Matrícula T-10 que se encuentra afectada, según protocolo, al servicio exclusivo
de la Presidencia de la Nación.
El Sikorsky S-70A Blanchawk H-01
estuvo fuera de servicio varias veces y por períodos de 6 a 9 meses, lo que
habría acelerado la compra de un Sikorsky S-76B usado. El S-70A tiene
problemas con el suministro de repuestos, porque es una aeronave de
concepción militar con un único proveedor de repuestos (EEUU), requiere
mayor especialización del personal, lo cual aumenta los costos asociados y
genera que su mantenimiento sea muy costoso.
El problema de mantenimiento se
complica aún más por el hecho que en los escalones de mantenimientos, que
se deben hacer a todas y cada una de estas aeronaves, no se pueden usar
partes intercambiables porque todas las máquinas son distintas y en algunas
situaciones impropias para operar en determinados escenarios, como el S70A,
que por potencia y la turbulencia que genera, es inoperable en la mayor parte
de los casos. Por todo esto se pensó en cambiarlo por un S-76C para
estandarizar la flota rotativa con 3 máquinas modernas y versátiles.
El Tango 01, símbolo de la
ostentación menemista, y que el ex presidente Kirchner había prometido vender
apenas asumiera la presidencia, era considerada obsoleta en el año 2010.
Sumado a ello, el Boeing 757-200 resulta inadecuado por múltiples motivos,
entre ellos: posee limitaciones para operar en la mayor cantidad de pistas del
país, dado que la mayoría son de 30 m. y el T-01 necesita 40 m. de manga; la
altura desde el nivel de pista a la puerta hace que se necesite equipamiento y
rampas especiales que no poseen todos los aeropuertos; el amplio radio de giro
que necesita la máquina, hace difícil la maniobrabilidad en estaciones aéreas
que no poseen calles y plataformas con la amplitud necesaria; y no posee
suficiente autonomía para emprender viajes de larga distancia sin escalas.
En cuanto a los Fokker T-02 y T-
03, son aeronaves viejas (30 años el T-02 y 50 años el T-03), de bajo techo
operativo, con motores de alto nivel de ruido y elevado consumo de
combustible.
Objetivamente, por costos y
maniobrabilidad, en el ámbito doméstico, la Presidenta debería usar el T-10,
que es un Lear Jet ejecutivo que está en perfecto estado de operatividad. Sin
embargo, llama la atención que, reiteradamente, la Secretaría General de la
Presidencia recurre asiduamente contratando a Royal Class para todo tipo de
vuelos.
Algo sobre lo cual no existe
información es sobre la supuesta ausencia de máquinas auxiliares utilizadas
como "aviones verificadores" porque la Fuerza Aérea carecería de presupuesto
para el mantenimiento de estas aeronaves. Estas aeronaves serían dos Lear Jet
35, nomenclados T-25 y T-26, que serían los encargados de verificar todos los
sistemas de aproximación y calibración de las radio-ayudas de todos los
aeropuertos del país, que ayudan a los aviones a aterrizar seguros, incluyendo
a los presidenciales. Sin estas verificaciones, los aeropuertos no podrían operar
dentro de los límites de seguridad requeridos.
En un exhaustivo informe de
marzo de 2014 en el blog Eliminando Variables, José M. Stella e Ignacio Montes
de Oca alertan sobre "Los curiosos gastos en combustible aéreo de la
Presidencia: La sospecha del canillita aéreo de lujo".
De acuerdo al informe, el 7 de
marzo de 2014, la Secretaría General de la Presidencia firmó un convenio con
YPF SA para la entrega, durante doce meses o bien hasta que se acaben $ 12
millones, de combustible a granel para la flota de aviones presidenciales.
El acuerdo involucraba hasta
450.000 litros de aerokerosene (JP1 aeronáutico) por trimestre, o hasta
1.800.000 litros anuales, es decir, unos 5.000 litros de combustible diarios a un
costo de $33.333 cada 24 horas. El JP1 es un tipo de combustible utilizado por
aviones a reacción, no por helicópteros.
El pago del combustible a YPF
sería por adelantado, aunque se trate de una empresa con mayoría estatal, y si
una de las partes decidiera no continuar con el acuerdo, deberá intercambiar
mails con una cuenta de Gmail, ajena al dominio de Presidencia de la
Nación.
YPF deberá realizar el combustible
en condiciones CIF, es decir, haciéndose responsable del costo, seguro y carga
en un total de 57 aeropuertos, 53 en la Argentina y 4 en el exterior.
De las direcciones de entrega,
llaman la atención algunas, como Malargue y Chapelco, dos reconocidos centros
de esquí, que llevan a pensar en el uso recreacional de los aviones de la flota
presidencial.
También llama la atención otros
lugares de entrega de combustible para la flota presidencial, como Junín y La
Plata, en la provincia de Buenos Aires, tanto por la cercanía con Aeroparque,
como por el hecho que sus pistas no son aptas para el Tango 01, que necesita
al menos 1900 metros de pista y 40 metros de ancho para operar.
En el mismo blog, un año después,
los mismos autores presentan otro informe con los curiosos gastos de proteger,
trasladar y atender a la Presidenta, que estiman en al menos $553.602.196
millones desde el 2011, cifra que llevada a valor dólar oficial año por año,
equivaldría a unos U$S 79 millones.
Estos $ 553 millones, no incluyen
partidas adicionales que suelen reforzar el gasto presidencial y tienen que ver
con gastos de combustible, reparaciones de la flota presidencial, y el alquiler de
aviones adicionales, práctica que se incrementó en los viajes al exterior para
evitar embargos por parte de los holdouts. Esas erogaciones extras serían del
orden de los $ 60 millones a los $ 80 millones, con un número final que se
aproximaría a los $ 630 millones.
