La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

1. Reemplázase en el artículo 61 del Reglamento de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación, la denominación "Vivienda y Ordenamiento Urbano" por "Vivienda, Hábitat y Ordenamiento Territorial".

2. Sustitúyase el artículo 88 del Regla- mento de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación, por el siguiente:

Artículo 88: Compete a la Comisión de Vivienda, Hábitat y Ordenamiento Territorial dictaminar sobre todo asunto o proyecto relacionado con la temática habitacional, así como las que se refieren a aspectos administrativos, económicos, financieros, sociales, ambientales, técnicos y legales de los asentamientos humanos, en lo referente a la vivienda, el hábitat y el ordenamiento territorial.

Señor presidente:

El nombre o la denominación de una comisión puede parecer una formalidad de segundo orden, sin embargo condiciona muchas veces el enfoque desde el cual se abordan las problemáticas que los legisladores queremos colaborar a solucionar.

En el caso de la Comisión de "Vivienda y Ordenamiento Urbano", coincidentemente las políticas públicas en nuestro país estuvieron más relacionadas al método o la herramienta, que al ambiente humano y su necesidad. Es decir, históricamente se intentó solucionar la injusticia social que significa tener familias y seres humanos de toda nuestra geografía en condiciones denigrantes, insalubres e inhumanas de habitabilidad de su lugar de morada, cuando no directamente en la calle, edificios públicos o a la intemperie, a través de planes de vivienda que accesoriamente aumentaban los índices de empleo y la actividad económica en todo el país. De esta forma y paradójicamente, "la vivienda" se transformó en la política central y la preocupación de los legisladores y no el todo, es decir el hábitat humano y su territorio de residencia con sus características geográficas, culturales y sociales.

Por otra parte, la emergencia ante nuestros ojos de los grandes conglomerados urbanos y el hacinamiento que provocaron las grandes concentraciones humanas en la génesis y persistencia de las megalópolis, con su consecuente pérdida de calidad de vida, la mayor demanda y por tanto el déficit en el acompañamiento de desarrollo de los servicios y de los elementos ordenadores de la convivencia y el aumento de la agresividad que significa el achicamiento del espacio vital, hicieron perder de vista en muchos casos la génesis del problema o al menos su contrapartida, a nuestro entender, la migración de los campesinos a la ciudad, signada por el olvido del acceso de los beneficios de la sociedad moderna y acosada por la concentración de la tierra, la pauperización de sus economías familiares y la subdivisión de su principal medio de producción, la tierra.

Actualmente el crecimiento de las posibilidades de acceso a la vivienda desnudó otros problemas que siempre estuvieron presentes, pero que quedaban relegados ante la emergencia. Uno de ellos es el acceso al espacio físico para la consecución de la misma, es decir, la necesidad de tener políticas orientadas a mejorar las posibilidades de poner a disposición de las familias argentinas tierras, de mejorar las condiciones su tenencia y propiedad para los habitantes de regiones y territorios respetando la diversidad cultural de los mismos. Pero especialmente aportar herramientas legislativas que promuevan un mejor ordenamiento, por tanto, aprovechamiento y optimización de la tierra y los espacios destinados a su habitabilidad y uso humano, desde una mirada del todo (urbano y rural) que guie y oriente una mayor planificación y previsión del desarrollo urbanístico de nuestras ciudades pero también de la nueva ruralidad y el desarrollo de los territorios.

En cuanto al Ordenamiento Territorial, es una concepción que tiende a que la relación Hombre - Ambiente sea amigable y, a su vez, un uso racional de los recursos para que la tierra esté al servicio de todos los hombres, ahora y para las futuras generaciones, en la utilización perdurable de los recursos naturales, en especial la tierra.

Por todo lo expuesto, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto para renombrar la comisión como "Vivienda, Hábitat y Ordenamiento Territorial".