PROYECTO DE TP
Expediente 3413-D-2015
Sumario: SOLICITAR AL PODER EJECUTIVO DISPONGA LAS MEDIDAS NECESARIAS PARA LA PRESERVACION DE LA " SELVA DE MONTIEL ", UBICADA EN EL DEPARTAMENTO FEDERAL, PROVINCIA DE ENTRE RIOS.
Fecha: 12/06/2015
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 69
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
1º - Dirigirse al Poder Ejecutivo
Nacional, para que por intermedio de Secretaría de Ambiente y Desarrollo
Sustentable, se disponga la adopción de medidas tendientes a la preservación de la
SELVA DE MONTIEL, ubicada en el Departamento Federal, provincia de Entre
Ríos.
2° - Requerir del Poder Ejecutivo
Nacional, para que a través de los organismos competentes en la materia, informe a
esta Honorable Cámara sobre las acciones dispuestas, hasta el momento, en
relación a lo solicitado en el punto 1°.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El 10 de mayo de 2006, la Honorable
Cámara de Diputados de la Provincia de Entre Ríos sancionó con fuerza de Ley un
proyecto que declara Reserva de Uso Múltiple Provincial a 70.000 hectáreas que se
encuentran en buen estado de conservación, de la mítica "SELVA DE MONTIEL".
Ahora resta que la Ley cuyo texto, entre otras cosas, alienta a realizar actividades
relacionadas al ecoturismo y la convivencia armónica entre el hombre y el medio
ambiente; se cumpla para que dichas medidas se implementen en el corto plazo y
en forma efectiva.
Con esta norma, que es el resultado
conjunto del esfuerzo de diferentes actores políticos, funcionarios del Municipio de
Federal y voluntarios de la Gestión "Selva de Montiel" perteneciente a la Fundación
de Historia Natural Félix de Azara, queda concretado un viejo anhelo
conservacionista, y saldada una enorme deuda pendiente que se tenía hasta el
momento con la mítica selva a la que le cantaron poetas como Atahualpa Yupanqui,
José Larralde, Linares Cardozo, Martiniano Leguizamón y Jorge Luis Borges, entre
otros es la zona de mayor biodiversidad de todo el espinar entrerriano.
Este maravilloso ambiente es, en
realidad, un bosque seco, que conforma el distrito más septentrional de la
ecorregión del Espinar. Se trata del distrito del Ñandubay, una leguminosa pariente
de los algarrobos, de tronco retorcido y bella copa aparasolada. El Ñandubay es
acompañado en estos pagos por dos bonitas palmeras: la Yatay, que es la que
encontramos en el Parque Nacional el Palmar y la característica Caranday, más
pequeña y que exhibe sus hojas secas en forma de pollera y se defiende de los
herbívoros armándose de unas hojas largas y punzantes.
Este bosque se caracteriza por la
abundancia de especies tanto vegetales como animales que lo pueblan y llenan de
color el entorno, especialmente en las épocas más húmedas del año. Esto fue lo que
generó su denominación popular de "selva". De esta manera, podemos encontrar
coloridas enredaderas, Orquídeas, Culebras arborícolas, Yacarés, gran diversidad
de anfibios en los humedales y muchas aves, entre las que se cuentan algunas muy
raras o en peligro de extinción, como el Cardenal amarillo, la Charata, el Pato Real,
la Bandurria Mora, Capuchinos o Corbatitas (extraños habitantes de los pastizales
húmedos), Monteritas, Dormilones, etc.
Entre los mamíferos, hay Carpinchos,
Gatos Monteses, Zorrinos, Armadillos, Comadrejas, Corzuelas o "Virachos", Zorros
y varias especies de Murciélagos. Existe además la posibilidad de que algunos
ejemplares de Aguará Guazú (en serio peligro de extinción) aún recorran ese
hermoso territorio, resistiendo valientemente el irresponsable avance de las
actividades humanas.
Desde hace un siglo, la Selva de
Montiel se ve afectada de manera significativa e incesante por la expansión de la
frontera agrícola, la extracción de madera y la explotación desmedida de sus
recursos.
Actualmente, sólo queda en pie un
porcentaje mínimo de su superficie original en buen estado de conservación.
Es por ello que, a partir del año 2004,
las autoridades municipales de la ciudad de Federal y Legisladores del
Departamento, en forma conjunta con miembros del proyecto Selva de Montiel de
la Fundación de Historia Natural Félix de Azara, comenzaron a trabajar con el fin
de salvaguardar los relictos de esta formación vegetal, y con ello, parte del valioso
patrimonio natural y cultural de la Provincia y de toda nuestra Nación.
Finalmente, la zona cuenta con una
reserva privada de 2100 ha. que se concretó mediante un convenio que se rubricó
entre la FHN y el propietario de la estancia El Rincón, y otra provincial de
aproximadamente 70.000 ha., que deberán ser implementadas en el corto plazo
para que su protección sea efectiva y cuenten con sus debida zonificación.
Es por ello que entiendo que es
urgente practicar el Relevamiento de la reserva privada "El Rincón" y de la reserva
provincial Selva de Montiel y un minucioso análisis de la Ley 9706, sancionada el
pasado 10 de mayo. Es necesario tomar conciencia que la Selva de Montiel,
contiene un enorme potencial para el desarrollo del ecoturismo y de micro
emprendimientos, ambos de indudable repercusión en la economía de la
Región.
