La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Declárese el beneplácito de esta Honorable Cámara de Diputados de la Nación por el nombramiento de la Ingeniera Claudia Quini, como Presidente de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), constituyéndose de esta forma en la primer mujer en presidir este importante organismo.

Señor presidente:

La propuesta para la nominación de la argentina Claudia Quini como postulante para presidir la OIV, surgió a propuesta del embajador argentino en Francia, Aldo Ferrer, quien la presentó en la Sede de la Embajada Argentina en Francia, en la ciudad de París, como candidata oficial de nuestro país para presidir la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV).

Claudia Quini, es Ingeniera Química y se desempeñaba como Subgerenta de Investigación para la Fiscalización del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), fue postulada para ese importante cargo a instancias del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.

Es la primera vez que una mujer es candidata a la presidencia y luego elegida como presidente de la OIV y Claudia Quini fue propuesta en razón de sus antecedentes científico- tecnológicos y de su transferencia de conocimientos y tecnología al sector de pequeños y medianos productores de vinos caseros y artesanales argentinos, en sinergia con ese ministerio y el de Desarrollo Social.

La elección de las nuevas autoridades se realizó en la Asamblea General de la OIV que se celebró, en el marco de la 10° Asamblea General, en el Congreso Mundial de la Viña y el Vino que tuvo lugar en Esmirna, Turquía del 18 al 22 Junio próximo.

La Presidencia del OIV de la Ingeniera Claudia Quini implica también un reconocimiento al relevante lugar que la vitivinicultura argentina ha logrado en el mundo, a través de la excelente relación calidad - precio de sus productos, a la participación activas en los principales foros internacionales, en este caso científicos-tecnológicos como la OIV

La Ingeniera Quini debió dirimir la elección con el sudafricano Jan Booysen, en un comicio del que participaron 30 de 35 países miembros (5 abstenciones). El resultado le fue favorable con el 69% de los votos, entre los que cosechó el apoyo de los representantes de América Latina y de miembros de la Unión Europea, como Francia y España. Si bien debía realizarse una segunda vuelta por no haber alcanzado el 75% necesario para acceder al cargo, con la renuncia de Booysen quedó formalmente ungida como presidente. Clauidia Quini es Ingeniera química de profesión y acredita una trayectoria de 28 años en el Instituto Nacional de Vitivinicultura, como jefa del Grupo de Degustación y Estudios Enológicos, de Viñedos y Normas Analíticas Especiales. Actualmente, está al frente de la subgerencia de Investigación. Sus antecedentes en ese campo, el reconocimiento como "Personalidad Científica Calificada", así como también la transferencia de conocimientos y tecnología al sector de pequeños y medianos productores de vinos caseros y artesanales, fueron fundamentos que el Gobierno argentino utilizó para postularla al cargo. La OIV

La "Organización Internacional de la Viña y el Vino" (OIV) sustituyó a la Oficina Internacional de la Viña y el Vino de la Oficina y fue establecida por el Acuerdo del 3 de abril de 2001. La OIV es un organismo intergubernamental establecido con competencia científica y técnica en el campo de la vid, el vino, los productos de bebe vino, las uvas de mesa, pasas y otros vid.

En el ámbito de su competencia, sus objetivos son los siguientes:

a) informar a sus miembros las medidas para hacer frente a las preocupaciones de los productores, consumidores y otras partes interesadas en la industria del vino;

b) ayudar a otras organizaciones internacionales intergubernamentales y no gubernamentales, especialmente aquellas que llevan a cabo las actividades de normalización; c) contribuir a la armonización internacional de prácticas y normas existentes y, cuando sea necesario, para desarrollar nuevas normas internacionales con el fin de mejorar el desarrollo y comercialización de productos del sector vitivinícola y para tener en teniendo en cuenta los intereses de los consumidores.

En el ámbito de sus responsabilidades, los objetivos de la Organización Internacional de la Viña y el Vino son los siguientes:

a) informar a sus miembros las medidas para hacer frente a las preocupaciones de los productores, consumidores y otras partes interesadas en la industria del vino;

b) ayudar a otras organizaciones internacionales intergubernamentales y no gubernamentales, especialmente aquellas que llevan a cabo las actividades de normalización; c) contribuir a la armonización internacional de prácticas y normas existentes y, cuando sea necesario, para desarrollar nuevas normas internacionales con el fin de mejorar el desarrollo y comercialización de productos del sector vitivinícola y para tener en teniendo en cuenta los intereses de los consumidores.

Para lograr estos objetivos, la Organización Internacional de la Viña y el Vino realiza, entre otras, las siguientes funciones:

- Promover y orientar la investigación y la experimentación en la ciencia y la tecnología; - Desarrollar, hacer recomendaciones y vigilar su aplicación, en relación con sus miembros, en particular en las siguientes áreas: las condiciones para la producción de uva, las prácticas enológicas, la descripción de la definición y / o producto, el etiquetado y las condiciones comercialización, métodos de análisis y evaluación de los productos de la vid; - Presentación de propuestas de todos sus miembros: la garantía de la autenticidad de los productos de la vid, especialmente en relación à-vis de los consumidores, en particular en lo que respecta al etiquetado, la protección de las indicaciones geográficas y, en particular , zonas vitivinícolas y denominaciones de origen designadas por nombres geográficos o no asociados con ellos, ya que no vayan en detrimento de los acuerdos internacionales sobre comercio y propiedad intelectual, la mejora de los criterios científicos y técnicas de reconocimiento y el vino PvP;

- Contribuir a la armonización y la adaptación de la normativa por sus miembros o, en su caso, para facilitar el reconocimiento mutuo en materia de prácticas en el ámbito de sus competencias; - Participar en la protección de la salud de los consumidores y contribuir a la inocuidad de los alimentos: por la vigilancia científica especializada, para evaluar las características de los productos de la vid, promoviendo y orientando las investigaciones sobre la nutrición específica la salud y la adecuada difusión de la información resultante de esta investigación a los profesionales de la medicina y la salud.

Por los argumentos expuestos, solicitamos la aprobación de la presente declaración.