La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

1) Expresar su beneplácito por la restitución de tierras (2.500 ha) a la comunidad Ranquel por parte del Gobierno de la Provincia de San Luis, el pasado 13 de agosto del corriente.

2) Manifestar su más firme apoyo a este tipo de acciones que buscan proteger y promover los derechos de los pueblos originarios de nuestro país.

Señor presidente:

El pasado lunes 13 de agosto del corriente, en cercanías a la localidad puntana de Fraga, el Gobernador de la Provincia de San Luis, Dr. Alberto Rodríguez Saá restituyó 2.500 hectáreas a la comunidad Ranquel en un claro acto de reparación para con nuestros pueblos originarios.

La restitución de las tierras a los ranqueles, que por legítimo derecho le corresponden, se enmarca en una política de estado que viene realizando el Gobierno de la Provincia con el objeto de reivindicar los derechos de las comunidades originarias.

En el mencionado acto, que contó además con la presencia de representantes de diferentes comunidades ranqueles de La Pampa y Buenos Aires, mapuches y huarpes, y bajo una ceremonia de restitución y bendición de la tierra, también se avanzó en el establecimiento de medidas de apoyo para el desarrollo de la comunidad. Por ello, se construirán viviendas, una escuela, un galpón de usos múltiples y dotará a estas estructuras de todos los servicios básicos como agua potable, cloacas, luz, telefonía e Internet con el apoyo del gobierno provincial.

La política de reparación de las culturas originarias que tiene el Gobierno de San Luis no solo alcanza a los Ranqueles sino que alcanza también a los Huarpes y Comechingones, con quienes se han firmados convenios similares.

Sabemos, señor Presidente, la deuda que tenemos con los aborígenes de nuestro país. Tenemos mucho por hacer. Pero tenemos también que reconocer los esfuerzos como el realizado por la Provincia de San Luis; sin lugar a dudas un punto de inflexión en la historia, en la lucha de los pueblos originarios por recuperar lo que por derecho les pertenece.

Por lo tanto, señor Presidente, no podemos sino celebrar tan importante hecho. Que nos llena de orgullo a todos, sin importar banderas políticas. Y que nos señala el camino que debemos seguir en pos de cumplir con lo que nuestra Constitución Nacional no manda.

Por todo lo expuesto, solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto de resolución.