PROYECTO DE TP
Expediente 3781-D-2010
Sumario: EXPRESAR ADHESION A LA DECLARACION DEL RIO DE LA PLATA, PUBLICADA EL DIA 17 DE MAYO DE 2010, EN TORNO A LA PASTERA BOTNIA.
Fecha: 02/06/2010
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 67
La Cámara de Diputados de la Nación
DECLARA:
Expresar su adhesión a la Declara-
ción del Río de la Plata, publicada el día 17 de mayo de 2010 y firmada por
representantes políticos argentinos y uruguayos por una iniciativa del Club Polí-
tico Argentino sobre la resolución del diferendo en torno a la pastera Bot-
nia/UPM.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Tras varios años de
desencuentros entre dos pueblos hermanos, la emisión de un texto que aborda
el diferendo en torno a la pastera Botnia/UPM, elaborado por argentinos y uru-
guayos, políticos y especialistas de ambos países, es un hecho sin anteceden-
tes. La presente declaración se trata de un paso adelante en el reencuentro de
ambos pueblos, ansiado y necesitado por uruguayos y argentinos.
Por ello es que creemos importan-
te que la Honorable Cámara exprese su adhesión a esa Declaración, cuyo texto
es el siguiente:
"Con el cono-
cimiento del fallo del Tribunal de La Haya se ha abierto una nueva etapa en la
historia del diferendo que, lamentablemente, afectó los vínculos entre la Repú-
blica Oriental del Uruguay y la República Argentina. Los gobiernos de ambos
países recibieron el fallo con la mejor disposición, Argentina declaró su voluntad
de instrumentar con Uruguay el monitoreo conjunto, y Uruguay se abstuvo cla-
ramente de presionar a Argentina en lo que se refiere al corte de la ruta y el
puente internacional. La ausencia de declaraciones altisonantes, en los días si-
guientes, y la disposición del presidente Mujica a pagar un precio político para
allanarse a un deseo del gobierno argentino en la Unasur, completaron este
cuadro de distensión.
Los abajo fir-
mantes, argentinos y uruguayos comprometidos con el entendimiento fraterno
de nuestros pueblos, entendemos que se ha creado, así, una excelente oportu-
nidad cuyo aprovechamiento requiere de iniciativa y de acción por parte de
ambos gobiernos tanto como de fuerzas políticas y actores involucrados en la
cuestión. Es el momento en que la diplomacia debe conjugarse con la política.
Ha pasado una etapa en la que el vínculo entre ambos países descansó casi
exclusivamente en los gobiernos, para abrirse una en la que sus ciudadanos
deben tener un rol protagónico. Es en ese sentido que sostenemos que:
- El monitoreo
conjunto de la planta de Fray Bentos debe implementarse lo antes posible me-
diante mecanismos transparentes y accesibles; las capacidades técnicas para
que Argentina complemente el monitoreo uruguayo existen y deben ser movili-
zadas de inmediato. Esto supone fortalecer a la CARU como autoridad de apli-
cación, y que la tarea descanse en laboratorios nacionales certificados interna-
cionalmente. Pero las comunidades locales de ambas márgenes del río deberían
tener presencia y participación en la tarea. Asimismo, esta doble experiencia
conjunta debe ser el primer paso de una política de monitoreo integral para
toda la región, tras la fijación de estándares compartidos que supongan la
adaptación de las plantas ya existentes así como su cumplimiento por parte de
las futuras. A corto plazo debe acordarse el monitoreo conjunto y sistemático
de todo el tramo del Río Uruguay que compartimos ambos Estados. Esto permi-
tirá realizar un mapeo del estado ambiental del agua, suelo y aire sobre el río
que determine la situación de partida y permita la rápida detección de actividad
contaminante de cualquier origen (industrial, agrícola o ciudadano) proveniente
de las riberas o de aguas al norte. Esto colocaría al Río Uruguay y a nuestros
países, como modelo de cuidado ambiental y desarrollo sustentable.
- La continua-
ción del corte de la ruta internacional 136 y del Puente General San Martín tiene
efectos notoriamente perjudiciales no solamente para las poblaciones cercanas
sino también para ambos pueblos. Para el caso argentino, aceptar pasivamente
el corte equivale a admitir una violación permanente del derecho. Por otra par-
te, entendemos que en las presentes circunstancias, no es mediante coerción
abierta, sino mediante persuasión, que debe resolverse el problema. Pero el
problema debe resolverse, y para eso precisa ser encarado, cosa que hasta
ahora no ha sucedido, más allá de declaraciones esporádicas de algunas autori-
dades y de una injustificada confianza en el mero paso del tiempo. No puede
llamarse prudente a una actitud contemplativa; es un signo de prudencia evitar
más costos para las comunidades a ambos lados del puente y avanzar con gra-
dualidad y eficacia en la apertura plena de esa vía de interconexión internacio-
nal.
- El Tratado
del Río Uruguay es el acuerdo básico que regula la utilización, por parte de am-
bos países, del río que no debe separarlos sino unirlos. No obstante, en orden a
prevenir, hacia el futuro, conductas unilaterales de uno u otro país pero, al
mismo tiempo, evitar que cada parte disponga de un poder de veto sobre las
acciones de la otra - es decir, evitar tanto la anarquía como el bloqueo recípro-
co -, el Estatuto del Río Uruguay no es, para el río Uruguay y su entorno, un
marco regulador suficientemente completo, y debe ser complementado con
acuerdos que no se limiten a las aguas. A la vez, el diseño y la implementación
de estos compromisos deberían ser concebidos como pasos encaminados a la
creación de marcos regulatorios que posibiliten el óptimo aprovechamiento pro-
ductivo ambientalmente sostenible, mediante una interacción cooperativa que
incluya asimismo al resto de los países del Cono Sur. Asimismo, debe ser consi-
derada la conveniencia de que ambas partes estudien la elaboración de un pro-
grama de desarrollo de mediano y largo plazo que aproveche de manera inte-
gral la potencialidad económica del Río Uruguay, a partir del concepto de sus-
tentabilidad ambiental. La creación de una Agencia Ambiental en los marcos del
Mercosur, que disfrute de competencias y recursos que la doten de eficacia,
merece a su vez ser seriamente considerada.
- La supera-
ción del conflicto debe ser colocada en el escenario más amplio de las relacio-
nes bilaterales Uruguay - Argentina en su conjunto. Existen diversos problemas
que las afectan cuyo tratamiento se vio, hasta ahora, inocultablemente condi-
cionado por el conflicto. El dragado de los canales del Río de la Plata, y la pro-
visión de gas boliviano al Uruguay, están entre ellos, y deben ser resueltos lo
antes posible en interés común de ambos países.
Este conflicto
que amargó la relación entre países hermanos ha durado ya demasiado tiempo;
es hora de superarlo y se ha abierto una oportunidad para ello. Aprovecharla
dependerá de que no nos quedemos de brazos cruzados. Hay un abrazo que se
deben nuestras sociedades a sí mismas y tal vez el propio puente General San
Martín sea el lugar apropiado para ello".
Argentina:
Eduardo Amadeo, Patricia Bullrich, Juan Manual Casella, Alieto Guadagni, Mario
Feliz, Fernando Iglesias, Federico Pinedo, Marta Velarde, Héctor Méndez, Carlos
Reboratti, Marcelo Stubrin.
Uruguay: Ra-
quel Alvarado, Gerardo Caetano, Alberto Couriel, Antonio Giossa, David Gonzá-
lez, Pablo Iturralde, Alejandro Villaverde, Alberto Volonté.
Club Político
Argentino: Henoch Aguiar, Antonio Camou, Marcelo Cavarozzi, Graciela Fernán-
dez Meijide, Carlos Gervasoni, Héctor Leis, Federico Merke, Daniel Muchnik,
Carlos Mundt, Guillermo O´Donnell, María Matilde Ollier, Vicente Palermo, Luis
Rappoport, Jesús Rodríguez, Guillermo Rozenwurcel, Juan Gabriel Tokatlian,
Damián Toschi, Eduardo Viola, Carlos Zurita.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
AMADEO, EDUARDO PABLO | BUENOS AIRES | PERONISMO FEDERAL |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
RELACIONES EXTERIORES Y CULTO (Primera Competencia) |