La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Profundo pesar por la muerte de la adolescente activista Zainab al Hosni, de 18 años de edad, ocurrida en Siria el 10 septiembre del corriente año, en un contexto de violencia generalizada y violaciones a los derechos humanos.

Señor presidente:

Zainab Al Hosni, de 18 años de edad y natural de la Ciudad de Homs, Republica Arabe Siria, fue encontrada salvajemente asesinada en una morgue de aquel país. La joven sufrió la mutilación de su cuerpo y tenía señales de haber sido torturada con prácticas inhumanas.

El mencionado País de Medio Oriente se encuentra sumergido en una crisis social desde hace mas de 5 meses, donde se originaron decenas de manifestaciones reclamando reformas al régimen vigente por parte de la ciudadanía. Las muertes y desaparición de personas en condiciones muy poco claras han provocado el repudio de la ONU, solicitando que el Consejo de Seguridad remita la situación de Siria al Tribunal Penal Internacional.

La joven Zainab fue secuestrada el pasado 27 de Julio como parte de una presunta extorsión para que se entregara el hermano de la adolescente, principal activista social de los reclamos opositores al régimen.

Considero necesario repudiar todo acto de violencia contra la mujer, fomentando la concientización de la sociedad sobre este flagelo. La lucha incansable contra la violencia de género y su difusión, lleva a que cada vez más personas se comprometan con la causa, esforzándose por prevenir y combatir las atroces violaciones de los derechos inalienables de la mujer.

El caso expuesto en este proyecto es una muestra más que las mujeres han sido y son las principales víctimas de diferentes formas de violencia en todo el mundo. Únicamente desde la óptica de la desigualdad es posible comprender la violencia ejercida contra las mujeres.

Es imperioso llamar a ponerle fin a estos crímenes imperdonables, sea el uso de la violencia sexual como arma de guerra, la violencia domestica, la trata con fines de explotación sexual, la ablación o mutilación genital femenina, entre muchos otros repudiados delitos contra la mujer.

En tal sentido, y en el convencimiento de la responsabilidad estatal que nos corresponde, creo que resulta estratégico que desde el Congreso de la Nación y particularmente desde esta Cámara, se realicen distintas acciones orientadas a efectos de reclamar el cumplimiento de los derechos de las mujeres. Protegiendo esos derechos y libertades en los casos de violencia contra la mujer es un problema que incumbe a todos los Estados y exige que se adopten medidas al respecto.

Es importante remarcar que esta cámara recientemente dio media sanción al proyecto que intenta otorgar jerarquía constitucional a la convención de Belem Do Pará, Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la violencia contra la mujer. Y años atrás este mismo órgano aprobó el Protocolo Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW), tratado que contribuye a garantizar el derecho de las mujeres a vivir libres de violencia y discriminación.

Por los motivos anteriormente expuestos, es que solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto.