La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Declarar de interés de esta Honorable Cámara de Diputados de la Nación la exposición cultural "Postales Patagónicas, homenaje a la beatificación de Ceferino Namuncurá", que se llevará a cabo del 17 de mayo al 15 de junio del presente año en el Museo de Fotografía Fernando Paillet, en Capital Federal.

Señor presidente:

Ceferino Namuncurá, nacido en Chimpay (Río Negro) en 1886, fue nieto del gran cacique mapuche Calfucurá, quien dominó las pampas y se alió a Rosas luego de 1841, recibiendo el título de coronel del ejército de la Confederación Argentina, además de combatir junto a él en la Batalla de Caseros.

Su hijo, Manuel Namuncurá (convertido al catolicismo), dio a luz a Ceferino junto a una cautiva blanca, Rosario Burgos. Enfrentado sin éxito a la Campaña del Desierto del General Roca, que diezmó a la población indígena de nuestro país, debió rendirse y aceptar convertirse en Coronel de la Nación, a cambio del respeto a su tribu.

Ceferino fue bautizado en 1888, y criado para ser el sucesor de su padre: para defender sus tierras y a los indígenas que aún quedaban en su región; por esto, a los 11 años se lo envió a estudiar a Buenos Aires. Por recomendación del ex presidente Luis Sáenz Peña, ingresó al Colegio Pío IX de Artes y Oficios en septiembre de 1897, donde pudo recibir la Sagrada Eucaristía.

Influenciado por los hermanos salesianos, su fervor religioso y su espiritualidad se destacaron desde muy temprano. Luego de asistir a una conferencia sobre las misiones patagónicas, decidió ingresar al Seminario con el fin de evangelizar y educar a sus hermanos, y no el de ser su rey. Sus problemas de salud (sufría de tuberculosis) lo obligaron a mudarse repetidas veces, hasta que Monseñor Cagliero decide llevarlo a Roma con él, adonde arriba en 1904.

Su presencia no pasó desapercibida en Italia: era "el príncipe de las Pampas". Esto le granjeó ser recibido por el Papa Pio X, quien le regaló un estuche con una medalla de plata. Sin embargo, a pesar del esfuerzo puesto en sus estudios, su salud se resintió nuevamente y fallece en 1905, a los 18 años, en el Hospital San Juan de Dios en Roma.

Sus restos descansaron mucho tiempo en el santuario de Fortín Mercedes (Buenos Aires), siendo meta de peregrinaciones ininterrumpidas, debido a su fama de santidad y posterior beatificación. En el año 2009 sus familiares los trasladaron a la Comunidad de San Ignacio, en el departamento Huiliches (provincia de Neuquén), donde fue enterrado de acuerdo a ritos mapuches.

Ceferino encarna en sí los sufrimientos, las angustias y las aspiraciones de su gente mapuche, la misma gente que a lo largo de los años de su adolescencia encontró el Evangelio y se abrió al don de la fe bajo la guía de educadores salesianos. Hay una expresión que recoge todo su programa: "Quiero estudiar para ser útil a mi pueblo". Ceferino, quien deseaba regresar a su pueblo, aunque no para reinar, vio truncado su sueño en vida, pero regresó como beato. En 1973 el Papa Paulo VI declaró a Ceferino "Venerable Siervo de Dios". Esto, sumado a la curación sin explicaciones racionales (y por ende milagrosa) de una mujer con cáncer de útero que en 2000 le rezó pidiendo por su salud, generó las condiciones para declararlo beato, lo cual fue otorgado en 2007.

Aún más, Ceferino Namuncurá es un claro exponente del proceso doloroso y conflictivo de la constitución de la Patria Criolla: su ejemplo de integración a la nueva cultura, lejos de ser sumisión al invasor, era la actitud necesaria para evitar mayores enfrentamientos y derramamientos de sangre en su pueblo tan castigado por ese choque de culturas tan desigual. Religiosamente es un signo más del encuentro de este Nuevo Continente con Dios y de cómo este proceso estuvo muy por encima de las metodologías autoritarias de evangelización asociadas a la conquista.

