La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar preocupación por la proliferación de e-mails solidarios, los cuales se utilizan para extraer las direcciones de las personas que los reenvían.

Señor presidente:

Los casos conmueven. Cuentan historias terribles y esperan la ayuda urgente de quien las lee. Se apoyan en la buena voluntad de quienes reciben el e-mail para dar vueltas y más vueltas por el ciberespacio. Y así, de casilla en casilla, van cosechando direcciones y lamentos. O acaso alguien no dudó antes de eliminar alguno de estos pedidos: "¿Y si fuera cierto?".

Tantos son los e-mails de este estilo, que el fundador de Red Solidaria, Juan Carr, decidió crear una página para desterrar estos mitos cibernéticos. En www.mailsverdaderos.blogspot.com hay por lo menos una veintena de supuestas cadenas solidarias que son falsas o, en el mejor de los casos, viejas.

Para ponerlo en números: si Red Solidaria recibe entre 80 y 120 mails diarios, entre 15 y 20 contienen estas cadenas. "

Estos mensajes tristes o apocalípticos tienen un "nombre científico": son hoaxes (en inglés: "broma", "engaño"), correos electrónicos engañosos que se distribuyen en cadena. Algunos asustan con expandir virus informáticos; otros tientan con la posibilidad de hacerse rico por distribuir el mensaje entre sus conocidos y muchos, cada vez más, apuntan a la sensibilidad invocando supuestos niños enfermos, perdidos o que necesitan medicación.

No se trata de ser poco solidario ni incrédulo: este tipo de cadenas les cuesta la privacidad a nuestros conocidos, cuyas direcciones de mail empiezan a circular por la Red. Además, conspiran contra las personas que realmente necesitarían apelar a una cadena para ayudar a un enfermo o encontrar a un familiar. En www.rompecadenas.com.ar hay consejos para reconocer este tipo de mensajes.

Los entendidos sugieren prestar atención a algunos elementos antes de tomar en serio estas cadenas. Si se trata de un mensaje real, debería incluir una dirección de página web en la que se pueda obtener más información, un teléfono real o el respaldo de una organización conocida.

Señor Presidente, por lo expuesto solicito la aprobación del presente proyecto.