De acuerdo al número que pudo
corroborar Eliminando Variables, el gasto diario en torno a las tareas y
movimientos presidenciales rondaría los $ 379.089 por día, unos $ 263 por
minuto de cada uno de los 1.460 días desde el 10 de diciembre de 2011 hasta
el 09 de diciembre de 2015.
El rubro que más gasto demandó
es el de "Seguridad, Logística y Comunicaciones", a cargo de la Casa Militar,
que a lo largo del período medido habría acaparado un 66% del total, un
32,7% más que entre el 2007-2011.
Y todo esto teniendo en cuenta
que, desde 4 de enero de 2012, la agenda presidencial se encontraría limitada
por indicación médica, lo que genera suspicacias acerca de este aumento en el
gasto en traslados, ceremonial y actividad burocrática, absolutamente
incoherente con una agenda presidencial cargada de días sin actividades
oficiales y ausencias patagónicas.
Aún se desconocen los gastos en
avituallamientos y combustibles para el corriente 2015, ya que, en la mayoría
de los casos, correrían contratos del año 2014, pero considerando que es un
año electoral, resulta previsible pensar en un aumento considerable de este
monto.
Stella y Montes de Oca concluyen
que resulta "curioso" que, "los gastos de la presidente Cristina Kirchner se
hayan aumentado de un modo tan notorio, incluso por encima del índice oficial
de precios, cuando la actividad presidencial disminuyó por razones médicas. Lo
cierto es que aun con una actividad protocolar limitada, la Presidencia de la
Nación sigue adelante con el gasto como si tal situación no hubiera ocurrido y
la figura de la presidente se hubiera multiplicado a tal punto de necesitar más
aviones para ser trasladada, más documentos para firmar, más viandas para
consumir y gastar en muchas más actividades oficiales en las que,
curiosamente, Cristina Kirchner no está presente. Ese es uno de los misterios
que los autores de esta nota no han podido resolver".
Paralelamente a este incremento,
hace varios años se viene discutiendo sobre la carencia de presupuesto de la
Fuerza Aérea Argentina (FAA) y la consecuente falta de control de nuestro
espacio aéreo y la urgente necesidad de recuperar las capacidades de nuestro
instrumento de defensa aérea.
Y todo esto sucede en el marco de
un preocupante crecimiento del tráfico aéreo ilícito de drogas y sustancias
químicas concentrado en las zonas de la frontera norte del país, en cuyo control
la FAA tendría un rol insustituible.
El Gobierno nacional respondió a
esta amenaza con el Operativo Escudo Norte, que tiene como objetivo
"incrementar la vigilancia y el control del espacio terrestre, fluvial y aéreo de
jurisdicción nacional en las fronteras noreste y noroeste" del país, así como la
"aprehensión" y "puesta a disposición de las autoridades judiciales de los
incursores ilegales".
El operativo se lanzó en 2011, y se
prorrogó anualmente hasta el 31 de diciembre de 2015, pero con números
sumamente elocuentes con respecto a la importancia que el Gobierno le asigna
al mismo: mientras en el Presupuesto 2015 se le asignan $ 1.634.413.883 al
Fútbol para Todos -a esta altura ya supera los $ 1.742 millones-, al Escudo
Norte sólo se le asignan $ 172.309.082. Esto significa que, mientras se destinan
$4.477.846 diarios al Fútbol Para Todos, sólo se destinan $ 472.079 al
Operativo Escudo Norte. Es decir que, por día, se destinan casi 10 veces más a
Fútbol para Todos que a controlar los vuelos ilegales en la frontera norte del
país.
Si todo ese presupuesto se
destinara únicamente a los medios aéreos afectados al operativo, se podrían
garantizar unas 100 hs. diarias de vuelo de Pucarás, o 23 hs. de A-4AR. Y con
ello, la eficacia del Escudo Norte, absolutamente diferente.
Si aplicáramos el gasto diario en el
Fútbol para Todos a financiar horas de vuelo para controlar nuestras fronteras,
podríamos financiar 948 horas de vuelo de Pucarás o unas 218 horas de A-
4R.
Si utilizáramos el gasto diario en
tareas y movimientos presidenciales de $ 379.089 por día en financiar los
medios aéreos afectados al Escudo Norte, ello alcanzaría para garantizar unas
80 horas de vuelo de Pucarás o unas 18 horas de A-4R.
Frente a la carencia de
presupuesto para áreas sensibles de la vida argentina, como lo es el
financiamiento de aviones dedicados a la lucha contra el narcotráfico,
necesitamos conocer los gastos que demanda el traslado de la Presidenta, su
entorno familiar y su gabinete de ministros, a juzgar por la cantidad de
aeronaves que integrarían la flota, las que se contratan al margen de las
mismas y el gasto en combustible y vituallas dedicados a la Agrupación Aérea
Presidencial.
El gasto público, financiado con los
impuestos de los contribuyentes, requiere transparencia que nos permita
individualizar, claramente, las prioridades políticas. En este caso, los datos que
salen a la luz, nos generan estupor e indignación. Es por ello que necesitamos
el Poder Ejecutivo Nacional informe con detalle lo que solicitamos en el
presente pedido de informes.
Por todo lo expuesto, solicito la
aprobación del presente Proyecto de Resolución.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
MARTINEZ, JULIO CESAR | LA RIOJA | UCR |
OLIVARES, HECTOR ENRIQUE | LA RIOJA | UCR |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
PRESUPUESTO Y HACIENDA (Primera Competencia) |