Esto es lo que se homenajea desde el 17 de mayo en el Museo de Fotografía "Fernando Paillet". Con el auspicio de la Fundación Volpe Stessens, consiste en una exposición de postales de la Patagonia de fines del Siglo XIX y principios del Siglo XX. Las mismas fueron tomadas por diversos artistas prestigiosos, como ser Carlos Brandt, Grossi, Strobach, Eggers, R. Magowan, Writtrn, Rosauer, Domingo Gallo, Carlos Álvarez, Relmu, Clemente Onelli, Samuel Rimathe, Kohlmann, Bourquin, Kaltschmidt y Jontza.

La jornada inaugural, "en el Viento También Sopla una Canción", estará organizada por el Grupo Evangelizador Artístico Jesús Misericordioso, con ilustraciones de Celina Capot y música de Carlos Seoane.

El Grupo Evangelizador nace en el año 2000 por iniciativa de su coordinadora actual y creadora Celina Capot, con el objetivo es evangelizar a través del arte y de la común unión entre artistas profesionales, amateurs, y personas que por distintos motivos no han podido acceder a un estudio artístico, pero que encuentran en el arte un canal para expresarse humana y espiritualmente. Celina Capot es una artista plástica formada en el Instituto Lavardén y el IUNA. Es discípula de Enzo Socco y de su padre, el recordado artista y muralista argentino Eduardo Capot (gran premio Nacional de Dibujo). En cuanto a Carlos Seoane, grabó en 1987 con el grupo Koinonía la "Misa Joven Latinoamericana", además de participar de la animación musical en el acto central de la segunda visita de Juan Pablo II a la Argentina. En el año 1995 aparece su producción "Historias sin historias", y en 1996 graba junto al cantautor peruano Luis Enrique Ascoy "La mañana de aquel día". Le siguen numerosas producciones, incluidas algunas para niños, hasta que en 2007 graba "Ceferino, el lirio de Chimpay", disco que cuenta en canciones la vida del beato de la Patagonia.

Este evento se inscribe en los que se realizan en el marco del 18 de mayo, Día Internacional de los Museos. En 1977, el Consejo Internacional de Museos (ICOM) creó esta fecha para sensibilizar al público sobre el papel de los museos en el desarrollo de la sociedad. El Comité consultivo del ICOM define el tema de este evento que, dado el gran número de países participantes, se organiza en un día, un fin de semana, una semana o un mes entero. Estos últimos años, el Día internacional de los Museos ha conocido su mayor afluencia, con cerca de 30.000 museos organizando actividades en más de 120 países.

"Museos: Las Colecciones crean Conexiones" es el tema propuesto para la edición 36° del DIM. Nos recuerda que los museos son instituciones vivas que permiten crear enlaces entre los visitantes, las generaciones y las culturas del mundo. A medida que el mundo se va alejando de los modos de relación tradicional, los museos tienen la terea de encontrar nuevas maneras de implicar a la comunidad, rindiendo sus colecciones más accesibles, con el fin de interesar al público. Este tema acentúa el poder que tienen los objetos museísticos, no solamente contando su historia, sino también creando un nexo con la comunidad a través de la memoria colectiva. Lo que se busca es sensibilizar al público sobre el rol que desempeñan los museos en el desarrollo de la sociedad, promoviendo la conexión que existe entre los diferentes tipos de colecciones y el público.

Ceferino Namuncurá, "el que sonreía con los ojos", el primer indígena argentino beato, encarna en su persona esta idea de conexiones culturales: influenciado por los valores religiosos salesianos, quiso estudiar en colegios católicos - y finalmente, ingresó al seminario - con la firme intención de ser un guía para el pueblo mapuche, aunque no del tipo que estaba marcado en su legado familiar.

Creo que esta exposición se destaca no solo por su valor cultural sino también por lo que significa la figura de Namuncurá para el acervo intercultural de todos los argentinos. Es por lo expuesto que solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto.