El Senado y Cámara de Diputados...

Art.1º Incorpórese en el artículo 11º de la Ley de Educación el siguiente inciso:

w) Coordinar políticas con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) a fin de potenciar el uso de los satélites en el desarrollo del sistema educativo y perfeccionamiento de los docentes.

Señor presidente:

La CONAE realiza importantes esfuerzos en el ámbito educativo a todos los niveles, desde el primario hasta el universitario, para difundir y promover el conocimiento y el uso de la tecnología espacial y sus aplicaciones.

Las actividades en este campo comprenden conferencias de divulgación y capacitación de docentes, programas que dan la oportunidad a estudiantes de todas las edades a participar en el diseño de sus propios experimentos, capacitación en las aplicaciones de imágenes satelitales y difusión de material didáctico.

El propósito del Proyecto Educativo SEM es dar a estudiantes de todas las edades, desde el nivel primario al universitario, así como a sus maestros y profesores, la oportunidad de diseñar sus propios experimentos espaciales, pasando por todas las etapas de un proyecto de este tipo: diseño, selección, construcción, calificación espacial, vuelo al espacio y análisis y publicación de los resultados.

Proyecto Educativo SEM.

El propósito del Proyecto Educativo SEM es dar a estudiantes de todas las edades, desde el nivel primario al universitario, así como a sus maestros y profesores, la oportunidad de diseñar sus propios experimentos espaciales, pasando por todas las etapas de un proyecto de este tipo: diseño, selección, construcción, calificación espacial, vuelo al espacio y análisis y publicación de los resultados.

Los experimentos seleccionados viajan al espacio en uno de los trasbordadores espaciales de la NASA, en un contenedor del tipo de los así llamados Get Away Special Cannister (GAS-CAN), denominado Space Experiment Module (SEM) o Módulo de Experimentos Espaciales. Los SEM fueron desarrollados por la NASA como una alternativa eficiente para permitir que jóvenes estudiantes tuvieran la oportunidad de realizar experimentos espaciales.

Desde 1998, la CONAE ha firmado acuerdos con la NASA que le han permitido el uso de los SEM por parte de estudiantes argentinos. Hasta principios del 2001, la Argentina había sido el único país en participar en este tipo de actividad; en la actualidad participan también bajo convenios similares Australia, España, Italia, Marruecos y Portugal.

El primer proyecto piloto del programa SEM que patrocina la CONAE se llevó a cabo en 1998, con la participación de cuatro escuelas primarias y secundarias que proveyeron semillas autóctonas de diversas variedades, con el propósito de estudiar el efecto que la radiación cósmica y la gravedad puedan tener en su poder germinativo. Estos experimentos volaron en el trasbordador Discovery en octubre de 1998, en la misión STS-95, la misma que llevó nuevamente al espacio al astronauta John Glenn.

En el segundo proyecto se incluyó 19 experiencias de colegios primarios, secundarios, escuelas técnicas, institutos de profesorado y universidades de la Capital Federal y las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Chubut, que volaron en el trasbordador Atlantis, misión STS-101, del 19 al 29 de mayo de 2000. Entre los elementos enviados se encontraban, entre otros, detectores termoluminiscentes y plásticos de trazas de partículas cósmicas, para medir dosis de radiación, rayos gamma y neutrones lentos; elementos magnéticos y placas electrónicas para ver los posibles efectos de la radiación cósmica en estos elementos tecnológicos de uso cotidiano; semillas y aceites esenciales derivados de especies patagónicas que se utilizan en la elaboración de perfumes y fármacos; muestras de Artemia Salina (Sea Monkeys), para detectar el posible efecto del ambiente espacial en los mismos; semillas variadas, incluyendo soja transgénica, humus, sustancias generadoras de color, agua, aceite y propóleos.

El tercer proyecto tuvo lugar del 5 al 17 de diciembre de 2001 en el trasbordador espacial Endeavour, misión STS-108, en una nueva misión a la estación espacial internacional. A bordo del trasbordador, se llevaron dos experimentos estudiantiles argentinos. El primero, denominado RESUMÉ, fue diseñado y construido por la Universidad Tecnológica Nacional (Regional Haedo) para probar un sistema de liberación de partes móviles de satélites de bajo costo y alta confiabilidad. El otro, llamado CRISTANAR, consiste en un experimento de cristalización en condiciones de microgravedad que fue diseñado y construido por alumnos y profesores de la Universidad Nacional de Rosario.

Por los motivos aquí expuestos, solicito a mis colegas legisladores apoyar, con su voto, este proyecto de ley y requerir su pronta respuesta.