La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

El reconocimiento de esta Cámara a la gran maestra y pedagoga argentina Olga Cossettini por los invalorables aportes realizados a la educación pública y a la renovación de la pedagogía argentina, rindiéndole homenaje en el 110º aniversario de su nacimiento.

Señor presidente:

Olga Cossettini nació el 18 de agosto de 1898 en San Jorge, Provincia de Santa Fe. Como maestra y pedagoga dedicó su vida a transformar la escuela tradicional, la cual recurría al castigo como recurso pedagógico y era ajena a la realidad social.

Su provincia natal la vio desarrollar su potencial. En el año 1914 se recibe de maestra en Coronda. Su obra de renovación pedagógica se desarrolló fundamentalmente en la Escuela Normal Domingo de Oro, de la ciudad de Rafaela, y en la Escuela Experimental Gabriel Carrasco, de la ciudad de Rosario. También llevó a cabo investigaciones en el extranjero, donde visitó Estados Unidos, Inglaterra, Francia e Italia, y participó en misiones para la formación de maestros en Honduras.

En 1930, como regente junto a Amanda Arias, Directora de la Escuela Normal "Domingo Oro", su hermana Leticia Cossettini y todo el cuerpo docente, da inicio a la aplicación de los centros de interés y de la Escuela Serena. Creadora de un tipo de centro escolar dentro de la concepción de la Escuela Nueva o Activa -que recibió el nombre de Escuela Serena- realiza un proyecto educativo que, partiendo de la pedagogía renovadora italiana, sale al campo, al barrio, y se involucra con el medio, basada en el principio de la libertad del sujeto para auto-realizarse, abriéndose a la comunidad y a la cultura.

Impulsora, junto a su hermana, de un proyecto pedagógico en el que la investigación, el conocimiento de la naturaleza y el respeto por los tiempos de aprendizaje de los alumnos se constituyeron en las bases fundamentales de la nueva escuela.

En la Escuela Serena los alumnos compartían con sus maestros lecturas, excursiones, historias, experimentos, paseos y juegos, incluyendo la música, la pintura, el modelado, los títeres, como actividades importantes, se crea un laboratorio de ciencias, una revista escolar, la cooperativa de alumnos, la biblioteca escolar y pública, el club de madres y la asociación de padres, se realizan excursiones y misiones culturales. Todo lo que se impulsaba tenía como objetivo de la revalorización de la capacidad creativa y los aspectos positivos de la producción realizada por los alumnos, convirtiéndolos en protagonistas del aprendizaje y no sólo destinatarios. Este se alcanzó también por medio de la evaluación de los alumnos tomando en consideración sus logros, y promoviendo la superación de los mismos sin estimular la competencia, ya que se movían dentro de la escuela con libertad, escribían y dibujaban como deseaban. El arte ocupó un tiempo importante a través de las dramatizaciones, la danza y los poemas. Esta nueva experiencia "No se trataba de cambios de horarios y de programas; era una reforma profunda de la vida de la escuela que, con espíritu nuevo, iba a abrir de par en par las puertas de las aulas a la vida", escribió Olga en uno de sus textos que lleva por título Sobre un ensayo de Escuela Serena en la provincia de Santa Fe.

La bibliografía de Olga Cossettini incluye títulos como Sobre un ensayo de escuela serena en la provincia de Santa Fe, El Niño y su expresión, Pedagogía de la perversidad, La educación popular en Inglaterra, Francia e Italia, La Escuela Viva, entre otros.

Recibe numerosas distinciones durante el ejercicio de su profesión, tanto de instituciones argentinas como de otros países.

Las diferencias principales con la escuela tradicional pueden resumirse en estos puntos:

- Gran respeto por la personalidad infantil. No sólo es preciso un sentimiento de amor al niño, sino también un detenido estudio biológico y psicológico de su individualidad.

- Eliminación de las fronteras entre la escuela y la comunidad. Se colocó a la educación como un hecho social que debe tener lugar en el entramado vivencial de los hombres.

- Rechazo de toda forma de discriminación. Igualdad en la consideración a niños de las más diversas procedencias y a los colegas, ratifica la aceptación de la pluralidad social, económica y política como substrato republicano.

- Convivencia del maestro con la comunidad lugareña. El domicilio del maestro en la cercanía de la escuela favorece los resultados del quehacer específico.

Esta experiencia revolucionaria y vanguardista en lo pedagógico que representó por aquellos tiempos la Escuela Serena, duró sólo 15 años: por orden ministerial, la misma es clausurada y Olga Cossettini exonerada de su cargo. Su impronta, sin embargo, ha quedado como una marca para la docencia argentina y su legado ha trascendido en el tiempo. Una experiencia educativa que fue replicada en algunos países de América Latina.

Olga Cossettini es recordada por el gran aporte que realizó a la renovación de la pedagogía argentina en las escuelas santafesinas, su lugar de trabajo, a partir de una ajustada mezcla de estudio, intuición e investigación sistemática, trabajo y constancia. Olga Cossettini y su plantel docente sostuvieron una de las experiencias pedagógicas más interesantes en la Argentina de la primera mitad del siglo XX.

Por lo expresado, solicito a mis pares acompañen el presente Proyecto de Declaración.