Antiguamente la Selva de Montiel
ocupaba aproximadamente, un tercio de la provincia de Entre Ríos.
En la actualidad se remite solo a
manchones ubicados en el centro-norte y centro-oeste de la misma, más
precisamente en los departamentos Federal, San José de Feliciano y
Villaguay.
¿Por qué Montiel?
Mucho se ha dicho sobre el origen del
nombre ya que Montiel aparece en numerosos documentos y crónicas de viajeros.
Por eso Martiniano Leguizamón, el que parece tener el indicio más firme sobre el
tema, intuye que es Don Antonio Marques Montiel, Alcalde de Santa Fé, alrededor
del año 1.715, la persona a la cual se hace referencia, debido a que sus campos se
extendían desde esa provincia hasta el sur correntino, incluyendo la vasta región
entrerriana conocida hoy como Selva de Montiel.
¿Por qué Selva?
La formación de Montiel corresponde
a la Provincia Fitogeográfica del Espinal, más precisamente al Distrito del
Ñandubay, nombre que recibió debido a lo abundante que era esta especie
antiguamente pero que hoy, se encuentra en peligro de extinción a causa de la tala
excesiva,
Si bien no es una selva como la
Paranaense o la de Yungas, aspecto enmarañado de este espinoso bosque
semixcrófilo, hizo que se instaurara en el lenguaje popular la denominación selva,
tal vez acaso por su fama de lugar impenetrable.
Las dos especies arbóreas que
predominan son el ñandubay y el algarrobo negro (declarado en peligro de
extinción por la UICN en 1.996), de cuyos intrincados y
retorcidos troncos penden un
sinnúmero de líquenes, enredaderas y claveles de aire. A estos los acompañan
árboles de mediano porte de origen chaqueño como espinillos, molles, talas,
chañares, coronillos u ñapindaes, que de vez en cuando se encuentran escoltados
por un verdadero gigante: el Quebracho Blanco. También se encuentran las dos
especies de palmeras presentes en la provincia: por un lado, yatay o palma real,
destacándose en el paisaje con su esbelta figura; y por otro la caranday o carandilla,
mucho más pequeña y cuyas hojas poseen afiladas puntas. En algunos sectores se
desarrollan palmares mixtos y es la selva de Montiel la única que alberga esta
curiosa asociación en toda la provincia de Entre Ríos.
A estos componentes se le suma la
vegetación de las selvas en galería que se desarrollan en las márgenes de los
numerosos ríos y arroyos que surcan la región.
El paisaje se completa con un denso
sotobosque de gramíneas que de tanto aparece salpicado de tunas y cardones, y que
junto a una gran cantidad de pajonales inundables y un nutrido número de
bañados y tajamares dificultan la circulación por estos míticos y misteriosos
montes.
Los que ya no están
Los míticos montes de Montiel
albergaron otrora al mayor felino del continente americano: el Yaguareté,
extinguido en las primeras décadas del siglo XX y de cuyos últimos registros dieron
cuenta algunos paisanos de la zona. Su presencia en la región ya es parte del
recuerdo, como lo es también la leyenda que este magnífico animal originó; la del
Capiango u Hombre Tigre.
Tampoco esta mas el Aguara Guazú o
Zorro Potrillo que con su alta y desgarbada figura seguramente no pasaría
desapercibido cuando atravesara a la carrera de alguna pradera o pastizal asustado
por la presencia de algún ser humano. Menos indiferente aun era para los
pobladores su largo y escalofriante aullido que motivo a otro personaje mítico: El
Lobizón, leyenda americana equivalente a la del Hombre Lobo del viejo
mundo.
Otras especies animales que ya no
podrán ser observadas en la zona a menos que se implemente un programa de
reintroducción son el Coati, el Pecarí de Collar y el Lobo Gargantilla, la nutria más
grande del mundo.
Pero no todo está perdido. La Selva de
Montiel todavía alberga un número considerable de especies de mamíferos, como
referimos más arriba. Pero sin lugar a dudas la mayor diversidad de fauna está
confundida por las aves, que con sus 250 especies registradas aprox. convierten a
Montiel en una de las zonas de mayor presencia de avifauna del país. Entre ellas se
pueden mencionar algunos carpinteros como el de Lomo Blanco y el del Carbón,
rapaces como el Aguilucho Colorado y el Chimachima, que encuentran en Montiel
el límite sur de su distribución. También estan presentes familiares del Hornero
como la Bandurrita Chaqueña, Pijuices, Espineros y una considerable cantidad de
especies acuáticas.
Pero son otras dos especies las que
ubicaron a la Selva de Montiel en el plano internacional: el Cardenal Amarillo y el
Corbatita Pecho Blanco, ambos en peligro de extinción a causa de su captura para
mascotización, el uso indebido de agroquímicos y la pérdida del hábitat por el
continuo avance de la frontera agrícola.
Debido a ello, BirdLife Internacional
incluyo a la Selva de Montiel como área clave para la conservación del
Neotrópico.
Considero que es menester que la
Nación asuma la ineludible misión del cuidado de sus Parques y Reservas
Naturales, más aún en el presente que tanto valor adquiere la preservación del
medio ambiente y la biodiversidad.
Por los motivos expuestos, solicito de
mis pares la aprobación del presente Proyecto.
Firmante | Distrito | Bloque |
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ASSEFF, ALBERTO | BUENOS AIRES | UNIR |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
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RECURSOS NATURALES Y CONSERVACION DEL AMBIENTE HUMANO (Primera Competencia) |