PROYECTO DE TP
Expediente 4156-D-2009
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON LA DISTRIBUCION DE SUBSIDIOS OTORGADOS EN EL PERIODO 2007-2009 A SECTORES Y EMPRESAS PUBLICAS Y PRIVADAS.
Fecha: 28/08/2009
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 104
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Dirigirse al Poder Ejecutivo para que
brinde información sobre la distribución de subsidios, durante los años 2007 y
2008, y primer trimestre de 2009, repartidos por el Estado, directos e indirectos,
subvenciones, y recursos financieros para capitalización, a los siguientes
Sectores y Empresas públicas y privadas, desglosando cada una las empresas
favorecidas
1. Aerolíneas
Argentinas y Austral Líneas Aéreas, antes y después de su estatización
2. Fondo
fiduciario del sistema de infraestructura de transporte, importes otorgados
mediante el sistema de subsidios que se nutre del 22% de cada litro de gasoil que
se vende y otros conceptos. Aclarar si los mismos se utilizan para gastos de
explotación o a inversiones.
3. Transporte
automotor de carga y de pasajeros, especificando el nombre de cada Empresa,
carácter y destino de cada importe subsidiado.
4. Ferrocarriles y
subterráneos, especificando cada empresa operadora de los trenes y destino del
subsidio
5. Fondo
Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de Gas por
compensaciones tarifarias
6. Compañía
Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (CAMMESA) y detallando
préstamos si los hubo.
7. Fondo
Fiduciario para el Transporte Eléctrico Federal y otros destinos del sector
eléctrico
8. Fondos
del sistema vial, destinados a empresas públicas y privadas, incluyendo fondos
redireccionados a otros sistemas.
9. Compañías aéreas, especificar
cada empresa y destino del subsidio para el nuevo régimen de compensación de
combustibles establecido para las aerolíneas de cabotaje
10. Empresa aérea estatal
LADE, transferencias de la cuenta Jurisdicción 91 "Obligaciones a cargo del
Tesoro" al Programa 17 "Transporte aéreo de Fomento", del Estado Mayor
General de la Fuerza Aérea, dependiente del ministerio de Defensa. Detallar
montos y destinos de las mismas.
11. Empresa Nacional de
Energía Sociedad Anónima (Enarsa), subsidios y recursos financieros para su
capitalización; además sobre decisiones administrativas que otorgan dinero a
ENARSA para las compras de gas a Bolivia e importación de GNL
12. Agua y Saneamiento
Argentinos SA (AySA), subsidios y recursos financieros para su capitalización
13. Empresa Argentina de
Soluciones Satelitales SA (Arsat), subsidios y recursos financieros para su
capitalización
14. Nucleoeléctrica, subsidios y
recursos financieros para su capitalización
15. Agencia nacional de
noticias Télam
16. Yacimientos Carboníferos
Fiscales
17. Sistema Nacional de
Medios Públicos (ATC, Radio Nacional, y otros)
18. Ente Binacional
Yacyretá
19. Régimen de incentivo a la
fabricación de maquinaria, que compensa a los industriales locales por la
importación sin aranceles de equipos extranjeros
20. Sector Industrial, detallando
áreas, localización y empresas beneficiadas
21. Sector Transporte,
detallando áreas, localización y empresas beneficiadas
22. Sector Rural, detallando
áreas, localización y empresas beneficiadas
23. Sector Forestal, detallando
áreas, localización y empresas beneficiadas
Detallar en cada caso:
- Fecha, monto y destino, y la partida
presupuestaria utilizada sea esta original de la ley aprobada o el cambio de partida
decidida por el Jefe de Gabinete de Ministros en base a las facultades
delegadas.
- Resoluciones y Disposiciones
emanadas para efectuar los cambios de asignaciones transferidas a otras
jurisdicciones.
- Si una partida o parte de ella fue
utilizada para otra finalidad, detallar como se ejecutará lo previsto en el
presupuesto y que queda disminuido o sin asignación, con las alternativas
analizadas para ello.
Informar además sobre
- préstamos reintegrables y
capitalización de empresas, detallando fechas, montos y decisiones
administrativas, que las originaron
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Como antecedente de este proyecto
mencionamos el expediente 6533-D-2006, donde también se solicitaba
información sobre los mega-subsidios que el gobierno repartía y reparte, por ello
se lo califica como el festival de subsidios.
Para todo sirven los
subsidios del Estado que, según la definición de la Real Academia Española, es
una "prestación pública asistencial de carácter económico y de duración
determinada".
El proyecto tiene como fundamento
solicitar al Poder Ejecutivo para que brinde información sobre la distribución de
subsidios, durante los años 2007, 2008, y primer trimestre de 2009, repartidos por
el Estado, sean directos e indirectos, subvenciones, y recursos financieros para
capitalización, a los siguientes Sectores y Empresas públicas y privadas.
Con tarifas de servicios públicos
congeladas, los subsidios a las empresas concesionarias son la parte más visible
del reparto, aunque trenes y colectivos poseen los subsidios más cuantiosos y
conocidos, no son los únicos.
Casi un tercio de los subsidios
otorgados por el Estado nacional no presenta condiciones de total transparencia,
según un estudio del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la
Equidad y el Crecimiento (Cippec)
El Indice de Transparencia, realizado
por tercer año consecutivo, se elabora en función de la posibilidad de individualizar
al beneficiario final y el costo por unidad de los subsidios entregados a empresas
privadas, organizaciones sin fines de lucro y ayudas sociales a personas.
Si bien se registra una leve mejora
con respecto al año anterior, el índice 2007/2008 revela que todavía existen
núcleos críticos por su falta de transparencia. El 67,8% de los subsidios son
plenamente transparentes (permite el acceso a los beneficiarios finales y montos
individuales), siete puntos por encima del resultado del índice 2006/2007.
En cambio, el 18,9% de los subsidios
($ 3500 millones) es asignado en condiciones institucionales de completa
opacidad. Y el 9,7% permite identificar el grupo destinatario, aunque no
individualiza el nombre del destinatario. El resto son partidas sin discriminar.
El índice permite identificar tres tipos
o estilos de gestión diferente frente al desafío impuesto por las reformas pro-
transparencia.
En primer lugar, se ubican los
ministerios y las agencias que implementan una política transparente de subsidios
e, incluso, mejoran, como el Ministerio de Relaciones Exteriores.
En segundo lugar, se presentan casos
como el del Ministerio de Trabajo, donde se aplica una regla estricta de
transparencia con algunos programas (Plan Jefes y Jefas de Hogar), mientras que
otros, como el Programa de Empleo Comunitario, permanecen en la
opacidad.
Finalmente, aparecen los "ministerios
y agencias que se resisten a las reformas protransparencia", como el Ministerio de
Desarrollo Social, que no transparenta la asignación de subsidios a personas ni a
organizaciones sin fines de lucro.
El índice mide la transparencia de los
18.443 millones de pesos que transfirió el Poder Ejecutivo Nacional en concepto de
subsidios a empresas privadas, instituciones sin fines de lucro y personas en el año
2007.
El informe del Cippec agrega que "los
subsidios a organizaciones sin fines de lucro son, sin duda, uno de los núcleos más
críticos por su falta de transparencia: 31,41% de las asignaciones a estas
instituciones no transparentan cuáles son las organizaciones beneficiarias finales ni
el valor unitario del subsidio".
En cambio, el índice ubica a los
subsidios asignados a empresas privadas como los más transparentes de las tres
categorías. "Los datos muestran un nivel óptimo de transparencia en
general",
Según
datos obtenidos, los subsidios se duplicaron en 2008, hasta $ 30.908
millones
La mayoría de las subvenciones se
destinó al sector energético y al transporte público
Los fondos públicos destinados a dar
subsidios, tanto a empresas públicas como a mixtas y privadas, se incrementaron
el año pasado un 111% en comparación con 2007. De cada diez pesos otorgados,
ocho se destinaron al sector energético -electricidad y gas- y a los concesionarios
de transporte (tren, colectivo y subte).
Las subvenciones sumaron $ 30.908
millones, según un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto y
Administración Financiera Pública (ASAP). Son fondos que se usaron para contener
aumentos en las tarifas de servicios públicos -muchas alzas se están dando por
estos días para algunos segmentos, con la promesa de reducir esas asignaciones-,
y también para subsidiar el consumo de algunos alimentos básicos, como pan,
fideos y carne.
El ritmo de crecimiento de los
subsidios tuvo un leve descenso con respecto a la tasa de incremento registrada
en 2007, cuando la cifra total había resultado un 125% superior a la del período
previo. De acuerdo con el informe de la ASAP, al sector energético fueron $ 16.208
millones, mientras que las empresas de transporte recibieron 8746 millones.
Aerolíneas Argentinas fue destinataria
de 1064 millones, contra un monto de 500.000 que le había llegado en 2007. La
compañía de bandera recibió ese dinero para gastos de operación -salarios,
combustibles, pago a proveedores- a partir de junio, cuando se intensificó el
conflicto entre el Gobierno y el grupo español Marsans, a tal punto que el Estado
comenzó a poner dinero y tomó la gestión de la empresa.
Para los trenes y subtes, en tanto, se
destinaron $ 2808 millones, un 22% más que en 2007.
En el rubro de energía, los principales
destinos de los subsidios fueron la compañía mayorista de electricidad Cammesa y
la petrolera Enarsa. Esta última, según el informe, habría derivado recursos
principalmente a importar gas desde Bolivia.
A la cifra de ayudas se sumaron otros
$ 78 millones destinados a préstamos a empresas, que en 2008 estuvieron
concentrados en el sector energético: en este rubro hubo una caída del 95% en
relación con 2007.
Más allá de los subsidios para
contener alzas de precios, otro número del presupuesto nacional que mostró una
tendencia alcista fue el de la ampliación de los montos originalmente aprobados
por el Congreso para gastos corrientes. En el ejercicio analizado, las ampliaciones
totalizaron $ 41.537 millones, 6723 millones más que las que se habían otorgado
en 2007. Eso representó una expansión del 26 por ciento.
El Ministerio de Planificación Federal,
fue la dependencia pública más favorecida por esas decisiones posteriores a la
aprobación de la ley de gasto estatal: recibió $ 13.652 millones adicionales a lo
que estaba previsto.
Al analizar las perspectivas para este
año, el informe pone el acento en el desafío que representan los vencimientos de
deuda que tendrá el Estado argentino, en un escenario que se presenta
complicado. Y advierte que el presupuesto aprobado "deberá ser objeto de
importantes modificaciones en su ejecución" por los efectos de la crisis.
Se estima que en 2009
los subsidios a los combustibles subirán hasta $ 4.685 millones
El gasoil que se importara, sin
impuestos internos, casi el doble que en 2008.
Pese a que la voces oficiales habían
anunciado que el Presupuesto 2009 contenía un fuerte recorte de subsidios en el
área energética, la letra chica del proyecto de ley remitido al Congreso indica que
los aportes estatales seguirán teniendo un rol destacado durante el próximo año.
Cammesa la compañía administradora del mercado eléctrico y la estatal Enarsa
recibirán 4.685 millones de pesos para importar gas, gasoil y fuel oil que luego
volcarán en el mercado interno a precios subsidiados.
Además, como la producción local de gasoil y diésel no será suficiente para
abastecer la demanda, se permitirá importar libre de impuestos hasta 3 millones
de metros cúbicos, casi el doble de lo autorizado para este año.
Por el lado del sector eléctrico, el Presupuesto 2009 asigna una "asistencia
financiera" a Cammesa de $ 3.623 millones que se destinará "principalmente a
financiar el abastecimiento de combustibles a las centrales térmicas".
En el caso de Enarsa, se prevén partidas específicas por $ 1.432 millones para
sostener la importaciones de gas de Bolivia y GNL por barcos, la provisión de
propano-aire a la red de gas natural, el abastecimiento de combustibles líquidos y
la sustitución industrial de gas y electricidad por combustibles alternativos.
ambién en materia energética aparecen otras dos perlitas. Por un lado, la
autorización al efe de Gabinete para que reasigne partidas destinadas a "iniciar las
obras de las centrales hidroeléctricas santacruceñas Cóndor Cliff y Barrancosa",
cuyo costo total según los cálculos privados superará los US$ 3.000 millones.
Y por otro, el otorgamiento de un
"préstamo preferencial" por US$ 450 millones a Bolivia para la construcción de una
planta separadora de gases en Yacuiba.
En sector Transporte, los datos más llamativos son los "refuerzos prespuestarios"
para los fondos de donde salen los subsidios a colectivos, trenes y subtes. A los
ferrocarriles, la asistencia extra será de $ 690,2 millones, mientras que para las
líneas de ómnibus habrá un "complemento" de $ 536 millones. Estos recursos se
sumarán a los ingresos del impuesto al gasoil que son la principal fuente de pago
de los subsidios a los transportistas.
En el caso de Aerolíneas, el Presupuesto deja abierta la puerta para pagar
subsidios ilimitados. Según el artículo 26, la Jefatura de Gabinete podrá adecuar
las partidas para cubrir los déficits operativos de Aerolíneas y Austral durante todo
el año o hasta que se complete la reestatización.
Otro caso de
malversación:
El Gobierno decidió prorrogar por un
año el régimen de incentivo a la fabricación de maquinaria, que le cuesta al fisco
mil millones de pesos anuales y que compensa a los industriales locales por la
importación sin aranceles de equipos extranjeros. Aunque los estímulos fueron
usados para desviar pagos a empresas fantasmas, el régimen que venció seguirá
vigente por doce meses más. Y pese a que las denuncias llegaron a la Justicia y a
la Fiscalía de Investigaciones Administrativas.
Los incentivos se entregan a través de
un programa que creó Domingo Cavallo en 2001 para proteger a las fábricas
locales de la competencia importada. A las metalúrgicas que adhieren a él se les
reintegra un 14% de su facturación, para compensarlas por la eliminación del
arancel (también del 14%) que se cobraba hasta ese año a los bienes extranjeros.
Pero la compensación fue percibida también por empresas que no existen, otras
que declararon no tener empleados y algunas que "aceleraron" los pagos mediante
sobornos.
Los giros injustificados se concretaron entre mediados del año pasado y marzo de
éste. La Secretaría de Industria se apuró después a denunciar 16 pagos apócrifos
por $ 23,9 millones. Pero omitió al menos otros cinco, que insumieron casi siete
millones más.
Las desprolijidades en el régimen son
tales que en la lista de beneficiarios no sólo hay fabricantes de máquinas. Hubo
pagos a agencias de turismo, comerciantes de granos e intermediarios de ganado.
Los cobraron apoderados y gestores que fraguaron habilitaciones, facturas y
balances para recibir las subvenciones. En algunos casos engañaron a pequeños
empresarios para que les prestaran su nombre y su CUIT y en otros pagaron por la
cesión de los papeles y poderes.
Repasamos un poco
de historia y antecedentes con los benditos subsidios
Se gastaron $ 4418 millones para
frenar la inflación en 2006, es decir que el esfuerzo de la caja oficial estuvo
básicamente destinado a dos rubros que hubieran recalentado el índice de
inflación: los transportes y las tarifas energéticas.
Allí se dirigieron la mayoría de los
fondos públicos. La lucha contra la inflación que despliega el secretario de
Comercio Interior, Guillermo Moreno, tiene límites territoriales y sectoriales muy
claros y concretos: los lugares y productos que alcanza la medición del Instituto
Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El secretario de Transportes, Ricardo
Jaime, defendió el sistema de subsidios al transporte de pasajeros al sostener que
"permitió mantener las tarifas". "Eliminar dicho subsidio por completo implicaría
tener que aumentar esas tarifas al doble de las actuales",
Otro gran monto de subsidios se
destinó a la generación de electricidad con el fin de sostener la misma cantidad de
energía, aunque producirla cueste mucho más. Este es el caso de las generadoras
térmicas, que en vez que funcionar a base de gas natural tienen que quemar fuel-
oil, varias veces más caro que el gas.
El transporte es el que se llevó la
mayor parte. En 2006, entre los ómnibus y colectivos, de larga distancia y
urbanos, más el transportes de carga y los ferrocarriles se llevaron 2601 millones
de pesos, aproximadamente un 2,5% del presupuesto total de 2006.
En total, entre subsidios y préstamos,
durante 2006 se destinaron un total de 3780 millones al sector energético, es
decir, un 60 por ciento más que el año anterior. Si bien las autoridades se
resistieron a toda costa a admitir la existencia de una crisis energética, y con el
afán de no autorizar el aumento de las tarifas de los servicios públicos, la mayor
parte de la transferencia de fondos fue a parar al financiamiento de la política
instrumentada en ese sector.
El Gobierno aumentó durante el año
anterior un 84 por ciento los subsidios a empresas públicas y privadas. En total, se
desembolsaron 6838 millones de pesos. Así lo indica un informe de la Asociación
Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).
Montado sobre el incremento de la
recaudación impositiva y la utilización de los superpoderes, el Gobierno aumentó
el año pasado, respecto de 2005, los subsidios a las empresas privadas y
públicas.
En el mismo período, desembolsó, en forma de asistencia financiera mediante
préstamos reintegrables y capitalización de empresas, otros 1124 millones,
aunque en este caso la cifra fue un 7% menor que la del año anterior.
Todos los colectivos urbanos que circulan por el país pagan un gasoil
diferenciado, a un precio menor, como una manera de mejorar la ecuación de las
empresas. Pero las que circulan por la Capital Federal y el Gran Buenos Aires
(que es jurisdicción nacional) tienen además un adicional como compensación de
la tarifa, dado que El Indec pondera el precio del boleto mínimo de colectivos en la
Capital Federal.
Durante el año 2005, las empresas de
transporte recibieron un 30% más de subsidios para solventar los costos, a cambio
de que no se toque la tarifa. Pero si la comparación se hace entre diciembre de
2005 y con el mismo mes del año 2004, el Gobierno aumentó sus desembolsos en
un 92 por ciento. En el 2006 se produjo otro incremento como vimos anteriormente
de 2601 millones de pesos. Si las negociaciones salariales concluyen en
aumentos para los trabajadores, las subvenciones deberán subir aún más.
En junio de 2001 se creó una tasa
sobre el gasoil que originalmente era de $ 0,05 por litro. En abril de 2002 se
modificó: un 18,5% de cada litro se integraría a un fideicomiso. Finalmente, se lo
fijó en un 20,2 por ciento. El fondo fiduciario aporta al Sistema de Infraestructura
de Transporte, que se integra con el sistema vial integrado y el sistema integrado
de transporte terrestre.
El último semestre de 2005 se incrementaron fuertemente los subsidios por un
nuevo precio que los transportistas pagan por el gasoil. En junio, el Gobierno
anunció que el valor del gasoil pasaría a costar $ 0,42 para el transporte de corta
distancia y 0,62 para el de larga. Los subsidios prácticamente se duplicaron.
Mientras que los últimos seis meses de 2004 los colectiveros recibieron 282
millones, en el último semestre del año pasado sumaron $ 543,4 millones, es
decir, un 92% más. Esto tiene que ver con un aumento de los costos: los insumos
y los sueldos, principalmente.
Lo que sucede con el ferrocarril es que
el Gobierno ha dejado prácticamente la inversión en sus manos en los últimos
años. Como el material rodante y las vías son propiedad del Estado, la inversión
no pasa por estos fondos. Con los subsidios se pagan los mayores costos de
explotación, el ferrocarril tiene una fórmula de cálculo para los subsidios que toma
en cuenta algunos egresos de las empresas, como los salariales y la energía.
En medio de la suba de precios, los
usuarios del transporte público pueden estar tranquilos: el Gobierno no escatimará
esfuerzos para que los boletos mantengan los valores que las máquinas
expendedoras estampaban en abril de 2002. Pero a no ilusionarse con la ecuación
de que con más aportes mejore el servicio, por lo menos de colectivos, este
sistema no permite que haya una gran inversión en nuevas unidades.
En el 2005 se tienen datos que se
usaron dinero destinado a terminar Atucha para pagar subsidios a trenes. Con
fecha 27 de julio, la Jefatura de Gabinete transfirió partidas presupuestarias para
cancelar subsidios y compensaciones tarifarias a los trenes de pasajeros. Esa
medida bloqueó dos iniciativas ligadas a la generación eléctrica: por un lado, se
usaron $ 63,7 millones que estaban destinados a terminar Atucha; por el otro, se
gastaron $ 21 millones que iban a financiar un programa de energía eólica de la
compañía estatal Enarsa.
En el caso de Nucleoeléctrica, el dinero
para financiar las obras de Atucha II lo iban a recibir bajo la forma de un crédito de
largo plazo de parte del Estado.
El dinero fue destinado a "cubrir la deuda acumulada en los últimos años por el
reconocimiento de los mayores costos operativos que afrontaron las
concesionarias ferroviarias del área metropolitana", explicaron la semana pasada
en la Secretaría de Transporte. Esto es, subas de sueldos y de la energía que no
fueron trasladados a las tarifas de los ramales Roca, San Martín, Belgrano Sur y
Norte, Mitre, Sarmiento y Urquiza.
"Esos 63,7 millones eran parte de la partida que teníamos para terminar Atucha II",
reconocieron fuentes de Nucleoeléctrica Argentina, la empresa estatal propietaria
de la central atómica. Terminar Atucha es una de las soluciones que el Gobierno
plantea para solucionar el déficit energético. Pero los acuerdos con Siemens, que
diseñó la usina, no se terminaron de renegociar, y el trámite se demoró. Y todavía
nos quedan otros 80 millones para encarar y terminar las obras.
Si de subsidios polémicos se trata, los que se manejan dentro de los fondos
fiduciarios son la vedette. El Gobierno ha hecho de ellos una fenomenal
maquinaria de reparto de subsidios que está dispuesto a ampliar, por lo menos si
se recuerda que pidió al Congreso que obediente lo aprobó una ley para crear
cargos específicos en las facturas de servicios que formarán parte de nuevos
fideicomisos.
La delegación de facultades al Jefe de
Gabinete de Ministros, se usa indiscriminadamente para cambiar partidas
asignadas presupuestariamente, cubriendo agujeros negros como consecuencia
de mantener congeladas las tarifas de los servicios y de otras prioridades no
previstas o mal estimadas en el presupuesto.
Podríamos continuar enumerando
ejemplos del "festival de subsidios", es cierto que, gracias al Gobierno, todo lo que
producen nos sale más barato; pero ¿de dónde saldrán el gas, el combustible, la
carne y el resto de los bienes y servicios que queremos consumir en el futuro?
Bueno es recordar además que es
imposible adentrarse en el panorama de subsidios en las provincias, por lo tanto
de este universo no existen cifras concretas.
Cada uno de los gobiernos provinciales recauda sus ingresos y recibe, además,
dinero de la Nación. Gran parte de ellos se destina a subsidios que manejan
directamente los gobernadores y los intendentes.
"Es imposible tener un
número global de todos los subsidios del país porque hay planes cruzados en
todos lados. Hay que conformarse con los números del presupuesto que son
bastante elocuentes por lo abultados"
El congreso necesita estar informado
de todos los cambios que no se publican en los medios específicos de divulgación,
para que a su vez la ciudadanía esté también enterada de los destinos de los
fondos públicos-
En base a ello solicitamos la
aprobación del presente proyecto.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
GALVALISI, LUIS ALBERTO | CIUDAD de BUENOS AIRES | PRO |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
PRESUPUESTO Y HACIENDA (Primera Competencia) |