La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su extrema preocupación ante la caída y despidos en la actividad industrial del país.

Señor presidente:

A la espera de la respuesta oficial al documento que le llevaron recientemente al ministro de Economía, Axel Kicillof, crece la preocupación entre los industriales respecto de la caída en la actividad y su consecuente impacto en el empleo. De acuerdo con una encuesta que el Centro de Estudios Económicos (CEU) de la UIA realizó entre más de 300 compañías, la gran mayoría considera que la economía decrecerá este año y que ello conllevará a que no se creen nuevos puestos de trabajo y, peor aún, que haya despidos en la industria.

El sector automotriz es el que más lo está sufriendo debido a una fuerte merma de la demanda local, pero también del consumo brasileño. Las suspensiones son cada vez mayores en terminales y autopartistas y ya en algunas firmas comenzaron las reducciones de personal. El caso más preocupante es el de Peugeot, que suspendió a 1.000 trabajadores. Si bien la UOM ofreció sumarlos en un plan de capacitación, la sospecha es que esos empleados se queden sin trabajo en el corto o mediano plazo. Consultados sobre el nivel de actividad, la mayoría de los entrevistados respondió que el PBI del 2014 oscilará entre 0% y -5%, en coincidencia con el pronóstico realizado por los analistas de la UIA, que plantean una caída del 2%. El economista de la UIA, Diego Coatz, aprovechó su presentación para adelantar también el dato de evolución de la actividad manufacturera en marzo, que se derrumbó 6,4% en términos interanuales, casi en línea con el número publicado por el Indec, del 6% de caída. La encuesta también reflejó la opinión de los empresarios en torno a si podrán trasladar a precios la suba de los costos. Y la respuesta generalizada fue negativa. La caída del consumo le está poniendo un freno a esta posibilidad, y ello se traduce en menores márgenes de rentabilidad. Consultados sobre si las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) complicaron a la industria, un tercio de los empresarios afirmó que no tuvo problemas; otro tercio respondió que sí les había generado inconvenientes, en tanto que el 33% restante consideró que si bien el instrumento provocó algunas dificultades, el balance era más positivo que negativo por lo que implica en términos de protección a la industria. El relevamiento también mostró que sólo el 30% de las industrias consultadas aprovechó las líneas de crédito impulsadas desde el Estado con subsidio de tasa. Ocurre que muchas son pymes y los requisitos para acceder a estos préstamos suelen ser demasiado exigentes y dejan afuera a este segmento de empresas.

La preocupación por el no ajuste por inflación de los balances, los impuestos distorsivos como el del cheque y la demora en la devolución del IVA y los reintegros también quedó de manifiesto en la encuesta, en una consulta tributaria. A su vez, los industriales cuestionaron los problemas energéticos y se mostraron expectantes por el rumbo del comercio exterior, que está en fuerte deterioro. Además de conocer los datos preliminares de la encuesta, los industriales le dedicaron parte del encuentro a repasar las negociaciones paritarias de los sectores presentes y los reclamos de los gremios que aún no cerraron. El vicepresidente de la entidad, Daniel Funes de Rioja, subrayó que "los porcentajes pretendidos no tienen nada que ver con los que ya se han formalizado

Por todo lo expuesto es que vengo a solicitar de mis pares la aprobación del presente proyecto.

Fuente: www.cronista.com